Partida Rol por web

Imbrodiel espera a que Darren se de cuenta de que la cerradura es solida y entonces se arrodilla y, con una pequeña cuchilla que llevaba en la bolsa, intenta forzar la cerradura.

-No pregunteis donde he aprendido a hacer esto...los elfos de ciudad tenemos que buscarnos la vida.

Marwina guardo la daga y por si acaso mantuvo una flecha lista no fuera a ser que hubieras sorpresas esperando al otro lado de la puerta, de la que se estaba encargando Imbrodiel, que habia hecho un chiste sobre los elfos urbanos...siendo ella misma uno de ellos, aunque lo disimulara muy bien, oculto una queda sonrisa antes de concentrarse en lo que fuera que hubiera al otro extremo.

Abris la puerta, y el espectáculo es simplemente desolador. Apenas no hay más que mujeres y niños, excepto algún viejo que ya no puede ni combatir y unos pocos varones. Se les ve cansados, sucios, hambrientos y temerosos. Recelan de vosotros y dan unos pasos atrás, hasta pegarse contra la pared. Pero cuando Eshara entra en la estancia, todos los niños corren hacia ella. Ésta hinca la rodillas y los abraza con lágrimas en los ojos.

Después, se acerca a un viejo que se encuentra sentado sobre una caja de madera, en la pared del fondo.

Maestro Orellis, ¿Estáis bien? ¿Qué ha ocurrido? ¿Donde están los demás?

Mientras Eshara está al fondo, los niños se os acercan y os abrazan muy cariñosamente. Las mujeres lloran y alguna suspira de alivio y tiene que sentarse para no caerse del susto.

Hum...marwina relajo la flecha en el arco pero aun asi no dejo de estar alerta...la experiencia del bosque no le habia gustado nada, asi que aunque parte de ella estaba encantada de que todo hubiera acabado tan bien; la parte mas conservadora de su interior le decia que tuviera mucho cuidado que todo esto no habia hecho mas que empezar.....

Posé la única mano que tenía libre encima de algunas cabezas de los niños revolviendo el pelo cariñosamente para tranquilizarles un poco. No pude evitar sonreír levemente pero era muy extraño que sólo tres esqueletos revividos por magia fueran los únicos guardianes. ¿Quién los había conjurado? ¿Quién había convertido a los elfos en bestias de la noche? Alguien estaba detrás de todo ésto y seguro que no andaba lejos. Tal vez el anciano tenía algo que decir así que desvié mi mirada para allá con el ceño fruncido en gesto de preocupación...

—Oigamos lo que tenga que decir el maestro Orellis... 

       Imbrodiel logró abrir la puerta y, para gran alivio de la mayoría, encontramos a gran parte de los elfos con vida. Cuando todos entraron, yo me quedé en la puerta con el escudo y la espada listos, vigilando por lo que pudiese pasar pero con el oido puesto a lo que se dijese dentro.

El maestro parece agotado. Es mayor y no está para muchos trotes, pero su mirada es la más viva que habeis visto nunca.

Sí hija, estamos bien, tranquila. Algo de comida nos han dado esos engendros, y no nos ha faltado agua. Ha sido muy raro... - el viejo agita la cabeza - Pero lo importante es que estás aquí, y nos has salvado.

Os mira a vosotros, dirigiendoos una mirada inquisitiva.

¿Y estos quiénes son? No dudo de que no sean enemigos, pero espero que no sean de Vintiver, porque entonces tampoco serán nuestros amigos...

Podeis estar tranquilos, no somos esclavistas. Mis compañeros y yo somos unos simples aventureros. Encontramos a Eshara en problemas y nos ofrecimos a ayudar. Los engendros tenebrosos tienen muchos enemigos.

Imbrodiel intentaba sonar seguro de si mismo. Queria ayudar a aquella gente. Elfos como él...

marwina se mantuvo al margen; los actos sociales donde charlar con otros se suponia parte de la estrategia no eran para nada su punto fuerte, asi que callo y dejo que sus dos compañeros, se encargaran de los refugiados y de sus necesidades, por lo tanto lo unico que la silenciosa elfa podia hacer , era preparar su arco y colocarse cerca de Darren, no fuera que la mazmorra les guardase mas sorpresas....

El llamado Orellis se levanta, no sin cierta dificultad y ayudado por Eshara.

Bien, bien, bien... Os lo agradecemos profundamente, pues de no ser por vosotros quizá no lo contariamos... Es una desgracia la que ha recaido en mi pueblo, pero nadie en toda la región estará a salvo. No, a menos que Elgar'len, o Harralan, sea detenido y destruido. Sí, así es, Elgar'len era uno de los nuestros, pero estaba confundido. La rabia le invadia, y se topó con estas ruinas, y un artefacto de la era antigua que unos insensatos ocultaron penosamente. Y el demonio le envaucó, y se apoderó de él. Y afectó a otros de los nuestros también. Y ahora... otros seguirán nuestra suerte...

El gesto de Orellis es trsite, melancólico, apenado. Agita lentamente la cabeza.

Imbrodiel imita inconscientemente el movimiento de cabeza del anciano y añade: 

-¿Teneis alguna idea de donde están? Tanto Elgar`len como los otros y el artefacto...

Marwina se envaro notablemente ante las palabras del anciano, no le gustaban nada...¿demonio?, ¿uno de los suyos poseido por un demonio?.,..por el lobo terrible, era lo peor que esperaba oir...

No me gusta siseo casi para si mas que para los demas; no tenia ni idea de magia, verselas con un demonio no era precisamente la idea que tenia de pasar un buen rato, maldicion...esto se estaba complicando por momentos...

Saquemoslos de aqui...mascullo para Darren, este sitio es una trampa mortal....

      Asentí levemente ante las palabras de Marwina. La información que el anciano acababa de darnos me habia alterado... habia bromeado sobre los extraños encuentros que estabamos teniendo, pero no esperaba ni de lejos enfrentarme a un demonio... eso eran palabras mayores.

¿Queda alguno entre vosotros capaz de empuñar un arma? - me dirigí directamente al anciano - Podemos escoltaros hasta algún lugar seguro, o emprender la caza de ese demonio, pero en cualquier caso vendría bien que podais defenderos.

El gesto de Orellis es grave, y os mira fijamente.

Me temo que hace unas pocas horas Elgar'len partió hacia Vintiver con el resto de engendros que quedaban. Sus últimas palabras eran promesas de venganza y sufrimiento... Respecto a nosotros, estamos bien. - dice respondiendo a Darren. - Algunos quedan con fuerzas suficientes, pero necesitamos de su arco y su espada para sobrevivir en este duro bosque... De todas maneras, me temo que es tarde...

Al oir esto, uno de los elfos da un paso adelante.

Yo conozco una ruta rápida a Vintiver, que seguramente Harralan no conozca. Quizá lleguemos a tiempo para preparar una defensa...

Tras estas palabras, es Eshara la que habla.

El artefacto lo tenía yo. Era un eslabón roto de una cadena. Pero me temo que lo perdí o algo, ya no lo tengo...

En el pueblo la tenias, Eshara...¿cuando se ha perdido?