Partida Rol por web

- No lo sé, sólo llevar la joya allá... Mi señor no me lo explicó, tuve que salir corriendo y llevo varios días sin parar.

Los monstruos atacaron a mi tribu sin razón alguna. Al menos nadie en ella la conocía.
Hace una pausa para dejar terminar a Kazamar y agrega:
No se quien es la regente, pero yo solo me encontraba escapando, 2 de las criaturas me atacaron y me encontre con Frekthel y Kronk. Vamos a la cueva??? dice con impaciencia, como un niño que pide ir al parque de diversiones... sus piernas se mueven rapidamente, aunque su cuerpo se mantiene en su sitio...

Frekthel sigue hablando algo alejado con Kronk, en voz baja, y al parecer de algo importante pues no responde a los comentarios de Ssrio quien, al parecer, tendrá que esperar a que haya acabado si pretende acompañarle.

- Así que no sabes para qué vas allí... -murmura Frekthel después de escuchar a Kronk.¿Y entonces porqué lo haces?¿Acaso no sabes qué te puede acarrear eso? Y no solo a tí, apoyas a un poder maligno que desconoces.

El clérigo se acaba de dar cuenta que Kronk no es más que un pequeño peón en el gran tablero en que están jugando. Un peón al que no se le da importancia, pero que puede decidir la partida.

Me parece que tu amigo no confía mucho en mi verdad? Dice Kazamar al felino, en voz clara, con una sonrisa, y recorriendo sus negros ropajes con un ademan.
El joven humano da unos pasos hacia el clérigo y con evidente petulancia de joven y humano, pero demostrando que intenta ser respetuoso, da una reverencia y le habla en celestial.
Escuchame al menos noble elfo, antes de juzgarme por mi raza o por mis oscuras ropas...

Luego continua en su propia lengua

Escuchame al menos noble elfo, antes de juzgarme por mi raza o por mis oscuras ropas...

Yo no se para que quieren esa gema ustedes, ni los demonios que atacaron a quienes debieron ser algún dia mis maestros. No se para que sirve esa extraña joya que todos buscan, la regente, o quien sea que se la haya solicitado a tu gigantesco camarada.
Sin embargo, por culpa de esa gema han matado a muchas personas por quienes tenia un gran aprecio, y a quienes por sobre todas las cosas respetaba mucho por la gran sabiduría que la experiencia y practica les había dado.

Yo soy solo un principiante si me comparas con las personas que acaban de morir en manos de los demonios, y sin embargo, en ves de salir corriendo a esconderme estoy aca, y me he acercado a ustedes con la esperanza de poder llegar al fondo de todo esto. Al menos respeta eso elfo, y no me juzgues solo por mi juventud o mis...huy huy huy!...teeeetricas...ropas.
Comenta con evidente sarcasmo al final.

En seguida nota su error, y trata de remediarlo. Unas suaves palabras surgen en idioma celestial con la esperanza de ser comprendidas.
Podría haberme acercado oculto y jamas hubieran detectado la mancha que soy sobre la tierra...Me acerco a ustedes con los brazos abiertos y pidiendo ayuda.

- ¿Maligno? No lo creo. Mi señor era buena gente, me trató bien. Maligno era la terrible tormenta mágica que le echaron. Malignos eran los seres que me perseguían. Malignas eran esas criaturas que os atacaban y a las que he matado.

Krok se quedó casi un minuto en silencio, pensando, algo que no se le daba demasiado bien.

- ¿Es que la ciudad hacia la que me enviaron la mandan seres malignos?

Es que el dispersar las joyas que pueden combatirles, como esa que dices tener, es algo que están haciendo los enemigos de Faerûn.- le contesta con voz tenue. Los objetos que pueden servir para derrotar al mal están en distintas partes del continente, incluso hay varias en las islas... Además, dime una cosa, ¿qué pretendías hacer con ella en Cormanzhor? ¿A qué parte del bosque te dirigías?

- Mi señor sólo me dio la joya, me dijo hacia donde correr, y yo corrí. Lo que nos seguía lo tenía muy asustado y no hubo tiempo de más. Supuse que al llegar a Comanthor alguien me diría qué hacer... Pero también me dijo que no me fiase de nadie, y sigo sin saber de qué parte estás tú. Eres un elfo, un elfo solar. Por eso me he fiado. Pero no sé si seguir haciéndolo...

Mientras el semiogro y el elfo platican en voz baja, el que se ha presentado al grupo como Kazamar intenta incluirse en la conversación....

Kronk corta la conversación abruptamente al ver acercarse al sujeto, y se queda mirándolo de forma no muy agradable. Una de las comisuras de los labios parece arquearse involuntariamente, dejando un enorme colmillo a la vista.

