Partida Rol por web

Angriel disfruto en privado el delicioso sabor de la sangre, su instinto lo guio hasta aquella mujer que lo esperaba en el lecho, apenas penso y nada dijo... Solamente se movio con suavidad para luego alimentarse, procurando no ser una amenaza, no ser un monstruo mas... 

Muchas cosas el debia aprender, debia hacerse fuerte y dominar su nueva bestia interio para asi, darle caza a esa dama que le quito todo lo que conocia o creia conocer. Condenado a un mundo sin sol, a un mundo de mitos y leyendas haechas realidad, el sabia que ya nada seria igual

PEro en sus ultimos minutos, en donde apenas pudo detenerse para luego descubrir como podia cerrar aquella herida, el sentia su cuerpo endurecerse sin poder hacer nada... Era algo diferente al cansancio, algo que el no controlaba y lo ultimo que supo, eran esas burlas y miradas... el los recordaba.. el se vengaria.

Mi cabeza me retumba, aún no me he acostumbrado a mi nuevo estado. Sus heridas... se han cerrado... ¿por qué? Hay demasiadas cosas que aún no sé.

Cuando recupero la compostura salgo del cuarto sin saber muy bien a dónde voy.

Observo el carmesí líquido que se mueve en mí, las lágrimas que Isabella muestra, y me corro inmediatamente, alejándome. La observo, quiero decirle algo e inclusive abro mi boca para intentar hacerlo, pero vuelvo a cerrarla pues ningún sonido emito.

Me doy la vuelta y me detengo a ver a la joven en la cama... sonrío levemente. Entre las sábanas, comienzo a recoger mis ropas para vestirme y, al instante, escucho las últimas palabras que me brinda, que me cuentan algo que jamás hubiese pensado, que jamás esperaría.

Comienzo a reír pero no encuentro gracias en nada de lo hablado. El sonido, entrecortado, deja hilvanar cierto nerviosismo y enojo.

"- Para que volviera a ser humano, ¿eh? ¿Para ver el mal causado?- contesto y mi mandíbula comienza a endurecerse más-. Dime, Isabella, cuál es ese mal tan grave, pues no noto diferencia alguna al estado de las cosas actuales... Quiero que me contestes sinceramente, pues mi accionar como... humano... en nada difiere al espectáculo de anoche... tanto en aquel húmedo y oscuro sótano como en esta alcoba. ¿Querías salvarme y que estuviese toda la eternidad contigo? Aquí estoy, aquí me tienes. ¿Querías que no me mataron los tuyos... ahora, los nuestros? ¡Esto es la misma muerte, no podías tenerme atado a ti si no muerto en vida, no más!- exclamo furibundo, mientras, trémula, a mi boca la resulta imposible sostenerse".

Comienzo a tironear la seda y saco hecha jirones cada una de mis vestiduras. Los calzones de lino, las calzas... empiezo a ponerme la camisa y me freno al sentir las cicatrices en mi espalda, aunque sólo es un momento. Llevo la túnica a mi cabeza y la dejo caer hasta que la siento en su lugar. Mis ojos están cerrados, no desean abrirse. Sin embargo, lo hacen y vuelven a posarse en la niña del lecho.

Me giro con el brazo alzado, rápido, con ansias de golpear a la rubia doncella que aún está parada, pero me enredo en la tela de la sotana y caigo rendido ante los pies de Isabella.

