Partida Rol por web

Siguiendo hacia el Norte, pegados al lado derecho de la pared de la mazmorra, atravesasteis la zona del campamento, quedando este detrás vuestra. Según vuestros cálculos, en aquella dirección, pero a muchos días de viaje, debía encontrarse otra de las entradas a la Mazmorra.

El camino que seguíais era una gruta de unos veinte pies de ancho, que se retorcía en su camino al norte. Parecía que había una terraza, no más de diez pies de ancho, en la pared derecha, aunque la altura (difícil de estimar en la oscuridad, pero sin duda mayor de veinte pies), unida a lo resbaladizo de la pared, hacía casi imposible la escalada. Y es que la piedra que formaba las paredes de la cueva, extremadamente dura y de aspecto negro como el carbón, estaba recubierta por parches de un musgo luminiscente aquí y allá, que aunque apenas daba luz, iluminaba suficiente como para ser un ligero alivio a la oscuridad de la gruta.

En esta situación os encontrabais cuando el camino volvió a dividirse en dos caminos, y os disponíais a seguir por el lado derecho.

Escuchas una conversación. Más adelante, por el camino de la derecha, logras discernir unos susurros. Son en un idioma que no entiendes, de tonos guturales, pero estas seguro de reconocer al menos dos voces. No puede provenir de muy lejos.

Aunque vuestras antorchas apenas alumbran, tus ojos élficos te permiten detectar algo en la terraza, siguiendo por el camino de la derecha. Agazapadas tras unas rocas, logras distinguir a duras penas cuatro figuras, que parecen armadas con arcos. Deben de estar a unos cincuenta pies más o menos, y no parece que tus compañeros las hayan visto.

-Ptsss- chisto -todos quietos- advierto a mis compañeros.

Cuando frenan les digo -hay enemigos en la terraza, en el corredor de la derecha- entre susurros -a la cuenta de tres haré surgir luz, estén listos y sigan caminando-.

En voz baja cuento -Uno, dos... TRES- Concluyo gritando y evocando una antorcha en la punta de mi bastón.

luz ? Con lo bien que se está en la oscuridad Es lo único que acierto a pensar ante el anuncio de Imoeth pero tampoco hay tiempo para más así que me preparo para lo que pueda venir . Creo un escudo de fuerza que me acompañe mientras camino y avanzó esperando ver qué pasa .listo ,entonces. susurro para indicar que estoy dispuesto y preparado .

Regiarix situa su espadón sobre el hombro en silencio mientras van avanzando. Al susurro de Imoeth se detiene, pero no contesta, se limita a estar preparado para cualquier eventualidad.

crawdler toma su postura de combate inicando su aura de proteccion para cubrir a sus aliados lo mejor que le es posible, lanzarse al combate contra algo que no ven era peligroso, asi que espero a que la luz aclare un poco y busco con la mirada a los enemigos para identificarlos cuanto antes

El conjuro de luz logró revelar a los Gnolls. Armados con arcos y flechas, sin embargo, su cobertura, unida a su situación por encima de vosotros, hacía que seguramente su emboscada fuese a ser muy efectiva. Trepar la pared no sería fácil, y disparar a los Gnolls sería difícil.

Que...que ¿que ha sido eso?

Dice mientras va avanzando y de repente, su mirada completamente abstraída, agudizando más sus oídos a causa de ese extraño sonido.

-Hay algo...delante de nosotros...es un idioma que conozco...debemos tener cuidado-.

Pero al ver que Imoeth lanza el conjuro de luz para iluminar el lugar, logra contemplar para su sorpresa que se tratan de gnolls. En ese momento, sus manos comienzan a emitir una energía brillante, poco a poco parece tejerse lo que parece ser una armadura translucida en esos colores cromáticos, más etéreos y ligeramente plateados. Casi caóticos .

.Isthu...darha Moevkul.

Invocando el conjuro armadura de mago para aumentar su defensa en combate, dado que en este momento no se encuentran en la posición más ventajosa. Y considerando que deberá de precisar de los conjuros más arcanos que divinos en este turno.

