Partida Rol por web

menos mal que quedaba poco para el amanecer, porque no podías seguir y estar ahí en tu tienda atormenrtándote no era en nada un buen panorama.

Después de dejarte las flores para que te sintieras mejor, Ogú te dejó sola para que descances, pero tú te vistes y te preparas para empezar una nueva jornada. Cuando ya estas lista, sales al exterior y ves como el cielo comienza a aclarar. La temperatura era muy agradable por lo que te sientes algo reconfortada.

Ahi afuera se encuentra Tarzán, Marlow y Frankenstein. Están sentados alrededor del fuego y en silencio, como si lo que esperaban para ese día no fuera en nada prometedor.

En ese momento aparece Ogú entre el follaje cargando sobre los hombros un antílope muerto. Como siempre el cavernícola parece un niño orgulloso de sus logros cuando te dice:

- Mira, Mimina, mí traer desalluno.

Sólo había que ver como estaban todos para saber que no sólo mis ánimos se habían menguado el día anterior, en realidad, hasta imaginaba que en eso nos sacaban ventaja, pues seguro que a quienes teníamos que enfrentarnos no estaban preocupados porque a sus amigos les hubiera pasado nada y nosotros, estábamos totalmente abatidos, al menos todos menos Ogú, quien parecía tener una fuerza de voluntad férrea.

- Menudo desayuno, eso va a ser un festín! - Intentaba parecer lo más animada que podía aunque estaba segura de que aún tendría los ojos hinchados de llorar. - Vamos con los demás, seguro que nos ayudan a prepararlo.

Comencé a caminar hacia los tres hombres allí sentados.

- Buenos días. ¿ Tienen hambre? Ogú nos ha cazado el desayuno...

Los hombres se alegran de ver lo que trae Ogú y Tarzán se acerca para ayudarlo a preparar todo para la carne. En tanto, Marlow y Frankenstein te ofrecen un poco de café mientras esperan al lado del fuego. No es el mejor café que has bebido en tu vida, pero igual reconfortaba en medio de la jungla. Entonces te das cuenta de la tensa expresión en la cara de Frankenstein, como si estuviera perciviendo algo que el resto no puede. Entonces te dice:

- Puedo escuchar tambores a lo lejos. No han parado de sonar en toda la noche con un ritmo demencial. Ese maldito ruido me tiene los nervios de punto.

Tomé asiento al lado de Frank, pues como ya sabía su apariencia no me molestaba lo más mínimo y coloqué una mano en su hombro, como queriendo infundirle algunos ánimos que a todos nos hacían falta.

- Seguro que lo están haciendo a posta para desconcertarnos, para que tengamos miedo. Si les damos ese gustado no les opondremos mucha resistencia. Además, lo de los tambores lo podemos arreglar como hacían antiguamente, prendiendo fuego.

Sonreí por la vena pirómana que me acaba de entrar, aunque sólo fuera para quitarle importancia al asunto.

- Esta noche podemos ponerte unos tapones en los oídos para que puedas descansar bien.

Frankenstein sonría ante tu ocurrencia, pero no por ello parece estar menos preocupado por esos tambores que solo él puede escuchar.

Mientras a estás ahí, viendo cómo Ogú saca las visceras del antílope y se las da a Jab-bal-ja, el león de tarzán, por un momento tienes una ensoñación y recuerdas algo que viste. Se trata de un campo de batalla en el que hay mucha genete muerta o en vías de morir. Ahí había un hombre moribundo rodeado de guerreros caidos. A su lado se encuentra otro guerrero tirado y con una espada clavada en el pecho. ves tambien unas mujeres que vienen por el campo en dirección del moribundo.

Luego vuelves a la realidad cuando agú se sienta a tu lado y pregunta:

- ¿Guardo piernita, Mimina? Tene mucha karnita rika.

A Frankenstein no le sirvió demasiado lo que le dije, aunque al menos había intentado animarlo un poco, pero estaba visto que acabaríamos todos muertos y pensando eso fervientemente, era difícil animar a nadie.

Justo cuando pensaba en lo más funesto del mundo, observando como Tarzán y Ogú destripaban a aquel animal recordé algo, pero aquellos recuerdos no eran míos, pues lógicamente yo no había participado en una batalla de aquella índole en la vida... ¿ Sería aquello que me dio sueño y que no servía para nada? Ya me había autoconvencido de que por muchas historias que me contaran no valdrían para nada.

- Por mucho que sepa, me parece que seré una mujer inteligente enterrada en África.

Las palabras de Ogú me hicieron volver a este mundo y asentí.

- No creo que me la coma toda, pero te agradecería que me guardaras un cacho. - Sonreí agradecida, pues me estaba dejando incluso la zona más jugosa y blanda para mí.