"- ¿Ves a esa mujer? Deseo profundamente castigarme por haberle hecho eso, al igual que muchas veces lo hice con otras- esbozo entrecortadamente y continúo-. Pero... no puedo hacerlo porque esta vez no siento remordimiento alguno, no me siento penitente- levanto mi cara para observarla, mis dientes se encuentran apretados, mi rostro demuestra el esfuerzo que hago-. No puedo llorar y lo intento, juro al Señor que lo intento... No me hables como si me hubieses hecho un favor, no menciones a mi padre, no te atrevas, porque lo único que has logrado es quitarme mi alma- agrego al momento que con ambas manos tomo su vestido y acerco mi rostro, aún esforzándome, gritando ahogadamente y buscando siquiera una mísera lágrima en mí- Dime, por Dios Santo, dime qué sentido tiene el que siga en pie, qué razón existe para que no espere el Sol o me lance a una hoguera... jamás temí lo que hice antes pues sé que lo hice por nuestro propio bien y en nombre del Señor, pero ahora no soy más que un monstruo y siento pavor por lo que pueda llegar a convertirme- agrego agitadamente, con mis ojos perdidos, implorándole ayuda".

Te mira y no sabe que decir  durante un segundo. Una lagrima roja surge de su ojo derecho y lentamente se desliza por su mejilla hasta su barbilla donde pende por unos segundos y cae a su escote donde se pierde en la oscuridad dejando un regero rojizo que  pronto se seca, no sabes bien si por el aire o tal vez por vuestra propia naturaleza

Su cuerpo no la sostiene por mucho mas y cae de rodillas al suelo con las mano sobre su vestido mientras comienza a llorar con mas fuerza y mancha la  cara tela sin que la importe.

Comienza a murmurar en un idioma que no comprendes algo que no sabes bien que puede ser, pero podria ser una plegaria o tal vez una maldicion.
Te mira desde su posicion y te parece que es otra de esas pobres victimas a la s que mandaste a la hoguera o a las mazmorras de las inquisicion donde fueron condenadas por crimenes que tal vez no fueran reales.
En ese momento notas como las fuerzas abandonan tu cuerpo y como caes al suelo en el mismo instante que notas el primer resplandor del sol por uno de los resquicios de las contraventanas. Ha llegado el dia

El primer deber de un revolucionario es sobrevivir a la revolucion

Ha anochecido y ois como llaman a vuestra puerta, al otro lado de la puerta una voz conocida la de Rodrigo que os dice que Lord Hardestadr os convoca a su presencia en cuanto os adecenteis, es extraño pero habeis dormido bastante bien, es mas vuestro pequeño bocado de la noche antes ya no esta a vuestro lado y teneis una pequeña ropa para poder adecentaros e ir completamente limpios a su presencia de acuerdo a vuestros gustos y la ropa que habeis llevado. Tambien hay una jofaina con agua algo fria para que os laveis.

Cuando os adecentais y salis os acompañan hasta una sala donde hay un monton de mapas militares marcados con rutas y fronteras, unas las conoceis las otras no sabeis exactamente de que pueden ser.

Os mira y arquea una ceja antes de comenzar. Podeis observar que esta solo con algun criado pero ninguno de sus compañeros de la noche anterior esta alli para hablar con vosotros, es muy extraño.

Sois debiles, ingenuos, inmaduros, pero hay muy poco que nosotros podamos hacer para corregir estas caracteristicas poco recomendables. De todas formas, os ayudare inconmesurablemente en vuestra persecucion de los conspiradores, de vuestros creadores. Escuchad atentamente, si lo vuelto a repetir os aseguro que no os gustara verme enfadado.
Hago un gesto para que os acerqueis mas.
Claudius y su Conspiracion de Isaac se reunen en diversos lugares, apiñandose para tramar sus planes como los granujas, vagabundos y bandidos que son. Creen estar seguros en sus pequeños refugios, pues estan acostumbrados a escurrirse como las ratas cuando llegamos. Y como las ratas no se temen unos a otros.

Les miro y con un gesto instintivo echo mas de una vez como al criado mas cercano para clavar mis colmillos en su cuello y beber un largo sorbo antes de dejarle marcharse.

Por tanto, os presentaries antes los anatema en la Posada del leon, donde nuestros informantes nos han dicho que suelen esconderse al ser expulsados de un nido mas confortable.

Apoyo las manos sobre la mesa mirando el mapa o tal vez mirandolos a ellos, eso nunca lo sabran.

