Partida Rol por web

Aquella habitación parecía normal, pero con Mashane nada era normal, de modo que, a pesar de las apariencias, la chica se movió cuidado hasta llegar al orbe. Aquella bola era pura magia y, por un momento, los ojos de la chica volvieron a brillar como antes de encontrarse la habitación de cadáveres. Con la punta de los dedos, tocó el orbe. Tenía muy claro lo que iba a hacer, pero antes de ello tenía que comprobar que nada ocurría si lo tocaba.

De repente comprobáis de manera sorprendente como Niella cae al suelo tras tocar el orbe. Ha caído en peso muerto de forma fulminante. No entendéis qué ha pasado exactamente ni porqué, tan solo que el orbe ha tenido algo que ver.

Si os acercáis a ella para comprobar su estado averiguaréis con pesadumbre que no tiene pulso...

Niella estaba muerta.

De repente notaste como un electrizante zumbido recorrió todo tu cuerpo. Notaste como tu respiración se detuvo de forma repentina, como un último aliento se escapó de tus pulmones antes de notar como tu cuerpo se desfallecía cayendo directamente al suelo en un golpe seco.

No sentiste dolor, no sentiste calor ni siquiera frío, tan solo te quedó el recuerdo de aquel extraño relampagueo al que le acompañó oscuridad... una oscuridad total...

A los pocos segundos la puerta que daba acceso a los siguientes niveles se materializó. La impresión de lo sucedido generó que tan solo escuchaseis el latido acelerado de vuestros corazones...

Ratko al ver el orbe supo que aquello era de todo menos bueno, por tanto decidió no gozarlo siquiera sin embargo la pequeña y curiosa Niella no se lo pensó y con su curiosidad e ímpetu se lanzó directa a tocar... Cuando el nigromante quiso hacer algo ya era demasiado tarde.

- Niella ¡¡NOOOOOO!!- corrió en post de ella para simplemente recoger su cuerpo entre sus brazos y verificar que no tenía pulso- ¡¡MALDITA SEA!! JURO POR TODOS LOS DIOSES QUE VOY A SASCARTE EL CORAZÓN DE TU ASQUEROSO CUERPO... ¡¡PERRA!! exclamó lleno de ira avanzando hacia la puerta que se había abierto con Niella en brazos, no pensaba dejarla atrás- Shany... Vamos a terminar esto...

Para Shany la siguiente habitación no era más que otro largo y pesado escalón hacia su objetivo. Pero ahora no tenía el entusiasmo de como cuando empezó, queriendo más acabar con aquello que terminar con el sufrimiento que azolaba la región. Incluso la perspectiva de atravesar el corazón de esa perra se había ido aguando con cada nueva prueba. El orbe para ella era un instrumento más para hacerles sufrir y no podía estar más en lo cierto.

-No…- ver caer el frágil cuerpo de Niella de esa forma, con la mirada vacía y adoptando una pose extraña, le revolvió las entrañas. Se acercó a ella, pero de forma lenta, como anticipando lo que ya esperaba. Ratko tuvo una reacción tan flamígera como sus poderes, mientras que la orumita se arrodillo junto a la joven y le cerró los ojos con delicadeza-. Que tu espíritu sea elevado hasta el padre Sol, donde nos cuidaras y protegerás, así como lo hacías cuando estabas a nuestro lado- le hizo un símbolo que iba desde la frente hasta la base de su rostro, dedicado solo a los grandes guerreros Orumitas caídos en batalla-. Me encargaré de que tu muerte no sea en vano.

Los grandes ojos oscuros de la guerra se posaron en Ratko, esperando no tener que hacer un juramento similar arrodillada frente a su cuerpo. Se levantó luego, sin derramar una lagrima, esperando el momento adecuado para despedir a su compañera, si es que sobrevivía. Luego llevarían el cuerpo a casa, esperando darle una sepultura digna de una guerrera. No quería pensar en que esa había sido su primer y última misión. No había tiempo para lamentaciones. Tenían una deuda que cobrar.

Tras la trágica noticia de la pérdida de Niella a manos de la retorcida prueba de Mashane, al resto de supervivientes no le quedaba más remedio que seguir adelante luchando contra sus propios sentimientos.

Ahora el dolor de la pérdida debía transformarse en fuerzas para continuar, para afrontar una planta más pero... ¿después de perder a una compañera así? ¿qué os depararía la siguiente prueba? ¿daría por fin la cara la usurpadora?

Mientras Ratko cargaba el cuerpo sin vida de la Dibumae, seguisteis subiendo peldaño tras peldaño preguntándoos si ahora que estabais alcanzando la décima planta significaría que el final estaba cerca.

Finalmente llegasteis a la nueva sala, ésta estaba completamente vacía, algo que os recordó horriblemente a la anterior donde apareció el orbe.

A diferencia de las anteriores veces, en esta ocasión podíais ver las escaleras que indicaban que se podía acceder al piso superior, pero hubo un sonido que os hizo deteneros.

