Partida Rol por web

Las aventuras de Spider-Man y Black Cat #1 - La unión

El funeral, nacen las leyendas

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13/06/2011, 17:47
Director

Cyclone había sido detenido finalmente por el trabajo común de Spiderman y Black Cat. Después de una brevísima conversación que rompió la tensión del combate y creó otra especie de tensión entre los dos, Peter Parker finalmente pudo poner tras las rejas a Cyclone por un largo período de tiempo. El capitán Stacy consoló al jóven y fortalecido Parker asegurándole que la justicia había llegado. El día del funeral del buen Ben Parker había llegado, allí en el funeral se encontraban Peter y su herida y adolorida moralmente tía May, también habían llegado como era de esperarse amigos de Ben y para sorpresa de Peter sus nuevos "amigos" se encontraban allí. Gwen, Harry, Eddy e incluso Felicia junto con Flash se encontraban reunidos dándole sutilmente un gran apoyo al joven Parker. Después de la ceremonia, May amablemente pidió a Peter que hablara con sus amigos, lo necesitaba

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14/06/2011, 15:35
Ct. George Stacy

En el funeral se encuentra el capitán George Stacy quien se acerca muy respetuosamente a la maltrecha May Parker y al joven Peter Parker - Lamento su pérdida, sin embargo, hemos logrado procesar al criminal culpable de este crimen gracias a la ayuda de dos misteriosas personas que estamos investigando desde ya, pero a quienes creo que deberíamos agradecer por la ayuda. De todo corazón deseo a ustedes la fortaleza para poder soportar semejante pérdida y el dolor que esta misma supone - el rostro del capitán Stacy es frío, adolorido y se nota realmente que le duele de corazón lo que ha ocurrido, junto a él se encuentra Gwen quien tiene un parecido impresionante con el capitán, esta conversación la han escuchado todos pues el capitán así lo deseó

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14/06/2011, 19:23
Spider-Man

El dolor era impresionante.

Había sido doloroso en el momento de la muerte de Ben, pero la sorpresa, el shock y la rabia posterior habían mitigado el efecto. Ahora era plenay friamente consciente de que Ben estaba inludiblemente muerto. Se había ido de nuestras vidas y ya no volvería. Nunca.

Contuve las lágrimas, por May quien necesitaba a un Peter fuerte en el que apoyarse. Yo había perdido a mi tío, así como había perdido antes a mis padres; y si bien con mis padres era muy crío para recordarlo, con mi tío, siendo doloroso, no era equiparable. Ben había salido de mi vida, pero aun tenía toda mi propia vida por delante para vivirla. May había perdido al amor de su vida. A su media naranja. La vida para ella no sería la misma.

Centré mi atención en... nada. Una nada inconcreta e inconclusa. May y Ben no eran excesivamente creyentes, pero si tradicionales, por lo que un cura dirigió la homilía. Escuchaba un zumbido vacío cuando este hablaba y la gente me parecían sombras que deambulaban a mi alrededor, dándonos el pésame a May y a mi. A algunos los conocía. A otros no. Amigos, vecinos, conocidos, compañeros de trabajo... Solo en su funeral me di cuenta de que Ben tenía una vida plena de conocidos que yo casi no sabía ni quien era. Había reconocido a nuestra vecina, la señora Watson, con quien May había trabado buena amistad. Pero poco más. Algún que otro vecino ocasional me sonaba, pero poco más...

Solo una persona logró sacarme de mi autismo. El capitán Stacy, aquel que había ayudado a Peter a completar lo que Spiderman había iniciado, nos ofrecía sus condolencias más sinceras, deseándonos lo mejor. Hablo de Spiderman y la Gata Negra sin ponernos nombres y debí reprimir un amago de sonrisa amarga al recordar la azaña de atrapar a Cyclone: hubiera dado a cambio mis poderes con tal de que Ben siguiera vivo. El enfrentamiento me había dejado un morado en le pecho que May había visto cuando nos preparábamos para el funeral, pero que no mencionó. Supuso simplemente que había lidiado con el dolor a mi manera y no necesitaba que su tía metiera la nariz. Le bastaba con ver a su Peter tranquilo y a su lado. Tratando de mantenerse tan firme como Ben lo había sido toda su vida. Nada más lejos de la realidad, pues me temblaba todo bajo la ropa, y solo mi determinación a no soltarme me impedía desatar el llanto.

