Partida Rol por web

Fede estaba atónito ante lo acontecido en los últimos instantes. Apenas terminó de recitar comenzó la locura. 
Sentía una voz en el interior que le hablaba y dio un paso al frente. 

- Tranquilidad, compañeros. Mantengamos la compostura y el orden. 

Se  arregló la chaqueta y se volvió a dirigir al resto de compañeros. 

- Es nuestro momento, nos toca liderar el movimiento, perseguir la fe. Yo me presento para que juntos la alcancemos y nos libremos de esos impostores que se encuentran entre nosotros y que nos quieren disolver. No será fácil pero me comprometo a haceros partícipes a todos de las decisiones, de buscar siempre de manera consensuada todo. Intentaré llevar de una manera coordinada la información que proporcionéis para que todos podamos tomar las decisiones que nos toquen con el mayor acierto posible.    

No quiso acabar así. Los miró a todos uno por uno. 

- Sé que soy un españolito perdido y desubicado en un lugar rodeado de grandes mentes, de ilustres personas pero os puedo asegurar que estoy aquí por la llamada que siento del interior que me hace creyente. Confiad en mi, estoy llamado para hacer grandes cosas. 

Aunque tenía claro a lo que venía, no estaba acostumbrada a tratar con gentes tan extravagantes. Sí con ocultistas y verdaderos fanáticos, pero no con diletantes, periodistas, curiosos y otros mamarrachos similares. Tampoco estaba habituada a que mi título de Gran Duquesa no fuese pronunciado junto a mi nombre, ni se me dispensara el trato distintivo que señala el protocolo.

Por todo ello, durante el viaje y la tormenta preferí mantener las distancias con el resto de "invitados". Salvo un par de saludos corteses y una efímera conversación con Miss Jones (de arrolladora personalidad, he de reconocer), evité cualquier otro contacto. Debía estar concentrada para lo que estaba por llegar.

Una vez en la isla fuimos debidamente recibidos por un nutrido grupo de devotos seguidores del Señor Primigenio y conducidos al interior de un volcán inactivo; y, por fin, parecía que las cosas empezaban a cobrar sentido y que el larguísimo viaje había valido la pena. Nos proporcionaron vestimentas ceremoniales y nos enseñaron los cantos y ritos necesarios para recibir al dios durmiente. Durante horas ensayamos para alcanzar la perfección en la hora señalada; por momentos, sentí cómo un cierto éxtasis místico se apoderaba de mí y he de reconocer que en algún punto del ritual, incluso proferí un ahogado grito de placer.
Entonces, la grieta se abrió y la luz brotó de ella con verdosa furia. "YA LLEGA" gritó el gran maestre, y sentí que yo también estaba llegando...
De pronto, una explosión me arranca de los brazos del placer; un falso hermano ha arrojado una granada, matando o hiriendo a un gran número de fieles. Acto seguido, la luz verde que surge de la grieta extermina a todos los fieles "veteranos" excepto a la traidora y a un ferviente seguidor con medio cuerpo casi desaparecido. Siguiendo sus instrucciones, lanzamos a la blasfema e impía superviviente al pozo y dejamos que la bendición del Negrocastro nos bañe a todos.
En mi interior, se asienta la energía del dios y sonrío al resto de invocantes, sintiendo, por primera vez, que sí son mis compañeros.

Esta misma energía me compele a dar un paso al frente entre los adeptos supervivientes y dirigirme a ellos con voz alta y clara:
- Queridos compañeros, amigos, hermanos. En estos momentos tan complicados, en los que está en juego algo más grande que todos nosotros, debemos unirnos y trabajar en aras de la liberación del dios Primigenio. Y para ello se requiere un liderazgo fuerte, como el que yo puedo brindaros. Mi familia ha esgrimido esa capacidad de mando que hacía felices a todos hasta que los bolcheviques, actuando de forma torticera, segaron la vida de mi familia y el bienestar de mi pueblo.
Desde aquí podemos traer una nueva era al mundo, una era de iluminación como nunca antes se ha conocido. Así, os pido sensatez a la hora de elegir... de elegirme como Maestra Sectaria por el bien de todos.

El viaje hasta esta isla había sido largo y tortuoso, acompañado por un grupo heterogeneo y poco fiable en mi opinión me había mantenido al margen de las conversaciones de todos, nada que ver con los problemas intestinales que me causa la navegación.

