Partida Rol por web

Tekdur mantiene la posición junto a su compañero, esperando a que los enemigos se acerquen.

- Si nos movemos adelante, hagámoslo a la vez, para no descuidar ningún flanco.

Sí, se ve que Tekdur es bárbaro, pero la disciplina enana, aunque tenue en él, nunca desapareció del todo.

En el fragor de la batalla veis como el jinete jalea a su sapo para que salte por los muros para huir por el pasillo sur. El resto de kobolds sigue tratando de herir a Tekdur, solo el escama negra está a punto de conseguirlo.
Mientras tanto, otro escama negra entra por el pasillo del que salió el jinete, tratando de sorprender a Geon, pero el enano está atento y evita que le golpee con su garfio encadenado.
Sin embargo Finn no perdona y dispara dos flechas al que acaba de entrar, una se clava en el hombro y la otra en el estómago del monstruo, dejándolo muy malherido.

Resiste, Tekdur. Iomedae no nos abandonará, dice Rumuk tratando de alientar al enano mientras él lucha contra el nuevo kóbold que acaba de posicionarse enfrente.

- Tranquilo Rumuk, que apenas estoy entrando en calor. En un momento empezaremos a divertirnos...

Y para apoyar sus palabras el enano suelta un hachazo sobre su nuevo enemigo que se incrusta profundamente en su craneo esparciendo una oscura sangre hacia atrás.

- Tu eres el próximo clama desafiante al escama negra

Soker se desplaza por la cámara mientras carga la ballesta para realizar un nuevo disparo.

Enfurecido por la repentina interrupción del kobold con el garfio, Geon se vuelve hacia él con los ojos tan inyectados en sangre como las numerosas heridas de su torso y le hunde el punzón del guantelete en el estómago, antes de retirarlo de su puño de un hachazo en pleno esternón. El sorprendido kobold apenas tuvo tiempo de preocuparse por lo sucedido, antes de que sus ojos se nublaran para siempre:

-¡Sabandijas escurridizas! ¡Bestias insidiosas! ¡Ninguna saldrá viva de aquí! ¡No huyáis; no podéis ir muy lejos!- gritó el enano mientras contemplaba al destripado kobold irse contra el muro.

Geon necesita dos hachazos para acabar con el kobold de escamas negras.
Rumuk acaba con la vida de otro de los kobolds. Tekdur no tiene tanta suerte.
Al verse superados los kobolds comienzan a retirarse por el corredor hacia el norte.

Cita :

No, son de asaltos distintos... A Tekdur le chulean los turnos cosa mala...

Tekdur, en el fragor del combate no se dió cuenta de que había matado a un kobold de más.

Viendo desaparecer bajo sus hachazos al último kobold en pie, Geon se apoya derrengado contra la pared, sin resuello ya cuando pierde el empuje de la adrenalina, antes de comenzar a librarse de la pegajosa baba del slurk. Una vez libre y aun tambaleante, pero recuperándose con rapidez, recoge el hacha caída en el suelo, sujetándola con la mano nuevamente.

Tras recoger sus hachas y el aliento, Geon volvió a incorporarse, ya más descansado y espetó:

-Uno se fue por este tunel. Hay que cazarlo.- indicó señalando al lugar por el que huyó el jinete kobold y mirando las huellas dejadas por la baba en el suelo -En marcha.- terminó por aceptar, al límite de sus fuerzas.