- Gracias Capitan, por todo lo que ha hecho... -fue lo único que pude decir.

Me sorprendió alzar el rostro y contemplar a Gwen junto a su padre, así como a un puñado de compañeros del instituto con los que habái trabado buenas relaciones. No me sorprendió tanto el hecho de que estuvieran presentes, pues todos parecían buenas personas; fue mi ensimismamiento lo que me hizo sorprenderme, pues no creí que les importara tanto a esos chicos y chicas tan guais y simpáticos que casi acababan de conocerme.

Gwen, muy parecida a su padre, tenía el rostro lleno de pesar por mi. Era todo empatía y sus ojos se habían enroquecido, lo que indicaba lloro. Me dió el pésame y un abrazo sentido que correspondí y agradecí. Gwen era una buena chica, digna hija de un poli que también era un buen hombre.

- Gracias, Liss... -pude mascullar, entre el dolor, la pena y el agradecimiento...

También estaba el bueno de Eddie. Grande fuerte y noble, me había dado su apoyo desde que llegue al centro. Ahora sin saber como lidiar con semejante situación, me puso una mano en el hombro y ladeó la cabeza sin saber que decir. Tampoco hacía falta. Entre amigos una mirada bastaba.

Lo mismo pasó con Harry, quien me mostró su mudo apoyo sin apenas palabras. No era fácil para unos adolescentes como ellos lidiar tan de cerca, tan pronto, con la muerte. Una muerte que les había rondado cerca cuando Cyclone casi arrasa el autobús. Quizás por eso hasta Flash estaba allí.

Porque hasta un idiota como Flash había tenido el suficiente detalle de presentarse. Quizás era un cabeza hueca, pero hasta los cabezas hueca pueden tener algo bueno dentro. Quizás no un corazón de oro, pero al menos no uno hecho de excrementos... Quizás debía plantearme mi juicio inicial sobre Flash...

- Gracias también a vosotros chicos... -eche un vistazo agradecido a mis dos amigos, e incluí a Flash en el lote.

Finalmente, Felicia, que parecía intimidada por la situación, también se acercó a darme las condolencias. Otra preciosidad como Gwen que se había interesado lo suficiente por Peter Parker. Nunca olvidaría que ella estaba allí cuando Ben falleció en el hospital. Fue su abrazo el que me consoló y me dio fuerzas cuando me derrumbaba.

- Felicia... -susurré con la voz medio rota, tratando de mostrarme más firme que la última vez que nos habíamos encontrado, en el hospital. Quería mostrarme un poco más duro y resistente, pues suponía que May necesitaba eso de mi. Tragé saliva dos veces, tratando de articular alguna cosa coherente... Pero era imposible. Ver a Felicia me recordaba el consuelo que me dío, y sobre todo el porqué necesitó consolarme. Tenía un nudo en la garganta- Yo... Yo... -noté que me temblaba el labio, contagiado por el temblor que había ascendido por mi cuerpo, y me maldije por no ser tan duro. Por no ser tan resistente- Yo... -apreté los dientes y bajé la vista, haciendo que el pelo me cayera por la cara, ocultándola- Gracias por... estar ahí... Felicia... -esperé que nadie me pudiera ver.

Una lágrima comenzó a caer por mi rostro y di gracias porque este me viniera sobre la cara. No quería que me vieran llorar. No quería que May me viera. Dios. ¿Como podía ser tan duro todo aquello...? La presa se había roto y las lágrimas de un dolor sordo comenzarona  brotar ya  rodar por mis mejillas, sin un lamento que pudiera mitigarlas, pues no quería dejarme llevar por el dolor. May me necesitaba. Necesitaba que fuera fuerte. Yo tenía que...

Dios...