De todos modos todo parecía ir a la perfección hasta que todo se fue a la porra

"que típico, las agencias de la ley siempre actuan igual"

Y tras las explosiones una nueva reorganización de la estructura de poder, es un clásico y es el momento de los emprendedores, y dos pronto se postulan, un poetilla y una noble exiliada

-¿era de iluminación? no me hagas reir, el Primigenio ha de despertar para que la humanidad recuerde el miedo a las tinieblas, para que los que no temen el poder gobiernen finalmente, muhahahaha-

Tras las risas doy un paso y elevo la voz con decisión

-Lo que necesitamos es una mano firme, acostumbrada a mandar si, pero por méritos propios. ¡YO! soy el mas adecuado ¡YO! me he enfrentado a las fuerzas de la ley en innumerables ocasiones ¡YO! debería ser el lider en esta empresa maligna-

Los parajes y las grotescas figuras que formaban las montañas hicieron que  deseara ponerme cuanto antes con las pinturas. Quería reflejar todo lo que me encontraba por el camino en uno de mis cuadros. Poco importaba que me llamaran loco, ya sabía yo que todo era verdad. Al fin podía palpar y sentir lo que rondaba por mi mente desde que era pequeño.

La extraña gente que nos recibió encajaba totalmente con el ambiente del lugar. Misteriosos y solemnes, nos recibieron con antorchas dotando al lugar de una oscuridad por un lado pero de color por otro. Por desgracia, todo cambió cuando iniciaron los rituales. Alguien traicionó al Maestro Sectario, y nos tocaba a nosotros acabar con él. -Si a nadie le importa- dije, aunque el poeta español ya se había presentado al cargo también- Me presento yo también. No tengo nada que ocultar, y procuraré estar a tiempo para tomar todas las decisiones necesarias respecto a las votaciones o para evitar que el que dude de la fe se convierta en traidor.  

-Espero que cualquiera que se presente- dije mirando a Fede García y a Maligno suponiendo que era también su caso, estando comprometido con la causa- cumpla esas condiciones pues esto no es un concurso de popularidad, si no algo importante.

Parte de mí me llamaba estúpido por presentarse a algo que conllevaba tanto riesgo y responsabilidad, pero igual tenían razón cuando dijeron que me dio demasiado sol en la cabeza, no me importaba arriesgarme si creía que podía se útil.

Se había ido todo al traste por culpa de una infiltrada. La hermandad no contaba con las herramientas de la policia para parar sus planes de dominación sobre la humanidad. La granada había hecho pedazos a otro de los sectarios y finalmente la gran invocación no pudo llevarse a cabo. Tras hablar de lo sucedido, escuchar al superviviente y limpiarse los alrededores del volcán se tomó un tiempo para cambiarse de ropa y vestirse como lo hacía en la intimidad de su domus. Había traído a cuestas un pequeño baúl donde guardó  enseres personales varios, distintas túnicas y como no, botellas de vino de alta calidad "prodotto italiano" de su Italia natal. Con una buena copa de vino en la mano, la mente de Francesca siempre funcionaba mejor.

Tras un descanso breve pero necesario, se personifica ante el altar improvisado de aquel cráter que ha de ser testigo de las caídas de todos los traidores ocultos entre la hermandad.

-Nos plantean una decisión difícil, elegir entre nuestros hermanos a un maestro sectario que vele por los intereses comunes del grupo, ayudando a conseguir el éxito en cada invocación en la que participemos. He escuchado los argumentos de los cuatro candidatos, y todos me parecen válidos. La pasión es tan importante como la inteligencia. La fidedigna malignidad y compromiso que se demuestre con la causa del dios primigenio será tomada en cuenta. Me decantaré por una candidatura discreta, pero no por ello menos convincente. - de aquellas palabras todavía no se podía extraer una conclusión clara sobre a quien iba a votar Francesca. Necesitaba escuchar un poco más a sus hermanos y estar atenta por si otro de ellos se postulaba al cargo de maestro sectario.

Ludwig había caminado con el resto de los acólitos, había recibido con solemnidad la túnica, y la había vestido cuando cantó los salmos que les habían enseñado, pero no fue hasta ver la luz verde, y finalmente al miembro de la hermandad casi despedazado pero aún así vivo, que no se convenció del todo de que había llegado casi al final de una larga búsqueda, de un largo viaje.