No intenteis un asalto frontal, pues no podreis derrotarles jovenes neonatos, apenas conoceis vuestros propios poderes y a pensas sabreis usarlos. Decid a los traidores que escapasteis de mi derrotando a Roderigo, llevadle con vosotros como prueba y decidles que esta Dominado, pero si les dejais que lo maten... un sonoro golpe sobre la mesa para clavarles la mirada como la daga que hay clavada en ella sobre uno de los mapas

Observad y descubrid cuanto podais, especialmetne cuando planean atacar a Japheth y decidmelo. Y si podeis destruirlos uno a uno.Eso podria limpiar la carga y la mancha que pusieron sobre vosotros al crearos.

Me incorporo y los miro. Por supuesto os acompañaran tanto el padre Uriel como Vincent, seran compañeros vuestros los habeis conocido en mis mazmorras.

Angriel se incorporaba sintiendose extraño, habia dormido demasiado bien, como si aunque algo hubiese llegado a pasar durante su descanso, el no hubiese reaccionado y eso no era algo normal. Pero ademas de sentirse diferente, aun recordaba como se alimento, no le gustaba la idea pero se sentia bien... demasiado bien.

De todas formas, pronto encontraba una muda de ropa limpia, parecia a las prendas que el solía usar siempre y luego de prepararse para salir, el terminaba abriendo la puerta de su habitacion para dejar ese lugar atras. Parecia que habia una reunion y el se dispuso a acudir a la misma como se le indico para luego, encontrarse de nuevo con Lord Hardstand.

Pronto ese hombre autoritario hablaba explicando un plan en donde ellos eran los peones de su tablero de juego, si no fuera porque pronto veia que tendria la posibilidad de vengarse en aquel lugar, Angriel se habria sentido demasiado molesto. No le gustaba sentirse usado, pero el dio su palabra y prometio ayudar en la caceria de aquellas aberraciones, algo que desea a pesar de que es conciente de que en aquel lugar, debera ser cuidadoso.

Habian muchas cosas que no entendia y alli lejos de sus contactos,influencias,dinero y poder estaba un poco fuera de lugar. -Gracias por la presentacion Lord Hardstand.-

Como su señoria ha dicho me encuentro aqui para ayudaros en todo lo que pueda. Todos tenemos nuestros asuntos propios ,pero aun en nuestra individualidad poseemos objetivos comunes que nos unen y nos haran mas fuertes si colaboramos. Despues me dirigi a Hardstat de nuevo No tengo mucha idea de quienes son esas "personas",sabemos algo de ellos ,aliados,amistades,criados,costumbres ,puntos debiles . Veo que ha planificado muy bien la operacion ,me gusta su estilo y me encantara poder tratar todo con nuestros compñaeros y con vos sobre cualquier duda o paso que dar antes de hacerlo. Soy un "hombre"muy metodico y prevenido,me encanta ir siempre por delante de mis enemigos ,antes de nada estaria bien saber como piensan esa gente para adelantar sus siguientes jugadas ,las cuales haran sin duda en respuesta a nuestros movimientos,no me gusta dejar nada al azar

ES cierto vos no sabeis nada de esas serpientes y como se mueven. Solo os dire que los conspiradores, tantos como vuestros compañeros se encuentran aqui ahora y puede que unos pocos mas son los miembros mas odiosos de nuestra familia. Solo desean poder y eliminar a otros de nuestros hermanos. Comienzo a decir antes de callar y mirar a Rafael que se esta acercando.

Si bien la pero de todos es Lady Jadvina, una serpiente que usara su labia para haceros fracasar en vuestra mision. Es la primera que debera morir para que podais llevarla a cabo. Rafael ¿a que debemos el honor de tu visita.?

Sonrio mientras se ilumina el rostro y me acerco a ellos parandome frente a la pequeña Malkavian, la usare.

Debeis mantener la Mascarada, es algo que yo he creado y que todos nuestros hermanos o al menos la inmensa mayoria siguen.