No pude evitarlo y me giré de nuevo hacia el ataud de Ben, que estaba listo para ser enterrado... No quería que nadie más que él contemplara mis lágrimas. Era demasiado dolor; dolor reprimido; dolor del que aprender y con el que convivir...

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14/06/2011, 20:46
Black Cat

Volver a la realidad era mucho más difícil que golpear el rostro de un hombre sin escrúpulos: La noche anterior había sido Black cat, la gata negra; sin preocupaciones, sin dolor, sin remordimientos, tan solo con el ideal de darle a un buen amigo que acababa de perder a alguien aquello que necesitaba: Justicia. Ir dentro de aquel traje negro ajustado me hacía sentirme mucho más segura y capaz, confiada e incluso más locuaz, pero con la cabeza en su sitio. La verdadera Felicia Hardy no era así, ni mucho menos: Una joven atleta con alguna que otra preocupación sobre su físico, debido a los cambios experimentados, y con un enorme vacío en el pecho - debido al internamiento de su padre en una prisión- que ahogaba entre falsas sonrisas. La ficción, en multitud de ocasiones, era lo que acompaña al ser humano; lo que me acompañaba a mí.

El funeral se me hizo eterno: Quizá era por ese miedo que sentía de perder a alguien, por saber que nunca iba a volver. No era una persona católica, ni creía en el más allá, en un cielo en el que todos viviríamos felizmente. Mis ideas se acercaban más a volver a encarnarse en otros cuerpos... Ya se decía, ¿no? La energía no se crea ni se destruye, solo se transforma. Y nosotros no éramos más que energía. Quizá el tío de Peter, Ben, se habría reencarnado en un nuevo cuerpo, pero sin ningún tipo de recuerdo. Vaya, pensar en algo como esto es terrible... No recordar nada de lo que has vivido, ni a las personas que has amado, o por las que has llorado... Simplemente estás vacío, dispuesto a dejar llenarte de recuerdos nuevamente.

Me preguntaba qué tipo de pensamientos recorrerían la mente del joven Parker en esos momentos: Seguramente estaría recordando los buenos momentos vividos, lo que merecía la pena recordarse. Notaba que se me encogía el pecho solo de pensar en que algo así pudiera ocurrirme a mí: yo aún albergaba esperanzas por poder rescatar a mi padre de la celda en la que se estaba pudriendo y ahora tenía las fuerzas para hacerlo. Miré a Peter, a la par que se me escapaba una lágrima que rápidamente me limpié con la mano. Al menos sabía que, en parte, la captura de su asesino se debía a mí: Quería que ese fuera mi regalo, que confiara en que todavía había gente buena en el mundo dispuesta a luchar. Espero que esto te ayude a sentirte mejor.

Una vez se acabó el funeral esperé a que todos, uno a uno, le dieran el pésame. En poco tiempo Peter se había hecho con varias amistades: Gwen Stacy, una chica que por nada del mundo me gustaría ser como ella, pero a quien debía reconocerle el gesto por haber acudido; Eddie, el chico que había salvado al torpe fotógrafo en más de una vez; Harry Osborn, el atractivo chico del instituto, con quien apenas había tenido el placer de hablar; y, por último, Flash, a quien estaba seguro de que Peter no consideraba amigo, pero tendría en cuenta su aparición en el funeral, eso seguro. A decir verdad, las tonterías de Flash me hacían gracia, pero ya me estaba hartando de su rollo de abusón, quizá más adelante sería hora de que la gata le hiciera una visita, dejándole las cosas claras.

En ese tiempo me acerqué a la tía de Peter, May, quien se encontraba aún herida por el incidente. Noté que la voz no me salía, puesto que un nudo había decidido a quedarse a vivir en mi garganta. Me quedé frente a ella unos instantes. Felicia, dile algo. Por muy estúpido que sea, sé que lo agradecerá.

-Lo lamento muchísimo, May. Sé que esta debe ser una pérdida irreparable, pero... tiene a Peter a su lado, es un gran chico. Le cogí la mano durante un instante y le susurré algo- No dejaré que nada malo le ocurra.

