Partida Rol por web

Don no consigue agarrar al guarda perdiendo unos segundos preciosos, pero entre él y otro hombre consiguen levantarle, no sin esfuerzo. A través de la ventana observa la situación, y el alma se le cae a los pies cuando descubre que el autocar está atascado en el barro. El geólogo se gira hacia el grupo de la parte de atrás.

-¡¡Un par de personas deben bajar para empujar el autocar antes de que los dinosaurios nos rodeen!! Hay que darse prisa, ahora mismo están entretenidos pero no será por mucho tiempo...- aunque no sabía tanto de conducir camiones como aquel hombre, sí que se creía con más autocontrol que él, de modo que no pudo evitar pasársele por la cabeza la idea de llevar él mismo el transporte

Relee tu mensaje :P te he editado una cosa.

-Tranquilícese, ponerse histérico no arreglará nada- increpa Michelle al nervioso Dave con tono de reprimenda -No apriete al acelerador o nos hundiremos más, tenemos que empujar- comenta apoyando la decisión de Don, aunque ella duda algo más que sea suficiente con dos voluntarios para conseguir sacar el enorme vehículo del barrizal con tanta gente dentro.
-¡John...! Deberías sustituir a Dave en el volante- comenta a White al pasar junto a él con paso decidido a través del estrecho pasillo, llegando hasta la posición de Walter y pasando de largo, saliendo por una de las puertas traseras hasta el exterior, donde la lluvia vuelve a azotarla y empaparla entre los distintos gruñidos y ruidos sobrecogedores que llenan el sendero.

Por suerte o por desgracia los dinosaurios todavía no parecen demasiado interesados en su transporte así que espera que otros voluntarios salgan deprisa y no tarden demasiado en salir de ahí... porque la otra opción sería correr campo a través y no parece una idea muy alentadora.

Cuando Michelle va a pasar a mi lado para salir, y aunque no tengo mucha confianza con ella, la conozco de verla por la isla mientras trabajamos, la sujeto del brazo y le digo en voz baja: No es buena idea, Hudson... están demasiado cerca para que los que empujemos nos salvemos...

Le quito el rifle y disparo, si no me lo deja uso la cutre pistola.

Al pasar la chica por mi lado, me guardo el destornillador y la llave en los bolsillos y salgo corriendo hacia la parte interior.
Espero que mis años lidiando con multitud de coches me ayuden ahora.
- Dave, lo apriete el acelerador. Ha de ser poco a poco. ¡¡Déjeme a mí!!.
digo mientras no dejo de mirar por la puerta abierta.

 Mis hijos noooo! Que será de ellos sin mí! Tengo que salir de aquí.

 La temerosa Lucrecia se arrastra por el suelo, con su equipaje aferrado, hacia la parte posterior del bus hasta que llega a la altura de un pequeño extintor.

 - Tal-tal-tal vez eso pueda servir...- dice sin dirigirse a nadie en especial.

Vamos, saquen esta tartana del barrizal...Cada uno tiene su campo y el mio, desde luego no es sacar trastos del barro, es raro que los dinos esten tan revoltosos...hay que avisar cuanto antes, pero sino hay radio...todo esto es muy extraño. 

Me doy la vuelta tras oir a los quie están atrás, poniéndose nerviosos...

Señorres... tranqüilos... segurro que esto se solucionarrá...

 Pero que hago ho Diós bendito!

 Lucrecia se acerca a la puerta de acceso, con el extintor a punto de usar, esperando no tener que usarlo. Parece muy atemorizada, medio cobijada al lado de la puerta.

Me quedo parado enmedio del autobus levantado, mientras observo a algunos de los pasajeros viajar. Ya parecen demasiados, así que opto por tumbarme tras mi asiento y quedarme con las piernas cruzadas, mientras cojo mi Walkman temblando y me lo coloco como buenamente puedo. Aprieto el botón de Play y comienzo a escuchar Go own your way....más relajado, cierro los ojos y me dejo llevar por la musica, a todo volumen.

En estos momentos, el mundo y yo no estamos juntos..

-Mira el lado positivo, si se acercan podemos ser los primeros en salir corriendo de aquí... el resto no parece demasiado dispuesto a hacer nada- observa algo sorprendida como la mitad de pasajeros siguen en sus asientos sin mover un músculos, aunque al menos los de la parte delantera sí parecen procurar intentar "algo" aunque sin las suficientes agallas para ponerse a empujar, claro.

La duda que asalta a Michelle en estos momentos es la de si vale la pena arriesgarse por ellos... pero finalmente chasquea la lengua y espera un instante a que alguien la acompañe fuera, probablemente John, aunque ellos dos solos es difícil que consigan mover el gran vehículo.

te espero master :D

Faltan 3 jugadores, a ver si se dan prisa y posteo para todos. Si no, postearé sin ellos.

Ok lo siento :/

Ese es el problema de las partidas "semimasivas" :D

 Nerviosa y con temor, Lucrecia ve que falta gente para ayudar al autobús para salir del bache. En un ataque de decisión y con alguna lagrima resbalando por la megillas se guarda el extintor y baja para intentar ayudar a tirar del bus.