Partida Rol por web

Mañana del día 22 del octavo mes del mes del año 298 en Puerto Gaviota.

Alrededor vuestro, aunque separados unos metros, se reúnen algunos curiosos. También los hay en los barcos cercanos, aunque después del sequito del nuevo Señor del Valle el vuestro es muy pequeño los Lores siguen despertando expectación. Desde algunas ventanas de las casas más próximas os saludan chicas que han debido acabar de despertarse y dormían sin camisa ya que muestran sus pechos.

La cara de Lady Selyse evidencia de que no le gusta el recibimiento de las jóvenes y está hablando enérgicamente con sus hijos mientras la pequeña Catelyn se os aproxima un poco asustada señalando una ventana y os susurra. – Que ocurre, no entiendo porque mi señora madre riñe a mis hermanos. – Gira un instante para observar a su madre. – Si le pregunto a ella seguramente también me reñira por mirar a esas jóvenes que han olvidado el vestido en la prisa por vernos.

El único hombre de la comitiva que no es un soldado, una vez calcula que Lord Kevan Falcon y sus familiares o principales acompañantes ya están en el muelle toma la palabra.

– Bienvenido a Puerto Gaviota, Lord Kevan, usted su familia y su sequito. Soy Branden, el mayordomo de Lord Gerold Grafton, os escoltara hasta el castillo Nicholas el Capitán de la Guardia de la Casa Grafton. – Señala al oficial que lo acompaña antes de aproximarse para saludar personalmente al Lord y su familia.

Mañana del día 22 del octavo mes del mes del año 298 en Puerto Gaviota.

Lord Kevan permanece en silencio sin hablar como si hubiera esperado que acudiera el mismo Ser Gerold Grafton y no ha sido así. Ni se molesta a responder al mayordomo de su señor. Por su parte Lady Selyse esta ofendida por la bienvenida de aquellas descarriadas y mas aun cuando parece que nadie mas de sus acompañantes parecen ofendidos.

Mientras Roland se adelanta despacio para hablar en nombre de su Casa, después de un largo silencio en los muelles. Zane se agacha para intentar contestar a su hermana pequeña. Sabe que repetirá insistentemente la pregunta hasta obtener una respuesta. – No pasa nada Catelyn, debían estar durmiendo y se han quitado la camisa de dormir, pero no les ha dado tiempo ponerse sus vestidos. – Catelyn se la queda mirando con una cara nada convencida, pero al ver la expresión furiosa de su madre prefiere no ser ella quien acabe pagándolo y se acerca a sus primos Ferragut sabiendo que a su madre no le acaba de gustar acercarse a la gatasombra de Joana.

Finalmente, Roland acaba de decidirse y responde a la bienvenida de la Casa Grafton. – En nombre de la Casa Falcon os agradezco la bienvenida, soy Roland Falcon. Os acompañaremos gustosamente a los aposentos que nos habéis acondicionado.

Media mañana del día 22 del octavo mes del mes del año 298 en Puerto Gaviota.

Branden asiente ante las palabras de Roland, un tanto extrañado de que haya hablado en el lugar de su padre, aunque intenta que no se refleje en su actitud.

Por su parte Nicholas, el Capitán de la Guardia, es mas practico y imparte las órdenes para distribuir sus hombres abriendo y cerrando la comitiva. Vuestros comandantes no tienen problemas para coordinarse con ellos.

De un callejón salen unos mozos de cuadra con unos corceles para los miembros de la familia Falcon y sus principales servidores.

Después de recorrer Puerto Gaviota llegáis al castillo que está situado en una pequeña elevación a muy poca distancia de la muralla que protege la ciudad. Nada mas entráis en el patio otros mozos de cuadra se hacen cargo de las monturas mientras el mayordomo vuelve a dirigirse a vosotros.

– La comida se servirá al mediodía, mi señor Lord Gerold Grafton espera que asistáis a ella. Los sirvientes os acompañaran a los aposentos que hemos destinado a vuestra casa, si necesitáis alguna cosa solamente debéis solicitársela a alguno de ellos.

Media mañana del día 22 del octavo mes del mes del año 298 en Puerto Gaviota.

Nada mas acaba de hablar Branden y marcha se coloca en el mismo sitio una doncella acompañada de varios jóvenes, seguramente contratados para servir a los numerosos invitados.

Realiza una reverencia antes de comenzar a hablar. – Mis señores, tendrán que disculpar las habitaciones, todos los aposentos han sido reservados para los diversos Lords que han acudido a la convocatoria de Milord Gerold Grafton, si me acompañan.

Os guía hacía una de las torres que como todas cuentan con soldados de la Casa Grafton apostados en sus puertas. Una vez en ella os va alojando en las diversas habitaciones en que está dividida. Cuando abre cada una de las puertas, que están ajustadas, aunque pueden asegurarse por dentro, aguarda a que las vayáis ocupando en el orden que deseéis y que también decidáis si sois uno o mas de uno en ellas.

Intenta disimular, pero no deja de echar nerviosas miradas a Sharra intentando que estéis varios entre ella y la gatasombra.

Media mañana del día 22 del octavo mes del mes del año 298 en Puerto Gaviota.

