Partida Rol por web

Muy buena historia, ya me imagino las canas verdes que le sacaron al bueno de Cedric xD. 

Propongo que sea en el segundo año del viaje el momento en que pasamos por Braavos y conocemos a Alia. Así ella podrá estar junto a nosotros en el tercer año. 

Alia si quieres puedes hacer la parte de la historia de lo que le ocurrió a tu padre y como te encontraste con nosotros y yo la sigo en ese punto desde la perspectiva de Cedric. 

Además en el último año sería interesante para que todos hayamos tenido protagonismo que el personaje principal de lo que pase sea Zane. Así quedaría así: 

Primer año en Meereen: Roland y Brazh son los protagonistas de aquél acto heróico y se ganan el odio de un importante enemigo aunque también la lealtad de un grupo de guerreros. 

Segundo año en Braavos: El grupo conoce a Alia, Cedric no sólo queda cautivado por la valentía y belleza de la mujer, sino que también jura ayudarla a lograr su venganza. Juntos consiguen hacer justicia y ella jura lealtad. Desde ese momento Alia acompaña al grupo. 

Tercer año: Por definir. 

Hay un pequeño inconveniente. RL viaje estaba pensado como un año viajando por las ciudades libres y las tierras de más allá del mar Angosto, y luego otro viaje de dos años por los siete reinos.

No hay problema, entonces pasamos al primer año lo de Alía, después de lo acontecido en Meereen ;) Y quedan libres los dos años de viaje por los siete reinos.

Desde el día que mataron a mi padre juré vengarlo. Él era de poniente, más concretamente un vasallo de la casa Arryn y todo apunta a que alguien de poniente lo asesinó. Con mi entrenamiento me convertí en una maestra del baile del agua creyendo que algún día me serviría para vengarme. Entonces un hermoso día en Braavos recibí la noticia de que un grupo de Poniente recién llegado de Meereen había llegado a mi ciudad. Tras una conversación con el grupo descubrí que además eran del Valle, de donde eran las tierras de mi padre. Cedric se mostró muy atento y me hizo sospechar que le gusté, por lo que esperé a que todos se fueran a dormir y hablé en privado con él, le conté lo del asesino de mi padre y que algún día quería vengarlo y mi intención de ir a poniente a buscarlo si hacía falta. Me sorprendió su reacción, propia de alguien con altos ideales, me empezó a gustar este Cedric que además era el maestro de armas de su casa. Así que decidí acompañarlos y ellos me aceptaron tras contarle a todos mi objetivo. Quizá con el tiempo surgiera el amor entre Cedric y ella pero antes tenía que vengarse, no podía distraerse. Durante el tiempo que se conocieron estrechó lazos de amistad con todos y entrenaba con Cedric aprendiendo mutuamente cada uno del otro la distinta forma de luchar de cada uno.

Alia el director me dijo que preguntabas por la edad de los personajes al empezar el viaje. En el caso de Zane él empezó con 8 años y lo acabó con 11, así que él y Alia se conocieron cuando tenía entre 8 o 9 años. Aún era un crío, vaya.

Ok, gracias Zane

Alia, voy a molestarte un poco, pero a ver que te parece la idea.

Hace unos días mientras estaba con la creación de la ficha de Zane me puse a pensar en que estilo de lucha quería centrarlo. Siendo caballero lo normal sería ir a espada larga y un escudo, pero como me encanta romper los esquemas e ir en contra de todo pensé que en su lugar podría ir a espada corta y una daga de parada. La primera idea que me pasó por la cabeza fue una espada braavosi en lugar de una corta, pero como era considerada como un arma de "criminales" sentí que lo mejor sería tirar de otro tipo de espada. Así que pensé, si Cedric no pudiera ayudarme a mejorar el manejo de estas armas, ¿qué clase de super compañera danzarina del agua podría ayudarme? xD

Así que quería que entre los dos decidiéramos la relación entre nuestros personajes. Lo que tenía pensado era que Zane te tuviera un poco de respeto, casi miedo, al principio. Que te tuviera algo como desconfianza al no conocerte y ser la nueva, una actitud quizá bastante normal para un crío de 8 años. Pero que después de verte esgrimir una espada pasara a admirarte, alegando que era genial que una mujer peleara tan bien y de tan forma elegante, ya que sería de las primeras veces que vería a una mujer guerrera y la danza del agua. Supongo que esa ocasión se podría dar cuando nosotros —o más bien Cedric y Roland— te ayudamos con el asunto de tu padre. A partir de ahí él se interesaría mucho más por ti y tu estilo de lucha, incluso te pediría consejo a ti también para que le ayudaras en sus entrenamientos, ya que él se sentía mucho más cómodo danzando por el campo de batalla valiéndose de su velocidad y agilidad para asestar golpes a su oponente que depender de la fuerza con un arma más pesada que dependiera en mayor medida de la fuerza bruta.