Los humanos temen aquello que no entienden y os temeran. Los mismos sacerdotes que se suponen la  encarnacion del amor y la caridad cristiana, escupiran sobre vosotros, pero eso me parece que ya lo sabe uno de vosotros no padre Uriel le miro de reojo antes de continuar con una medio sonrisa. La tomo de la barbilla y la alzo la cabeza para que me mire a los ojos.
Os condenaran a los fuegos del infierno solo por el echo de existir, os desturiran como los romanos hicieron con vuestro o con su Salvador.
No alardeeis de vuestra naturaleza, convenceros que sois aun humanos, no mostreis vuestros dones-

Una pausa dramatica antes de esta vez dar un paso atras y mirarlos a  todos
Ya que la superviviencia de toda la Estirpe depende de vosotros. Respetad la Mascarada o caereis en los fuegos de la Inquisicion. NIngun Vastago agradecera que lleveis a la Inquisicion a su puerta.  La miro a los ojos y me acerco a su oido a susurrarla aunque todo lo escuchan ¿Lo has comprendido?

Pronto llegaba el momento que el esperaba, el momento de ponerse a actuar y empezar a labrar el camino hacia la venganza, parecía que todos los involucrados estaban allí y pronto Lord Hardstand les daba un nombre... No era el nombre que el quería, Angriel deseaba tener en sus manos el cuello de Lady Dimitra, pero si para llegar a ella debía encargarse de esa Lady Jadvina, no tendría problema alguno.

Pero de pronto, entraba alguien a quien el no reconocía, tal vez lo vio unos segundos y aun así, no comprendía que tenia que ver con todo ese asunto. Pero pronto empezaba a hablar fijando su atención en aquella muchacha, la que se encontraba encadenada en la noche anterior... Sus palabras cobraban sentido, estaba claro que con esos cambios en sus cuerpos y en sus vidas, debían tener mucho cuidado, ya no eran como todos los que podían caminar debajo de la luz del sol.

Creo que todos lo comprendemos.

Decía Angriel de forma cortante al ver aquello, lo que dijo era muy importante y eso no lo dudaba, pero aquel espectáculo era uno inutil, uno que solamente los estaba retrasando de lo que ya debieron haber iniciado. Tenían un plan y un nombre, no tenia sentido seguir retrasando la partida, sobretodo porque la noche le parecía muy corta en esos momentos.

Las ruedas del carruaje retumban en el camino en la noche. A un cuarto de milla de la posada mas o menos en mitad del camino hay un arbol caido bloqueandolo.
El cochero, Roderigo para y baja  a ver si puede apartarlo sin  ayuda. Cuando escuchais un silbido y poco despues un grito de dolor.
Varias flechas se clavan en las puertas del carruaje y escuchais una voz que dice.
La bolsa o la vida.
Fuera hay seis bandidos armados hasta los dientes.

La veo caer a mis pies, vencida por mi propia ira. ¿Dónde ha quedado esa mirada que otrora me llenó de terror luego del carruaje?, ¿dónde está esa seguridad, esa sensualidad, esa capacidad de arrebatarme el alma, de llegar a regalársela si ella me lo pidiese? Observo su semblante, ha dejado de ser un monstruo por un momento, me resulta más humana de lo que muchos podrían ser.

Me mira, esboza unas incomprensibles palabras, tomo sus manos. Me agacho junto a ella y no puedo más que abrazarla. Algo dentro de mí parece cambiar, tal vez comprenda que no hay vuelta atrás en esto, tal vez sea momento de tratar de comprender que soy, de superar este obstáculo. Acaso será una prueba más... he pecado y el Señor me a puesto esto delante de mí. Quién soy yo para reprocharlo.

