-Dicen que habrá mucha acción. Soy deportista extrema y no me pude resistir, además, necesitaba cambiar un poco de aires y vaya si lo he hecho-digo pensando un poco en ese beso de Linda.-Creo que no debí montarme en esta cosa pero ya estoy aquí y casi nunca me arrepiento de lo que hago. Ya sabes, fui criada así y moriré así.
Le guiño un ojo, el chico es muy agradable.
-wow, deportista extrema, eso es fantastico. yo solo toco la guitarra y compongo canciones, esto son unas vacaciones, espero.- sonrio
-Suena bien, yo seguro que no le sacaría ni una nota a tu guitarra, pero claro, para eso estás tú y creo que es una suerte que yo no me acerque a un instrumento musical más que para ayudar a su dueño a ponerlo en el compartimento del avión...-sonreí.-Apuesto lo que sea que conquistas a alguna chica antes que termine el concurso.
-a si?- sonrio -Bueno, te puedo enseñar en la isla.-mientras la cogo de las manos -tienes buenas manos para tocar.Te será facil aprender.-
Cuando entramos en el avion, busco un par de sitios libres para Nikki y para mi.
-Prefieres ventanilla o pasillo, Nikki?-
Entro al avión junto a mi hermana y al llegar a nuestros asientos no puedo evitar sacar esa niña que llevo dentro y actuar algo infantil, hago como que corro hacia mi asiento mientras hablo a Alexia.
Me pido la ventanilla!! - digo mientras sonrio -.
Entro en el avión y busco un sitio libre, a ser posible ventanilla.
Veo a Natalie sola, me acerco-¿Puedo?- digo refiriendome a si quiere compañia...
Lo miro fijamente a los ojos mientras me sostiene las manos, el tacto es suave y parece algo extraño pero no forzado, se siente hasta bien.
-Si te atreves a intentarlo serà bajo tu propio riesgo, te aseguro que te arrepentiràs a los cinco minutos, Murray-bromeè aunque no dudaba mucho que fuera asì.
Miro la escenita y no puedo dejar de fruncir el ceño...
Murray...
Repito su nombre en mi mente mientras grabo su cara...
El chico mira su guitarra y con un gesto de algo parecido al dolor lo guarda al igual que murray, en la parte superior, luego saca de su bolso una armonica y empieza a tocar una canción lenta, que nadie conoce puesto que la compuso el, la cual transmite un cierto dejo de soledad y romanticismo, mientras mira a Murray, Linda y Miranda y luego de esto, en un puente especialmente triste de la canción el chico se enfoca en mirar a Miranda, y finaliza mientras la mira y luego sonrie para acariciar su armonica y quedarse mirando al techo.
Por fin, ya era hora, embarco en el avión mirando de soslayo a la ingente de periodistas con sus cámaras y micrófonos. Me cuesta creer que todo esto sea por un concurso del cual no se sabe nada. A bordo del avión, me quito la chaqueta, y busco un asiento. Veo al jovencito de la armónica, a la chica que iba con la otra y a la otra ya sentada con un chico, oigo a las juveniles voces de las gemelas, me recuerdan a mi infancia... Saludo a la azafata y al preguntarle sobre donde me siento, me dice que donde quiera, lógico... El avión es del programa y no somos tantos como para ocupar todas las plazas. Veo un sitio en el lado derecho cerca del ala, me siento y me abrocho el cinturón. Otro vuelo mas para mi curriculum, jejeje... Al final voy a tener mas horas de vuelo que el propio piloto.... aaahhhh....
-No creo, ¿sabes cuanta paciencia hay que tener para componer un tema?- saco un poco la lengua mientras la guiño un ojo.
Entro en el avión y busco un sitio libre, sonrio a los que ya estan sentados y pongo la mochila en el compartimiento de equipajes.
Sonrío, supongo que tiene razón, yo en esos conocimientos no opino pues soy nula. Mientras voy escuchando la melodía que entona ese joven que la verdad se escucha preciosa, cuando termina me encuentro con sus ojos, hago una seña con la cabeza y le doy un par de aplausos con las palmas en alto.
-Parece que tenemos al menos dos artistas aquí-digo sonriendo.-No está mal y lo estaría menos si supiera a qué vamos a la Isla, si me ponen a cantar, ten la seguridad que haré perder a mi equipo...
Echo a reír.
Saco mi PSP del bolso con el juego de Bleach y me pongo a toquetear botones hasta que el avión comience a despegar. Al parecer, mi amiga se la está pasando muy bien por allí atrás y me ha dejado solita aquí delante.
Bueno, ya tendremos tiempo de hablar en la isla, si es que nos dejan, claro.
-Bueno, supongo que nos informaran... sino, haremos nuestro propio concurso.- sonrio acomodandome en el asiento.
-Sí, no dudo que lo harán... Quiero que pongan a andar este bicho, me encanta volar. Aunque mejor si lo hago con sólo unas ligas atadas al cuerpo-respondo y es verdad.-Alguna vez deberías intentarlo...
Le guiño un ojo.
-Quién te dice que no sepa? En California me he escalado el cañon del colorado, pero por la parte fácil.- sonrio guiñandola un ojo.
-Eso es bueno, ¡genial! Me encantaría verte por allí, pero eso sí, te aviso que yo no te llevaré a la parte fácil. No, señor, conmigo las cosas no son así. Bueno, pero primero tendremos que terminar con este reality y luego, te invito hasta una copa.
Entro en el avión y veo apenada a Murray con una chica sentada...veo a Linda sola y me siento con ella
-Hola. ¿puedo?-