Los enemigos estaban fuera de mi alcance en un cuerpo a cuerpo, y subir no parecia una movida muy inteligente en ese momento, apunto a uno de los Gnoll (G1) saco mi arco compuesto y disparo contra el enemigo, mi aura podria proteger a mis aliados un poco

Malditas bestias!, si llego a subir van a lamentar planear esto

Observo la disposición de los gnolls y no puedo por menos que elogiar su buen juicio a la hora de plantear la emboscada ; un lugar elevado de difícil acceso , parapetados y equipados con armas de distancia .Asiento con la cabeza .Nada mal , pero que nada mal para unos bichos que se pasan oliéndose el culo unos a otros .. Ahora es nuestro turno de hacerles ver que si bien la emboscada estaba bien la elección de presa ha sido un desastre .Confiando en que mi armadura y la pantalla de energía mental que he creado delante de mi sean suficientes para parar las flechas avanzo  disparando contra el enemigo más cercano .

Regiarix suelta el espadón a sus pies mientras coge el arco y una flecha, apunta hacia un gnoll y dispara, aunque los nervios le hacen errar el tiro, al punto que la flecha cae a apenas un pie por delante de él.

La luz manaba de mi bastón y eso había permitido a mis compañeros ver. Kerflank exclama que las bestias han sido inteligentes al elegir aquel lugar pero yo no opinaba lo mismo.

-Al contrario- digo comenzando a toser -ell.. *Cof Cogh*... No saben en qué *Cjemm* se metieron- la tos de Imoeth se intensifica hasta que de su boca brota un enjambre de insectos.

Los mismos viajan hacia la plataforma y, aprovechando la cercanía de los pobres Gnoll entre sí, comienzan a hacerse el festín de sus vidas, mordiendo, picando y bebiendo la sangre de los enemigos del mago.

Sancho atacará con su honda, con la que no es competente. Usted tiene sus estadísticas.

El primero de los Gnolls, tratando de ignorar a las criaturas del enjambre, dispara hacia Kerflank dos flechas, que se pierden muy por encima del brujo. A éste se le une otro de los Gnolls, que trata de disparar desde un flanco, fallando también.

Ante estos fallos, los otros Gnolls parecen preferir disparar contra otros objetivos, y uno de ellos trata de disparar a Regiarix, mientras que el cuarto dispara contra Amras. Sólo una flecha termina por dar en su objetivo, rozando levemente a Amras. El resto se clavan en las rocas o son paradas por los escudos sobrenaturales y armaduras. Sin embargo una leve mirada hacia las flechas os revela que parecen estar impregnadas en una especie de sustancia viscosa. Sin duda, algún tipo de toxina.

Nuevamente tomaba una flecha apuntandole al mismo enemigo del ultimo ataque, disparo hacia el esperando causarle mas dolor y que deje libre ese costado para subir con mas calma, claro una vez los insectos no sean una molestia

Creo sera mas rapido si nos centramos todos sobre uno y l acribillamos hasta que caiga para continuar con otro

Si,si centrarse ... matar, acabar con ellos .No aparto la mirada de mi victima y casi puedo imaginar su cara cuando exhale su ultimo aliento .Un enjambre de bichos,algunas flechas y mis ataques están cayendo sobre los enemigos pero aun así no hemos conseguido eliminar a ninguno y cada segundo que pasa les damos la ocasión de que alguna de sus flechas nos alcancen .

No podía moverme demasiado sin perjudicar a mi equipo quitándoles la visión por lo que opté por buscar algo que me cubra, como una roca o similar.

Mantuve en alto mi bastón para que iluminara la plataforma y dejaría que los insectos acabaran con mis enemigos.

Regiarix dispara otra flecha, fallando, por lo que decide que lo mas prudente es resguardarse. Viendo que no hay mucho lugar y que Imoeth pretende hacer lo mismo le señala un sitio al mago mientras coge su espadón.