Partida Rol por web

Charlie les apuntó con la pistola pero al ver que eran sus compañeros se la volvió a guardar. "Me lo tenía que haber imaginado" pensó.

-Pues con mucho cuidado y en silencio. No me digan que han matado al chico de ahi arriba y han bajado aquí a seguir con lo suyo-preguntó con sorna, aunque se esperaba lo peor-Por favor guarden eso y no hagan ruido, sigamos investigando.

Cuando la puerta se abrió de golpe, Nigel reprimió un gritito que, imposible de ocultar, convirtió convenientemente en un leve sollozo.

- Qué susto... Jesús. ¿Qué... qué... qué hacíais ahí dentro? ¿Cómo que "sigamos investigando..."?

Por un momento, viendo a todos sus compañeros con las armas en la mano se vio tentado de extraer la suya a fin de estar en igualdad de condiciones. En el ambiente flotaba la sensación de peligro inminente pero, a pesar de ello, Nigel desistió acerca de la idea de llevar un revolver en la mano. Con lo nervioso que estaba, las posibilidades de caer o de simplemente accionar el gatillo accidentalmente y herir a alguno de sus compañeros o a él mismo, era inasumiblemente grande. 

Pues que estamos aquí para descubrir mas cosas sobre la Logia y sobre todo eso de dioses alienígenas y esas locuras que ponía en los libros que leímos. A menos que vosotros hayáis bajado para empezar a exterminar gente supongo que también querréis saber que está ocurriendo-de pronto se dio cuenta y bajo la voz- y por favor tratemos de hacer el menor ruido posible, si nos cogen aquí a todos nos echarán de la Logia...

Me molesto sobremanera la actitud de Charlie. Nos trataba como si estuviesemos locos...¡y no lo estabamos! pero procuré ignorar sus patéticos comentarios y su intento de burla y tratéde averiguar lo que habían descubierto.

-¿Han descubierto algo? ¿Que partes de la logía han examinado?

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Una vez pasado el shock inicial tras la lectura de aquellas obras Roy parecía normal...o casí normal. De todos modos eestaba claro que su actitud, relajada, distaba mucho del Roy que había estrellado un libro contra la pared al grito de "Quememos ese maldito edificio"

Charlie suspiro, en las palabras de Roy pudo darse cuenta de su error. Aquella situación le estresaba y no podía reprimir el contestar con ironía a los comentarios de aquellos que el dia anterior clamaban asesinatos en voz alta.

-Hemos llegado aquí y he forzado esa cerradura...no hemos podido investigar más-le respondió- será mejor que nos pongamos a ello cuanto antes, me pone nervioso pensar que nos pueden coger aquí abajo. Démonos prisa- tras decir eso se dio la vuelta y se metió en la habitación de la que había salido.

Nigel abrió los ojos de par en par ante la respuesta de Charlie... algo no estaba claro. ¿Acaso no estaban tratando de salir de aquella sala cerrada con candado? ¿Cómo habían llegado a él... acaso había otro camino?

De cualquier modo tampoco estaba muy centrado como para pensar de una manera clara y mínimamente coherente. Con los ojos como platos se encogió de hombros en un gesto compartido con Roy (quien estaba al parecer tan sorprendido como él mismo) y se metió de lleno en aquella salita detrás de Charlie.

Interrumpí mi búsqueda en cuanto escuché como se abría la puerta. Instintivamente apunté con el revólver, y estuve a punto de disparar, pero enseguida reconocí a Charlie. Me alivió comprobar que no me estaba volviendo loco y que no me había imaginado los ruidos, pero los comentarios de Charlie no me agradaron en absoluto.

- ¿Por quién me toma, señor O'Conaill? - dije visiblemente ofendido - Por supuesto que no hemos matado al tipo de la entrada, fíjese si hemos sido discretos que ustedes ni siquiera habían advertido nuestra presencia... En fin, será mejor que olvidemos este asunto y vayamos a lo que hemos venido ¿han encontrado algo?

Aunque ya había comprobado que eran ellos los que estaban al otro lado no guardé el revólver, me sentía mucho más seguro con él en la mano.

Tira Descubrir.

Pasas las manos por la rugosa pared, entonces casi sin darte cuenta, empujas una de las piedras y escuchas un clack! muy débil, tan débil que sólo tú puedes escucharlo.

De pronto escucháis un extraño sonido y véis claramente como en el interior de la tercera de las habitaciones, junto a la pared del fondo, una sección del suelo se hunde dejando a la vista varios escalones que descienden.

Mierda, ¿pero que me pasa hoy?

Chalie se giró asombrado y miró al lugar que se acababa de abrir. Allí abajo necesitarían luz... Miró al rededor suya buscando un farol o algo que sirviese para iluminar ahí abajo. No le gustaba ir dando señales de luz pero si no podían tener algún problema y eso de bajar a sótanos a oscuras no era una buena idea se mirase por donde se mirase.

- Esto si que es bueno - dije mientras contemplaba las escaleras que bajaban.

