Partida Rol por web

El viejo Dasmus nego.- No se permite consejeros en la toma de decisiones directas, menoscaba la autoridad de la corona frente al pueblo.- Dijo aunque supiste que le agradaria estar a tu lado.

La reina no se encontraba donde pensabas que estaria. Imaginaste que los preparativos del viaje la tendria ocupada.

No tenias tiempo de buscarla, la audiencias estaban a punto de dar comienzo.

Entraste en el gran salon de audiencias y los lacayos te reverenciaron como al principe que eras. Subiste al trono preparado para ti. No era tan grande o bonito como el de tu padre pero si noblemente comodo.

Se hizo pasar al primero

- Sir Ictor de Roxel.- aunciaron a su entrada con pomba. Era un noble, de una casa de gente rica y dar posicion politica, influyentes sin duda pero el, el menor de sus hijos no era mas que un arrogante y estupido vividor.- Saludos principe Rowan, esperaba ver a vuestro padre ¿Esta enfermo?.- pregunto algo molesto al verte a ti en lugar de al rey.

Saludé con una leve inclinación de mi cabeza a aquel noble descarado.-Saludos Sir Ictor-dije con voz grave,presa de los nervios y sonreí-Mi padre,el rey,me ha concedido el honor de sustituirlo en las audiencias puesto que es mi deber como príncipe saber llevar a cabo dichos menesteres.No todo va a ser disfrutar de la vida¿no creeis?-solté una leve risa.-Pero decidme noble caballero ¿Que os trae a este salón de audiencias?-Concluí con un tono firme pero afable

Negocios.- dijo el noble no muy convencido de tener que hablar contigo.- Nuestros rebaños estan famelicos, apenas llovio este verano y los pastos escasean. En cambio las colinas de Gart son extensas y verdes dado que el rio corre en paralelo a ellas como bien sabreis. El problema es que esos pastos pertenecen a la corona. Ire al grano, quiero pagar el derecho de pasto. Cuando llegue la epoca de esquila entregaremos una decima parte de la lana y la misma cantidad de leche y queso que se producca ese año.

Asentí en silencio mientras sopesaba la petición de Ictor.Conocía aquellos pastos.Solía pasar cerca de ellos a veces,siguiendo el rastro de algún animal.Sabía que ahora mismo la corona no los tenía en uso,era un buen trato,pero también sabía que si hacía esa oferta tan generosa era porque su margen de ganancia era enorme.Si presionaba un poco,podría sacar algo más de beneficio para el reino.-Es una buena oferta Sir Ictor.No obstante,sabreís que me pedeís acceso a las mejores tierras de pastoreo de la corona.Conozco bien esos pastos,por lo que creo que vuestra oferta,aunque generosa,no es suficiente.En mi opinión sería más justo tres décimas partes de la lana esquilada y un aumento de la leche y el queso del 15%.A cambio,podreís tener acceso a las colinas Gart con vuestros rebaños,y gozareís del apoyo de la corona en caso de ataques de ladrones,bandidos o alimañas-Sonreí con simpatía

El hombre te miro pensativo, no te respondio inmediatamente.- Puedo aceptar el 15 por ciento de los lacteos pero necesitamos la lana... ¿Que tal dos decimas partes del esquilado?.- pregunto intentando llegar a un acuerdo aceptable por ambas partes.- Puedo añadir un cargamento de miel casera, directamente traida de los panales de Roxel alto.

Sonreí ante aquella oferta.Si que estaban desesperados por conseguir aquellas tierras.No era momento de ser exigente.Estaban dispuestos a ceder,así que no había por que complicar más aquella situación-Que sean uno ahora y otro con la entrega de la lana y la leche y el queso-Sonreí,la miel de los Roxel era famosa por su sabor digno de las mejores paladores.-Espero que marcheís contento sir Ictor,hablo en nombre de mi padre cuando digo que esto es un buen trato,tanto para la corona como para vuestra casa.Ahora podeís retiraros,saludad a vuestro padre.

Ictor sonrio satisfecho.- Asi se hara.-dijo el noble en una reverencia antes de salir feliz... posiblemente demasiado. Empezaste a pensar que, o amaba mucho a sus rebaños o alguna treta se guardaba.