Fumó con tranquilidad de su cigarro con boquilla de oro mientras escuchaba como, luego de las instrucciones del sectario veterano, sus nuevos compañeros se iban postulando al cargo.

- Pues yo tendré que cortar esta racha de buenas intenciones, pues tengo costumbres propias de mi país en cuestiones horarias que puede que me dificulten cumplir de la mejor manera con el cargo. 

Sin embargo, y aunque aún no emitiré mi voto pues quiero ver si alguien mas se presenta, quiero poner de relieve que me ha caído bien sobremanera la actitud del Señor García. Su presentación y su valentía de ser el primero en hablar, hace que lo vea con buenos ojos, es una actitud de alguien que no tiene nada que ocultar, y mucho para dar. De un fiel devoto del Magnánimo.

Con una mano en el bolsillo del saco de exclusiva costura observó con detenimiento a todos los acólitos. Según entendía de las palabras del acólito veterano, cuatro de ellos no eran quien decían ser, y había que encontrarlos antes de que interrumpieran el nuevo orden mundial. Había que separar a los fieles de los charlatanes. Observaría con mucho detenimiento todo lo que se dijera, y observaría especialmente a personajes que podían considerarse escépticos o charlatanes de feria, como Mr. Fuster, Mr. Pine, Miss Jones o el tal Archibald. A tal efecto tuvo una idea.

- Mr. Olsen, seguramente ya esté en ello, pero sería buena idea registrar todo con ese artefacto suyo, creo que nos será muy hilfreich, muy útil.

Suit no era mujer de muchas palabras. Habia asistido expectante a todo lo sucedido siempre abrazada a su querido Dodo. Pero ya habia llegado la hora de intervenir.

Queridos y no tan queridos compañeros. Parece que por ahora todos nos vemos preparados para ejercer de Maestro sectario. Es evidente que algunos lo harán para protegerse y sentir que al ponerse al servicio del pueblo, de alguna forma, o durante algunos días los veremos como inocentes. Bien. Yo quiero presentar a mi Dodo como Maestro Sectario. No hay que dar muchas explicaciones sobre el porqué ofrezco a lo que mas quiero, y evidentemente él hablará a través de mi. "Uy! Uy! Que raro!" (hace mímica imitando a alguien estúpido) "No entiendo nada!! ¿Ese pájaro nos va a representar?" (Abandona la imitación). ¡Así es! El Dodo será nuestro representante. Él solo come y duerme... y le gusta que le rasquen bajo el ala... pero también es el último Dodo y sabrá llevarnos a buen puerto. ¡Que nadie se ría! Venga! A votar al Dodo que es más listo de lo que pensáis. Y por ultimo pido que la gente que habla mucho reflexione que, en un futuro, puede llegar a confundir mucho también. Gracias.

Suit levantó al Dodo como en el Rey leon para que todos le vieran. El Dodo sin inmutarse hizo un extraño sonido de ave afonica.

Sophie decidió no seguir la indicación del acólito superviviente y en lugar de descansar esas horas se había dedicado a tomar notas de todo cuanto había acontecido en aquel volcán. Nunca había visto nada igual. Ni las más enigmáticas historias que le contaba su difunto padre, ni los libros más misteriosos y ocultos habían conseguido que se imaginara algo parecido a lo vivido en su primer día en la isla. Y no quería perder detalle para poder contarlo algún día en su libro. A veces pensaba en el título que llevaría su obra, aunque eso siempre lo dejaba para el final.

Ya reunidos de nuevo, estaba dispuesta a presentarse al cargo de de Maestro Sectario (pues a fin de cuentas no confiaba en nadie más que en sí misma, pese a toda la responsabilidad y trabajo que conllevaba) cuando de repente vio como muchos de sus compañeros se adelantaban. De todo lo que iba observando, había algo que podía ir concluyendo: en ese grupo había mucha gente queriendo hablar mucho y tener poder. Sophie siempre había admirado a los valientes e incluso ella estaba dispuesta a dar un paso al frente, pero no podía evitar extrañarse ante la cantidad de propuestas. ¿Serán conscientes de lo que realmente implica? ¿habrá buenas intenciones en todos ellos? Pensaba. Desde luego que a partir de ese momento todos tendrían que estar ojo avizor.