Así que básicamente la cosa se resumiría en algo como que Zane al principio se alejaba un poco de ti, te vio luchar y empezó a admirarte. Junto a las enseñanzas de Cedric también empezó a pedirte consejo a ti para que le instruyeras y poco a poco Zane iría desarrollando un estilo de lucha basado en gran medida en de los braavosis. ¿Qué te parece? XD

Lo primero no es molestia. Al contrario, Alia encantada de enseñar el baile del agua al hijo pequeño de Lord Kevan.

Ahí va la primera enseñanza:

Lo primero que debes saber es que no terminé mi formación como danzarina del agua, aunque sí aprendí mucho de lo que sé de este estilo de lucha. Eso sí, para aprender mi forma particular de combatir tendrás que empezar a saber defenderte mejor que nadie pues mi forma de luchar radica en que el adversario no me dé. Para ello deberás ser más ágil que un gato, tendrás que aprender a hacer acrobacias, empezarás por tirarte desde una altura de dos metros y caer sin hacerte daño. Cuando sepas bien hacer eso pasaremos al siguiente nivel.

— ¡No importa! — Justificó el pequeño Zane rápidamente, en su rostro marcado por una quemadura brillaron dos ojos emocionados, aunque por un momento sintió como si aquello fuera una mentira. Si con su formación a medias ya era así de buena, ¿cómo sería si las hubiera terminado del todo?

Atendió al resto de su primera lección y era justo lo que podía esperarse. Más ágil que un gato era poco para Alia, a quien había visto danzar con abundantes acrobacias no solo para evitar ser alcanzada, sino también para ser ella quien alcanzara a su oponente. — De acuerdo, lo haré. — Afirmó convencido.

Tras aquello fue a parar a una de las calles de la ciudad, donde unas escaleras conducían a un desnivel de unos tres metros de altura, aunque estaba claro que él las escaleras no las iba a necesitar. Así que como ya había encontrado un buen lugar para iniciar su primer entrenamiento se alejó unos cuantos metros de la altura, tomó carrerilla y cuando estuvo lo suficientemente cerca como para ver la caída saltó sin miedo, moviendo los brazos torpemente para recorrer mayor distancia. Tocó el suelo con los pies, tropezó, rodó e increíblemente había conseguido saltar esa altura sin hacerse daño alguno. Sorprendido por su hazaña se alzó sobre sus dos piernas y repitió el salto una y otra vez, asegurándose de que aquello en vez de un golpe de suerte pasara a ser práctica y habilidad.

Alia miró asombrada como Zane realizaba aquellas acrobacias, sin duda el chico tenía potencial, algo más de entrenamiento y se convertiría en un maestro de la disciplina. Cuando Zane llevaba varios días practicando, empezó a hacerlo tirándose de 4 metros de altura con soltura fue entonces cuando decidió Alia que Zane debía pasar a la segunda fase del entrenamiento. Bien ahora que ya sabes hacer mejor las acrobacias y caer como un gato pasemos al siguiente nivel, debes aplicar esos conocimientos que has adquirido al combate fíjate bien entonces Alia le mostró su habilidad más recurrente en el combate, la defensa acrobática, empezó a dar volteretas alrededor de él para mostrarle como tenía que hacerlo. Fíjate en los movimientos, en como piso, en como doy la vuelta sin perder de vista al oponente; tienes que hacer que tu oponente no sepa donde vas a caer ni cual va a ser tu próxima pirueta decía Alia entre salto y salto. Alia cogió un palo Venga ahora tú, cada fallo que cometas te lo corregiré con esto dijo enseñándole el palo que acababa de coger.

Aplicar los conocimientos al combate, ¡sonaba genial! Estaba preparado y entusiasmado para su siguiente lección, ansiaba ver que caras ponían tanto Cedric como su hermano Roland al ver la paliza que les daba con los movimientos que Alia le iba a enseñar. O al menos como evadía todos sus golpes con vertiginosas acrobacias.

— ¡Vale, lo he entendido! — Sujetó con fuerza su espada corta de madera y adoptó una postura para nada parecida a la de su tutora. Si bien ella se colocaba elegantemente mostrando solo un lado de su cuerpo, Zane flexionó sus rodilla y se mantuvo de cara exponiendo todo su cuerpo, pasando de lo que debía ser una postura elegante y ligera a una vulgar y pesada, casi como lo haría un criminal.