Ogú cocina mientras canta esas extrañas canciones cavernicolas que quizá ustedes son los primeros en escucharlas en milenios. Así, Ogu después de terminar de cocinar les sirve a todos su porción y se sienta al lado de Mina a comer.

La verdad es que el cavernícola tiene buena mano con la cocina. Pero no comerían tan tranquilamente.

En un momento, mientras coían en silencio, Frankenstein se pone de pie y les anuncia:

- Alguien se nos acerca.

Y sin más se adentra en el espeso follaje. Detras de él salió Tarzán y Marlow fue a buscar su rifle. No obstante, al final no parecia ser una gran amenaza lo que trae Frankenstein en los brazos, sino un pequeño niño de color que a epenas respira.

Ogú, al verlo, te dice:

- Hai ke dar agüita al negrito.

Probé la carne recién hecha y mi estómago se alegró muchísimo cuando recibió aquel primer bocado, que había que decir que a Ogú le había quedado estupendísimamente.

- Gracias por este desayuno Ogú, está muy bueno.

Así como de vez en cuando le echaba la bronca y me metía un poco con él, también me gustaba felicitarle y darle las gracias. Sabía que a todo el mundo nos gustaban las palabras amables de vez en cuando.

La tranquilidad apenas duró un par de bocados más pues Frankenstein me hizo dejar la carne para levantarme rápidamente, quizás viendo de antemano cómo venías los problemas y al ver que Tarzán traía a un pequeño muy mal corrí hacia ellos para ver en qué estado llegaba.

- Pobrecito. - Mi instinto maternal era más fuerte que cualquiera de los otros. - Llamaré a Chia, quizás ella pueda ayudarle.

Cuando entras a la tienda en la cual dormía Chia con Karemaneh te encuentras que Sandokan también está ahí. parecen que están hablando algo importante por la cara que tienen, pero al escuchar lo que les dices, Chia te comunica que estrá de inmediato con ustedes.

Cuando vuelves con los demas, Frankenstein y Ogú están tratando de animar al pequeño dándole de beber agua y mojando su cabeza. Así fue el chico recobra la conciencia y lo primero que ve son las caras de un cavernícola y un monstruo hecho de cadaveres, por lo que se pone de pie de un salto y sale corriendo en busca de cobijo. Entonces te ve y la verdad es que le pareces mucho mejor que tus compañeros, por lo que se esconde detrás de tusd polleras.

Ogú le dice:

- No tener miedo, negrito. Mí y mi amigo mio de mí no ser malulos.

Frankenstein es más realista y le dice a Ogú:

- No creo que te entienda, y si lo hiciera tampoco nos creería.

Al ver que el niño estaba bastante mejor sonreí, pues me pareció normal que saliera corriendo asustado de ellos, que no tenían una apariencia como para que el niño permaneciera tranquilo y en cuanto se quedó tras de mí lo cogí en brazos, como si fuera mi propio hijo.

- No tengas miedo.. - Sabía que no me entendería, pero sí que entendería el tono de mi voz y seguro que le tranqilizaba.

Luego miré a los demás.

- Está asustado y no entiende nada de lo que decimos. No os tomeis a mal que se esconda de vosotros... - Añadí para los demás y con el niño en brazos, moviéndome suavemente como si quisiera mecerlo y que se tranquilizase, esperé a que viniera Chia y le echara un vistazo, a ver si sabía que le podía ocurrir.

Cuando ustedes salen ven como Ogú y Frankenstein le dan agua a un pequeño con intención de reanimarlo. El problema es que cuando el pequeño abre los ojos y ve a sus salvadores, entra en pánico y sale corriendo, escondiendose detrás de la polleras de Mina.

La inglesa intenta tranquilizarlo, mientras Ogú le dice que son amigos, que no van a ahacerle daño, no obstante, el chico comienza a decirle algo a mira con los ojos llenos de lágrimas. Su lengua es muy extraña, llena de sonidos como gangueos y chasquidos de lengua. Fue tarzán quien les tradujo algo de lo que decía:

- Pide que le ayuden, que él y su familia fueron hechos prisioneros por los adodadores del dios de lengua sangrienta. Dice que intentaron escapar, pero sus padres fueron capturados nuevamente y solo él logró escapar.

El chico se abraza a ti como si necesitara protección. Entonces comienza a hablarte en una lengua extraña mientras sus ojos se llenan de lagrimas. Tú no entiendes nada, solo escuchas los sonidos que hace con la boca que ni siquiera parecen palabras, sino chasquidos y gangueos. Es tarzán quien traduce lo que dice:

- Pide que le ayuden, que él y su familia fueron hechos prisioneros por los adodadores del dios de lengua sangrienta. Dice que intentaron escapar, pero sus padres fueron capturados nuevamente y solo él logró escapar.