Entonces se aclaró un poco la garganta para proceder a hablar. Permítanme, señores. Espero que seamos conscientes de la importancia de nuestra labor y que quienes se han presentado para liderarnos realmente asuman ese cargo con total implicación y responsabilidad, escuchando a todos los presentes y animando a la participación y al debate. He visto muchas ganas de hablar y eso ahora nos puede permitir conocernos bien, pero más adelante podrá ser una maniobra de despiste. Pero, de igual modo, quienes se mantienen callados pueden querer pasar desapercibidos para llegar hasta el final. Yo intentaré que mis intervenciones sean breves pero claras, colaborando con la hermandad e implicándome en esta labor hasta el final, ayudando a desenmascarar a los traidores. La labor de Maestro es complicada, por lo que he entendido, y quiero pensar que las ganas y el ímpetu que hay presentes a la hora de presentar candidaturas, son los mismos para cumplir nuestra misión con éxito. Por todo ello, y dado que poco más aportaría mi candidatura a lo que han defendido mis predecesores, no me presentaré en principio, salvo que lo veáis por el bien del grupo y la mayoría queráis apoyarme. Y, de los candidatos hasta el momento, todos presentados con ímpetu, he de decir que el hecho de que el señor García se presentara el primero me ha hecho verle como un valiente, pero esto no quiere decir que mi voto ya sea para él, porque todavía quiero escuchar al resto... Acabó diciendo, mirando a los que aún no se habían pronunciado.

Ah y señor Orsen, como dije ya antes, yo que Vd. pondría su cámara a grabar desde ya.

Tras oír a los demás, asentí. Al fin y al cabo, yo me había presentado porque al fin y al cabo era del único que estaba seguro, de momento de su inocencia. Y porque me forzaría a estar presente y activo todo el tiempo. - Si García garantiza que estará ahí en todo momento demostrando no solo ser valiente si no también constante no veo razón para que no sea él o cualquiera de los otros. Yo garantizo mi compromiso, desde luego, así como escuchar a la mayoría para decidir las votaciones. Todos los que nos presentamos deberíamos garantizar eso, pues quien no lo cumpla, no valdría como líder.

Ser valiente, avispado y dispuesto a tomar el bando de forma lo más objetiva posible eran buenas calidades, pero si querían convencer a aquel dudoso que podía volverse policía de no ser convencido a su hora precisa se necesitaba de constancia y puntualidad. -Tampoco creo que sea mala idea que los candidatos seamos sinceros y digamos qué tipo de elecciones preferiríamos. Yo creo que las más justas serían las hechas por ritual, poniendo las cartas sobre la mesa desde el principio, o a barullo siempre y cuando la otra no sea posible evitando cambiar de voto lo mínimo posible. Claro que si no funcionan, tampoco veo mal optar por el linchamiento en el futuro si vemos que con las públicas son utilizadas por los policías para linchar inocentes. De esa forma, tendrían más difícil hacerse una piña para condenar un inocente si no saben como van las intenciones de voto. 

Por otro lado descartaría la secreta pues no beneficia a los que no son policías y las  de palabra del maestro, pues los policías, al menos hasta que quede más de uno, se votarían entre sí como personas en las que confían y solo moriríamos los que no lo somos.

Edward estuvo junto a Fede y Faramir cuando bajaron del barco, durante un momento todo iba bien pero, para que negarlo, sorprendió significativamente encontrarse a todos aquellos seguidores del Dios Primigenio, así que tras recibir la capa, se la colocó, siguió al grupo y formaron la media luna como debían hacerlo... lo siguiente estaba borroso, explosiones, muertes, una luz verde... Definitivamente Edward empezaba a estar fascinado por todo lo que ocurría y sino que se lo dijeran al hombre medio quemado, si no era un milagro estar tan cerca de la granada y no morir, nada lo sería.

Se mantuvo con la libreta en la mano, sin escribir, absorto, pensando en lo ocurrido, en como le había latido de rápido el corazón con el fuego verde viniendo de golpe, no respiró durante un instante, no supo reaccionar, solo supo quedarse quieto y pensar que aquello era... ¿Precioso? "¿De verdad yo estoy pensando que aquello era precioso? ¿Donde está el fraude?¿Donde está la trampa?... ¿Me invitaron porque querían demostrarme que todo era verdad? Que había un dios primigenio...?" Todos sus pensamientos acabaron en el momento en el que Fede se dio a conocer como uno de los posibles líderes sectarios, algo que arqueó una ceja del periodista pero, para que negarlo, también le sacó una sonrisa.