Mi boca se acerca al fino cabello que cubre sus oídos. "- Eras... ¿eras tu?... ¿siempre fuiste tu la que ha estado abriéndome paso?, ¿entonces por qué me han usado cual objeto tu y Augusto?- le susurro-. Ahora comprendo que siempre he sido un monstruo... mi hipocresía me ha nublado... de que sirve castigarme por la suerte de esa joven si lo que aquí aconteció ha pasado muchos otras veces. Dios ha puesto mi fe a prueba... ahora he de actuar en consecuencia pues gritar y renegar de lo que ahora soy no me conducirá sino a mi propia perdición- continúo diciéndole".

Muevo mi rostro sobre su cabello, sedoso, reconfortante, llevándolo hacia el suyo. Comienzo a besar sus lágrimas... me queman y, aún así, apaciguan mi ansiedad. Beso sus mejillas, su boca, la abrazo aún más fuerte.

"- Si realmente quieres salvarme... ayúdame a superar esto... ayúdame a no olvidar el remordimiento, no me dejes alejarme de mi humanidad...". "Te... amo", se escucha en mi mente, aunque se desvanece al instante. Mis brazos flaquean me alejo un momento de ella. "Ha de ser el día nuevo que ha llegado... ahora pertenezco a la noche", pienso.

Mis párpados se abren, observo el delicado techo del cuarto. Una tranquilidad reconfortante me invade. Será la dama de la noche, será la sinceridad vertida en palabras, algo será a lo que se debe esta... paz. "- En un momento estaré listo- respondo quien está del otro lado de la puerta".

Me siento en la cama, acomodándome para marchar hacia las ropas. Mojo una mano, luego la otra, enjuago mi rostro y me acerco al espejo para peinarme un poco... sonrío. Higienizo un poco el resto de mi cuerpo y me visto, emprendiendo el paso rápidamente afuera de la habitación.

Camino por el corredor hasta llegar a la habitación en cuestión. Me he tardado, pues Hardestadt ya ha comenzado a hablar. Su rostro es tan tosco, tan serio como lo fue cuando lo conocí... imprime una seguridad y liderazgo tan característico como la suerte de desagrado que pareciera tener frente a los presentes. "Así que ese es el quid de la cuestión... somos no más que los inexpertos desgraciados que deben hacer las labores que ustedes deberían", me digo en silencio.

Vincent contesta a las palabras del Lord y la respuesta me deja pensando en las posibilidades que nos quedan. Parecemos títeres de seres que están más allá de nuestras capacidades... nunca tuve que hacer el trabajo... sucio. Jamás vi a los ojos el rostro de aquellos que ardieron tantas veces.

Como si mi pensamiento estuviese siendo escuchado, levanto mi vista para ver al recién llegado Del Corazón, quien me recuerda mis pasadas labores. "Amor y caridad, si... me gustaría ver si aún recuerda lo que es sentir esas cosas... si puede manifestar algo debajo de máscara de ego, de vanidad", me digo al verle, al momento que levanto un ceja y yergo mi semblante, haciendo caso omiso a sus palabras.

La ceremonia termina y nos preparamos para marchar hacia donde se ha dispuesto. Un carruaje nos espera y, tras subir al mismo, emprendemos el camino que marcará nuestro destino, que sólo Dios sabe cuál será.

Observo por la ventana un momento y, posteriormente, me limito a juntar mis manos y mirar el suelo del carro. No sé en qué estoy envuelto, no sé qué es esta danza en la que hemos de movernos al compás de esos seres misteriosos que hemos dejado atrás. Lo único que llega a mi mente es el rostro de Isabella y sus lágrimas... Dios encuentre un lugar para ella en el Paraíso si su alma aún no ha sido completamente mancillada.

De pronto nos detenemos. Un ahogado grito se escucha afuera. "Roderigo", pienso al instante. El grito de unos asaltantes termina de hacernos entender lo que pasa... "nos estaban esperando".

