Partida Rol por web

Desde el momento que cruzaron miradas han sentido algo el uno por el otro, es como si el destino hubiera conspirado para unir estas dos almas en una sola. De ahora en adelante el objetivo de uno será igual para el otro. Si llegase el indeseable momento de morir, la otra mitad no será capaz de resistir el dolor y morirá de pena.

-Esta sensación... hacía mucho que no la sentía. Sólo puede ser amor. Señorita RioTazi, yo... no sé cómo explicarlo, pero os amo con todo mi ser. Presiento que grandes peligros se ciernen sobre nuestro grupo y es por eso que ahora mismo sólo puedo confiar en vos.

Todo aquello carecía de sentido. Todo ese tiempo que había odiado el simple hecho de evitar una situación parecida, el encontrar pareja. Ahora que estaba delante de aquella persona y su corazón se aceleraba, pensó en lo ridículo que sonaba el querer evitar este sentimiento a toda costa.

-Calla. -Dijo Rio sin poder mirarlo a la cara. -Creo... que yo también, confiare en ti. -Le respondió mientras intentaba no verse estúpidamente sonrojada.

-Rio, tengo que contarte algo -dije, sabiendo que cualquier relación se basaba en la sinceridad-. Cuando llegué a estas ruinas, fui poseído por uno de esos espíritus del clan Yiga que ha mencionado ese goron. Nuestro deber es acabar con las vidas de todos los que se encuentran en las ruinas, salvo con las de mis compañeros, también poseídos por espíritus del clan. A la larga, ellos también intentarán matarte, pero no se lo consentiré. Solo dos personas deben salir vivas de este lugar y esas somos tú y yo.

-Cada noche, me convierto en una bestia y tengo la capacidad de asesinar a alguien. Esta noche, hemos elegido a Kered. Él forma parte de un grupo numeroso, llamado los expedicionistas, del que también formo parte, y somos un total de seis integrantes. Por ahora, he convencido a mis hermanos de clan para que nos centremos en debilitar a los distintos grupos. No tendrás nada que temer por las noches, nadie te atacará, y por el día solo tendremos que tratar de no parecer sospechosos.

-Te he revelado todo sobre mí. Ahora que estamos juntos en esto, necesito saber lo mismo sobre ti: habilidades, grupo del que formas parte, etc. Solo confiando el uno en el otro podremos salir con vida de este lugar, mi amor.

Aunque no lo pareciera pues la deba la espalda escucho todo con atención y se sorprendió al terminar este su historia. -Yo... no estoy con nadie mas. -Le confeso agachando la cabeza. -Siempre he estado sola. -Titubeo por un segundo sin estar segura de seguir hablando. -Eres la primera persona con la que hablo desde que llegamos aquí.

Se había jurado que nunca se dejaría contaminar con su hermana y ahora estaba dispuesta a morir por uno. Que ridículo.

-Ahora ya nunca más estarás sola -le aseguré, con dulzura-. Sobreviviremos a esto juntos o no lo haremos. Pero necesito saber algo, ¿tienes alguna habilidad que podría ayudarnos a facilidad nuestros objetivos? Quizá pociones, la habilidad de cazar por las noches, capacidad para obtener información... ¿Algo?

-Mmmmm... No. Solo protección para mi misma. Ya lo he dicho solo miro. Miraba por mi. -Se agarro el brazo al no poder sentirse útil. Era raro, la sensación, casi lo había olvidado, su hermana llevaba tanto tiempo fuera que ya se había acostumbrado a velar solo por ella, pero ahora ese Voe era una parte de Rio y ni siquiera entienda el por que.

-Bueno, algo es algo. Al menos cuentas con protección sobre ti misma -dije, pensativo-. Esta noche, mis compañeros y yo mataremos a Kered. Pensé que deberías saberlo. ¿Qué piensas de nuestros compañeros? ¿Hay alguno que te parezca peligroso?

Miro por primera vez al Voe.

-No se quienes son tus compañeros. Como evaluar el riesgo. -Hablo directa y sin titubeos, tal vez empezaba a acostumbrarse a su presencia.

-Mis compañeros son Malaqgoron y Weirton. De esos dos no tendrás que preocuparte mientras estemos aquí.  Nos ayudarán a reducir el número de inocentes, aunque tarde o temprano también tendremos que acabar con ellos.

-Amor mío, estoy centrando todas las sospechas de mis compañeros, tanto a los asesinos como a los expedicionistas, sobre Gorogure. A algunos les resulta sospechoso. Hoy votaré por él. ¿Cómo lo llevas tú? Podría ser útil que fueras a las ruinas para informarte sobre si los que están allí dicen alguna sospecha.