Partida Rol por web

Cuando el elfo comenzó con toda la historia de construir un refugio, Clevor perdió la paciencia. Quería llegar cuanto antes a la desgraciada torre, y además del frío que le calaba los huesos, tenía aguantar ahora a Dagor bromeando con resfrios y querer armales una casita de muñecas a ellos.

sin embargo te pido un instante de paciencia para ver si podemos encontrar algún refugio para nuestros camaradas, no quisiera que pescaran un resfriado ¿verdad?

Apenas finalizó esa frase el guerrero lo interrumpió, frenándolo en seco.
-No, perdamos, tiempo, elfo- sus ojos lo miraron fijo, como brasas, mientras cruzaba los brazos, claramente impaciente. Cada una de sus palabras había sido acentuada particularmente, separadas de las otras para dejar el mensaje claro, conciso.
-Ve junto a Fargrim, os esperaremos bajo aquellos árboles- finalizó, enfrentándolo. 

-Explorad, pero evitad el combate a toda costa-

Fargrim asiente con un leve movimiento. 

Aguarda observando con paciencia la torre de los goblins pero sus ojos nunca habían sido dignos de alabar. Cuando Dagor estuvo listo empezaron el camino. Al enano no le era necesario revolcar sus ropas en la nieve, a su pesar, el clima ya había realizado el trabajo para el.

de acuerdo, entonces parto, pero consideren lo de apiñarse dice el explorador mientras se aleja con su capa embadurnada en nieve

Lo que sea pero decidanse ya-exclama Mirdor-se me han congelado los pelos de los sobacos y los de la entrepierna tambien,jaja-y rie absurdamente bajo un bigote helado

Os acercáis a la torre prácticamente camuflados por la nieve. El único acceso que hay es la entrada principal que está parcialmente derruida. En el interior hay luz y llega hasta vuestros oídos algo de ruido. Os asomáis con cautela y podéis ver que el interior es una sala medio en ruinas, con unas escaleras ascendentes y un puñado de goblins holgazaneando.

Contáis hasta seis enemigos. Cuatro goblins están en torno a una mesa echando lo que parece ser una partida con dados. Los otros dos están junto a un caldero, uno de ellos está removiendo el contenido del caldero con una cuchara de palo y el otro, que parece estar supervisando al cocinero, es más grande que los demás y de aspecto más fiero, se trata de un hobgoblin. 

Fargrim se moría de ganas por lanzar un cuchillo a la nuez del hobgoblin, pero había prometido no meterse en escaramuzas y por el momento decidió que era mejor volver.

Le hizo un gesto a Dagor hacia los demás y empezó a retirarse.

el elfo se acerca como una sombra en la oscuridad y ojea con cautela los enemigos que se guarecen del frió, el elfo aprovecha y observa los rastros que han dejado para determinar la presencia de otras criaturas aliadas que resultaran un problema a la gesta.

mira a enano y con un ademan de su cabeza se escurre por la colina en sigilo para encontrar a los demas aventureros y preparar su asalto a la torre.

Dagor y Fargrim regresan rápidamente al lado de sus compañeros después de haber echado un vistazo rápido en las inmediaciones de la torre.

El elfo mantiene ojo avizor y peina la zona circundante sin conseguir detectar ningún rastro. Nada ni nadie, salvo vosotros mismos ha pasado por aquí cerca en las últimas horas. 

Fargrim se quita la nieve de encima la ropa con cara de hastío, necesitaba un poco de calor y los goblins lo tenían.

-Cuatro goblins jugando a dados, un goblin cocinando y un hobgoblin ... quizá el líder ... supervisando la sopa.-

-Hay unas escaleras que suben a pisos superiores, pero no pudimos trepar por la pared exterior ... demasiado helado y frío.-

El enano se atusa un poco la barba antes de continuar.

-Parecen bastantes distraídos y no están en guardia ... creo que podríamos realizar un ataque sorpresa. Con algo de suerte no llegarán a sus armas-

Travok se acariciaba la barba mientras la avanzadilla daban el parte.

Y no tenian ningun centinela los goblins.... bien, la tactica de la sorpresa la veo la mas acertada, pero lo malo es que no todos estamos preparado para tal menesteres. Quizas los que podais hagais una ataque sorpresa y los demas arremetemos luego.... o quizas, hagais un ataque y os retirais para que caigan en nuestras manos Golpeo una mano con la otra en un sordo sonido Pero temo que esto ultimo pueda dar la voz de alarma.

-Dudo que sean los únicos pieles verdes de la torre ... si atacamos y nos retiramos probablemente no nos sigan y den parte a los pisos superiores.-

Fargrim mira hacia lo alto de la torre.

-Y a saber que tienen en sus pisos superiores ... como una balista.- 

Los enanos pondrían una balista, de eso estaba seguro ...

-Si dan las voces de alarma en el interior podemos defender la única vía de entrada, esas escaleras, y evitar que vengan mas enemigos a tropel.-

Clevor escuchaba en silencio el reporte de la exploración dado por Fargrim, así como los planes de posibles acciones.
Quitó los ojos de la hoja de espada y se unió a la discusión.
-Preparemos un ataque sorpresa, luego podremos usar las escaleras a nuestro favor- afirmó, apoyando lo dicho por el convicto. -No perdamos tiempo-

Frunció el ceño y tomó su escudo con firmeza.

-Guianos Fargrim-

Fargrim asiente.

-Cubrios de nieve y avanzad agazapados.- Les instruye antes de partir. 

-Mantened una distancia prudencial, a lo que creáis que podáis llegar con una carga.- 

Luego el enano señala el torreón con su martillo.

-Cuando el elfo y yo estemos en la puerta nos pondremos en guardia y vosotros termináis de avanzar hacia la entrada ... si se percatan, atacamos.-

Después de eso, y si no hay mucho mas que decir, el enano emprende de nuevo el camino a la torre.

Vale yo me mantengo a once casillas mas atras

Aunque yo soy defensor,no deveria ir delante tambien?

el elfo mira a los impacientes enanos mientras calienta sus manos en las axilas con una mirada retraída, mira en dirección a la torre y agrega, yo me encargo de cubrir los de la mesa los de la mesa, concuerdo con fargrim, lo mejor es un ataque rápido y contundente, al fin y al cabo no podemos a esperar que se queden dormidos con este clima tan desgraciado, en cuanto estén listos partiremos el elfo manda mano a su arco y se prepara para la escaramuza.

Tras haber confeccionado una estrategia rápidamente, os ponéis en marcha. De nuevo, Dagor y Fargrim avanzan para tratar de coger a los goblins por sorpresa mientras los demás os quedáis unos metros rezagados, dispuestos a entrar en acción a la menor señal...

El explorador se hace de nuevo a la marcha con paso seguro y sigiloso rumbo a lo que seria la primera escaramuza de la aventura.