Partida Rol por web

La Larga Búsqueda: In Vitae Veritas

Roma Nocturna

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17/06/2014, 10:12
Håkan den Svarta

Aquello no era un murciélago corriente, de igual modo que él no era un cuervo corriente. Tras el inesperado golpe, se recompuso como buenamente pudo batiendo las alas. ¿Un Gangrel, tal vez? Aquello le iba a retrasar, joder...

Descendió a toda velocidad hasta el suelo, donde estaba el chico, y recobró su aspecto humano con una expresión feroz. Comenzó a gruñir levemente, pero fue intensificándose poco a poco.

-¿Quiénes sois, perros, y qué mierda queréis? No tengo tiempo que perder con suicidas... -vigilaba también el maldito murciélago, que podía atacarle desde cualquier parte.

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17/06/2014, 11:05
Rosalía Caeiro

-Estoy bien -lo tranquilizó entrando en la casa-. Escucha, Miguel ha sido apresado; los Tremere sabían que me había dado refugio. Tenemos que liberarlo y esconderlo hasta que limpie mi nombre. Cayo Marco está en Constantinopla. Voy a ir a buscarlo, pero necesito saber cuál es ahora la situación allí. ¿Hay en la ciudad algún Vástago exiliado tras la conquista otomana? ¿Alguien venido de Oriente? -se detuvo de pronto y lo miró agradecida-. Siento pedirte tantas cosas pero el tiempo apremia...

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17/06/2014, 17:15
Chico

El muchacho sonrío como si sus labios fueran una fina hoja de afeitar.

-Muy gracioso, Hakan. ¿Por qué nos has hecho venir a aquí? 

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17/06/2014, 17:32
Christian Adler

Nicolae abrió los ojos sorprendido. Después bajó la cabeza pensativo.

-Imagino que Claudia conocerá a alguien que... ¿Pero cómo habéis averiguado todo esto? -dijo de pronto levantando la vista-. ¿y dónde estabais? ¿Quién era ese misterioso jinete con el que huisteis?

 

 

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18/06/2014, 10:11
Håkan den Svarta

Maldita sea… Le conocían. No sólo le conocían: parecía que eran compinches de Hakan. Aquello era un problema. Uno para el que necesitaba a Astrid, quien por suerte no andaba lejos. Pero Daister se le podía escapar de un momento a otro. No obstante, debía centrarse en la situación actual cuanto antes.

Su rostro furioso estalló en una sonora carcajada. Se acercó hasta el muchacho y le cogió de la nuca con cierta brusquedad, sonriendo no obstante.

-¿Por qué habéis tardado tanto, bastardos? –buscó con la mirada al murciélago. Sin duda podían tratarse de una banda. Rayos, aquello complicaba mucho las cosas y ponía en peligro su tapadera-. ¡Baja aquí, que te vea bien de cerca!

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18/06/2014, 10:19
Grande

El murciélago planeó con elegancia hasta el suelo y al instante se transformó en un hombre alto y robusto, tanto como podía serlo el propio Hakan. Con largo cabello negro y ataviado con una sencilla armadura de cuero.

-Vayamos al grano. ¿Dónde está el tesoro? En tu carta decías que sería un trabajo sencillo y tenemos otros asuntos de los que ocuparnos.

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18/06/2014, 10:33
Håkan den Svarta

El interior de Hakan estaba inquieto. Muy inquieto. ¿Qué tratos tendría con aquellos dos? El grande no parecía especialmente amistoso... Pero lo que más le sorprendía era que... ¿Cuándo les había dicho Hakan que fueran a Roma? ¿Cuánto tiempo había pasado desde que Francesco fue diabolizado? No podía ser mucho para que aquellos dos hubieran llegado a Roma, suponiendo que hubieran viajado desde Suecia.
Necesitaba a Astrid, joder.

-El tesoro está en movimiento. Y quizá ya lo tendría entre manos de no ser por tu caluroso saludo -se acercó hasta él y le mesó la barba con dos dedos y una sonrisa sardónica-. Así que, decidme, ¿preferís seguir de cháchara o me vais a ayudar a recuperarlo, joder?

Pasó rápidamente de la sonrisa a un gesto brusco y con el ceño fruncido. Desde el principio le había dado la impresión de que Hakan el Negro era así. Y ese tipo de cambios de humor bien podían infundir respeto o miedo en sus enemigos. Tanto como en sus 'amigos'.

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18/06/2014, 11:24
Chico

-Vamos entonces -dijeron poniéndose en camino-. Y dinos, ¿qué sabemos de esa Compañía Nicci? 

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18/06/2014, 11:35
Håkan den Svarta

Al Gangrel casi le dio un mareo, pero logró sobreponerse rápidamente. ¿La compañía Nicci? Una sombra de su pasado que debería haberse extinto hacía mucho. ¿Tanto tiempo había logrado sobrevivir la compañía de mercenarios? Aquello sólo podía ser obra de un vampiro... No cabía otra explicación razonable. ¿Y qué tenía que ver ahora Hakan y sus compinches con ello? Dioses, tantos interrogantes...

-Estamos buscando a un Ventrue, Thomas Daister -explicó, encabezando la marcha-. Tiene en su poder lo que buscamos. Y creedme, no es cualquier cosa. Es algo por lo que seres muy poderosos estarían dispuestos a pagar lo que fuera. Literalmente -sonrió-. Pero es un cabrón esquivo... No hay maldita forma de ponerle las garras encima.