Tras estas palabras me alejé y me quedé en otro lado, esperando a que Peter terminara de hablar con los presentes. Fue él quien se acercó a mí. Tenía miedo de enfrentarme a él, de no saber qué decirle: El dolor que debía sentir era indescriptible, mucho más profundo que el moratón que adornaba mi rostro pero que se encontraba perfectamente maquillado, para evitar cualquier tipo de sospechas. Esperé a que hablara. Sus palabras, entrecortadas, me hicieron mucho más daño que todo lo sucedido anoche: no por lo que había dicho, sino por el sentimiento de pena que sufría, por el dolor que debía estar recorriéndole en esos instantes. No... no tienes que dármelas. Me quedé quieta, sin decir nada. Quizá él no quería hablar con alguien, quizá prefiriera estar solo, así que permanecí inmóvil hasta que me dio la espalda, mirando la tumba de su tío.

Vamos... gata, Peter te necesita.

Cuando me dio la espalda y se quedó ahí, esperando, me acerqué lentamente. Seguramente no tendría las palabras adecuadas para un momento tan duro como este, pero no podía quedarme quieta, mirando. Con un gesto que más de uno habría considerado descarado, rodeé con mis brazos el cuerpo de Peter y lo abracé, apoyando mi cabeza contra su espalda. Más de una lágrima salió de mi rostro en aquel instante, pero no me importaba. Saqué fuerzas de donde ya no quedaban para poder hablarle- Estaré... ahí siempre que lo necesites, Peter.

No dije nada más; no creí que fuera necesario. Tan solo seguí abrazándolo con mis brazos, en silencio.

 

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15/06/2011, 19:49
Spider-Man

Miraba la tumba de mi tio. No a mi tio. Su tumba.

Ben era un hombre bueno y recto que me había criado como a un hijo... Más que a un hijo, consideré, pues puede que tanto él como May habían apartado su deseo de tener hijos propios para criarme a mi, cuando mis padres verdaderos fallecieron siendo yo tan crío. Casi no me acordaba de ellos, solo fogonazos, muy al contrario de lo que recordaba de Ben y May, quienes habían sido mis verdaderos padres tantos años. Tantos años siendo su hijo y solo ahora me daba cuenta de ello...

Quise poder enviarle ese mensaje de reconocimiento a Ben para que fuera consciente de en cuanta consideración le tenía a él y a May, con quien más tarde tendría que hablar. Aquello no significaba que hiciera de menso a mis padres, a quienes también añoraba, pero si que ponía a Ben y a May a su misma altura. Hay quien tenía varios hermanos. Yo había tenido dos pares de padres. Pero ahora ya solo me quedaba May. Y yo era todo cuanto le quedaba a May.

Ahora que todo el mundo nos había dado el pésame, a mi espalda solo oía un murmullo. Algunos recordaban cosas de Ben, anecdotas en vida con las que hacían que su recuerdo arraigara en ellos. Tantas anectodas tenía yo y todas pasaba a toda velocidad frente a mi ojos. Anecdotas pasadas, presentes y... futuras. Anecdotas que Ben se perdería, igual que mis padres. Nunca me verían graduarme. Ni acceder a la universidad. Ni tampoco podría presentarles a mi primera novia. Ni que conocieran a la mujer de mi vida, o a mis hijos... Infinidad de momentos que se perderían, como lágrimas en la lluvia...

Sentía el corazón fuerte, palpitando en mi pecho, queriendo saltar y salir corriendo para gritar y descargar toda la angustia que producía la pérdida. Pero no corrí ni grité. Unas manos me lo impidieron.

A mis espalda, unas manos suaves con finos dedos de pianista, de mujer, avanzaron abriéndose paso por mi torso. Una pasó por debajo de la axila, mientras que la otra ascendia por la espalda hasta escalar la montaña de mi hombro. Avanzaron por mi piel en una caricia larga y temblorosa hasta encontrarse en el medio; en el centro de mi pecho... donde mi desbocado corazón palpitaba entre la rabia y la tristeza. Allí, esas suaves manos de mujer se entrelazaron creando un candado de carne y piel que tuvo la virtud de calmar mi alma. Según la manos se acercaban, noté que un cuerpo cálido se pegaba a mi espalda, apoyando su peso. Una cabeza, cuya melena cayó en cascada sobre mi, se apoyó en el otro hombro y pude detectar el delicioso aroma que desprendían todas las mujeres, más allá de cualquier colonia o perfume.