Nada mas irse entro el siguiente. Otro noble, conocido por ti. Un tipo que coleccionaba exclavas y se vanagloriaba de sus crueles actos con ellos.- Mi señor.- dijo con una reverencia apenas apreciable, dado que estaba tan gordo que habria rodado por el suelo de agacharse un poco mas.- Vengo a pediros ayuda. Tres de mis esclavas han escapado en un descuido de mi criado, preciso que envieis una partida en su busca antes de que caigan en manos de esclavistas o malas personas que las dañen.- dijo con fingida preocupacion.

Torcí un poco el gesto ante aquella petición.Menea tu gordo culo si tanto te preocupan,malnacido.Sólo te preocupa el dinero que puedes perder.Definitivamente si llego a rey haré algo para terminar con esto.Pero hasta entonces,tendré que seguir los sabios consejos de Dasmus.Giré mi cabeza hacia uno de los sirvientes.-Llamar a Dorden y a Corbec.Que vayan en pos de las esclavas de este caballero.Espero que dos de los mejores rastreadores del reino-sin contarme a mi,claro está-No obstante,esto os va a costar una leve subida en los impuestos,hay que tener en cuenta la peligrosidad del encargo,no hay nada más peligroso que una persona desesperada y sin nada que perder luchando por su vida.Deberíais cuidar mejor vuestra mercancía.Espero que mis medidas os dejen satisfecho.

El noble no espera tener que pagar por ello pero no se atrevio a quejarse.- Os lo agradezco, señor.- dijo a rregañadientes mientras salia.

El siguiente fue un hombre joven, con ropas caras pero que no os sonaba que perteneciera a la nobleza.- Señor, mi esposa se a fugado con otro hombre.- dijo con verguenza y rabia.- Nada me importa de ella si su deseo es irse pero se a llevado a mis dos hijos, temo que pase la frontera y no vuelva a verlos.

No podía entender el dolor de aquel hombre,puesto que nunca me había enamorado,pero el bochorno y el deshonor si que los conocía,pues era algo ligado a la condición de bastardo.Sentía pena por aquel hombre.Pero no sería justo juzgar a aquella mujer sin conocer su testimonio sobre aquella situación.No conocía a aquel hombre,por lo que no sabía si podía confiar en su palabra.-¡Guardias! que una patrulla de 6 hombres acompañen a este hombre en busca de la que dice que es su mujer y del hombre con el que se ha fugado y de los dos niños.Este tema tiene que esclarecerse ya.Aguardaré ansioso vuestro regreso para poder llevar a cabo este tema a buen término.Partid sin demora pues buen hombre,mis hombres lo escoltarán.

El resto de temas fueron tediosos, algunos estupidos como discernir si una camada de cachorros era propiedad del dueño del perro o de la perra. Al final de la audiencia consiguieron que te doliera la cabeza. No entendias como tu padre podria aguantar eso tres veces por semana.

Tras acabar la audiencia me dirigí hacia la galería de tiro con arco.Necesitaba quitarme de encima aquella tensión.Disparar un arco era lo que mejor se me daba,por algo era el mejor arquero del reino,una vida entera por los bosques y montes del reino te hace coger puntería si quieres cazar presas como los jabalís bravos del monte sin recibir daño alguno.Al llegar,tensé mi arco y llené mi carcaj de flechas y comencé a disparar a las dianas.

Pasaste un rato disparando a las dianas con notable punteria, hasta cansarte. Decidiste ir a hablar con Dasmus antes de la comida pero al pasar por uno de los salones escuchaste una conversacion furtiva. Parecia que la reina estaba llorando y no estaba sola. La voz de Gurne te sono familiarmente aunque no podias oir lo que decia. Por el tono de su voz ambos parecian tristes.

Usando todos mis conocimientos para la infiltración y el sigilo,me intenté colar dentro del amplio salón.Si era algo grave,no notarían mi presencia.Sabía que estaba mal escuchar detrás de las puertas.,pero quería saber que era eso que tanto afligía a mi madrastra,reina y amiga.Y por que negarlo,igual me enteraba de algo que pudiera beneficiarme en esta competición por el trono

Oiste a la reina decir :

....No te vayas, por favor no me dejes, no te vayas...  Besame... Por favor... Besame....

