Partida Rol por web

-¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHH!!!!-. Gritó Severo, presa todavía de la sed de sangre, alzando su amada hacha al aire con gesto de triunfo y victoria.-¡¡DIOS LO DISPONE!!¡¡DIOS LO DISPONE!!- Fuera de sí, empezó a darse golpes en el pecho con el escudo, haciendo gran estruendo y mirando ferozmente a los pocos judíos que todavía quedaban en pie y que huían como su dios les permitía.

Mas habiendo echado fuera las sedes de venganzas, dispúsose Severo a mirar a sus compañeros, comprobando que tanto Felip como Roldán estaban vivos y atentos, por lo que en pocas zancadas se desplazó hacia el bulto que debía ser Fernando, caído bajo una cruz, cual mártir ante su Señor.-¡Roldán! ¡¡Llamad presto a Tristán!! Yo voy con Fernando.-

Mientras Severo se acercaba a la cruz donde Fernando estaba ya a punto de ser crucificado (de hecho ya estaba aupado y con los brazos en cruz, sostenido por sogas y apunto de clavársele puntas de acero en manos y pies), un tremendo rugido salió del interior de la ruinosa ermita... El bramido era potente, muy alto y pareciera algo que no habías oido en vuestra vida... Es más... nunca habíais visto nada igual, pues lo que salió de allí os hizo abrir los vuestros ojos como vasijas anchas, y en lo que restaba de vuestra vida non hubiérais de olvidar aquella tremenda imágen:

Un ser de aspecto rocoso y casi dos varas y media de altura salía de la ermita, a paso agigantado. No era hombre ni animal, y tan siquiera que no parecía ser de éste mundo. Ni cien años hubiera vivido Fernando como alguacil y no hubiera visto semejante ente, pues no se asemejaba a nada parecido en este mundo...

Resumen Turno 2:

Tristán se levantó contra J2 asestando puñalada tremenda al malogrado en su estómago, en presencia de su compañero. Acto seguido, hizo lo mismo con su compañero J1, en su brazo derecho:

Daño1: 7 (-1 por Ropas Gruesas): 6 puntos de daño*.

Daño2: 4 (-1 por Ropas Gruesas) (/2 por brazo): 1 punto de daño.

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En éstos momentos, Daniel Leví tomó a su hija del brazo, y tras un leve forcejeo, consiguió arrastrarla tras inmovilizarla con sus brazos, rodeando su cuerpo. Poco a poco se iban alejando, bajando por el terraplén que tus compañeros habían cruzado para llegar delante de la ermita...

Por otro lado, a lo lejos, como procedente del lugar donde estaban tus compañeros, o tal vez de dentro de la ruinosa ermita, allá abajo a lo lejos, oíste un bramido terrible, que llegaba alto y claro a tus oídos, y por el rabillo del ojo, en plena pelea con los judíos, te percataste de una figura negra que apareció allí, en la explanada donde los otros alguaciles habían peleado. Al ser de noche y estar algo alejado el lugar, no lo veías claramente, sólo distinguías su silueta. Eso sí: su altura superaba con creces la de dos o tres hombres:

Intenté gritar para advertir a mis compañeros, con todas mis fuerzas.

-¡Aragonés, Severo! ¡Leví se ha llevado a María! -me era difícil gritar y mantener el ritmo de respiración que suponía la actividad física del combate- ¡Cuidado con... esa figura misteriosa!

Severo entraba corriendo al recinto cuando la visión de la mole lo paró en seco como si hubiérase estampado en una pared. La enorme figura se alzaba incluso por encima del fornido guerrero, por lo que éste, inconscientemente dio un paso atrás con la boca abierta.-_{…madre del amor hermoso…}- fue cuánto pudo susurrar, pues nunca había visto ni luchado contra tal criatura.

En estas que mientras reculaba, notó el peso del hacha en una mano y el del escudo en la otra. Agarrándola con fuerza y sintiendo el frío acero en la palma, cogió coraje y alzó cabeza.- Volverás al averno de qué surgiste, criatura maldada.- Dijo como promesa. Sabedor que este combate era a vida o muerte, ciñose tras el escudo y se adelantó presto hacia la criatura mientras gritaba.- ¡ROLDÁN! ¡DÁROTE TIEMPO A TI Y FELIPE PARA QUE SAQUÉIS A FERNANDO DE DEBAJO LA CRUZ! ¡CORRED!.- Entonces, girándose hacia la mole, gritó de nuevo su reto, llamando la atención de la criatura.-¡EH! ¡ENGENDRO! ¡PRUÉBAME, A VER QUÉ TIENES EN LA PANZA, PUES VOY A DESANGRARTE COMO UN GORRINO!.-

Iniciativa

Tristán: 25
J1: 18
J2: 13

J1 y J2 están en melé. Intentarán inmovilizarte (acción extendida).

Iniciativas

Severo: 23
Roldán: 22
Felip: 21
Ente: 12

Ente ataca y ataca con puños a Severo
Felip va a por Fernando

- ¡Aguanta Severo! ¡Nosotros vamos a por Fernando!. - Díle ánimos al guerrero, pues necesitaríalos.

Ataco a J1 e intento zafarme de su inmovilización*.

El guerrero, con el sudor empapándole la espalda, subió el escudo y se acercó lentamente hacia el engendro. Asegurando los pies fuertemente en el suelo, se preparó para el embiste de golpes que le iba a llegar. Severo sabía que primero debía medir las fuerzas de tan temible adversario. Debía ganar tiempo para sus amigos, y eso haría.

Resumen turno 1:

Severo levantó a conciencia su escudo de metal, esperando detener los golpes de aquella mole como de huesos y músculos de piedra (si es que eran pétreos) para ganar tiempo y desatar y bajar a Fernando de la cruz donde iba a ser crucificado. Pero aquella cosa era como el Mal; no era hombre ni bestia... ni tampoco la fuerza que expelía de sus enormes brazos, de sus tremendas manos... Por ello, asestó dos ganchos, uno de izquierdas y otro de derechas, al pobre Severo (que, a pesar de ser medio corto de vista, lo vió venir, pero que el bloquearlos eran ya palabras mayores...):

Puño1: crítico (daño completo): 27 PD --> le da al escudo* con un puño de izuquierdas, el cual lo abolló del tremendo impacto de sus nudillos, y lo hizo volar por los aires**, hasta donde casi ya estaban Felip y Roldán... Ahora Severo estaba sólo con su armadura y su hacha frente a la mole de piedra.

Puño2: 18 (-4 por Bacinete) (x2 en cabeza): 28 puntos de daño --> El gancho de derechas, tras la sorpresa del alguacil, le impactó directamente en su cabeza, la cual le golpeó la sienes y lanzó a un lado a Severo. El impacto fue tremendo, y el bueno de Severo quedó tumbado en el suelo, yaciente, con la sesera abierta y desangrada... ---> SEVERO HA MUERTO.