Estaba un poco excitado pues las sospechas iban cobrando sentido... no me refiero a todo aquello de los dioses extraterrestres, aunque inquietante bien podría ser una chufa, me refiero a las sospechas de algo oculto. Debe ser algo muy importante o no se habrían tomado tantas molestias, un sótano debajo de otro ¿qué demonios habrá ahí escondido?

- Bien, caballeros, veamos que se esconde bajo esta mansión - dije armándome de valor.

Encabecé el grupo y comencé a bajar las escaleras, alerta y con el revólver en la mano, por si acaso.

Una linterna... una linterna era algo inofensivo y estar agarrando algo le ayudaría a dejar de temblar ya que sus manos parecían las de un enfermo de parkinson. Nigel rebuscó con cautela en su maletín de doctor la linterna y comprobó que las pilas no estuviesen gastadas.

- Ve tú delante... - le dijo con cautela a Charlie. - Yo me encargaré de que no pises dónde no debes... ji ji ji. 

Por un momento se le pasó por la cabeza que sería buena idea dejar ha alguien ahí vigilando. Luego se dio cuenta de que era una tontería por mucho que les avisase los pillarían. Masculló algo que podía entenderse como la mezcla entre una maldición y un rezó y siguió detrás de Nigel, que movía el haz de luz de manera irritante, pero al menos veía por donde caminaba.

A medida que descendéis por las escaleras os dáis cuenta de dos cosas:

Hay iluminación ahí abajo, así que en el peor de los casos, no estaréis a oscuras.

Lo que demonios haya allí abajo no forma parte de la casa en el sentido estricto, pues el cemento, el suelo y demás deja paso a la roca desnuda y a la tierra. Estáis más que en un segundo nivel del sótano, en una gruta.

Al descender del todo y llegar al final de las escaleras, os dáis cuenta de que no es una gruta, sino un complejo de cavernas. Las paredes en el final de las escaleras son muy estrechas.

Más adelante a vuestra izquierda distinguís un saliente, hay otro saliente en la pared derecha más adelante aún , en frente de este saliente en el mismo punto de la pared izquierda hay otro saliente más.

Al fondo del pasillo mucho más lejos, se ve una gran caverna débilmente iluminada.

En complento silencio bajo las escaleras siguiendo a mis compañeros. Estoy francamente nervioso, pero no dejo que eso me afecte. Tenemos que descubrir que es lo que hay detras de la logia y, al menos ahora que estamos todos juntos podemos caminar sin pensar que vamos a disparar a un compañero.

Sería bueno saber como cerrar esto- comento buscando con la mirada alguna palanca que pueda hacer eso

Herbert se va recuperando poco a poco del los nervios pasados al comprobar que son sus compañeros los que se encontraban en el sotano. Al ver que todos los hombres estaban armados su corazón se volvió ha acelerar, pero por suerte nadie había disparado y todos se encontraban a salvo de momento. Tras los saludos, recriminaciones y demás susurros el resto del grupo escucha un crujido que les hace girarse, unas escaleras aparecen en el suelo.

Herbert nota en su cabeza los latidos del corazón como fuertes golpes, se pone muy nervioso y se aferra a su bastón mientras se apoya contra una pared. Que... que es lo que ha sucedido, como se ha derribado esa parte del suelo? Y los escalones a donde van? Es como un camino al infierno. Mientras sus compañeros deciden bajar, Herbert solo es capaz de tartamudear frases inconexas en un suave murmullo.

Antes de quedarse solo, Herbert decide colocarse el último del grupo, con mucho esfuerzo baja por esos escalones hechos de la misma piedra. La oscuridad no es como la esperaba y hay un leve resplandor que les acompaña mientras se integran más y más en la gruta.

Por fin tras pasar por varios estrechos pasillos, todo el mundo ve una apertura a una caverna de mayor tamaño y que además esta más iluminada.

Charlie, charlie, dice Herbert en un susurro. Charlie, creo que lo mejor sera que apagues la linterna de Nigel, no sabemos si alguién de la Logía tenía conocimiento de este subterraneo, pero de ser así es una posibilidad que haya alguien y creo que es mejor que no sepan que lo que hemos descubierto. Pero que demonios estoy pensando? Por supuesto que Smith sabría de la existencía de este subterráneo y alguién más. Cada vez estoy más seguro que esto puede ser una trampa que nos han tendido. Herbert se vuelve a encoger sobre si mismo, como si eso le valiera para protegerse y se pega a la pared.

Charlie se encogió de hombros pero se le dio un toquecito en el hombro a Niguel.

-Será mejor que apagues la linterna, no sabemos si hay alguien mas aqui abajo y no queremos que vean la luz y nos encuentren-le susurró tratando de  estar atento  los pasillos. Cuanto menos tiempo estuvieran allí mejor que mejor. Eso era algo que repetía en su cabeza una y otra vez-Será mejor que avancemos, con cuidado-dijo señalando hacia delante, a la zona iluminada mas allá.