Al abrir los ojos veis que estais en el hospital de la villa.
Los tres os encontrais en una sala "especial" atados a las camas y rodeados de sellos de papel y pergaminos.
Entre el desconcierto una cara conocida. Veis a Drago con el gesto serio y aspecto cansado, lleno de vendas y en un estado un poco lamentable.
- Llevais tres dias durmiendo ¿Recordais algo de lo sucedido?
Observo al sensei, nada más abrir los ojos y respiro con tranquilidad "La villa no se ha perdido"
-¡¡¡Sensei!!!, ¿Dónde están los dmás? Mushu ha muero y nos atacó Zaust, me obligó a romper el sello…lo siento sensei, no podía resistirme
hablo a toda velocidad mientras lloro, pensando en que todo mi clan ha quedado sepultado en la gruta.
- Tranquilo Kazuma, no debes alterarte ni hacer movimientos bruscos. Mushu no ha muerto, le encontramos justo a tiempo aunque su estado aun es preocupante y no a despertado, esta siendo tratado por los mejores ninjas medicos de la villa.
- Por desgracia la villa esta viviendo momentos tragicos y cruciales. Muchos han muerto en el ataque... incluido nuestro kazekage. La alerta roja se a instaurado en la villa, ahora somos debiles y vulnerables... sobre todo porque el clan Ryuki....- Drago se calla. Para el tambien es muy dificil esta situacion.
Hago fuerza contra los amarres, tratando de soltarme
-Tengo que encargarme de los fallecidos de mi clan…por favor, Drago-sensei, no estuve con ellos en la lucha final, debo ser yo quién les lleve al reposo de la tierra familiar
- Tendras tiempo para eso, yo mismo te ayudare en lo que sea posible pero antes debemos ocuparnos de un problema mayor. Aquello que guardabamos en la gruta a escapado...al interior de vosotros. Zaust hizo algo mal o algo no le salio como esperaba, el poder se dividio. ¿Comprendeis lo que eso significa?
Despertarme me resulta algo confuso, me encuentro en el hospital y Frago esta ahi con nosotros, comunicando la lamentable noticia a Kazuma, debia de resultarle muy duro asimilarlo
-Drago...yo...le ayudare...te ayudare Kazuma- digo todavia un poco desorientado
Me calmo, levemente
-Significa que ahora nosotros somos el dragón…o algo así, ¿No?
La noticia de Drago de que lo que habitaba en las grutas de la villa habitaba ahora en nosotros era algo que me dejaba impresionado -¿Significa eso que vienen a por nosotros Drago?-
- Si, el espiritu del dragon esta ahora en vosotros... vamos a sellarlo ya que no teneis forma de controlarlo por el momento. Zaust fue encontrado entre los escombros asi que es dificil que os persigan si nadie sabe que lo guardais en vuestro cuerpo.
- Por eso entendereis que jamas, nunca, podreis decirle a NADIE lo que a pasado en esa cueva.
Asiento, mientras sigo pensando "Esto ha ocurrido porque no soy nadie…no soy lo suficientemente fuerte…no estoy completo"
Con una mirada vehemente y voz segura digo al jounin
-Drago-sensei, quiero que me entrenes personalmente, quiero ser capáz de defender la villa y destruir a quienes nos han hecho esto, incluso si para ello debo dejar de lado cualquier clase de humanidad, solo quiero ser útil a la Villa del Dragón y vengar a los míos
Una pasión como nunca había sentido surge en mi pecho, parecida a unas llamas frías "El deseo de venganza, la fortaleza del odio y del sentido del deber"
Me gustaria complacerte pero eso debe decidirle el nuevo kazekage... y aun no se a elegido uno. En cualquier caso he pedido tu custodia y me he tomado la libertad de traerte esto.
Drago saca un pergamino que entrega a Kazuma. Tiene el sello de los Ryuki y solo uno de ellos puede abrirlo.
Cuando leas el pergamino...
Todo el clan esta luchando... no queda mucho tiempo, los nuestros no pueden contener al enemigo... temo que nuestra sangre se pierda por siempre.
Para los supervivientes dejo entonces este legado y una orden imperiosa que esta por encima de cualquier otra. El clan debe sobrevivir, si el clan mengua hasta el punto de la estincion aquellos que queden han de casarse jovenes y asegurar una buena descendencia.
Este mandato se antepone a cualquier otro. Asi pues, el miembro de mayor poder que quede vivo heredara el liderato del clan y debera jurar proteger al clan y a la villa, asi como guardar los secretos de ambos a todo precio.
La firma es la del lider del clan.
Abro el pergamino y lo leo en completo silencio, asumiendo las palabras para luego mirar a Drago
-Suélteme sensei, tengo que ponerme manos a la obra ya
- Kazuma, no seas inconsciente. Tenemos que sellar al dragon antes, es mas poderoso de lo que imaginas y podria doblegar tu alma, tomar el contrar y despedazar lo poco que queda de la villa en segundos.
Solo tardare un momento pero despues os sentireis muy cansados durante un tiempo. El sello a de hacerse con una tinta especial que estan preparando en este momento. Voy a buscarla, quiero que ninguno se mueva de este lugar y eso SI es una orden.
No entendia muy lo que estaban hablando, pero Drago estaba muy interesado en sellar el poder del Dragon ¿Tan peligroso era?
-Maestro Drago ¿Tan peligroso es el poder, nos dolera a la hora de sellarlo?-
- Si, es muy peligroso, sobretodo porque no teneis habilidad para controlarlo y no, el sello no os dolera. Sera un momento, como un dibujo en la piel que no se borrara aunque os bañeis. Vosotros podeis elegir el lugar del sello pero a de ser un sitio que no se vea. Recordar que nadie debe verlo ni saber nada de lo sucedido.
Drago hizo los sellos donde cada pequeño escogio despues los tres quedaron libres, atados bajo la promesa de no contar nada.
Elegí para mi sello la lengua, más que nada por el contexto y porque con mis afilados dientes me sería fácil cortármela en caso de interrogatorio.
El sello se le hizo a Kazuma y kazuma salio de la habitacion.
Ahora puedes ir donde quieras kazuma.
Al resto, elegir un sitio o os lo pongo yo.
Hasta lunes estare un poco off. Quiero mi tatu en el final de la espalda, es una parte que no creo que enseñe mucho.