Partida Rol por web

-Habréis escuchado los rumores ... gigantes ... un ejercito de ellos y sus viles criaturas que han bajado de las montañas de Stonemarch para arrasar con el valle. O eso sugieren las voces.-

Lord Faren miró entre varios mapas y desplegó el que correspondía al valle de Nentir.

-Tememos por la ciudad de Winterhaven y por los pueblos y granjas que están a medio camino ... lo primero que necesitamos es un reconocimiento.-

-Apenas tengo hombres para proteger la ciudad y he dado alarma para que todos los hombres aptos para el servicio vengan hacia aquí, lo que implica que con algo de suerte en unas semanas tendré unos trecientos hombres mas.-

El hombre os mira con su único ojo sano.

-Fallcrest y el valle de Nentir os necesita ... ¿Creéis que podéis ir y comprobar si los rumores son ciertos y de cuantos gigantes estamos hablando?-

La presencia del sacerdote se me hace un tanto incomoda y eso alarga aun mas la espera. Aunque hago un pequeño esfuerzo para mostrarme relajada y por el bien de Faren Markelhay, disfrutando del momento distendido. No creo que su ceño pueda aguantar muchas arrugas mas sin estallar.
Y es quizás por esto que cuando se pone en pie y despliega el mapa sobre la mesa lo percibo como un agradable soplo de aire fresco.

Me pongo en pie y se me escapa una ligera mueca de dolor. Pero sin decir ni una palabra, coloco con firmeza mi mano izquierda sobre las costillas y acabo de incorporarme para acercarme a la mesa.

Tememos por la ciudad de Winterhaven y por los pueblos y granjas que están a medio camino ... lo primero que necesitamos es un reconocimiento.

En silencio ladeo la cabeza mientras observo el mapa, intentando reconocer el paisaje que vi de camino hasta aquí, pintado sobre ese pedazo de papel.

¿Creéis que podéis ir y comprobar si los rumores son ciertos y de cuantos gigantes estamos hablando?

¿ Pero los rumores de gigantes dicen que están aquí ... - Pregunto mientras el indice de mi mano enguantada se posa sobre el nombre Cairngorm Peaks - ... o están hostigando esta zona ? - Acabo de decir mientras el indice se desliza por la carretera, cruzando por encima del nombre Gardbury Downs.

El clerigo se llevo las manos a la boca sopesando las palabras de Lord Faren.

Miro a cada uno de los que estaban sentados, eran pocos, pero si era solo para comprobar, no haria falta un enfrentamiento directo.

Sin duda acudiremos para investigar lo acontecido, si estan de acuerdo los demas, imagino que el campesino nos acompañara como guia en el lugar.

-Solo hay rumores, habladurías, algún mercader espantadizo ... no sabemos exactamente donde están los gigantes, si es que realmente tienen un ejercito y no ha sido una simple escaramuza.- Responde Faren a Eva que mira el aspecto magullado de la mujer con cierta preocupación.

-Puede que Winterhaven no sea ya mas que un cementerio, o puede que los gigantes estén congregándose aún en las colinas.-

Puede que Winterhaven no sea ya mas que un cementerio, o puede que los gigantes estén congregándose aún en las colinas.

Entiendo ... - Me tomo unos instantes mas analizando el mapa y la ruta hacia Winterheaven - Supongo que si el tiempo es propicio, podría ser día y medio de viaje. Tres o cuatro días entre ir y venir. Mas, vamos a conjeturar que uno o dos días indagando por la zona. - Levanto por fin la vista del mapa hacia la nada - Siete días ... Siete días es lo máximo que deberíamos estar fuera. Si no hemos regresado en ese tiempo, puedes considerar que las noticias que traemos de Winterhaven no son nada halagüeñas.

Al fin Sizzly había cumplido con la primera parte de su misión personal, llegar a la residencia del Lord. Como hizo la vez anterior entregó la nota al guardia que estaba haciendo su ronda.

-La reunión con Lord Warden empezó hará media hora, muchacha.- Le informó el guardia al devolver la nota.

La clara piel de la muchacha tomó un tono de color sonrosado en las mejillas, avergonzada por la demora. 

-Es que me topé con muchos... obstáculos para llegar a qui. Estoy segura que al Lord no le importará que me deje pasar.- Mientras convencía al guardia echó el flequillo de la melena pelirroja hacia atrás, peinándolo con los dedos, lo que dejo a descubierto parte de su busto, un gesto que no se sabía decir si era intencionado. El tono de la mujer era convincente, aunque las razones de peso por la que el hombre cedió eran otras.