Cierro mis ojos y los aprieto con fuerza. Si este ha de ser el momento, que el Señor sepa que aún lo amo, que a pesar de todo creo en su voluntad. "Credo in Deum patrem omnipotentem, creatrem caeli et terrae. Et in Iesum Christum, filium eius unicum, dominum nostrum, qui conceptus est de Spiritu Sancto, natus ex Maria Virgine, passus sub Pontio Pilato, crucifixus, martuus et sepultus, descendit ad inferos, tertia die resurrexit a mortuis, ascendit ad caelos, sedet ad dexteram Dei Patris omnipotentis, nide venturus est iudicare vivos et mortuos. Credo in Spiritum Sanctum, sanctam Ecclesiam Catholicam, sanctorum communionem, remissionem peccatorum, carnis resurrectopnem, vitam aeternam. Amen.- rezo en susurros". Mis parpados tiemblan de la presión con que los fuerzo, mis dientes se chocan, un calor como el de la noche anterior me invade... no me llevarán consigo si no es el momento, lucharé cuanto pueda para evitarlo.

Una emboscada,una trampa en el camino.Quizas solo sea un primer paso hacia muchas otras situaciones peligrosas.

Miro a los bandidos al parecer solo quieren nuestro dinero,pero ello no es seguro.¿que puedo hacer yo ante esta situacion.

Pueden haber dos posibles salidas una el convencerlos,o atraerlos ,mostrar que no somos enemigos e intentar que bvengan a nuestro lado como la serpiente hypnotiza a su presa ,con bellas palabras y sugerencias  ,pero si no la otra es diferente es obligarlos ,a que nos dejen marchar hacer que sigan nuestras ordenes o indicaciones.

Sabia que ambos caminos eran peligrosos,la gente comun al ver a alguien hablar de forma complicada y majestuosa solian tenere varias reacciones o inmediatamente verse atraidos o sencillamente yd ebido a su poca cultura creer que les estan tomando el pelo o no comprenderlo.

Y por otra parte la fuerza era otra opcion ,pero esta solo desembocaba en violencia a corto plazo y ello podria causarles mas problemas.

Pensandolo mucho abrio la pùerta del carruaje,a decir verdad aquello podria costarle su nueva no-vida ,pero si queria ser un verdadero lider debia tomar riesgos altos.

En el camino del poder el habia hecho aquello ya muchas veces ,habia sido un gran orador ante la plebe y los nobles,habia hablado en multitudes o en alcobas y siempre habia en sus palabras un calor o una fuerza que intentaba transmitir silaba a silaba intentando acercar a sus oyentes a su posicion.

Entonces empezo .

Dejo caer su capa y metodicamente comenzo a hacer gestos con cada palabra,con cada tilde o subida de voz,en todas y cada una de las palabras empleo las herramientos que Dios le habia dado.

-Señores creo que se ha cometido una confusion-dijo mientras dejaba su larga capa caer al suelo,sus vestiduras brillaban ante la luz de la luna haciendo si podria ser mas espectacular su figura mientras su voz impregnaba de fuerza y dignidad las primeras palabras,a la misma vez sus brazos se extendieron mostrando sus manos vacias.

No hay en este carro gente que busque hacer daño o busque mal alguno todo lo contrario bajo el auspicio de nuestro señor y mas aun de uno de sus siervos buscamos atravesar estas tierras duras y complicadas en als que la mano de los malvados nobles de la region a osado castigar al pueblo,ha obligado a su buena gente a tomar vidas y caminos que les han conducido a aguantar las mas duras condiciones por traer un pedazo de pan a sus familias.

Abandonados y odiados por aquellos que se consideran por encima de todos.

Pero Dios escucha la agonia del pueblo,oye cada palabra y en este caso ha actuado y nos envia para acabar con ello ,no am stributos no mas muertes y abusos,hemos venido a ayudar.

Pero si hoy ,si esta noche unos buenos hombres,pero equivocados como sus mercedes toman la vida de tan buena gente o detiene el apremio con el que vamos hacia nuestro destino,quizas entonces eso nunca pueda pasar y la vida solo sera un eterno calvario ,obligados al pillaje ,al trabajo duro y ver las injusticias acaecidas,sin poder hacer nada.