— Espera, así no er... ¡Ayayayay! — Gimió con gracia cubriéndose ahí donde Alia le había golpeado. — Vale, vale, vale. — Enderezó la espalda e imitó la postura que cualquier danzarín del agua adoptaría, aunque en su caso era rígida, poco flexible. Trató de danzar como ella lo haría pero sus movimientos eran torpes, predecibles y carecían de gracia alguna.

Durante días y días entrenó sus movimientos mientras allí donde Alia golpeaba solían aparecer moretones —por supuesto que no le gustaba ser golpeado, pero él lo agradecía porque así aprendía y recordaba que había hecho mal—, poco a poco sus movimientos se volvían gráciles y ligeros, si bien aún era predecible para un rival experimentado como sus tutores, al menos cumplía uno de los objetivos del entrenamiento; evitar cualquier golpe, incluso alguno de los que Alia le daba para aleccionarle, aunque eso solo le hacía recibir uno más de vuelta.

Alia miraba orgullosa los avances de Zane, poco a poco iba aprendiendo la técnica. 

Bien Zane, pasemos a lo siguiente, el manejo de la espada corta y la daga de parada. Pues la danza del agua es un estilo de combate y como tal lo que pretende es derrotar al enemigo, y no sólo con esquivar los golpes se vence. Le dió una espada corta de madera y una daga de parada Estas son un armas de esgrimistas en el que priman la gracia con que las manejes más que la fuerza que tengas. Pregúntate algo ¿qué es mejor? ¿maña o fuerza? en eso radica el manejo de la esgrima. Es mejor atacar a un punto débil que asestar un fuerte golpe. Alia se puso en posición defensiva con su espada corta de madera y su daga de parada Y recuerda defenderte mientras atacas o... y le señalo mi espada de madera ya sabes aprende sin olvidar lo aprendido.

En su siguiente lección Zane calló y prestó atención. Alia le comentaba que la danza del agua era un estilo de combate y, que como tal, su intención no era solo esquivar los golpes, sino también acabar con el oponente. También le ofreció una espada de madera y una daga de parada, armas con las que ya estaba familiarizado gracias a otras enseñanzas de parte de su maestro de armas Cedric o de haberlas visto en otras ocasiones en manos de Alia o de otro espadachín. Ante el planteamiento que la mujer le ofrecía quiso responder "¡Ambas son importantes!" pero en su lugar decidió mantener la boca cerrada y pensar. Estaba claro que si le hacía aquel planteamiento era por algo, y así era, en la danza del agua no debía dominar la fuerza, en su lugar había que utilizar tanto la vista como la cabeza para localizar puntos débiles en el adversario, tal y como podría ser una abertura entre los pliegues de la armadura donde solo habría cuero.

— De acuerdo. — Asintió, irguió la espalda posicionando su cuerpo en lateral y alzó la espada enfrente suya. Ya preparado para el enfrentamiento flexionó sus rodillas para desplazarse lateralmente hacía la derecha en una elegante pirueta y luego asestó una estocada.

Alia, en esta ocasión, no utilizó defensa acrobática y esperó a que Zane actuara primero e intentó esquivar el ataque. Una vez más el chico le sorprendió. El ataque que hizo bien podría ser el de cualquier maestro de esgrima, pero no se lo dijo o podría mermar su entrenamiento al confiarse, lejos de decírselo le corrigió.

Bien Zane, has atacado bien; sin embargo, ¿sabes que hay distintas formas de atacar? Puedes atacar a la defensiva, yo lo llamo ataque cauteloso, perjudica el ataque pero beneficia tu defensa. Fíjate

Después le enseñó los otros tipos de ataque que conocía y continuó a enseñarle parte de las enseñanzas de danzarín del agua.

¿Dime Zane de que le sirve a uno ser un gran guerrero si no ve, si no oye, si no huele? Te pongo un ejemplo, imagina el mejor guerrero luchando ¿qué pasaría si alguien que sepa manejar las armas le ataca por detrás sin que se dé cuenta? Por ello la danza del agua hace a sus "bailarines" perceptivos, los entrena para que vean más allá que cualquier otro y en cualquier situación. Así que a partir de ahora siempre tienes que estar alerta fijarte en los mínimos detalles como por ejemplo donde se dirigen los ojos de con quien estás, qué ropa llevan, qué armas... en definitiva que nadie te sorprenda.