Los demás intentaron mostrar algo pero, muy pobre todo para Edward, hasta que tuvo que hablar -Seamos sinceros- Dijo sin mediar mucha más palabra -De todos los posibles que os habéis presentado, son... Un soñador, como él mismo se definió, una persona que únicamente es "MI FAMILIA" todo el rato, otro que únicamente es "YO" todo el rato, otra persona que... ¿Malvado?...- Negó -una persona que "procurará" estar disponible y una mujer que habla a través del pájaro...- Hizo el silencio durante un segundo, no sonrió, ya no estaban las cosas para sonreír, aún tenía en mente aquel fuego verde, pero continuó hablando -Si he de elegir entre ellos, me quedo con el soñador, me parece el único con valor para hablar primero, además, desde el principio ha demostrado querer más la unión que la separación, solo espero Señor Fede, que en caso de salir usted, esté a la altura, por ahora se ha ganado más mi confianza que muchos otros y hace poesía- Sonrió al español -aún así me presento yo también, yo... Vine con las ganas de destapar un fraude... Pero, quiero...- Tragó saliva -Saber más sobre aquel fuego verde y sobre el Dios Primigenio y si la única manera de llegar a saber más es encontrando a aquellos que intentan detenerlo, haré lo que sea necesario para ello- Se mantuvo serio, firme, con ganas de saber más sobre todo lo ocurrido. 

Miró a Irving y continuó -Como ha dicho el señor Malloy, me parece buena idea indicar que tipo de votaciones propondríamos- Se quedó callado mirándolo y continuó -Aún no acabo de entenderlo del todo, señor Malloy, pero comparto su ideal en que las votaciones sean públicas, ya que al ser las primeras serán mucho al azar, pero a la larga será más últil- Hizo un gesto con la cabeza a modo de aprobación a la frase de Irving sobre mostrar sus votaciones

No pudo evitar cierta entonación en la descripción que Edward hacía de mí. No es que estuviera en desacuerdo con lo que decía, pues se parecía a lo que yo ya había dicho, pero quería dejar claro ese aspecto. - Créame, cuando digo que procuraré hacerlo es porque a menos me pase un accidente desafortunado- accidente que podría pasarle a cualquiera- yo estaré ahí. Tienen mi palabra- si es que les servía aquello, pues al fin y al cabo, muchos éramos desconocidos y tras la idea de que había algunos infiltrados, era más difícil el tenerlo en cuenta.

Que cantidad de candidaturas, me hace recordar que se supone que los miembros de la secta trajeron a la isla gentes para ser lideres, como yo, no meros seguidores. Aun así se ve que la mayoría son patanes o locos

-¿escuchar a los demás?¿ser democrático y justo? no es así como funciona el mundo señores, un lider ha de ser capaz de tomar decisiones, de escuchar a sus seguidores y de ignorarlos cuando no dicen nada útil. Un lider que se sienta limitado y en deuda no nos llevará a ningún lado, pusilanimes sin iniciativa es lo que son-

Girandome señalo a Pine que acaba de hablar -usted narizotas, no es malvado es Maligno, hay una diferencia, y por supuesto, todos nosotros, toda esta empresa es en esencia maligna según la ética comun de la plebe, si no lo ven son unos necios o unos cobardes. Yo me rio de esas etiquetas y las tomo como mi insignia-

Con un gesto teatral se mueve hasta Malloy -usted pintorzuelo, ha dicho algo interesante, hablemos de lo que hará cada cual como lider. Veo que usted y el narizotas están de acuerdo con la forma de votar, y eso les descalifica, actuan de la forma mas simple, sin imaginación, como borregos, y como borregos irán al matadero. Yo la primera votación la haría sin duda con la Palabra del Maestro. ¿Moriría algún fiel? si claro, para eso están los sicarios. Pero a la larga nos daría información muy valiosa, mientras sus propuestas solo nos harían perder el tiempo mientras esperamos que pase algo-

Observando en un segundo plano como todos los allí presentes tomaban la iniciativa, recordó como su padre lo llevaba a las reuniones secretas de la Orden y durante horas escuchaba como cada uno de los miembros intentaba cambiar el mundo. Por sus odios habían pasado las mayores conspiraciones de la historia. Cornelio ansiaba ese poder, soñaba con poder cambiar el mundo, pero su padre le había arrebatado todo

Tras la última intervención y con un movimiento sutíl y elegante, Cornelio se retiró el sombrero de la cabeza y se dispuso a hablar...

