Partida Rol por web

Sonrío al ver la demostración del lider de los Escamahollín, que aparte de demostrar que está con nosotros, está dispuesto a combatir contra el brujo.

Junto a él, seguimos por los túneles que nos van indicando hasta llegar a lo que parece su estancia y, según el lider, se podría llegar por otro lado.

Arrodillándome al suelo, cojo una piedra para intentar dibujar la sala y las dos entradas Podrían ir dos por ese pasillo estrecho y el resto entrar por aquí.

La historia sería esperar hasta que los otros llegaran para atacar desde aquí digo indicando la entrada principal Rennor, creo que tú deberías de ser uno de los que fueran por ahí, de forma que tuvieras disparos más limpios. Yo podría acompañarte, disparar junto a tí y, una vez que el combate haya comenzado, unirnos a la refriega.

- No estoy de acuerdo, tendré más disparos si entre desde el principio, si tengo que dedicarme a romper una barrera para poder entrar ya estaréis enfrascados en combate y no podré apoyaros.

El jefe Escamahollín explica que la distancia es la misma por ambos lados pero que la empalizada no puede saltarse ni disparar a través de ella pero se puede romper fácilmente porque son ramitas atadas. No hay kobolds defendiendo ese paso y no cree que haya trampas.

- Pues creo que lo del ataque a distancia ha quedado aparcado - dice mirando a Shallana'ha. Si alguien se viene conmigo podemos destruir la empalizada a modo de distracción para que vosotros le cojáis por sorpresa.

Al oir al jefe hablar de la empalizada, asiento a Rennor Creo que tienes razón. 

Iré yo contigo para destruir la empalizada.

Si eso, podéis esperar a que hagamos ruido rompiendo la empalizada y, cuando el brujo vaya a por nosotros, será el momento de que entréis a por él.

El líder kobold os señala el camino para ir a los túneles que van a la parte posterior de las dependencias del brujo, mientras Shallana´ha y Rennor avanzan con rapidez hacia los túneles posteriores, Escamahollin avanza con vosotros hacia el combate final contra el malvado brujo.

Avanzáis en silencio y el resto del grupo, avanza detrás del kobold, el cual se pega contra la pared y señala con la mano hacia la abertura de la cueva, por la cual se filtra un siniestro brillo rojo, así como el sonido de algo burbujeando...

El kobold se acerca al oído de Khastal. -Id vosotros primero, se me da mejor moverme entre las sombras si el brujo esta distraído.

En ese momento suenan los primeros golpes de Shallana´ha echando abajo el muro de madera, y Mara, usa sus dotes de bardo, para infundir el valor a sus compañeros.

khastal con su arma desenvainada esperó en posición para liderar la carga en cuanto los kobolds atacasen. No era el mejor plan del mundo, pero no había muchas formas de entrar allí y desde luego esa era la más sencilla. El único problema que ella encontraba es que podrían morir muchos kobolds... lo cual no les ayudaría a la hora de estrechar lazos y formar una alianza.

Se habían separado, buscando rodear al brujo y no dejarle escapatoria. Sonrió, mostrando sus afilados dientes; aquello era una pérdida de tiempo: Tartuk jamás podría huir de él. Con la espada desenvainada brillando de manera tenue gracias a su magia, avanzó hasta la entrada de la cueva, y le observó. El chamán estaba allí, a escasos metros de él. Era el momento.

Con la espada sujeta en ambas manos, se lanzó sobre el kobold sin molestarse en ser sigiloso. De nuevo, en realidad, emitió un nuevo grito de guerra mientras cargaba* contra él y descargaba un poderoso golpe que, sin embargo, erró sin saber como. Incrédulo, sus ojos se posaron en los de la esquiva lagartija, prendidos de odio.

