Partida Rol por web

- Da igual, Leonor. Los está espiando y hay magia de por medio, y son los Primi. Si la cuestión se juzga, ¿crees que alguien no votaría su postura? - traté de resumirle sin entrar en precedentes ni detalles técnicos y poniendo el acento en la cuestión política que impera subyacente en la justicia Hermética - Claro que me interesa lo que estén hablando, pero no quiero que le pase nada malo a Feromina ni a su aprendiz... y más aún, al saberlo nosotros y no detenerla ni delatarla nos podrían acusar de cómplices... - miré de nuevo a Feromina - Por favor, Feromina, dile que regrese...

Feromina hace un ademan con la mano mientras sigue comiendo.

- Tranquila, no es como si lo hubiera transformado explicitamente para esto. Lleva asi dias y bueno, no es como si ellos se estuvieran ocultando, simplemente mi aprendiz estaba andando por ahi, como dice Leonor, por un espacio publico y se enteró de la conversación.

Entiende las reticencias de Aysha, pero no cree que sea para tanto.

-El problema vendrá si te ven tan alterada con eso. Entonces sospecharán que esto ha sido premeditado y es lo que causará problemas a Feromina y a su aprendiz... y a todos nosotros.

La mira de reojo.

-Relájate.

─Sólo será delito si se enteran. Además, si no pueden "defenderse" de algo tan inocente como eso, no merecen el cargo de primus ─sentenció el grandullón.

A veces costaba hacerse a la idea de que aquel enorme guerrero era en realidad un mago filius de una poderosa y artera maga de Doissetep, cuna de intrigas y redes de influencias que extendían su poder hasta los confines más alejados de Europa. Puede que Magnus hubiera resultado alguien noble, o cuanto menos amigo de sus amigos, pero no por ello podía dejar atrás todo su bagaje.

Y yo pensaba que era su familiar, qué tonto soy.

Quizás en otra ocasión Angelus habría juzgado que el riesgo era demasiado. Desconocía las medidas exactas que se aplicaban a los magos que infringían esta parte del Código pero de seguro eran severas. Hoy, sin embargo, y tras haber escuchado las palabras de los Primi, su curiosidad era demasiada. El riesgo era algo que podía manejar.

—Graciaspor tuayuda, Feromina —dijo mientras toma la mano de Aysha, en un intento por tranquilizarla—. Tengouna corazonada. Porfavor, confíaen mí... yen Feromina.

En realidad, si las cosas se torcían, estaba dispuesto a confesar que él había sido el instigador. Fermina quedaría involucrada, sí, pero los demás tendrían una salvaguarda. Asumiría las consecuencias. No volvería a ser un lastre para el grupo.

Suspiro ante el comentario de Leonor. Siempre tan obstinada.
Niego al comentario de Magnus.
-Precisamente porque son Primi dudo que no se den cuenta de la intromision, y precisamente porque son Primi imagino que lo usaran de ejemplo para quitarle semejantes ideas a otros magi en el futuro. - aclaro con la voz de la razón dado que todos parecen querer comportarse como chiquillos traviesos incapaces de medir las consecuencias de sus actos.
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Me pongo en pie cuando noto la mano de Angelus en la mano. Le sonrío y le acaricio la cara dulcemente.
-Confío en ti, pero estas no son las formas adecuadas. Voy a hacerlo a mi modo. Sin magia. - le sonrío antes de aclarar al final - Hablando.
Me despido de ellos alejándome para unirme a la conversación con otros magi en otro lugar de la sala.

Veis como Aysha se marcha y tras unos momentos de silencio se oye el claqueteo de unas pisadas diminutas acercarse. De un salto la hurraca/filius de Feromina aparece en su hombro y comienza a graznarle por lo bajo.

- Oh... entiendo... hum... ya veo...

Va diciendo conforme esta habla. Cuando parece que ha terminado se rasca un ala con el pico, luego de un rapido picotazo toma algo de la carne del plato de Feromina y se aleja volando. Esta se rie y os mira.

- Parece que los Primi no estan muy de acuerdo entre ellos sobre como abordar este asunto. Aunque bueno, era algo que se podia notar. Por lo visto hay algunos que piensan que simplemente habria que encabezar una marcha de magos y cargar contra ellos ahora que son pocos, a la cabeza de estos esta Robert, claro, pero luego Augustus y otros piensan que habría que estudiarlos, pues nunca se habia visto una interferencia como esta en los pilares de la magia -suspira tomando aire- hay una tercera opinion, que deberiamos simplemente blindarnos y esperar, esta la ha dado el Primus Ex-miscelanea, pero no parece tener mucha aceptación.