Frekthel se gira enfadado al ver cómo Kazamar se infiltra en su conversación:

- No sé porque piensas que tus malcosidos trapos negros puedan ser la forma que tiene la gente de conocerte, tal vez seas tú mismo el que desconfías de la gente con ropa negra.- contesta fríamente el clérigo, obviamente enfadado. No te juzgo por tus ropas, sino por tus acciones. Sus palabras en común pueden dejar confundido al que no haya entendido el mensaje de Kazamar, aunque es obvio que le está contestando a algo que ha mencionado.

Y no trates de parecer usando idiomas extraños.- Añade finalmente.

Mis acciones? En que momento mis acciones han sido ofensivas hacia ustedes!? pregunto el joven sorprendido y divertido a la vez.

Me estoy cansando. Quieres o no venir a la cueva? le pregunta infantilmente a Kazamar, en tono conciliador. Vamos? agrega luego, como si nada hubiera pasado.

Antes de escuchar una respuesta se larga a correr a toda velocidad por el pasto hacia la cueva. Llega a la entrada y observa el interior, asomando solo su cabeza.

HEY! Espera Siro! Puede ser peligroso! Comienza a gritar el aprendiz para luego, más precavido, bajar su voz hasta un susurro...
El joven sale corriendo hasta alcanzar al humanoide felino.
No entiendo que tienen en mi contra...creo que lo que he oido sobre los elfos y en particular un elfo solar no es tan cierto...No me resultan tan distintos a los más hoscos enanos que he conocido...
Sabes que hay ahi dentro? le susurra a Siro
Si por culpa de una gema mágica han matado a tu pueblo y a mi gente, me gustaría llegar a averiguar algo al respecto...

la entrada a la caverna no es muy diferente de la de cualquier caverna, aunque dado el tamaño de la entrada la luz solar la ilumina perfectamente por lo que pueden observar que se encuentra vacía, aun que unos 100 pies mas adelante notan que la caverna tiene un corredor que tuerce rumbo al norte por lo que bien puede guardar algunas sorpresas...

Escucha Siro. Me ocultaré por aquí y veré que encuentro de acuerdo? Ya que no les he caido bien al ogro y su amigo el elfo solar, me mantendré fuera su sus caminos por un tiempo...
Esos dos saben algo sobre la gema causante de tanto mal...espero que en algún momento terminen confiando en mi...

Mira, quizás no me vean ya que mientras no confíen en mi me mantendré alejado, pero te aseguro que estaré junto a ustedes cuando recorran estas cuevas, y podrán contar conmigo si llegan a estar en problemas.

Quizás así logre ganarme su confianza y me ayuden a descubrir que es lo que esta pasando, que es esa gema que todos buscan y porque!

Dicho esto, espero alguna respuesta y luego me adentro en la cueva cubriéndome con la capucha, y perdiéndome entre las sombras.

El misterioso joven parece dirigir unas palabras a Siro, y comienza a adentrarse por la cueva...

Los pensamientos de...del aprendiz, arremetían como lanza contra el peto. El joven no había presenciado la masacre de quienes habrían de ser sus maestros algún día, sin embargo cuando llegó al sitio de la emboscada, la presencia de los demonios fue evidencia suficiente.
La mente mostraba una y otra vez a los demonios desgarrando como si de un simple velo se tratara, la carne de Zuco, Karadal, Gimdor...y tantos más.
Visiones de una extraña y brillante gema inundaba sus sentidos, violando su mente como daga a la carne, con turbias escenas bañadas de roja luz. Se veía a si mismo en una mágica habitación, veía sus manos tomando la gema desde un pedestal de gran poder. Orgullo.
Veía a su maestro, siendo ejecutado por el más cruel hombre que Kazamar hubiera conocido.

Averiguaré quien acabo contigo, noble maestro...Descubriré el propósito de la tan codiciada gema y vengaré tu muerte y la de tus congéneres!!
Un paso adelante, en lo oscuro. La mirada atrás fija en Ssirro...la única ayuda que le tenderían en mucho tiempo quizás...
Torbellino de recuerdos e ilusiones...
Juro que haré honor a tu recuerdo...Entrenaré y entrenaré siguiendo tus pasos. No descansaré hasta llegar al fin de todo esto! LO JURO!
Tu muerte no habrá sido en vano sabio maestro...Tus nobles enseñanzas, las increíbles técnicas del gremio que con extrema confianza me habían mostrado no se extinguirán contigo!
Tendré la cabeza de tu verdugo bajo mi daga...LO JURO!

Una reverencia a Ssirro, un movimiento bajo el velo que denota la invisible sonrisa...y me adentro un paso más.
Oculto.