Partida Rol por web

Christie baja el tono a algo mas neutral a medida que sus niveles de adrenalina van disminuyendo y aprovecha para disculparse, a su manera, con Alice.

- No pretendía ser grosera, chica, sólo buscaba una maldita explicación a toda esta locura.

Después, volviendo al tema de Bernie y del hallazgo de su licencia de conducir prosiguió.

- Ese bastardo nos la ha jugado, no me cabe duda, pero ¿por qué? ¿Y por qué la dependienta se despidió de nosotros de aquella forma, como sintiéndo lástima por nosotros? ¿Y qué me decís de la friki que viajó con nosotros para luego desaparecer para irse a buscar "fantasmitas"? - pronuncia esa última palabra con una más que pronunciada sorna  - Ella parecía la única que realmente estaba aquí por gusto y eso tampoco me hace gracia. Si todo esto no os huele mal a vosotros, me meto un tiro.

Tomó aire, como dándose unos segundos para pensar, lo que le provocó un ligero dolor de cabeza.

- Voy a salir fuera para echar una mano, no es seguro que vayamos solos a ninguna parte tal y como están las cosas. Si hay problemas dad un grito - y con esto salió fuera para acompañar a Terry.

En cierto modo desilusionado por no encontrar la cara de Bernie delante de los cañones de su escopeta, Terry se quedó pensativo durante un par de segundos.

-Ese hijoputa no es un puto fantasma. Si ha salido de la tienda ha tenido que dejar algún rastro- pensó mientras se dirigía a la puerta trasera en busca de alguna pista que le indicara la dirección que podía haber seguido el chófer el autobús.

Si aquello era una trampa, como parecía, aquel cabrón se abría refugiado en un lugar seguro fuera del alcance de los putos zombies.

Las preguntabas se agolpaban entre aquellas paredes, había muchas dudas y ni una sola respuesta. No parecía buena idea salir de aquella tienda convertida en trinchera, pero aun peor idea era separarse en aquel momento, más aun si se iban dos de las tres personas con armas.

- Yo voy fuera también a tomar el aire, pero procuremos no separarnos demasiado, tenemos que pensar algún plan para salir de esta mierda de sitio. - Dijo siguiendo los pasos de Christie.

- La loca esa de la cámara seguro que sabía algo, tenía demasiada confianza. Si no, probablemente ya estará muerta... - Comentó en voz un poco mas baja cuando se acercó a la exmilitar.

Bobby sigue a Kenneth. De alguna forma parece ser que tiene confianza en sus habilidades como médico y confía en él.  - Esa friki sabía a lo que venía. Seguro que sabe más de lo que nos ha contado. - suelta el chaval al oir a Kenneth. - Puede que hasta esté compinchada con el psicópata de Berni. - dice antes de escupir al suelo.

Brian le dice a Alice que le ayude a salir de la tienda. - Me encuentro algo mareado con este olor pestilente. Bastante tengo con mi costilla rota como para vomitar ahora del asco. Anda ayúdame a incorporarme, salgamos de aquí... - le dice a su novia. Por otro lado usa uno de los fusiles a modo de muleta o bastón para ayudarse a caminar. No sin antes coger la última caja de munición que queda en el mostrador.

Al ir saliendo de la tienda veis como Terry sale del cuarto de baño que tenía acceso únicamente desde el exterior. Aquel al que Alice tanta prisa tuvo por entrar la primera vez que llegó a Ebernburg. Veis como se marcha sin haceros mucho caso intentando averiguar algo en la parte trasera de la tienda. Va con la escopeta lista para cualquier eventualidad.

No muy lejos de ahí se encuentra la moto en la que había llegado esta pareja. Parece que no está en perfectas condiciones después del golpe, pero todavía parece que puede funcionar bien.

La noche es fría, serán cerca de las 23h. Habéis necesitado de casi media hora tras el asalto para que Kenneth pudiera atender la heridas de la pareja de moteros.

- No creo que sea buena idea salir de la tienda si sigue habiendo locos de esos por ahí fuera, dice Morganne acompañando a los demás cuando se queda sola. Hasta ahora hemos podido defendernos así que sacando los cuerpos fuera podríamos esperar dentro a que llegue el día. A pesar de sus comentarios ya que está fuera intenta discernir qué es lo que ha llamado su atención entre las sombras.

Kenneth salió después de ella y parecía compartir la misma sospecha acerca de la friki; ciertamente algo no encajaba en ella aunque por lo que contó la pareja de moteros, pudiera ser que ya estuviera muerta. Aquel pensamiento le provocó un sentimiento neutro, sin alegrarse por ello pero tampoco entristeciéndose lo cual podría bien ser efecto directo de la última hora luchando por sobrevivir en aquel tienducho.

- Mi mayor preocupación ahora es encontrar un refugio seguro para pasar la noche - comentó al proyecto de médico - No creo que podamos seguir mucho más con el cansancio acumulado y... bueno - señaló al herido disimuladamente con un leve movimiento de cabeza - mucho menos él ¿Qué tal se encuentra?

