Partida Rol por web

Mkoll lanzó un gruñido, parecía que no iba a tener pareja de poker. Tampoco podía culparles por ello, al fin y al cabo, acababa de volver de que le tratara el loquero. Sin embargo surgió otro plan, cuando uno de los soldados de otro escuadrón propuso echar unos dardos. 

-Viendo que sobro en la partida de poker, me apunto a ésos dardos.

Cerveza tras cerveza podían irse viendo los estragos de la bebida en mi, las cosas estaban un poco aguadas con tanta maldita cháchara, por el momento el poker no me apetecía lo suficiente, seria condenarme a mas y mas palabrería sin sentido, por otro lado habían camaradas hablando sobre los dardos, un juego mas emocionante y quizá podría sacar algo de efectivo si mis habilidades no estaban tan mermadas por la bebida (al menos no tanto como las de mi oponente).
-Bien dicho Mkoll.- Le decía al que apodaban "Loco", quizá después con mas familiaridad lo llamaría por su apodo pero por el momento seria mejor referirme a el por su nombre al no saber la razón de dicho apelativo. -Yo jugare contigo a eso de los dardos, veamos de que madera estas hecho muchacho.- Me levanto cerveza en mano aun con el uso correcto de mis 5 sentidos y me dirijo a arrojar algunos dardos.

Stukov se acerco a las mesas desde donde estaban los chicos de la Gatling. Con un enorme puro a medio consumir, mira las partidas de cartas y dardos. Sonrie, posando las manos en los respaldos de dos sillas.

Stukov, Zapador de la Gatling ¿Hay silla para un novato que quiere un copazo y una partida alo que se tercie? Necesitaré pareja, que los de mi escuadron no estan por la labor.

Señala con el pulgar por encima de su hombro, a la mesa de donde venia, donde aun quedan algunos hombres hablando.

Evans se mesó la barbilla pensativo.-Hightower, vamos a enseñarlas que los de la Fox saben jugar tan bien como disparar.-Antes de dirigirse hacia alguna mesa un poco "privada" el sargento recogió cuatro cervezas y haciendo una reverencia...-Las damas primero.- 

Salgo del radio de la mesa de la Gatling, me dirijo a la mesa donde esta stukov, hola soy  yaroslav  vólkov  fusilero de la Gatling ,   soy compañero de stukov. Hay sitio para  unas manos.

Me acerco caminando y sin prisa a la mesa del soldado que ha hablado de dardos - asi que te sientes con suerte muchacho ¿que tal un juego limpio y parejo, fondo blanco cada ronda perdida, y ultimo hombre en pie gana? - 

Me dirijo hacia una de las mesas junto a Cooper en las que hay dos infantes, reclutas nuevos creo haberlos visto en el escuadron Gatlin, me paro a su lado y digo

- Parece que estáis buscando alguien para completar la mesa,¿aún queda sitio? -

Observo como todos juegan sin participar en nada. Me siento tranquilo, y ligeramente adormilado.

Mijail se gira hacia quien le habla, Stone. Da una buena calada al puro, y sacandoselo de la boca con la mano izquierda, estrecha la mano derecha con Cooper y Stone.

Volkov  Señala a su compañero  y Stukov Se señala con la mano que sostiene el puro, antes dellevarselo al a boca. Tenia cierta habilidad para seguir hablando a pesar de cigarros y puros.

Y nos faltan dos para completar mesa, pero ya estamos todos  Comenta, al ver que ya son cuatro. ¿Donde nos sentamos? Si hay mozas cerca mejor, nunca esta de mas alegrar la vista.

James no se levantó de la silla. Miró a los de los dardos, miró a la gente del poker. Suspiró.

Si te levantas, vas a quedar en evidencia, chaval. Todo te da vueltas.

A pesar de lo cual, seguía bebiendo a pequeños sorbos, metódicamente, saboreando cada trago.

Hacía tanto tiempo que no... Miró la copa con sus mágicos cristales de hielo irisando la luz. Hizo un esfuerzo y se dirigió a un sitio vacío, donde estaba sentado Kurt Gawain. Caminaba, aparentemente sin tambalearse, pero si se fijaba uno atentamente, lo que parecía era un funambulista por la cuerda floja, caminando con todo cuidado y concentración.