Cuando el abrazo se completó, noté la fuerza e intensidad del abrazo. Mis manos ascendieron para encontrarse con las suyas y finiquitar aquella telaraña de emociones y caricias. Era un abrazo sentido y sincero, lleno de fresca comprensión. Sentí las llemas de los dedos sobre mi piel, aun incluso debajo de la camisa, pues ahora mi percepción era mucho mayor que cuando me picó aquella araña. Podía incluso sentir las vetas de sus huellas dactilares por encima de la tela de la camisa... Podía incluso sentir su corazón palpitando como un metrónomo sobre mi espalda, a través del pecho de aquella chica. Noté un suave y cálido aliento en el cuello, cerca del oído y adiviné que tenía sus labios muy cerca de mi piel.

- Estaré... ahí siempre que lo necesites, Peter. -susurró una voz joven.

Felicia.

Felicia parecía estar siempre ahí. Siempre que sentía dolorido el corazón, Felicia estaba ahí para reconfortarme. Esperé que no sintiera solo lástima por mi, pues había descubierto que aquella chica me gustaba bastante. No solo era una chica atractiva que se contoneaba por el colegio. Parecia algo pizpireta, pero la realidad era que tenía un alma brillante. Me había quedado claro. Aunque... ¿que otra cosa si no lástima iba a inspirar a una chica como esa? Despierta Parker... Solo es amable. Y tu estás sensible... Jamás alcanzarás eso que estás pensando con una chica como Felicia. ¿Como iba a fijarse en ti? ¿Acaso crees que le gustas...?

Volví a notar sus amorosos y reconfortantes dedos sobre mi pecho y deseché esos pensamientos, pues resultaban mezquino pensar de aquella forma. No era justo, de modos que los expulsé de mi mente.

- Felicia... -susurré de manera que solo ella podía oírme- Si algún día me necesitas... para lo que sea... solo dímelo... -me giré dentro de su abrazo y la tomé de los hombros, como en esas escenas románticas de las películas, como si fuera a besarla, con lágrimas aun cayendo de mi rostro- ...Una sola palabra y acudiré en tu ayuda... Gracias, Felicia Hardy... De verdad... -y aun con lágrimas cayendo por mi rostro, le sonreí.

Una sonrisa era lo menos que podía ofrecerle en ese momento a alguien tan generosa y hermosa como Felicia...

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15/06/2011, 21:08
Director

El servicio pasa rápido, tras recibir los saludos y apoyo de sus compañeros, Peter y su tía se retiraron a su hogar en Queens, mientras que la hermosa Felicia fue posteriormente a su casa con su madre. La noche no demora en llegar, cada uno está ensimismado en sus pensamientos y ambos, cerca de las 9 de la noche deciden ocultamente abandonar sus hogares con sus trajes del día anterior para poder escapar por un brevísimo instante a la realidad. Cada uno tiene sus preocupaciones y sus inquietudes, que tratarán de resolver antes de volverse a ver

Notas de juego

Los voy a dividir para finalizar esta escena y la partida. Este es el epílogo

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15/06/2011, 21:10
Benjamin Parker

Balanceándose por los edificios de New York en la noche, Peter siente el murmullo de la noche capitalina sacudiéndose bajo él. La vida nocturna de New York era un poco menos vívida que el día pero si se quería, más peligrosa. Finalmente llegando a la iglesia de San Patricio en la quinta Avenida, Peter busca refugio en el campanario de la Iglesia sentándose con su máscara cubriendo las lágrimas que aún recorren su rostro. Mientras las campanas suenan Peter pierde su mirada en el horizonte nocturno cubierto por las luces de la ciudad, una voz suena en su cabeza - No llores jovencito, no es el momento de hacerlo. Ahora tienes que ser todo un hombre por mi May. Has cambiado mucho Peter, eres un verdadero orgullo para May y para mí, segúramente Richard y tu madre estarán también felices de ver en lo que te has convertido hoy por hoy Pete - al girarse Peter se sorprende al ver a su tío Ben sentado allí junto a él en el campanario, sorprendido por lo que parece ser una alucinación, Peter prefiere simplemente tener esta última conversación con su tío

