Partida Rol por web

Leuvan se acerca despacio hasta apoyarse en la Torre intentando pasar desapercibido durante unos instantes de esos Orcos y salir de nuevo a la luz con su ballesta preparada para que reciban un golpe mortal.

Ante la aparición de los orcos, me vuelvo en su dirección, observándolos fijamente mientras calcula la distancia que me separa de ellos, asi como la posición de mis compañeros.

Vaya, la situación se complica, esos orcos no van a ser tan fáciles. - pienso, mientras avanzo hasta situarme justo por delante de Quario, donde me detengo con mi espada inclinada y apoyando la punta de esta sobre la tierra. Está bien, Quarion, pero esta vez dejemos que sean ellos los que se acerquen. - murmuro mientras alzo mi arma, situandola frente a mi pecho.

Los orcos se apresuran hacia vosotros...

¡Jroink,Jroink!,qué pensais hacer,a dónde creeis que vais?

Ashram intenta acercarse a sus compañero lo mas rápido que puede , pero el terreno y la pesada armadura que lleva le dificultan mucho la tarea.

Quarion con su cimitarra preparada se preparó para lanzar un conjuro, las palabras sonaban guturales y distantes, y unas llamas rojas aparecieron de la nada y se posaron en las manos del druida, tras lo cual las traspasó al arma de Valdia.

Leuvan aprovecha su ocultamiento para disparar un virote de su ballesta hacia el primer puerco. Sus movimientos son sigilosos como la mayoriá de las veces, sin embargo como casi siempre hay algo que le estorba, sea un saliente o como esta vez un pájaro que se le cruzó por delante antes de apretar al gatillo. Para colmo el virote se pierde por la lejanía del bosque.

-Maldición...- se apresura a decir al ver que son mas de lo que él se esperaba en un principio.

Quarion,conjura e instantáneamente en su mano,aparece una cimtarra de fuego,totalmente mágica.Leuvan,intenta que no le escuchen,con lo que se mueve todo lo sigiloso que puede,pero al chafar una crujiente rama,hace el ruido suficiente,como para que le delaten.Debido a esa torpeza,falla el tiro.

Al ver acercarse a los orcos, así como posicionarse a mis compañeros, cabeceo levemente antes de lanzarme a la carrera, elevando mi arma sobre mi cabeza para poder golpear con ella ayudándome de la inercia y el peso de esta.Pero el terreno es demasiado pedregoso para que puede llegar a cargar,con lo que antes de llegar a mi objetivo,me posicionó a la defensiva.

Los orcos se abalanzan hacia la guerrera,asiendo su gran hacha con ambas manos intentan arrancarle la cabeza,pero la guerrera esquiva sendos ataques con destreza.

¡Valdia, atráelos hacia aquí! El druida le hizo un gesto a su fiel compañero para que se preparara por si venían, tras lo cual, con su cimitarra de fuego, se preparó para lo mismo.

Ashram se muy lo mas rápido que puede , el terreno es tan malo que no se arriesga a intentar ir corriendo , pues su armadura le molesta demasiado.

Al percibir por la derecha como vienen mas de esos porcinos Leuvan alza la vista para observar la torre que tiene ante él. -Son tan ruidosos que se les podría escuchar a cientos de millas... Con la ballesta sin recargar trata de pegarse a la parede rocosa y avanza pegado a ella en completo silencio.

Con suma rapidez, alzo mi arma para detener la primera embestida orca, y actos seguido, sin perder la concentración, inclino mi cuerpo hacia adelante, esquivando el afilado filo del segundo, el cual corta el aire por encima de mi cabeza. Tensa, escucho el grito de Quarion, y creyendo saber sus intenciones, arremeto contra el primero de los orcos, logrando que mi arma atraviese su carne, antes de ponerme rápidamente en movimiento, desplazándome hacia atrás sin bajar la guardia.

El ataque sublime de Valdia,es suficiente como para dejar al orco inconsciente en el piso,los compañeros del orco,rabiosos,se alzan al ataque uno de ellos,intenta herir a la guerrera,pero tan solo golpéa al aire,el otro orco,se mueve,manteniendo una postura defensiva.

Ashram se acerca cuidadosamente al ver que los orcos se dirigen hacia valdia , opta por acercarse un poco a ella e intentar atraer la atención de los orcos.

Vamos sapos horribles , venid a por mi si os atrevéis.

El druida avanzó hacia el orco con furia para ayudar a Valdia, su filo flamígero bailó en el aire para despistar a su contrincante, las llamas danzantes parecían confundir al orco, a un lado y a otro, hasta que al final el druida decidió lanzar su tajo hacia este, sin embargo el orco era más diestro de lo que parecía, y en el último momento se apartó del camino de la hambrienta espada, sin embargo Quarion dio un paso que el orco no se esperaba alcanzándolo e hiriéndole profundamente, aunque el fuego cauterizaba sus heridas. Claw, ahora ¡ataca!

El lobo se abalanzó sobre el orco terminando con su tibia de un poderoso mordisco, haciendo que gritara de dolor y viendo como su pierna empezaba a sangrar abundantemente, para luego notar el tirón del lobo que intentaba derribarlo.