Christie permanecía atenta a los alrededores en todo momento mientras conversaba, era algo básico en las incursiones en territorio enemigo.

Escuchó como el resto parloteaba cerca de la entrada. Al parecer habían sido lo suficientemente sensatos como para salirse de aquel agujero lleno de cadáveres podridos. Pero no les hizo mucho caso, estaba pendiente de cualquier cosa que pudiera parecer un rastro.

Era consciente de que no era su punto fuerte, pero hizo un esfuerzo por concentrar todos sus sentidos en la tarea de investigación. Caminaba inclinado hacia adelante, con la escopeta preparada para escupir plomo y la vista clavada en el terreno.

Al salir del círculo de luz sus ojos se fueron adecuando poco a poco a la oscuridad reinante haciendo que lo que hasta hacía poco era un muro de negrura impenetrable se convirtiese en un tapiz de claroscuros distingibles de alguna manera.

Empezaba a refrescar. El vello de su nuca se erizó y pensó en tirar la toalla, cuando algo llamó su atención.

El viento que soplaba en aquella cerrada noche ponía banda sonora a la inverosímil aventura que estaban viviendo.

Con Bobby a escasos metros de él, se paró para escuchar a Morgane, a la que miró con atención. Con lo tímida e indefensa que parecía en el autobús... Menos mal que se ha sabido desenvolver allí dentro.

...mucho menos él ¿Qué tal se encuentra?

- Tiene una costilla rota, podrá andar y si no se infecta todo irá bien, pero si nos encontramos con más problemas... - Contestó algo preocupado.

Aquí al aire libre este tío puede ser un obstáculo (pensaba mientras miraba al motero), si hay que correr será una carga.

- No podemos quedarnos en esa tienda decorada por vísceras de vete tu a saber qué - Habló al grupo. - Christie tiene razón, hay que buscar algún refugio. En el autobús hará demasiado frío y si nos vuelven a sorprender estos... - Dudó en como describirlos. - ... lo que sean, lo tendremos jodido.

Llevándose la mano a la barbilla, escudriñó el horizonte mientras entrecerraba los ojos, buscando alguna posible respuesta o que alguna idea apareciera, por arte de magia, en su cabeza.

- ¿Creeis que podremos llegar andando a alguna granja? No tengo claro si es buena idea. - Sus ojos se pararon en la moto. - Porque hacer ruido no creo que sea inteligente.

Al joven se le notaba agobiado, sin tener las ideas muy claras. A pesar de todo, intentaba disimularlo mientras mantenía un porte lo mas recto posible, agarrando con fuerza aquel botiquín.

Alice ayuda a Brian a salir de la tienda, aunque no está de acuerdo en que ese sea el mejor momento para ello. 

-Salimos, tomas aire y volvemos a entrar¿eh?. Ahora que podemos descansar no quiero tener otro susto, al menos hasta mañana cuando sea de día.resopla mientras se echa el brazo de Brian por encima para sostener su peso.

Comienzas a buscar por el suelo cerca de la puerta trasera. Allí Kenneth había encontrado una cajetilla de tabaco a medias, así que deduces que por la zona no vas a encontrar nada que pueda darte una pista. Comienzas a describir semicírculos peinando la zona hasta que a unos 20 metros de allí ves unas huellas de rodadura. Por el tipo de neumático deduces que no son de la moto de los jóvenes si no de un coche, concretamente de un modelo antiguo.

Miráis a vuestro alrededor, estáis perdidos en medio de la nada en una noche oscura y fría. Os acaban de atacar un puñado de criaturas y personas, si es que se les puede llamar así, con sed de sangre. Sí, parece salido de una película de terror, pero es real. Tan real como el dolor que siente la tatuadora, Alice en su brazo derecho o Brian, su acompañante motero en las costillas.

- No os preocupéis, yo me llevo mi moto pero no pienso arrancarla para llamar a más de esos chuchos, si es que los hay. Por lo menos, de esos locos vimos una docena ¿Quién me dice que no va a haber otra docena de esos perros del demonio rondando en la oscuridad?

El tipo de la moto se presenta formalmente a Kenneth. - Por cierto, a todo esto, me llamo Brian. Muchas gracias por lo que has hecho, ya me siento algo mejor. - le agradece finalmente.

Veis como saca el móvil y mira para ver si hay cobertura. - Nada, parece que estamos incomunicados aquí. 

Kenneth tiene dudas sobre si recordará como llegar a esas granjas y las distancia que hay hacia ellas. Está todo oscuro y desde que ha caido la noche no se ven ya recortadas contra el horizonte, aunque más o menos sabéis en que dirección están y a que distancia. No hay ninguna luz que delate su posición, parece que la única farola encendida es bajo la que estáis ahora mismo.

Veis como Terry se aleja un poco por la parte trasera de la tienda en dirección norte. Parece que está buscando algo o siguiendo algún rastro...