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15/06/2011, 21:19
Adam Sorensen

Mientras te balanceas, llegas al edificio Chrysler, o cercanías del mismo cerca del centro bursátil de Manhattan. Mientras descansas por un brevísimo instante en una de las azoteas de un edificio aledaño, un misterioso hombre sale de la nada. Su caminar ligeramente encorvado y cojo te parece algo repulsivo inicialmente - Señorita Black Cat, es un placer verle - el hombre se ve bastante serio y pareciera conocerte de hace muchos años - Los hombres para los que trabajon se han interesado por su presentación del día anterior, quisiéramos hablar con usted, y hacerle una oferta algo, difícil de rechazar - cuando termina esta frase una sombría sonrisa se dibuja en su rostro

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16/06/2011, 01:53
Spider-Man

Aparentemente solo sobre aquel campanario, el corazón casi me da un vuelco.

Ben estaba allí. Junto a mi. Hablandome.

Y hablándole al Peter Parker que había bajo la máscara, lo que indicaba que aquella imagen que me hablaba sabía que Spidema y yo éramos la misma persona. Aquello descartó mi primer temor; por un momento pensé que alguien podía estar usando mi dolor y un buen disfraz para torturarme, pero ¿quien en este mundo conocía a Peter Parker y a su alter ego? La lógica dictaba que nadie... Además, conocía detalles sumamente profundos de mi vida personal. Estaba ahí mismo, al completo. Hasta con su característica coleta de antiguo hippie...

Llegados a este punto, mi mente analítica solo dejaba lugar a dos posibilidades: O Ben era un fantasma aparecido, o estaba teniendo una fuerte alucinación causada por el dolor. Tras meditarlo unos segundos en los que contuve el aliento, solté lentamente el aire llegando a la misma conclusión: no me importaba en absoluto. Si era un fantasma, no debía temer nada del espectro de Ben y si era un alucinación, eso significaba que había estado reprimiendome demasiado y mi mente había creado esa válvula de escape para soltar tanta presión. Tanto si era un fantasma o una alucinación, aquel era Ben y estaba allí consolándome y animándome. En ese momento no necesitaba más. Aun aturdido por la sorpresa me resistí a tocarle, pero nada me impidió hablar...

- ¿Ben...? -había llorado y mi voz estaba algo ronca- ¿Por qué tuviste que morir, Ben...? -mi tono denotaba confusión, no rabia ni reproche. Aun no asimilaba del todo su muerte, menos aun cuando le tenía frente a mi como si estuviera vivo- Tu eras el pilar que sostenía nuestras vidas. May te necesita y yo... yo también... -nuevas lágrimas resvalaron bajo la máscara y no pude evitar quitármela para mirar a mi tio a la cara- Ben... has sido como mi padre todos estos años... Y ni siquiera te lo he podido decir... Os quiero a May y a ti, y no se que voy a hacer ahora... ¿Como voy a cuidar a May...? ¿Como seré el hombre que la cuidará si apenas soy un... muchacho...? ¿Como aprender a llevar esa responsabilidad...?