El hombre carraspeó antes de empezar a hablar, para aclararse la garganta o mas bien la mente.

-¿Por que nombre debo anunciaros?- El rostro de la muchacha se iluminó ante la pregunta.

-Me llamo Sizzly.- Con una sonrisa entrañable.

-¿Nada mas? ¿Algún titulo o sobrenombre?- Le insistió antes de anunciarla.

-Bueno...- Era un tema que no había pensado demasiadas veces. De no haber sido por culpa de los nigromantes de Thay se habría hecho llamar "la maga roja", pero aquello le habría traído problemas. Recordó aquel tiempo que pasó con las sacerdotisas de Sehanine, y como entre ellas se hacían llamar "hermanas" o "Hija de Sune". -¿Que tal Sizzly, de las Hijas de Sehanine?

El hombre asintió con la cabeza, abrió la puerta y anunció su llegada. El título de Hija de Sehanine sonó como un coro de júbilo por el eco de la sala, nunca antes le había sonado tan bien un nombre.

Cruzó la sala, dando una vuelta de 360º mientras caminaba, contemplando la inmensidad de la sala, los arcos, las columnas, la luz que se filtraba por las ventanas con vidrieras... todo.
Cuando estuvo a medio camino y comprendió que la estaban mirando se detuvo en seco y recordó que debía presentar sus respetos y con la debida corrección, ante todo por su tardanza.

-Mi nombre es Sizzly. - Pasó una de las piernas por detrás e hizo una grácil reverencia.
-No estoy segura que esperasen mi llegada en particular, pero si es así disculpen la demora. Fui asaltada por el camino por un grupo de Orcos.- Se excuso, no era del todo mentira pues cuando se refería a "orcos" estaba pensando en el juego de roles de los niños. -Pero por favor, sigan hablando por donde lo dejaron... no lo detengan por mi.

El Lord Warden levantó la mirada del mapa justo cuando iba a responder a Eva, pero fue interrumpido por la nueva presentación y desvió su mirada hacia la recién llegada. Por la inclinación de sus cejas no podía decir que estuviera muy impresionado con la llegada de una mujer que parecía tener la cabeza en las nubes.

Dudo unos momentos antes de hablar.

-Bien, no hay mucho mas que decir.-

-Moseñor Iannes, no creo que haya campesino o guía con las agallas suficientes para acercarse a esa dirección ... pero el camino es claro y despejado, no debería ser problema llegar a Winterhaven.-

Parece que se ha formado un variopinto grupo. Pensó el mago mientras sentía que ya le había entrado curiosidad de tales asuntos. Sus ojos brillaron tras la capucha mientras recorría la curvas color escarlata que llegaban a presentarse cual niña extraviada.

Era de naturaleza desconfiada, y especialmente receloso de los motivos que podían tener los nobles, pues había tratado con demasiados, y en general eran serpientes traicioneras. Tantas veces había observado a la clase dominante para luego andar en dirección contraria siguiendo sus propias motivaciones. Ahora la situación pintaba diferente, no solamente podía tratarse de un asunto realmente peligroso para el Valle del Nenthir, sino que seres extraordinarios estaban acudiendo al llamado del Lord Warden.

Con una torcida sonrisa bajo su cuidado bigote, aunque aún con el rostro en sombras, el monje habló Pelor bendecirá vuestro camino; ¿o era Amaunator? hizo una breve pausa En todo caso, habeís picado mi curiosidad, Lord Faren Markelhay... 

No era la clase de bienvenida que se esperaba y parecía algo contrariada, preguntándose si quizás no se había presentado como debía. Por suerte Sizzly no tenia el ego demasiado subido como para sentirse ofendida. Se acercó a la mesa procurando no hacer demasiado ruido y echó una ojeada al mapa. A falta de un resumen de la conversación puso cara de comprender la magnitud del asunto y cuan importante era la misión, aún sin saber de que se trataba.

Una voz sonó, apartada del grupo congregado alrededor de la mesa, un tono que le era familiar pero el dueño de la voz se mantenía a una distancia prudente y en penumbras. A pesar de todo creía saber de quién se trataba y en los labios de Sizzly se dibujó una sonrisa.

Faren se gira hacia Andet haciendo repiquetear su pierna de madera en el suelo. Arquea una ceja y hace una mueca de medio sonrisa.