Pero si dejais que partamos yo mismo en nombre de nuestro Señor,juro a las alturas y ante uno de los mas grandes jueces de Dios aqui presente y ante todo.

Que sereis rencompensados ,y vuestra vida ahora dificil sera convertida en una vida nueva y digna ,pues el pueblo sera libre de los opresores actuales.-mientras hablaba habia intentado enseñar o incluso sacar un poco de la carroza al padre Uriel haciendo un poco mas poderosa la escena

No sabia si aquello tendria efecto,quizas fueran ateos lo mas seguro,quizas simplemente pasarian de el .

Pero en cada movimiento de sus manos ,cada tono,resuello o palabra,silaba o estribillo de la cancion que habia compuesto delicada y pausadamente como los grandes oradores havian ,siguiendo la spausas y reglas estrictas buscando el punto y las comas perfectas,comprension y reaccion ante cada cosa.

Solo entonces mientras hablaba noto como aquello que antes hacia  ,aquello que se habia convertido en parte de su antigua vida ,estaba en el en su interior y al aflorar hacia los demas,al usar sus talentos como su innata habilidad algo habia cambiado con su no-vida .

Lo que habia sido y lo que ahora era etsaba claramente relacionado y como una magia que surgia de su ser ,aquello que poseia desde siempre y corria por sus venas se habia convertido tambien en parte de su nuevo ser

Todo estaba yendo como debían, tenían un objetivo que cumplir y aunque Angriel no estaba acostumbrado a viajar en carruajes, el guardaba silencio mientras que en su cabeza solamente había una cosa... Acabar con Lady Dimitra, acabar con ella y los suyos, vengarse por lo que hizo y para eso, el aprendería a volverse como la bestia, aprender de sus necesidades y capacidades... aprender de su presa para ser realmente el cazador.

Angriel se mantenía en silencio, no sentía mucho interés por sus compañeros o al menos, no por el momento... No sabia porque ellos habían sido invitados y como estaban tomando aquel cambio, a lo sumo se preocupaba un poco por Caterina, la visión que tenia de ella en aquella prisión era algo que no le gusto... Pero de pronto el carruaje se detenía, se escuchaba como unos rufianes intentaban asaltarlos, un obstáculo en un camino que no debía tener y eso, lo hacia enojar...

Pero antes que el pudiera salir a mostrar su rostro, veía como alguien se adelantaba y empezaba hablar de una forma calmada, buscaba solucionar la situación de una forma tranquila... Pero usaba muchas palabras para unos simples asaltantes, no estaba seguro de que funcionara y mientras esperaba si servia de algo o no, su mano ya estaba lista en la espada.

Podeis ver como tres de vuestros compañeros se deslizan por la otra puerta del carruaje alejandose de alli por el bosque dejandoos solos como ratas de cloaca. Caterina se revuelve en su asiento mientras murmura algo entre dientes con una sonrisa debil antes de reirse. Podeis ver que los asaltantes dan un pequeño traspies hacia atras con algo que pasa, no sabeis que puede ser por un segundo ha parpadeado todo y se ha oscurecido pero ha vuelto a la claridad de la noche.

Uno se acerca y mira al noble Vereis señor, a nosotros no nos importa vuestro noble benefactor, solo queremos unas monedas para poder emborracharnos y llevarnos a unas putas a la cama en el proximo pueblo. Asi que si teneis aprecio a vuestra vida deber ...da un traspies hacia atras y niega.. Alejadlo, es un demonio, alejadlo murmura señalando al padre mientras su arma cae al suelo y mira a sus compañeros que empiezan a intentar sujetar a los caballos para que no se vayan de alli. Pero vosotros no veis nada raro.

Monstruo murmura mientras se santigua un par de veces y sale corriendo momento en que recordais las palabras de Rodrigo sobre la Mascarada...