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18/06/2014, 11:41
Grande

-Aguarda -dijo deteniéndose-. ¿Qué demonios tiene que ver ese Ventrue con el tesoro de la Compañía Nicci del que que hablabas en tu carta?

Notas de juego

Tira Manipulación+Subterfugio.

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18/06/2014, 11:49
Håkan den Svarta

Demonios del Infierno...

Se quedó quieto un segundo. Quizá fue eso lo que le delató. Con el tiempo, Francesco había aprendido a dominar sus expresiones corporales. Como Hakan no las conocía todavía lo bastante como para lograr algo así. Se giró lentamente para encarar a ambos y cruzó los brazos, ocultando las manos bajo sus axilas. Comenzó a desplegar sus garras poco a poco.

-Bien, podemos hacer dos cosas: ir a por ese estúpido tesoro o aspirar a algo mucho mayor y más ambicioso. Vosotros decidís qué preferís.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Vamos a gastar FV... Y un puntico de sangre para las garras, claro.

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18/06/2014, 12:20
Chico

Los otros se miraron entre con gesto de extrañeza. Uno de ellos sacó un pliego de papel.

-¿Entonces el tesoro de los Nicci era un falso reclamo para algo más grande? ¿Y que hacías en Londres cuando enviaste esta carta?

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18/06/2014, 13:06
Håkan den Svarta

Hija de puta...

¿Quién sabía acerca de la compañía Nicci? ¿Quién sabía que iban a Roma? ¿Quién conocía a esos dos compinches de Hakan?

Astrid. Maldita hija de perra.

Por supuesto, ahora podría encontrar a Thomas. Porque Astrid habría dado con él, seguramente para robarle el Clavo. Para venderlo al mejor postor o a quien fuera. No obstante, Hakan suspiró rezongando.

-Iba a ser difícil mover dos culos codiciosos como vosotros si os hubiera explicado toda la cuestión por carta. Ahora oíd: lo que buscamos puede peligrar. Hay mucha gente interesada en esto. O nos movemos ya o perdemos el rastro y el tiempo. El vuestro y el mío. Decidid. Ahora.

Cogió la carta del muchacho y la hizo un rebullo. No obstante, no la tiró. Quería saber qué contenía.

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18/06/2014, 14:13
Rosalía Caeiro

-Thomas Daister. Y no huí, se me llevó -puntualizó ceñuda-. Las cosas han cambiado y ahora está de nuestro lado, por el momento al menos. ¿Quién es Claudia? ¿Puedes llevarme con ella?

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18/06/2014, 17:05
Grande

-Bien. ¿Cómo es ese ingles? Nos separamos y damos con él, pero esta vez más te vale no intentar jugárnosla o no tendrás tanta suerte como la última vez- le advirtió severo.

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18/06/2014, 17:06
Christian Adler

Nicolae asintió a su explicación sin disimular su extrañeza.

-Es una Nosferatu. Tiene una prolija red de contactos, pero os es enteramente leal. De mortal asistíais a sus recitales de música. Canta muy bien. Después del Abrazo busco mantener el contacto con el mundo del arte gracias a vos. Os llevaré con ella.

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18/06/2014, 18:44
Rosalía Caeiro

Rosalía apenas pudo contener su asombro. ¿Ella, aliada de una Nosferatu? Cuántas sorpresas le quedaban aún por descubrir de su pasado olvidado? Empezaba a tener la amarga sensación de no conocerse lo más mínimo.

-De acuerdo, llévame con ella -dijo con un asentimiento.

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18/06/2014, 19:04
El Narrador

Christian la condujo a través de la ciudad hasta una pequeña explanada sin empedrar. Entre el las ramas entramadas de los árboles y arbustos había una escondida entrada que descendían a una pequeña cripta. Por lo que Rosalía había leído podía imaginarse perfectamente a los primeros cristianos rindiendo su culto clandestino en ella. 

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18/06/2014, 19:09
Claudia

Al fondo del angosto pasaje, en un habitación que se ensanchaba en forma ovalada y tenuemente iluminada, una mujer de espaldas parecía hablar con una rata a la que sostenía en la palma de su mano.

-Claudia -llamó Nicolae su atención.

La mujer se giró y mostró su rostro demacrado, con la piel ajada y el cabello lacio y sucio.

-¡Rosalía! -exclamó con una horrenda sonrisa y corrió a abrazarla.

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19/06/2014, 16:33
Rosalía Caeiro

La sorpresa fue lo único que evitó que Rosalía empujara a la Nosferatu con un grito de asco. Se separó de ella y forzó una sonrisa.

-Hola, Claudia... -saludó casi titubeante. Aquel lugar era horrible y su dueña lo era aún más. Tal vez cantara como los ángeles pero en aquellos momentos no tenía ningunas ganas de escucharla; tan sólo de salir de allí-. Escucha, no tengo mucho tiempo... Necesito información sobre Constantinopla, debo viajar allí enseguida pero no sé cuál es ahora la situación. Nicolae dice que tal vez tú conozcas a alguien que lo sepa -volvió a sonreír intentando que pareciera natural. No quería ser desagradable con ella. Horrible o no, al parecer era su aliada-. ¿Puedes ayudarme?