-El señor Andet, me preguntaba cuando tardarías en mostrar tu identidad.-

-Cuatro grandes héroes del valle ... no son los 20 que hubiera deseado, ni los 8 que estaba esperando, pero valéis mas que mi guardia personal y mis esperanzas reposan en vosotros.-

-Si necesitáis cualquier cosa para el viaje, hacedselo saber a mi jefe de la guardia.- Casi como si hubiera aguardado todo el rato para ese momento, un hombre se acerca a vosotros a modo de saludo militar, si bien no dice nada.

El rostro de la mujer se iluminó al escuchar el nombre de su antiguo camarada.

-Por el amor de Sehanine ¡Andet!- Sin importar qué la mujer se acercó a él y lo abrazó cruzando los brazos por detrás del cuello, para plantarle un beso en la mejilla, cual niña recibiendo a su padre de una jornada de trabajo.

-¿Cuanto tiempo hace que no nos vemos? Desde aquella vez que me prestaste tu ayuda contra el culto. Desapareciste sin mas y no me diste la ocasión de darte las gracias por aquello.

¿ Sizzly ?... Me abstraigo un par de segundos preguntándome si he oído antes ese nombre. Pero para cuando vuelvo de mis pensamientos, descubro que se acerca pavoneándose como una quinceañera demasiado orgullosa de tener pechos. De no ser por ese olor tan sutil pero peculiar, habría asegurado que era otra de esas niñas que pasean sus curvas en las tabernas esperando que algún rico este dispuesto a pagar una buena bolsa de monedas a cambios de su atención.

Pelor bendecirá vuestro camino; ¿o era Amaunator?

Me giro hacia el falso sirviente y se me escapa una sonrisa. Aun no sabe disimular ese tono de voz jocoso cuando consigue no ser descubierto. Lo sabía ... Sabía que tenia que estar por aquí. (*).

Si necesitáis cualquier cosa para el viaje, hacedselo saber a mi jefe de la guardia.

Supongo que tu no necesitas mas explicaciones - Digo refiriéndome a Andet, para luego mirar a Sizzly - pero tu si.
Tenemos que dirigirnos a aquí. Winterheaven y comprobar de momento que parte de los rumores acerca de los gigantes son ciertos o solo habladurías. - Explico mientras con el dedo y el mapa voy señalando la ruta y el destino. - Aunque si todo sale bien podemos hacerlo en 4, tenemos 7 días para ir y volver.

-El señor Andet, me preguntaba cuando tardarías en mostrar tu identidad.- 

Andet dejó caer el género que cubría su calva, dejando mostrar un rostro de gesto apacible e inclinó la cabeza de manera solemne. No había terminado dicho gesto cuando Sizzly se le lanzó encima, ante lo cual no pudo hacer nada. Le devolvió el abrazo, con recíproca alegría No necesito gracias de nadie, hija de Sehanine; el hacer el bien es mi verdadera recompensa. Su voz sonaba convincente y quizá con un matiz de arrepentimiento por no haberla saludado en aquella ocasión Creo que tendremos tiempo de ponernos al corriente, pues parece que hay una excursión que seguir. 

La muchacha se apartó de Andet, se había dejado llevar por la emoción de ver una cara conocida y amigable, y a pesar de conocerse el mentalista podría sentirse incomodo ante su gesto cariñoso.

Se giró a la mujer de extraña apariencia. Ahora que estaba un poco mas cerca le parecía enorme y temible, aunque solo se llevaran unos pocos centímetros de diferencia. También le pareció por un momento captar su aroma a azufre.

-Al menos ahora conozco nuestro destino. -Dijo con tono afable -Gracias señora... -Inició, esperando que la mujer se presentara esta vez.

Gracias señora...

Eva - Respondo aun no muy convencida del papel de esa chica en todo esto. Pero si los demás tienen dudas, no las muestran.

-Encantada, Eva. -A pesar de la sequedad de su compañera Sizzly le respondió con una sonrisa, pero no esperaba que se la devolviera... ni tampoco quería.

-Y vos sois Iannes ¿No? Espero que Amaunator ilumine con un sol radiante nuestro viaje juntos. -Saludó, intentando crear nuevas amistades.

Iannes hace una reverencia a Sizzly.
Un placer mi señora Sizzly, parecéis una presentación viva de uno de los angeles de Amanautor