Sin apenas mayor dificultad por su parte, el extraño kobol morado, esquiva sin mucha dificultad el ataque de Mal´ak, lejos de mostrarse sorprendido, el brujo ríe estridentemente. -Vaya, vaya... así que ese estúpido kobold se ha decidido a traicionarme... que mal, que mal... y yo que quería lanzar a esta inútil tribu a que fueran masacrados en un ataque contra vuestro fuerte... El kobol pasea la mirada por la cueva mirando a los invasores... -Bah... da igual... os mataré a todos y luego acabaré con estas patéticas criaturas...

Dando un paso hacia atras, el brujo clava los ojos en Mal´ak y sonríe siniestramente... -Siii... eso es... siente como el miedo entra en tu cuerpo y atenaza tus músculos... ¡Jajajaja! ¡Buh! ¡Corre!... ¡Corre idiota cobarde!

Rennor avanza hasta tener línea de visión y descarga la flecha de su arco pero el proyectil no perfora la piel del brujo.

de entre los restos de la valla rota, emerge Rennor con el arco ya preparado, y tras avanzar unos metros, divisa al brujo al girar la esquina. Con una rapidez propia de la experiencia con el arco, el rastreador tensa la cuerda y lanza la flecha contra el brujo kobold, pero esta choca contra un escudo mágico, el cual rodea al brujo.

Al ver que Malak fallaba su ataque y que, Rennor, aprovechando que había roto la valla, había avanzado y disparado pero que su flecha rebotaba inofensivamente en el cuerpo del brujo, opto por avanzar, no permitiendo que el brujo pueda parapetarse tras los muros de la caverna.

Así, con la espada en alto, para protegerme de posibles ataques, me muevo por dentro de su guardia con la intención de flanquearle.

Shallana´ha avanza con gran valentía hacia el brujo captando la atención de este, y obligando a que se girara hacia ella, mientras que la atacaba al pasar junto a él, sin embargo la aasimar consigue evitar el golpe de la hoz del brujo interponiendo su espada en la trayectoria del arma.

Sin perder un solo segundo mas, el jefe kobold surge de entre las sombras de la cueva y aprovechando que Tartuk había bajado su guardia durante un instante, el kobol ataco con furia a la espalda del hechicero kobold...

La clava del jefe kobold consiguió atravesar el escudo, antes de que este se formara para cubrir la espalda del brujo, haciendo que el arma golpeara con fuerza al brujo morado...

Avanzando detrás del líder kobold, me aproximo contra el hechicero kobold y moviendo con gran rapidez mi falcata, consigo golpear a través de la magia defensiva del brujo.

Te toca a ti Mara, si quieres puedes ir actuando tu tambien Mal´ak

Intentó retorcerse, girar hacia el brujo, mover su brazo para hacer que su espada cortará en dos a aquél lagarto. Pero no podía. Sus músculos estaban agarrotados, su cuerpo se negaba a seguir las órdenes que intentaba, sin éxito, mandar a su cerebro. No podía. Simplemente, estaba paralizado de miedo, de terror. Sus pies retrocedían solos, su arma estaba floja entre sus dedos, que habrían palidecido de ser eso posible. Temblaba mientras huía. Y no podía mirar, no podía observar la conciencia. Cada vez que lo intentaba aquellos dos ojos, terribles, peligrosos, se adueñaban de su mente y le hacían estremecer.

No podía. Sentía asco, vergüenza, quería luchar, pero no. No había manera.

De repente sintió la fría pared a su espalda, se detuvo. Y ni siquiera estaba lo suficientemente lejos. No era bastante...

El brujo se gira hacia el líder kobol, mientras que se mueve con un pequeño salto hacia la derecha evitando mantenerse flanqueado. 

Con una mueca de furia y enarbolando una hoz, este ataca con furia a su antiguo "aliado", sin embargo Escamahollín consigue evitar la acometida del brujo sin problemas.

Mara tras moverse realiza un disparo con su arco activando las runas mágicas de su arma antes de dejar salir una flecha hacia Tartuk, buscando herirlo.