No necesitaba entenderle para saber lo que tenía que hacer y prácticamente lo acunaba como si fuera hijo mío, sabiendo que necesitaba el consuelo de alguien que ahora no podía dárselo fuera por la razón que fuera.

Levanté la vista hacia tarzán mientras abrazaba con fuerza al pequeño y luego volví la vista al pequeño y asentí.

- Dile que tiene que ser un hombrecito muy valiente, como seguro que lo es su padre.

Imaginaba que un niño en la situación de este tendría a la figura paterna como ejemplo a seguir y que aquello le daría fuerzas y que dejara de llorar, porque iba a tener que hacernos de guía.

- Tenemos que ayudarle. ¿ Quién se viene?

Sabía que no iba a ir yo sola, pues aquellas personas habían visto lo mismo que yo y además, estaba preguntando lo suficientemente alto como para que nadie pudiera decir que no me había escuchado.

Pese a que Chia no entendia aquel idioma, algo en su interior entendio lo que contaba aquel chico, o al menos parte, antes de que tarzan tradujera sus palabras. pues los sentimientos era otro tipo de lenguaje y ya habia visto en otras ocasiones emociones parecidas. - tarzan, traducele esto.- chia se acerco al niño y se agacho para poner su cara frente a la del niño, no tenia sus gafas oscuras puestas.- si quieres recuperar a tus padres tienes que ser fuerte y ayudarnos, que sabes del dios de lengua sangrienta, cuantanos todo lo que sepas sobre el.

Sandokán se acercó junto con Chia hasta la posición de Mina, pero procuró no avanzar más, para no asustar más al chiquillo aborigen. Chia ya procuraba tranquilizarlo, con la ayuda de Tarzán, por lo que el pirata malayo simplemente se quedó atrás, en segundo plano, aguardando.

Tarzan le traduce lo que ustedes le dicen al pequeño.y el comienza a relatar algo en su extraño idioma. Luego Tarzán les traduce que el chico viene de una tierra llamada Kukuanaland. Los adoradores del dios de la lengua sangrienta llegaron a su aldea y se los llevarona todos. Muchos han sido oblibados a trabajar en el gran hoyo que los pelo amarillo cavaron en a los pies del Kilimanjaro, y otros son llevados al templo del Dios de la Lengua Sangrante, al que los pelo amarillo llaman N'Yala-Thoth-Ep, pare ser sacrificados. El pequeño dice llamarse Ignosi.

Miraba al niño mientras hablaba, pues necesitaba que le escucharan, que le ayudaran y ahora al menos, se le veía todo lo tranquilo que podía estar alguien en su situación, aunque mi instinto maternal me obligaba a protegerlo y cuidarlo de una manera casi recelosa.

- El lugar del que habla es donde se hallan las minas del Rey Salomón, he escuchado algo sobre ello. Además, si no me equivoco, este niño se llama igual que es rey de su pueblo.

Me sonaba vagamente todo aquello, pues Quatermain siempre se esforzaba por hablar de sitios y de lugares lejanos, e incluso me había llevado a más de uno, pero de eso parecía que ya había pasado una eternidad.

- Desmontemos el campamento. Tenemos que ayudar al chico.

hay algo que chia entiende de todo lo que e lniño cuenta, el nombre de aquel "dios", y confirmaba lo que se temia desde hace un rato."de modo que estas aqui desde el principio." - si, hay que ayudarle, pero tengo que contaros algo a todos antes de ponernos en marcha, es importante para que entendais lo que nos jugamos en esto.- luego espero a que todo el grupo le prestara atencion.

- el ser del que habla el niño, es mi padre, hace mucho mucho tiempo Mi hermano y yo nos enfrentamos a el y acabamos con su vida, o eso creiamos, al menos yo, si ganamos esa batalla fue de milagro, y ahora mismo dudo que le ganaramos de verdad, y sospecho que todo podia ser parte de un enrevesado plan, pues esta claro que mi padr esta en esto desde hace ya tiempo. Creo que los alemanes no saben con quien estan cooperando, mi padre no ayuda a humanos, solo los utiliza como herramientas que son para el, los planes de mi padre seran mas peligrosos que los de  los alemanes sean cuales sean. tamien debeis entender otra cosa, mi padre odia lo que soy y mis ambiciones de ser humana sobre cualquier cosa que odie, si estais cerca de mi os matara o os torturara para hacerme sufrir a mi, a si que no os enfrenteis a el, sera mejor que yo lo haga sola, mientras os encargais de los demas.