-Todos debemos ganarnos nuestra inocencia. El cargo que aquí se vota necesita de esa inocencia. Unas simples frases bien hechas pueden confundirnos y hacernos tomar decisiones precipitadas. Debemos pensar bien a quien entregaremos toda nuestra confianza pues la responsabilidad de encontrar a nuestro Dios estará en sus manos. Después de haber escuchado a los que habéis hablado, no tengo claro por quien postularme aunque si comparto algunos ideales de uno de los candidatos. No revelaré todavía mi voto, pues debemos dejar que le resto se pronuncien. Como he dicho, es una decisión necesitada de reflexión

Mi primera opción es la de no presentarme como candidato, pero si el grupo decide que debo presentarme lo haré con toda la responsabilidad que conlleva

¡¡El Dodo ha hablado!! 

Dice que por ahora nos centremos en elegir al Marstro Sectario y dejemos los "tipos de votaciones" y las INTERFERENCIAS para después. Y que desconfiemos de quienes se presentan al cargo pero hacen propaganda de otros. ¿Para que? Para que salga otro elegido, como Fede, pero siempre puedan decir que ellos tambien se presentaron.

Suit aplaudió al Dodo y le acarició la cabeza. ¡Es maravilloso! ¡Como se fija en todo, eh! 

- Sí sí sí sí, eso eso... perfecto... así... todos encuadrados... todos en círculo... sí sí... perfecto -

La ceremonia transcurre ante la lente de mi cámara mientras mi mente ya planea el montaje para el apoteosis final. 

- Y cuando Él aparezca, cuando nos agracie con su presencia, crescendo y primer plano. sí sí sí -

Hago un barrido por los presentes.

- Ahora una transición. Maestro. Veteranos.... ¿qué hace esa... ? -

Alzo la vista del objetivo y mi cara dibuja el más aterrador de los horrores, pero la cámara nunca deja de grabar... nunca

Pero no todo está perdido.

- No no no, y la camara funciona, aún funciona. Y nunca, nunca deja de grabar. - 

Aún podemos volver a invocarle. Aún nos llama. Pero antes, antes debemos acabar con este cáncer que quiere arrebatarnos su presencia. 

Los debates comienzan y las opiniones ya se ven vertidas. Mi labor aquí es grabarlo todo, aportar el toque del séptimo arte a todo lo ocurrido, y obtener con ello la que será sin duda la mejor película de la historia.

- No no, yo no me presento, yo grabo, yo soy el director, y el director no es el actor de su película. Y de los actores que ya han aparecido en la platina, Fede y Suit me otorgan el mejor encuadre. Además, ¡el primero sabe rimar y recitar, y la segunda tiene un Dodo! ¿cuándo se ha visto un Dodo frente a la cámara?-

Y la cámara, la cámara nunca deja de grabar.

Todavía aturdido y asustado Otto buscaba sus gafas por el suelo, que habían caído tras la explosión. Temió que su experimento psicológico se volviese demasiado real como para volver atrás, o incluso, una prueba de fuego para su propia mente. No entendía demasiado lo que estaba pasando, pero decidió meterse lo más rápido posible en situación.

Oyendo hablar a cada uno de los candidatos Otto se decantó por el primero:

​-Federico García, ha hecho usted dos cosas que me han gustado mucho. Hablar de su candidatura con brevedad y sencillez, y prometer hacernos partícipes en todas las decisiones. Mi opinión es que esto es tomar un compromiso claro y un parámetro para evaluarlo como Maestro Sectario. Las otras candidaturas también me han gustado mucho, pero me parecen más difíciles de evaluar a posteriori. De todas formas, todavía es demasiado pronto y no nos conocemos mucho y hay que esperar si alguno más se postula a maestro. Perdonad que no me presente yo, pero estoy bastante viejo como para atender a horarios de amaneceres y anocheceres.