Se sentó a su lado y le dijo unas palabras...

Gawain... no sabía cómo empezar. Siento fastidiarte, pero... creo que necesito tu ayuda. Escucha... baja la vista, como concentrándose en lo que va a decir. Tengo un problema con esto. Mira a su copa, tiene los dedos apretados contra el vaso, y están blancos de la presión. Si alguien no me controla un poco, temo que no seré capaz de... de dejarlo.

Siento darte así el coñazo, pero... puedo seguir bebiendo hasta caer inconsciente, asevera, bebiendo pequeños tragos entre una frase entrecortada y otra. Tiene la frente sudorosa.

Como al parecer las chicas no entienden lo que en Argentina es "cobrar en especias" decido cambiar a una táctica un tanto más "romántica" [1]
-¿Que les parece si vamos a un lugar con menos bullicio, menos luz y menos gente?

Me dirigí junto con el cabo hacia donde estaban el resto de escuadrones, buscando a ver quiénes serian nuestros contrincantes  y Stone no tardó en encontrar a unos dispuestos.

Estoy de acuerdo, una buena vista siempre mejora el ambiente- le dije al que se había presentado como Stukov.

- "Soldado O'Flaggerty, no se preocupe. Es natural beber en una situación así.

En mi caso, yo bebo poco. Este es mi segundo vaso de whisky y pretendo que sea el último de la noche. Eso me ayudará mañana a estar firme y a controlar correctamente el tráfico de mensajes de radio, y asesorar a los mandos, mis funciones principales.

En su caso no se preocupe. Si beber ahora le ayuda a mantener los nervios, un poco de resaca mañana es aceptable. Una vez en territorio enemigo, el miedo le mantendrá firme. Sí, el miedo, Soldado. Pues cuando uno se enfrenta a los bichos, se enfrenta también a su miedo." -

Estoy sentado tranquilamente en mi silla, sosteniendo un vaso medio vacío de whisky cuyos cubitos de hielo ya se han derretido.

Charlo tranquilamente con el segundo Consejero Táctico de la FOX.

Tras los valientes soldados de la Heat que se disponían a jugar a las cartas, apareció agitado otro novato con una botella en la mano, interrumpiendo la conversación que mantenían con un tal Stukov. Creo que las chicas tiraron por ahí, os llevo. El brazo de Hikawa arropó el cuello de Cooper, dejando la botella con una peligrosa situación y arrastrándolo hacia la zona de juego. Qué, ¿nervioso? Traaaanquilo, todo controlado hoy nadie "podrá" mojar, ya ves, concluyó su argumentación probando de nuevo un sorbo de su botella y liberando a Cooper de su presa.

-Un lugar oscuro?- clamó Minka algo asustada por ello. –No creo que eso sea bueno- susurró a su amiga.

La otra chica por su parte solo se hecho a reír dándole una palmada en el pecho a Skiper –Muy chistoso eehh, que te parece si antes de hablar de lugares oscuros vamos todas a bailar, que con tanto alcohol en la sangre necesito su dar un poco- propuso la chica con claras intenciones de cambiar el tema pero a la par no dejar la diversión. –Y bien, quien de los dos será mi pareja-.

James casi parece que desea dejarse convencer. Suelta una risilla de beodo y aferra su vaso. Luego se detiene de nuevo y cambia su actitud.

No, no comprende. Bebe otro poco. Esto no me hace bien, como a otros.

Pero permanece en silencio, y sigue bebiendo metódicamente. De vez en cuando ríe las gracias de los demás.

Tras un rato, vuelve a recuperar fuerzas.

No creo que sea "un poco de resaca" lo que tenga mañana... en fin. Me voy a por otra copa. Esta se ha acabado.

Se levanta, camina de manera cuidadosa hasta el bar y se trae una botella. La deja al pie de la silla. Se sirve otra copa y sigue bebiendo a pequeños sorbos.