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16/06/2011, 15:31
Director

Ben sonreía suavemente a Peter, la sonrisa que tantos años le acompañó, esa misma sonrisa que Peter había visto cuando había sido el primero en la feria de ciencias; la misma cuando había salido en su primer cita allá en Sterling Heights con la hermosa Tyra Collins para la fiesta de promoción de ese año y junto a los amigos de ella, sus primeros amigos; la misma sonrisa que le acompañó cuando todo salía bien - Pete, no eres más el muchacho tímido que solías ser, incluso mira, ya ni usas tus anteojos. Como dices, May es tu responsabilidad y es una que se que puedes cumplir totalmente porque confío en tí hijo, aunque Richard se fue de tu vida cuando eras muy niño, tengo que agradecerle porque gracias a él tuve lo que May y yo siempre quisimos y jamás pudimos tener, un hijo. Eres más que mi sobrino y es lo mismo con May, eres nuestro pequeño hijo Peter. Por favor, tienes que tomar aire, ser fuerte y soportar esta carga. El destino ha querido que tu cuerpo cambie en esta edad mucho más de lo que había cambiado el mío entonces, tienes estas poderosas y maravillosas habilidades que usaste impulsado por la sed de venganza pero con buenos fines. Jamás dejes que la venganza sea tu estilo de vida Peter, jamás dejes que el odio envenene tu espíritu, tienes un gran poder hijo y ese gran poder conlleva una gran responsabilidad. Tienes que cuidar a May y todas las May desamparadas de New York, ese es tu espíritu y lo sabes, eres un buen muchacho y serás un gran hombre

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16/06/2011, 20:22
Black Cat

El balanceo por las calles me hace sentir mucho mejor después de aquella escena tan triste, el funeral del familiar de Peter. Por suerte, noté que mis palabras hicieron mella en él, que realmente me creyó. Era un muchacho bueno, o eso parecían apreciar mis ojos, capaces de llegar mucho más lejos de lo que hacían antes. Me prometí a mi misma que intentaría que ese chico no volviera a sufrir más, ya se encargaría Black cat de cuidar a un chico indefenso como era él de matones como Flash, quien, por otro lado, me resultaba simpático.

Me preguntaba si volvería a encontrarme con Spiderman, si realmente acudiría a la cita que habíamos dicho. Sentía unas ganas de volver a encontrarme con el arácnido, de poder conversar con alguien siendo "la gata": mucho más atrevida y provocativa de lo que era Felicia Hardy, quien también tenía lo suyo.

Me paré en un edificio, pensando. ¿Iba a dedicarme a salvar el mundo? ¿de verdad? Eso debía ser meditado, pero no entraba en mis planes: tenía que sacar a mi padre de la cárcel en la que se encontraba. Antes de que pudiera salir de allí, la silueta de un hombre me pilló desprevenida. Mis ojos se fijaron en él, pero no lo conocía de nada. Al parecer, él sí que conocía a Black cat.

-No sé si decirle que igualmente, señor...-dejé mi frase- Lo siento, desconozco su nombre. Y no me gusta demasiado trabajar para alguien, soy más de ir por mi cuenta- no pensaba fiarme del primer loco que apareciera en un lugar invitándome a yo qué sabía. Dígame, ¿de qué negocio se trata? No voy a acompañarle a ningún lugar, así por las buenas.

Di un par de pasos hacia atrás, acercándome al borde del edificio, por si debía salir huyendo. ¿Dónde estás, arañita?

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16/06/2011, 20:54
Adam Sorensen

Sonriendo aún de forma maliciosa el hombre sacó rápidamente un sobre del interior de su chaquetilla, ya que viste de una forma bastante formal sacó un sobre negro, el sobre parecía hecho en satín o una especie de material similar. El mismo, llevaba estampado una especie de alfiler que tomaba la forma de una torre de ajedrez de color blanco, terminando en punta como si de una aguja se tratara. Al acercarse a la hermosa Black Cat, quien da un paso hacia atrás, el misterioso hombre sonríe una vez más - No se preocupe señorita Black Cat, no deseo lastimarle de ningún modo, mi jefe no me lo perdonaría - haciendo un galante gesto como si de una venia se tratara el hombre mantuvo estirada la carta en su mano derecha mirándote fíjamente - Mi jefe es un poderoso hombre de negocios conocido como Big Bag, es el amo y señor de las calles de New York y del bajo mundo. Cualquier criminal es inocente o culpable solo si él lo dice así, ya que maneja incluso al departamento de Policía. Ese tal Cyclone buscó actuar por su cuenta y riesgo y rechazó la oferta de Big Bag de aliarse con él para realmente controlar la ciudad sin lastimar inocentes, ya que no creemos en eso. Sus habilidades señorita Cat son excepcionales y podrían sernos de muchísima ayuda y por supuesto, nosotros también seríamos de ayuda para usted - sacudió de nuevo la carta haciendo señas que la recibieras - Podría pedirnos cualquier cosa que quisiera, lo que sea, nada es imposible para Big Bag