Cuando te levantas y vas a hablar con otros magi no sabes muy bien a quien ir a preguntar. Tienes 3 opciones que te llaman la atención. Un magus rodeado de unos cuantos con cara de preocupación. Este tendra unos 30 años, puedes ver que porta una espada en el cinto, lo que casi casi te asegura su pertenencia a la casa Flambeau, una barba bien perfilada y su piel es de color moreno, no como la tuya que es de nacimiento, si no que la suya se nota que es de haber estado bajo el sol.

En otro lado hay otro grupo, este es una gran mesa redonda donde puedes ver a muchos magi tratando de dar su opinion, aunque parece que esta liderado por una joven rubia de piel blanca como la nieve y unos ojos azules casi irreales, esta parece estar haciendo de mediadora y la gente parece respetarla. Cuando te fijas mejor ves que debe ser una magi de tu linaje pues unas orejas picudas coronan su cabeza.

En ultimo lugar te llama la atención la anciana-arbol quien pese a las noticias y el revuelo de su alrededor parece encontrarse en un estado de paz interior inmensa. Puedes verla sorber su sopa con la tranquilidad de a quien le anuncian que mañana llovera.

Rapidamente decido que la anciana-arbol podrá ser abordada más adelante; tendrá la paciencia de un árbil y la conversación con ella será igual de lenta que con las plantas.
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La maga-fae también será fácilmente abordable despues y probablemente logre que me haga un resumen de la discusión.
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Me acercó hasta el presunto Flambeau, poniendome a su lado tranquilamente, como si mi presencia allí fuera lo más natural del mundo.
-Graves noticias... - digo con tono grave y preocupado para iniciar la conversación.

El magus te mira y asiente.

- ¿Veis? ¿Veis todos? ¡Debemos prepararnos! ¡Debemos luchar! -algunos magos asienten dando un golpe en la mesa, otros, los muchos, simplemente o niegan con la cabeza o miran con escepticismo a sus sodales- Lo que ha mantenido fuerte a la Orden es su hegemonia magica en Europa. Por ello, yo, Rodrigo Manuel de Araujo os llamo, sodales, a una cruzada, una marcha de magos contra estos enemigos.

─Me parece lo más razonable y no es porque sea mi Primus ─opinó Magnus en referencia a la opción de blindarse y esperar.

Si bien es cierto que en la guerra es importante llevar la iniciativa, cuando no sabes a lo que te enfrentas es más fácil estamparse contra unas defensas bien dispuestas que errar en la forma de defenderte. Los defensores, a nada que estén bien preparados, siempre tienen superioridad y hacen falta muchos más atacantes que defensores en cualquier ataque a una posición bien defendida.

Claro que estábamos hablando de magia ─o su ausencia─ y las cosas con ella son siempre mucho más volátiles, pero aún así, a Magnus le parecía la mejor opción.

─¿Y han mencionado en que lugares los han avistado?

Esperaba que la respuesta fuera "sí". La localización de aquellos sujetos era de vital importancia a la hora de como afrontar su llegada. Si estaban repartidos por toda Europa, como la propia Orden, lidiar con ellos sería complicado, quizás peligroso, y a la larga, plagado de enfrentamientos. 

No dio su opinión, nadie se la había pedido, pero opinaba como Augustus. Todo fenómeno del mundo debía ser estudiado, categorizado y comprendido lo mejor posible. Esa era la base para mejorar cualquier conocimiento. Además su propia curiosidad le impulsaba a querer verlos. Se preguntaba si todos desprenderían aquella "aura" que había absorbido su magia. 

Se apoya en la mano mientras mueve un poco la comida. La información revelada por el pequeño espía plumoso es bastante útil aunque si saliese de ahí, haría que la Orden se viese debilitada y dividida. Eso haría que esa Orden de la Razón intentase algo contra ellos. Todo es posible. 

-No podemos hacer nada ahora. El momento llegará. Y no es algo que la Orden pueda enfrentar sola, ¿no creéis? Al fin y al cabo, no solo nos afecta a nosotros. Deberíamos prepararnos para lo peor. 

Se acaba por comer lo que tiene en el plato y se mantiene callada.

Mientras terminaba con el plato de sopa, pues al parecer la noticia no le había quitado el apetito ni mucho menos, Mía mira a los presentes (deteniéndose algo más de lo debido en Angelus, aunque con un gesto totalmente inescrutable), y finalmente indica:

- No entiendo el por qué dividen bando entre tres opiniones si dos de ellas son compatibles y, siendo como somos, se iban a dar a la par. Blindarnos y estudiarlos deberían ir de la mano. -aclara- Además, siguen siendo personas, habrá que saber qué quieren y de dónde sale esa aura. Querer eliminar a alguien porque puede debilitar la magia sería como querer atacar a la Iglesia por su aura, poco ético cuando menos. -concluye, antes de servirse una pequeña porción de carne con algunas verduras.