Aunque intentaste permanecer al lado de Lord Kevan Falcon este rehusó cuando os separaron para indicados donde estarían vuestras habitaciones.

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Tu hermana Joana no te da opción cogiéndote del brazo he introduciéndote en una de las habitaciones junto a Sharra para el alivio evidente de la doncella que os guía y sus ayudantes.

Antes de que marchen les pide una cosa. – Necesitaría un bol de agua para la gatita. – Las expresiones de sus rostros evidencian que ellos no la consideran así.

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Mientras es vais repartiendo Sharra susurra en tu oído. – Que deseáis que me instale en una habitación al lado, o las dos juntas. – Notas el tono de duda en su voz ya que será su primera ocasión para ejercer de dama de compañía y en Highcrow no hay actualmente.

miro  a mi hermana con complicidad y asiento. observo tanto su reacción como la de Sharra.

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Vanesha negó con discreción y disimulo levemente. Su gesto mostraba desconocimiento.

—No lo sé.— Susurró. —Ni tú has sido dama de compañía, ni yo tenido una— En ese aspecto ambas eran novicias y Vanesha tampoco sabía si su posición y cuna eran suficientes para que Sharra ocupase un aposento que no fuese destinado al servicio, o si lo frecuente era que la dama de compañía compartiese aposentos en los viajes. 

—¿Probamos una habitación contigua?— Propuso con duda, pero divertida. Arrojo no le faltaba. 

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La sirviente asiente con una pequeña inclinación saliendo algo demasiado rápido de la habitación sin dejar de vigilar a Sharra, además de cerrar la puerta detrás de ella.

Joana se pone a mirar por la ventana quedando un poco decepcionada ya que esperaba unas vistas del puerto, o por lo menos del mar. No ha tenido suerte y ve las colinas que rodean la ciudad.

– Creía que veríamos el mar.

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Ves como Sharra se tranquiliza visible y rápidamente se amolda a su papel.

Habla con la sirviente que os guía. – Mi señora desea que me instale en una habitación contigua a la suya para que pueda atenderla. – Esta se limita a asentir haciéndole una pequeña inclinación a Sharra que le hacen brillar los ojos de alegría.

Ella directamente os indica dos contiguas y además entra dentro enseñándoos que disponéis de una puerta que las comunica, pero que podéis cerrar desde cualquiera de las habitaciones.

No te preocupes, tendremos tiempo de verlo, incluso de un chapuzón rápido.

Media mañana del día 22 del octavo mes del mes del año 298 en Puerto Gaviota Alia observó con detenimiento todo como siempre. Lord Kevan estaba ocupado, no era buen momento para acercarse y proponerle nada, más adelante hablaría con él y/o con su mujer sobre la educación de Catelyn. Una vez en la Torre, no sabía si dormir sola o acompañada, tenía en mente conocer mejor a Vanesha. Así que para salir de dudas se acercó a ella y le preguntó ¿Quieres que compartamos habitación? fue directa y poco sutil, ella utilizaba sus técnicas en combate y no en las relaciones sociales y menos para algo como aquello.

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Bueno hermanita que te apetece hacer? exploramos el lugar o vamos a la playa, a que veas el mar?

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Vanesha dio un pequeño respingo ante la pregunta directa de la que un día podía llegar a ser su madrastra. Se quedó un instante en silencio, con los ojos muy abiertos. Instintivamente, se había llevado la mano al pecho. Sin duda la habían cogido con la guardia baja y eso pudo notarse en su gesto de sorpresa. Titubeó un breve espacio de tiempo antes de que su respuesta afirmativa, surgiese.

—Shhhhsí, claro.— Asintió. Miró entonces hacia el interior de la estancia que justo antes la doncella le había asignado. —Aquí nos podemos apañar perfectamente las dos juntas, creo yo. No he traído tampoco muchos vestidos.— Sonrió.

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Joana se deja caer larga en el lecho e inmediatamente Sharra salta a su lado lamiéndole la cara. Pasan unos minutos jugando las dos. Acabando tu hermana, como siempre, con el vestido completamente arrugado y despeinada.

Tras recuperar el aliento se incorpora sin dejar de acariciar a su gatasombra. – La comida es de aquí poco y no nos daría tiempo. No podemos dejar de asistir a la comida, recuerda que representamos a nuestra Casa, esta vez no han venido nuestros abuelos, ni siquiera nuestros padres.

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Bien, entonces quizá mas tarde. Iré a buscar un poco de agua, para por lo menos quitarnos el polvo del camino antes de la comida.

Salgo de la habitación y busco un sirviente que me indique donde hay un pozo.

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salgo de la habitación y busco a un sirviente para que llene una bañera para poder asearnos.

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Sales de la torre y en el patio de seguida ves diversos sirvientes caminando de un lado a otro. Detienes a uno de los que no llevan ninguna carga encima encargándole que os traigan una bañera, agua caliente y sales de baño. Este te garantiza que inmediatamente le transmitirá tus ordenes al mayordomo, el señor Branden.

Media mañana del día 22 del octavo mes del mes del año 298 en Puerto Gaviota.

regreso a la habitación y preparo ropa limpia para asistir a comida.