Partida Rol por web

Lo de invocar la niebla no estaba mal. Desde luego no podía compararse con la táctica del castor pero podría servir para salir del paso.

-Y en mi camarote, digo en el camarote del capitán, hay un sugus de piña. Quizá eso pueda darnos cinco o seis vitaminas. Pero ¿donde conseguiremos la sangre de virgen y la pepita de oro?-

- La sangre de virgen va a sé difícil de conseguí, supongo -repondió al mono mirando inquisitivo a todos los allí presentes- Y la pepita... -se quedó pensativo.

- El caso é' que ahí abajo hay una e'pecie de cocina. Allí quizá' nosotro' encontremo' algún recipiente p'hacer la mezcla y un cubo o algo pa' cogé el agua de má...

- Vayamo' a vé. -dijo resueltamente mientras se encaminaba hacia la trampilla para bajarla de una manera menos escandalosa que la última vez.

El grupo al completo se encaminó hacia la cocina. Una vez allí recorrieron la estancia con la mirada observando cada resquicio de la misma en busca de objetos "recogibles". A la izquierda pudieron encontrar una amplia colección de viejas cazuelas en bastante mal estado. A su lado, una cocina de leña que se encontraba apagada, pero lista para ser encendida. Sobre una pequeña encimera se podía ver varios utensilios de cocina como un cucharón y unas pinzas de cocina. Al otro lado de la habitación había un armario cerrado (aparentemente no tenía pestillo de modo que se podría abrir sin problema) y otra pequeña mesa donde se podía ver un bote de "Salsa Extra-picante".

En una cocina Greg se sentía casi como en casa. Ahogó un nostálgico recuerdo del tiempo que se había pasado en su cocina-destilería-sala de experimentos. Sin dejarse afectar, rebuscó entre las cazuelas alguna que no estuviese en demasiado mal estado (fijandose si alguna tenía restos de comida o de algo) y otro estilo cubo o tetera (o sea, con asa o agarraderas) para recoger el agua de mar.

Nerea, muy satisfecha de que ninguno hubiera ni siquiera insinuado la posibilidad de utilizar sus glóbulos rojos en una receta-para-llamar-a-la-niebla (la receta jamás hubiera funcionado con su sangre,...), comentó en voz alta:

- Si recordais la leyenda del famoso Guybrush Threepwood, él tuvo que hacer un brebaje la primera vez que viajó a Monkey Island TM, pero utilizó los ingredientes que tenía a mano y funcionó igual...¿de qué color es esa salsa extra-picante?

Bookan se acercó al bote de salsa y lo apretó hasta que expulsó parte de su contenido contra el suelo.

- Parece que es... ¡verde!

Extrañado giró el bote buscando la etiqueta de caducidad. Cuando la encontró la mostró a los demás:

Etiqueta de caducidad:

Pircam, interesado por los utensilios y los productos que podría encontrar en aquella cocina se acercó al armario cerrado y lo abrió de golpe. Dentro se podían ver una amplia colección de botes de cristal idénticos. En todos ellos se podía ver una misma etiqueta que Pircam precedió a leer.

- Comida para pájaros: "Pienso, luego existo". Con ocho vitaminas -meditó durante unos instantes -Intuyo que nos harán falta para algo, pero no sé para qué...

Yimbo sacó la lista y fue tachando mentalmente lo que ya tenían:

• Sangre de virgen
• Grog
• Una pepita de oro
• Agua de má
• Amoníaco
• Ocho vitamina'
• Aleación metálica

Greg había dicho algo de que en el puesto de vigía había algo parecido al amoniaco. Yimbo decidió que él iría a por el agua de mar así que se puso a buscar un cubo con una cuerda, o algo por el estilo, que le sirviese para lanzarlo vacío por la borda y recuperarlo lleno de agua salada.

En la parte izquierda de la estancia, junto a otros utensilios, había una cazuela sin agujeros y con dos asas en los bordes. Tal vez aquella cazuela, junto con una cuerda pudiera servirles para recoger el agua del mar.

-Bien, bien.- la cosa marchaba y los ingredientes iban apareciendo. Wash se introdujo el sugus de piña en la boca. -Así que, tengo dos preguntas tripulación ¿Quien de vosotros, marineros de agua dulce, es virgen? yyyyy ¿Quien tiene un diente de oro?-

Tras un breve momento de duda, Greg aclaró - Creo que en mi caso, la respuesta a ambas preguntas es "No, a causa del grog"... no entremos en detalles...

Acto seguido, se giró hacia el ex-propietario del barco. - Bookan, este era tu barco, ¿sabes donde había algo de oro en él? - le apremió - Una moneda, un candelabro, una muela... - añadió con la mirada expectante a que abriera la boca para responder.