Partida Rol por web

Lanzar la vela contra el lobo (con 2 cuyons... porque voy a tener malus por mano izquierda y no tengo Lanzar)

Ataque Preciso

Ok Florencio, luego concretamos. Actúa Rodrigo.

El Crespo intentó volver a acuchillar al animal, pero su cuchillada no fué esta vez tan certera y no dió en su objetivo.

Animal 1 usa "mirada" contra Rodrigo.

El animal 1 se paró en seco, y con sus ojos brillantes cruzó la mirada con el cazador y pareció quedarse helado, inmóvil por un instante... algo estaba pasando.

Aquellos ojos rojos se quedarón mirandome, no puede evitar su mirada y quedé paralizado contemplando el mismisimo averno.

Turno de Xuan.

Xuan levantó de nuevo aquella arma a la que no estaba acostumbrado y, con más voluntad que acierto intentó pegarle un hachazo al animal que se le venía de nuevo encima.

En un intento totalmente desesperado Florencio lanzó aquella vela que no se consumía contra la bestia para después intentar alcanzarla con un golpe certero

Turno 2:

Rodrigo falla estrepitosamente la cuchillda, y en esos momentos el Animal 1 comenzó a mirar atentamente a Rodrigo. Éste se quedó paralizado y su cuerpo tan sólo pudo experimentar terror, miedo, ¡angustia!; y no hizo sino salir corriendo hasta colocarse justo debajo de la entrada de esa sección de cueva, alejado de la batalla (no podía acercarse a los animales, que ahora mismo le infundaban un pavor que lo hacía huir)*

Por su parte, Animal 2 y Xuan se enzarzan ellos dos en un duelo personal, y ninguno de ellos es capaz de atacar al otro. Parece como si el juglar tuviera reflejos de lobo o lo que fueran aquellos seres, porque éstos no llegaban a alcanzarle.

Finalmente, Florencio lanzó tan desmedidamente la vela que su mano, en el vaivén, impulso y justo en el lanzamiento, se golpeó la mano contra un saliente de la roca, haciendo que le fuera imposible realizar el ataque preciso antes que los lobos volviesen a reaccionar (en el siguiente turno de batalla).

Tirad Iniciativas: 1d10 + AGI.

Xuan y el animal se encontraban enzarzados en una pelea en la que los dos parecían estudiarse. Los ataques eran esquivados sin dificultad y ninguno de ellos parecía ceder.

florencio dejó de frotarse compulsivamente la mano izquierda intentando calmar el dolor, si aquél animal decidía atacarle estando distraído de seguro sería su fin.

¡Esos ojos! Si vivía más allá de hoy jamás olvidaría lo que vi dentro de esos ojos. Demonios de color carmesí atormentaban a sus suplicantes víctimas entre ríos de lava, mientras arpías revoloteaban a su alrededor tocando extraños instrumentos que emitían unas notas infernalmente asonante, a su lado perros de dos cabezas ladraban a aterrorizados prisioneros atados con cadenas al rojo que les laceraban sus demacrados cuerpos.

Estaba paralizado, con un cuchillo en la mano, temblando de puro miedo. Necesitaba algo que me trasmitiera tranquilidad, algo a lo que aferrarme entre aquellas visiones de tormento, algo en lo que confiara, algo como un arco. El arco no me fallaba, el arco me permitía comer y alimentarme, el arco era mi amigo.

No se como lo hice, pero dejé el cuchillo en el hueco del cinturón y con las manos temblorosas saqué mi arco y una flecha, la coloqué con calma mientras respiraba profundamente intentando tranquilizarme.

Lobo 2 y 1 atacan y esquivan. (ambas acciones a Xuan y Florencio respectivamente)

Declara Florencio.

Esquiva y Ataque Preciso contra el Lobo que me toca

De nuevo Xuan levantó el hacha dispuesto a atacar al animal que tenía enfrente. Ninguno de los dos parecía dispuesto a ceder terreno, tanteándose, moviéndose en círculos, estudiándose el uno al otro. Pero los ataques de Xuan eran inútiles y no acertaban a la bestia.

El animal 1 intentó morder a Xuan, sin éxito alguno. Luego, el animal 2 se lanzó contra Florencio, pero en el lance, el salto no fue certero, y su hocico y sus dientes se hincaron en el lomo trasero del otro animal. El animal atacado (1) comenzó a aullar con fuerza, y sumado a sus anteriores cuchilladas de Rodrigo (turnos atrás), éste cayó en el suelo, intenando lamerse las heridas.

La mirada tenebrosa de aquel ente parecido a un lobo se debilitó fugazmente. El animal 1 ha muerto.

Como suele decirse, el mal se vuelve contra sí mismo. y así lo creyó Florencio cuando aquella bestia erró el golpe hasta el punto de acabar con su compañero.

Viendo su única oportunidad de asestar un golpe adecuado se lanzó contra ella con el cuchillo por delante