​Y de acuerdo con Suit Sullivan. Lo primero es lo primero, necesitamos un maestro sectario antes de ver alguna otra cosa-

Faramir no había abierto la boca desde que empezó el ritual. Habían pasado muchas noches desde que recibió la invitación a la isla. Interminables charlas con su compañero sobre el tremendo cambio para la humanidad que iba a suponer la venida del primigenio y ahí estaba, frente a la grieta que..... que explotó en colores.

La explosión verde que les protegió empujándoles lejos del salvaje atentado le trató con delicadeza. Ni siquiera sintió la necesidad refleja de cerrar los ojos cuando se vio alejado súbitamente de la caverna por ese... ¿fluido? que pudo observar con claridad. 

Caramba... ¿Qué estado de la materia es ese? - era todo lo que se pasaba por su cabeza cuando aún estaba en el aire.

Se incorporó tocándose el pelo, la ropa, la cara. Se acercó a los cadáveres buscando restos del plasma verde. Casi había olvidado por completo que se había frustrado la venida del Dios por esa curiosidad sobrevenida. 

Sin embargo, el parloteo de sus compañeros acólitos le hizo cambiar el foco de nuevo hacia su conversación que pivotaba acerca de la elección de un nuevo maestro sectario. 

Ah si... claro. Tenemos que intentarlo de nuevo. Hemos de preparar su venida. 

Atendió a sus palabras en silencio y a cada cual hablaba, más incomodo se sentía por tanto parloteo vacuo. 

- Bah, bah bah - gruñió -  El señor García tiene mi apoyo. Fue el primero en presentarse y no ha divagado en exceso. Para mi es suficiente ahora mismo. Yo no podría presentarme a tal responsabilidad. Digamos que.... peco atender a demasiadas cosas al mismo tiem... ¿eso es un dodo? Qué curioso... ¿bajo qué constelación nació? Huele a piscis...  ¿Ha intentado cruzarlo con un albatros? 

Alexandra escuchaba atenta las candidaturas y opiniones de sus compañeros. El tiempo apremiaba, debían organizarse pronto y para ello necesitaban un Maestro Sectario elegido por mayoría. Era preciso ir pronunciando sus impresiones, y así hizo Alex, principalmente guiada por esa intuición y ese sexto sentido que desde niña le acompañaba. Sólo esperaba que esta vez no le fallase:

Compañeros, de entre los valientes candidatos mis intuiciones me decantan hacia Fede García, le presiento valiente, sincero, idealista y comprometido… Le percibo dispuesto a hacer lo necesario para que la llegada del Dios Primigenio sea posible. Sin embargo, he de añadir que el Sr. Irving Malloy me ha demostrado ser también una persona consecuente y conocedora de las responsabilidades que exige el cargo de Maestro y parece que también dispuesto a ejercerlas. Muy probablemente mi voto esté entre ustedes. No tengo nada contra el resto de los candidatos – Dijo mientras les miraba-, pero ahora estoy escuchando a mi intuición, a la que en gran medida le debo este viaje.

Alexandra quiso ser breve y concisa, las emociones vividas y el desgaste del ajetreado viaje pasaban factura y parece que estos días tendrían que debatir muchas cosas…

- Una persona que se refiere a sí misma como "españolito perdido y desubicado en un lugar rodeado de grandes mentes" y que luego hace la petición de "Confiad en mi, estoy llamado para hacer grandes cosas.", habla de dos opciones:
O no está preparado y a ustedes les da igual, lo que los convierte en unos necios.
O pretende acaparar ese puesto con segundas intenciones, y ustedes, en connivencia, no son más que...

Dejo las palabras en el aire para que cada cual las interprete de la manera que crea conveniente. Claro que, viendo el nivel de algunos de estos plebeyos, no sé si sus conclusiones van a ser algo más que balbuceos psíquicos.

- En cuanto al sistema de votaciones, que algunos parecen no considerar importante, se trata de uno de los pocos aspectos en los que podemos manifestarnos y que pueden dar algún indicio de si somos gente realmente implicada con la causa del Negrocastro o simples débiles mentales que quieran hacerse con el cargo para evitar el buen desarrollo de la invocación. Por el bien de todos, si deciden no elegirme a mí, espero que no estén entregando su confianza a nadie que pertenezca al segundo grupo.