Ah, se me olvidaba cuando cojas el arma mejor así y le corrijo la postura un poco.

Lo que interpreto, puede que no sea correcto, es que el +1 es a las armas de esgrima sean una o dos. Si empuñas dos entonces ganas un +1 a cada uno de ellas.

Cierto

Al oír la enhorabuena de Alia por el golpe realizado una deslumbrante sonrisa llenó el rostro de Zane, dejando en segundo plano la horrible cicatriz que cubría su mejilla. Pese a todo, como aprendiz que era, aún tenía mucho por aprender en cuanto a los tipos de ataque.

— ¿Ataque cauteloso? — Pareció no comprender a qué se refería, pero al recordar como había inclinado el cuerpo y alargado el brazo para asestar la estocada creyó entender a qué se refería. — Creo que me hago una idea. — Miró la espada de madera, luego a Alia y asintió. También observó los movimientos que había realizado a modo de ejemplo y ahora ya no tenía duda alguna, o al menos en la teoría.

También atendió a la lección de ser perceptivo en el combate, entendió cual era el propósito de prestar atención a los movimientos, las miradas, las armas y todo tipo de información que pudiera percibir de su oponente. Y a pesar de que lo había entendido todo muy bien a la hora de la práctica le iba a costar horrores tener en cuanta todo a la vez. — Entendido. — Volvió a erguir su espalda, se dejó corregir por Alia —de nuevo Zane había expuesto su cuerpo con una posición más frontal que lateral— y flexionó sus rodillas preparado para danzar. — Voy.

Tal y como advirtió se desplazó con una media pirueta junto a Alia, esta vez se acercó un poco más para no tener que exponerse tanto como antes al realizar una estocada, trató de observar su mirada, la posición de los pies, percibir algún posible movimiento en las manos y una vez atacó trató de retroceder, tropezó y cayó al suelo. — ¡Ay! — Dijo sin tiempo a soltar la espada y la daga para aminorar la caída, rodando en su lugar. Había puesto tanta atención en los gestos de Alia que se había olvidado de atender a los suyos. Si bien ya tenía la teoría, ahora solo le fataba la práctica, mucha práctica.

Las fechas me parecen bien. Me habría embarcado con vosotros siendo un Maestre apenas nombrado y casi nada más llegar me habrían mandado como apoyo diplomático en los viajes.

Mis consejos siempre intentaron mantener las distancias de los enfretamientos. Tengo sentimientos encontrados con vuestro gusto por la acción, ya que aunque valoro vuestro sentido del deber y el honor, se me encargó hacer lo posible por manteneros de una pieza (tarea que me vino grande teniendo en cuenta que contaba con 17 años al empezar el viaje).

Sin embargo, aunque al principio me veíais como simplemente un pusilánime, pronto os hicieron falta mis habilidades para comunicarme con los nativos y mercaderes a nuestro paso. Alguna vez incluso nos habría alejado del peligro sin mostrarlo demasiado.

Había pensado en alguna escena del tipo:

- Mercader (hablando en común): el precio por este tapiz es de diez venados de oro, puede ver claramente la bella manufactura - (pasando a hablar en valyrio con su ayudante) - vamos a desplumar a estos bárbaros de poniente, esto no vale más de tres monedas.

- Stuart (hablando en valyrio con una sonrisa): si no quieres que le diga a mi señor que intentabas timarlo, mejor será que nos dejes los tapices a un precio justo, y añade un buen vino por las molestias - (volviendo a hablar en común) - Bueno, es cierto que son de gran artesanía, pero bien sabe que mi señor sólo pagará un precio justo por sus mercancías, buen mercader.

- Mercader (hablando en común): ruego me disculpe, no sabía que nos encontrábamos ante alguien capaz de discernir tan bien el arte local. Acepte esta botella como regalo - el mercarder masculla maldiciones en valyrio, imposibles de traducir, manteniendo la sonrisa todo el tiempo.

Además, chapurreo algo de braavosi y estoy dispuesto a practicar con Alia tanto como quiera.

Aunque soy un poco escuálido, soy un buen nadador, así que podríamos tener alguna historia de alguna broma que me hubieran gastado mientras paseábamos en barca o algo por el estilo.

A raiz del incidente con Khaaris fui comprando antídotos con bastante frecuencia y era palpable como mi humor se iba haciendo más sombrío. La vuelta a poniente me ha relajado de nuevo un poco, y vuelvo a ser alguien con quien se puede bromear, como era al principio del viaje.