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16/06/2011, 21:43
Black Cat

Me asusté un poco al ver que el hombre introdujo su mano en su chaqueta, pensando que podría estar a nada de sacar un arma para dispararme, pero a los pocos segundos vi el sobre que extrajo de su chaqueda. Desde luego, tenía estilo: tanto él como la carta que pretendía darme.

Aunque sus palabras no terminaban de convencerme cogí el sobre- sigue sin haberme dicho su nombre, señor. Reconozco que lo que dice suena enormemente interesante, pero entenderá que necesito pensármelo y... consultarlo con la alhomada. ¿También han contactado con el otro héroe enmascarado, Spiderman?

Lei la carta, queriendo saber qué me ofrecía ese tal Big Bag.

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16/06/2011, 22:54
Adam Sorensen

Su sonrisa oscura continúa ahí, es por demás algo inquietante - Nuestro jefe se ha encargado de buscar como contactarlo y ofrecerle lo mismo señorita Cat, los sobres son personales así que por él no debería afanarse - acto seguido se da media vuelta y empieza a entrar al edificio del cual ha salido en esa abandonada y solitaria terraza - Ah!, lo olvidaba - se gira sutilmente dejando ver el rabo de su ojo izquierdo mirándote fíjamente - tendrá solo un plazo de 24 horas para informarnos si quiere aceptar la oferta propuesta en ese sobre, de no aceptarla, estaremos pendientes de usted en cualquier caso - sin decir más levanta su mano en un gesto de despedida mientras camina y cierra la puerta tras él tras dejarte totalmente sorprendida con la carta en tu mano. Al abrirla, ves que la carta en si son las indicaciones para robar una hermosa joya, con todo el esquema de seguridad de una importante joyería de la ciudad. Es una hermosa esmeralda en forma de dragón que está avalada por más de US 30,000, más que suficiente para sacar a tu padre de prisión pese a que ya lleva varios años condenado

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16/06/2011, 23:02
Black Cat

-Muchísimas gracias, lo tendré en cuenta-  dije mientras se marchaba. ¿Y cómo les informo? ¿Mañana a la misma hora en el mismo lugar?- pregunté mientras leía el sobre. No dije nada más: la enorme cantidad de dinero me llamaba enormemente la atención, puesto que gracias a ello podría liberar a mi padre de la cárcel al fin.

Me quedé unos instantes sola, reflexionando. ¿Qué iba a hacer ahora? Quizá, hablarlo con la única persona que quizá me entendiera, me aclararía algo las ideas. Aunque, al 99% de probabilidad, conseguiría liberar a mi padre obteniendo ese dinero.

Notas de juego

¿Puedo intentar buscar a Spiderman o vas a dejarlo aquí? x_X

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16/06/2011, 23:15
Director

Notas de juego

Mmmm...hazme un chequeo de Intuición, que sea bien alto sin karma para gastar. Si tienes éxito lo buscas, si no, dejamos ahí que él también anda en monólogo :p

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16/06/2011, 23:16
Black Cat
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: Intuición
Resultado: 12

Notas de juego

Jajaja... alto dices! T______________T Yo quería encontar a mi arañita T___T

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16/06/2011, 23:17
Director

Notas de juego

Sorry, por esta vez no será...retomaremos la próxima aventura en este punto. Gracias por jugar Liss....ha sido un verdadero placer

 

Cargando editor
16/06/2011, 23:17
Director

Notas de juego

Sorry, por esta vez no será...retomaremos la próxima aventura en este punto. Gracias por jugar Liss....ha sido un verdadero placer

 

Cargando editor
16/06/2011, 23:20
Black Cat
Sólo para el director

Notas de juego

Gracias, dire. Ha sido un placer compartir contigo =) Espero que me tengas en cuenta para seguir siendo la gata, ¿eh? :P