Partida Rol por web

Despertáis con un dolor de cabeza terrible, llenos de morados, medio desnudos y atados en la oscuridad. Pronto deducís que estáis en la bodega de algún barco, porque no deja de moverse.

Me parece que esta vez no se debe a la cerveza y vos no sois una bella moza, ni si quiera una fea dijo Ser gregor quitandole hierro al asunto ¿Donde estamos? Muertos no al menos

¿ No sois ya algo mayor para esas juergas ser gregor ? . Estamos prisioneros , pero no se donde . 

Shane comenzó a forcejear con sus ataduras para ver como de fuertes eran , con algo de suerte podría ir aflojandolas o partirlas para tratar de escapar y tomarse venganza por tal humillación . 

Nunca se es mayor para el sentido del humor le dijo el veterano A fin de cuentas si estoy aquí es por que alguien se precipitó hacia ese tipo sin pensarlo mucho y me daba reparos no ir a buscaros. ¿Me trajeron sólo? ¿Sabéis que ha sido de Argyle? En sus palabras había una lección pero no reproche, no parecía muy afectado por el hecho de que estuvieran encerrados.

Mientras hablaba se acomodó contra la verja

No pasa mucho antes que se abra la trampilla y entre una corriente de aire salado y un poco de luz solar. Pero pronto la cubre completamente la inmesa masa de un hombre. ¿Hombre? Bueno, más bien es lo que imagina un niño cuando le hablan de ogros: un gigantón feo, encorvado, calvo, de cabeza pelada y horrible. Lo cubre una cota de malla y empuña un latigo. Baja las escaleras y os dirige una mirada torva.

- Caballeros del rey cobarde. Pagaréis rescate o os comerán los cangrejos.

Os hace una somera inspección, pero no ve que Shane ha estado intentando romper las cuerdas.

Vuelve a subir las escaleras y a cerrarse la trampilla (y oís claramente un pasador cerrándolo).

Aquella visión le deja un extraño sabor de boca, sabía reconocer la amargura cuando la veía pero ahora no sabía a quien veía demasiado bien... un hombre así seguro que habría sido notorio en su pasado y además la amargura y el odio hacia el rey denotaba una traición, un desengaño ¿El rey había tenido a sus ordenes algún hombre de semejante talla?

Es curioso que seamos los únicos que ha hecho prisioneros hasta el momento... dijo ser Gregor meditativo Y ahora pide dinero... si es dinero os lo pagaremos, mas si nos vamos a acoger a el juego de los rescates y los caballeros me gustaría conocer el nombre de mi captor.

Esperaba que el nombre que le proporcionara le diera alguna pista de con quien se las veían

Me río en tu cara , vacilando a hombres atados y desarmados , luchemos de igual a igual si te atreves . ! cobarde ¡ . 

Le dijo ser Shane al grandullón nada más entrar y hablar este ; era alguien grande , pero hasta que no se levantara del suelo no sabría cual de los 2 era el más alto aunque poco le importaba a shane ya que casi inmediatamente el viejales comenzó a hablar de una forma más educada . 

" Seguramente sea el único con modales aquí , supongo que será un barco " . 

El grandullón se gira lentamente y baja las escaleras. No parece alterarse, pero de pronto golpea a Shane en el rostro con el látigo. Y sigue golpeándolo brutalmente, con una precisión deliberada: cara, costillas, riñones, huevos. Está así un buen rato, sin parecer cansarse.

Cuando termina, Shane está casi inconsciente.

¿ Eso es todo ? creía que los gigantes y los salvajes del norte tenía más que dar a parte fardar ante gente indefensa cuan vulgares esclavistas con látigo . 

Dice Ser Shane sacando fuerza de flaqueza mientras que sangraba por la zonas donde había recibido sendos golpes mientras que su voz parecía más débil pero no menos intransigente . 

Su aspecto era deplorable pero su mirada seguía siendo la de antes , dura y firme . 

" Me me amedrenté en las situaciones dificiles de la guerra siendo un escudero , no me amedrenté ante los Tharh , y no me amedrentaré ante alguien que me iguale en estatura aun a pesar de estar en esta situación " . 