Gurne de Asdrom, tu hermano se acerco a la reina y viste que la besaba en los labios, con dulzura y pasion.
-Mi reina... Encontraremos otros momentos como este para estar a solas, pero serán solo nuestros, respecto a los demás debemos aparentar normalidad.

Mientras hablaba los dedos retiraban las lagrimas de sus ojos. La reina susurro.

Tenemos varios días con momentos a solas... - de forma cómplice y cariñosa dejando de llorar...

Gurnet la envolvió entre sus brazos, definitivamente ahora que habia probado el sabor de la reina, no podría separarse de ella. Pero ahora estaban donde estaban, y efectivamente les esperaban muchos días a solas.

-Esto es tan solo una muestra de mi amor, mas tienen que llegar. Ese viaje se convertirá en cómplice de nuestros secretos. Y ahora... debemos separarnos, ya hemos estado bastante tiempo aquí y puede que nos necesiten en otro lugar. Preparaos bien, mañana al amanecer nos encontraremos de nuevo.

Finalizo con otro beso, más prolongado e intenso que el anterior, pero igualmente tierno. Mientras sus brazos la apretaban contra su cuerpo
 

La reina asintio a aquellas palabras que me sonaron mas dulces que ningunas.- Os veré mañana entonces mi Lord...

-Asi sea, mi reina...
 

Me quedé pasmado ante la imagen que tenía ante mis ojos.¿Qué narices hacía mi hermano besando a la reina?.Y lo que era más increíble aún.¿Qué hacía la reina devolviéndole el beso?.Aquello era demasiado para mí.Salí de aquel salón y me dirigí hacia mi habitación.Mi cabeza era un hervidero de emociones.Por un lado,sentía furia,furia hacia mi hermano por semejante acto de traición hacia nuestro padre y nuestro reino.Furia hacia la reina por hacerle eso a mi padre,y,aunque muy en el fondo ,furia por no poder ser yo quien besaba esos labios con los que había soñado más de una noche.Y que dos.

No podía negarlo,una de aquellas sensaciones(quizá la más fuerte) era la envidia.Desde que había llegado a la corte,hacía ya un par de años,siempre nos habíamos llevado bien.Se portaba genial conmigo,me trataba con una dulzura increible.Con el paso del tiempo,me di cuenta que aquello no era más que una simple amistad.Ella la razón por la que aún no había intimado con ninguna cortesana,ni ninguna pretendienta.Y eso me llevaba a la decepción.Me había decepcionado que se fuera con mi hermano,un hombre casado,mayor que ella y con un hijo.¿Por qué no me quería a mi?¿Por qué tenía que irse con él? Demasiadas preguntas,y quería respuestas.Cuando estaba a punto de llegar a mi habitación,frené en seco y me dirigí a los rosales de la reina.Siempre estaba allí,así que acabaría viéndola por activa o por pasiva,aunque tuviera que quedarme en vela toda la noche,

Ensimismado en sus pensamientos Rowan meditaba en su cuarto cuando escucho dos golpes firmes en la madera de su puerta.

Levanté la vista hacia la puerta.¿Quién será?-Adelante,podeís pasar.

Gurne entro la habitación en cuanto escucho la respuesta, cerrando la puerta tras de si. Llevaba un pergamino enrollado en una de sus manos.

-Saludos Rowan, espero no os importe que os robe algo de tiempo.

Localizo una mesa adecuada en el interior y extendió el pergamino, rebelando un mapa de la zona donde se mostraban los caminos.

-Como sabéis, el rey me encargo escoltar a la reina Marian hasta un templo, y estoy planificando los detalles del viaje, y es conocido por todos que nadie conoce mejor los caminos y los bosques de la zona mejor que vos, Rowan.

Mientras hablaba su mirada observaba el mapa, pero en este punto clavo los ojos sobre los de su hermanastro, un gesto muy habitual en Gurne cuando quería que lo que iba a decir a continuación se tomase muy enserio.

-Os estaría agradecido si me indicaseis el mejor camino. Y con mejor no quiero decir el más rápido, sino el mas seguro. No me importa que el viaje se retrase un día o dos, pero no quiero darme cuenta que estoy metiendo a la reina en el territorio de unos bandidos.