Aysha agravó su expresión al escuchar a Rodrigo Manuel. Como cabía esperar de un Flambeau incitaba a la guerra. Aún así, no perdí el aplomo al continuar su intervención.
-Por sus vehementes palabras señor de Arujo, deduzco que me hayo ante el sodale adecuado que pueda iluminarme en mi desconocimiento de este tan grave peligro al que tan sólo veis como salida la guerra.
-¿Sabeis como se organizan en esta Orden? ¿Cómo es su magia? ¿Cuáles son sus puntos fuertes y cuales su debilidad? ¿Cómo de extendidos están? ¿En que territorios habitan? ¿Tienen lazos con los mundanos?
- ¿Se han intentado ya conversaciones diplomaticas con ellos? ¿Por qué fracasaron? ¿Cuantos ataques de ellos hemos sufrido? - todas preguntas realizadas tranquila y cabalmente, tan solo destinadas a demostrar mi ignorancia pero señalar los puntos importantes de inteligencia necesarios antes de iniciae una guerra.
- En definitiva, ¿qué sabemos de ellos que nos permitirá ganar la guerra con el menor número de bajas posible? - si alguno tenía ganas de guerra recordarle la probable muerte en ella solía funcionar para rebajarle las ganas de lanzarse a ella.

Feromina mira a Angelus y le responde.

- Por lo visto han dicho que los han visto en distintas partes de Europa... -se acerca un poco hacia la mesa- por lo visto comentaban la posibilidad de que no estuvieran organizados.

Vuelve a recostarse sobre la silla.

- Esto llevaría a posibilidades interesantes... -mira hacia Leonor y Mia- ciertamente, no es un asunto que solo nos competa a nosotros, pero la politica de la Orden se nota hasta ahi, el primero que llega lo reclama, y en este caso ha sido la Orden y sobretodo como dices puede ser poco etico... pero sabeis como son los flambeau, a la minima se encienden... en fin no nos queda nada mas que esperar, seguramente en los proximos dias nos enteremos de mas cosas. Los magos no somos famosos por guardar nuestros chismes.

Rodrigo te mira.

- Ciertamente sodal, no lo se, ni si han habido charlas diplomaticas, ni sus organigramas -vuelve a mirar al resto- pero lo que si se es que nuestros Primi han decretado que son una amenaza para los magi y que llegado el caso debemos usar la fuerza.

Somos mas, somos mas fuertes y aun sin llegar a poder usar nuestra magia algunos de nosotros podemos convocar ejercitos, los mundanos pueden combatir en nuestro nombre.

Dice mirando nuevamente a Aysha.

- Podemos enviar una avanzada, a ellos no deberia afectarles su aura, nos pueden dar información y si mueren... son solo plebeyos.

No me extraña su manera de pensar. Es la misma que he visto tantos años en la corte de mi madre. Siempre ha habido señores y servidores y los primeros rara vez trataban a los segundos mejor que a sus bestias.
-Ciertamente es un curso de acción interesante... - continuo sin oponerme a él -aunque me preocupa que haya quien pudiera ver tales actos como una grave interferencia con los mundanos y si trajera desgracia sobre algun sodale pudiera ser punible... aunque claramente necesitamos recabar más información antes de actuar... - continuo dándole la razón, pero desviando la conversacion a la inteligencia antes de la acción.
-Estoy segura de que nuestros Primi tienen buenas razones y abundante información para hacer este anuncio... aunque me reconfortaría tener más información yo misma para estar mejor preparada... - termino mirando en general buscando percatarme de quien tiene aspecto de callar lo que sabe en ese grupo.

-Esperaremos... supongo.

La verdad, saber todo eso solo hace que la curiosidad sea mayor. También las prisas por volver a la montaña y explorar el lugar. Ella no vio lo que descubrieron en aquella cueva, pero, sin duda, puede ser interesante. De todas formas, no hay nada que puedan hacer de momento y mientras estén en el Tribunal.

Magnus, poco a poco, fue calmándose, reposando la información. El Tribunal le ponía nervioso, tantos magos juntos, todos mirando con inquina, envidia o suspicacia a sus supuestos iguales. Y ahora la amenaza de un enemigo de la Orden, uno que podría presentar batalla y ponerla en apuros, al menos así como habían presentado el problema sus altos representantes...

Pese a todo, según los sentimientos iban reposando en su interior, el enorme Ex-Miscellanea iba pensando con mayor claridad. Claro que su expresión inexcrutable no dio muchas pistas de su mundo interior, por lo que para el común de los mortales simplemente estaba mirando al infinito. Finalmente tomó una decisión, clara, simple, evidente... y comenzó a comer. No tenía nada que decir, pero tenía un gran cuerpo que alimentar.