En este momento se oye como llaman al gigante desde la cubierta. Con ello seguramente SHane se salva de que la paliza continue, pero no de una patada en la ingle que le hace ver las estrellas, antes que el tipo se de la vuelta y suba las escaleras.

Shane tosió tras unos segundos resistiendo el dolor del golpe , luego trató de incorporarse y volvió a forcerjear con las cuerdas inutilmente pero no por ello se iba a dar por vencido , sin embargo su cabeza ya estaba pensando en el despues . 

" Tras liberarme tendré que hacerlo con el viejo , pero lo peor vendrá una vez que estemos libres ; si estamos en un barco vamos a tener que tomar una barca a la fuerza ya que el sigilo no es lo mio , y aún así puede que sean demasiados " . 

Es inútil: incluso con la fuerza de Shane no es posible romper las ataduras.

Tras un lapso de tiempo imposible de calcular en la oscuridad, pero que sin agua, luz ni comida os parecen días, oís como la nave atraca y lanzan una ancla.

Os sacan de la nave un grupo de hombres desastrados, pero con cascos de hierro y armas de acero. Os arrastran fuera de la bodega. Las cuerdas os han segado las piernas de tal modo que no podíes andar, así que medio os cargan, medio os arrastran, entre maldiciones por lo que pesa Argyle, que recibe algun golpe más en represalia.

De la nave pasais a un embarcadero modesto, delante de un castillo feo. Está muy oscuro para distinguir nada, salvo la puerta por donde os entran. Luego es subir por una escalera que no parrece terminar nunca... Hasta que os lanzan al suelo de una cavernosa sala. Quedáis tumbados encima de una tela mohosa y harapienta que, algun día, debió ser una alfombra.

Un minuto después, suena una desafinada trompeta, y alguien anuncia:

- ¡DE RODILLAS TODOS ANTE EL REY HARAG, SEÑOR DEL CASTILLO DEL AULLIDO Y TODOPODEROSO REY DE PONIENTE!

Un titulo muy ostentoso, pensó en decir, pero la prudencia de momento parecía la mejor opción, se arrodillo y espero ver por fin al misterioso caballero...

Miro a Shane preocupado por que precipitara una situación de la que quizá no saliera con vida.

Shane pasó del tema mientras se urgaba la nariz y esperaba pacientemente a ese tal Rey , tenía un par de cosas que decirle y no iba a callarse ni amedrentarse como era costumbre en él . 

Por la puerta pasan dos guardaespaldas con armaduras de placa viejas y muy usadas, pero de aspecto rudo. Se situan a cada lado de una plataforma de piedra. LEs sigue un hombrecillo gordo, patizambo, que camina andaneándose, con un vestido que sólo puede parecer digno de un rey en una farsa de titiriteros. Lleva una corona tan grande como su hinchada cabeza, en la que no hay ninguna joya (y diríais que tampoco oro). Sube con dificultad hasta su pequeño trono con cojines mohosos y se sienta mirandoos.

Detrás del "rey" HArag avanzan dos matones grotescamente altos y musculosos, y un individuo vestido casi elegantemente, de estatura normal. Por tener todos cierto aspecto simiesco que comparten con el Rey, deducís que son sus hijos. Uno de ellos es el que os ha capturado.

Habla el Rey Haragg, con una vocecita aguda:

- Así que ese porquerizo gañán de Argilac nos manda más de sus patanes, eh? Bien.  ¿Quiénes son esos?

Responde uno de vuestros captores:

- Majestad, el escudo de este...- señala a Shane.- Parece el de una familia importante... El otro no parece nadie grande.

- Vaya... Que disgusto, debemos estar dejándole sin caballeros buenos, ¿eh?- cuando el Rey ríe, su patética corte ríe también. Son como perros ladrando.- Al calabozo con ellos.

- Este me ha insultado, padre.- dice de repente el matón que apalizó a Shane.- Quiero su cabeza.
 

Ser Shane Se alza en toda su envergadura y friamente se dirige a ese llamado rey . 

Si queréis mi cabeza buscadla como un hombre y no como un niño mimado entre algodones , ! os desafío a un combate por mi libertad ¡ Si tenéis pelotas claro , que parece que solo las portáis cuando tenéis a vuestro oponente atado .