Partida Rol por web

Llegáis a la habitacion y os disponéis a dormir, apagais la luz y como siempre pasa, habláis durante unos minutos, finalmente el sueño os va atrallendo a su mundo.

Celso se acuesta y tras varias bromas sobre el chino friki y algún repaso al curioso dia que habian pasado sus parpados comienzan a pesar demasiado como para seguir alzados...

Zzzz

Saber que Blade está ahí al lado, y que no le importa que le despierte si pasa algo, me relaja lo suficiente como para quedarme dormida.

Abstraído en mis pensamientos, cuando Celso comienza a quedarse dormido, el silencio hace de la estancia algo tan relajante que el sueño, no tardará en envolverme. Tenía ganas de salir a celebrarlo de una vez, y mañana, será el gran día. Ya tengo razones para dormir. Sonreí mientras mis párpados se cerraban.

Casi no puedo dormir pensando en la van de mi padre y en los problemas que voy a tener a llegar a casa, ademas el couch tambien debe estar que me mata por no estar en la presentacion del equipo ante el consejo directivo.

Doy tres vueltas en la cama y por un momento recuerdo que la bella Vane duerme en la cama del lado, la observo con cariño mientras que la noche cae con mucha mas fuerza

Te tumbas en la cama para dormir un poco despues de las bromas, pasados 3 minutos escuchas como una voz serpentina, no entindes nada y se escucha muy flojo, pero algo está claro, viene del pasillo.

Me despierto y bastante asustado salgo de la cama, ese tipo de cosas típicas de las pelis de miedo siempre causan inquietud cuanto menos en Celso. Lentamente despierto a J.R. lo más en silencio que pueda, tampoco quería despertar al resto.

Tío, ¿oyes eso?

Y espero unos momentos en silencio para que mi amigo pueda escuchar el sonido.

La música es perfecta. Las luces acompañan el latido de los altavoces. Las chicas no están nada mal. Jejeje. Mira el cabrón de Blade qué bien se lo monta... Se repite en mi mente, mientras las imágenes de aquella apoteósica fiesta, iban deshaciéndose en una brumosa realidad. Las legañas cerraban herméticamente mis ojos, y las palabras de Celso no consiguieron llegar a mi tímpano. Froto mis ojos, aturdido por el sueño. La verdad es que no me gustaba que me despertaran en mitad de un sueño.

- ¿Qué pasa, tío?...- Pregunto, más con Morfeo que con Celso. - Me has interrumpido un sueño... - Continúo despacio, haciéndose notar que me estoy quedando dormido de nuevo.

¡Tschhhhh! Calla un momento. He escuchado algo en el pasillo, como una voz típica de las pelis de miedo estoy segurísimo.

Abro los ojos finalmente, ligeramente molesto porque Celso sigue interrumpiendo mi sueño. Me incorporo un poco.

- A ver, ¿qué dices? Estoy durmiendo, tío... ¿Películas de miedo? - No puedo evitar reírme. - ¿Y qué te decía? ¿Que nos iban a matar? - Me río un poco más fuerte, no puedo evitarlo. - Celso, ¿Por qué... no volvemos a dormirnos? ¿O te ha dicho cuándo, cómo y por qué nos van a matar? Porque entonces es buena gente... - Termino, mirándole con un ojo abierto y el otro cerrado.

Psche... como quieras, cuando te despiertes estrangulado por tu propio intestino descubrirás que tenia razón.

Dice para dejarle algo en que pensar antes de volverse a dormir. La tremenda inquietud de Celso le impulsa a acercarse despacio hacia el pasillo.

- Si pasa eso, no lo descubriré. - Suelto un ligero bufido, acompañado de una risita soberbia. Mientras se aleja, me acurruco de nuevo en la cama, aunque mirando hacia él. Intento cerrar los ojos para conciliar el sueño de nuevo, pero verle, tan cómicamente paranoico con el detalle de las películas de terror, atrae mi atención totalmente. En silencio, espero a ver qué hace, esperando también el momento oportuno para asustarle.

Te acercas hasta la puerta, la abres.

Echas una ojeada a ambos lados del pasillo, pero no ves nada, sin embargo, escuchas algo parecido a pasos rápidos por las escaleras, algo que camina muy rápido, algo ligero a la vez. El sonido es como el andar de un perro sobre baldosas de cerámica.

Ves que Celso ha abierto la puerta y está mirando hacia afuera.

Perfecto. Este es mi momento. Me pongo en pie silenciosamente. Avanzo hacia él intentando no hacer ningún ruido. Mis pies, desnudos, no deberían hacer ningún ruido, así que con cuidado me sitúo tras él y tiró de su cuerpo hacia el interior de la habitación.

- ¡Búuuu, Celso! ¡Soy J.R. diabólico! ¡Me han poseído! ¡Aaaah! ¡Aaaaah! ¡Y tú vendrás conmigo al cielo! ¡Jajajajaja! - No puedo evitar estallar en carcajadas mientras revuelvo el cuerpo de Celso. Lo mismo no era el tipo de bromas que haría, al menos, no tan físicas, pero resultaba que me lo había puesto "a huevo". Era como decirle que no a una cantante de Gothic Metal.

Sacando al cabeza al pasillo agudizo el oído para escuchar mejor el ruido.

Supongo que tendran perro, son de pueblo... soy un paranoico... ains...

De pronto unos brazos me rodean y me empujan dentro de la habitación, por un momento vuelvo a la teoría de las pelis de miedo pero dura poco tras caer al suelo miro arriba y veo la cara de J.R. aguantando la risa diciendo tonterías.

Lo tengo merecido soy un paranoico.

Lo habré soñado, o no se tio esta casa no me da nada de buen rollo.... nada...

Digo estirando el brazo para que me ayude a levantarme, para volver a meterme en la cama a conciliar el sueño.

Medio dormidos escucháis las risas de alguien afuera en el pasillo.