Alguien estaba bajando las escaleras, por un momento llegasteis a creer que podría ser Mashane quien se atrevía a dar la cara por primera vez desde que estabais dentro de la torre, sin embargo lo que visteis fue algo más bien "distinto", por decirlo de alguna manera...

Abristeis los ojos de par en par al comprobar que los pasos que se escucharon bajar por las escaleras provenían de... ¡dos personas idénticas a ustedes!

Ambos no mostraban ningún ápice de sentimiento o vida, es más, en el instante que se quedaron a escasos metros de ustedes, la copia de Shany desenvainó su arma, y la copia de Ratko comenzó a canalizar fuego en sus manos... ¡la prueba final de Mashane se revelaba!

Caminando como en sueños o pesadillas, llegaron al fin al siguiente piso, en donde la ausencia de objetos o seres no hizo más que levantar sospechas. No era la primera vez que algo aparentemente tranquilo ocultaba una prueba mortal.  Incluso ver la escalera no le envalentonó y recorrió todo el recinto con su mirada, evitando adrede mirar a Ratko y el cadáver de Niella. Entonces oyó los pasos…

Apretó los dientes con rabia, haciendo crujir su mandíbula, cuando logró ver al fin quienes eran esas dos “personas”. Recibir una mirada muerta de un rostro idéntico al suyo tenía algo de siniestro que le costó identificar. Era como ver su propio cadáver, aunque no pareciera muerto. Sacó su arma casi al mismo tiempo que su doble. Ni siquiera se planteó luchar contra el falso Ratko, podría dudar al dar una estocada y eso sería mortal.

Con un grito bestial, sacando de su ser todo el dolor, la rabia, la desesperanza y la impotencia por lo vivido, la guerrera avanzó como una exhalación, descargando su espada contra su doble. No miró el rostro de esa cosa, solo sus movimientos y tácticas. Imaginaba que lucharía como ella, así que intentó atacar de forma que no pudiera defenderse del ataque. Aprendió un par de cosas en el ultimo duelo en su tierra natal, así que usó toda esa experiencia en un único y letal ataque.

Un golpe brutal logró atravesar a su oponente, logrando que el arma penetrara armadura, carne y huesos. Esto siempre era una buena señal, pero quizás por verse a sí misma ahí tirada, aunque no fuera ella en realidad, provocó lo que de podría denominar como un vistazo a su propia muerte. Shany no podía apartar la mirada del cuerpo sin vida, preguntándose si no estaría muerta y su espíritu se estaba elevando para encontrarse con el padre Sol. Su mente había quedado prendada en ese momento, haciéndola incapaz de notar que la batalla aún no terminaba. 

Ratko dejó el cadáver de Niella sobre el suelo en el lugar más seguro que pudo encontrar para que el cuerpo de la pequeña no sufriese daño. A continuación miró a su doble muy serio, quizás lo más sensato hubiese sido que atacase a la falsa Shany pero la original ya pensó por ambos, de manera que sin perder el tiempo Ratko conjuró la bola de fuego sintiendo como el poder le recorría el cuerpo liberando así su dolor y su ira, lanzando las grandes bolas de fuego fatuo con fuerza sobre el impostor, como si se tratase de la propia Mashae, quizás por eso no guardó la distancia necesaria para esquivar los tantos de su copia.

La visión de su propia y artificial muerte se desvaneció, justo para ver los últimos vestigios del que fuera el clon de Ratko. Por suerte sus rasgos estaban tan maltrechos que era imposible reconocerle. Verse morir y ver morir a alguien tan especial podría ser demasiado para la ya abatida orumita.

-Trucos y más trucos- gruñó apartando la mirada de los cadáveres y posarla en las escaleras… ¿Podrían haber evitado la batalla corriendo hacia allí? Quizás. Pero se habrían llevado muchas heridas. Lo mejor fue atacar de frente-. ¿Estás bien?- sabía que sí, pero necesitaba ese pequeño alivio para compensar la falta de energías anímicas. Lo usaría para continuar su camino hasta la siguiente planta, la siguiente prueba, el siguiente truco siniestro. Ya ni sabía la cantidad de pisos que habían cruzado o si llegarían a ver el final de todo aquello. Solo podía poner un pie delante del otro, para seguir adelante.

Ratko respiró varias veces hasta que su ritmo cardíaco se relajó mientras el poder arcano volvía a aletargarse hasta volver a ser llamado. Fue entonces cuando escuchó a Shaby, al mirarla a los ojos su diestra se posó en su mejilla, odiaba verla tan abatida, era realmente extraño y doloroso que una mujer tan apasionada como ella estuviese tan triste, tenía que tratar de animarla.

- Si tú estás bien yo también- le posó la otra en la otra mejilla y le acarició con los pulgares para transmitirle calor- Vamos a salir de esta... Ya falta poco... Muy poco. No podemos caer ahora, se lo debemos a Niella, a todos los que Mashae ha matado y a nosotros mismos-mismos- la miró a los ojos y acercó sus labios a los suyos, se mantuvo unos segundos a escasos centímetros de la boca de Shany como esperando alguna reacción hasta que finalmente y sin pedir nada la besó, fundiéndose con ella en un tierno abrazo, cuando se separó la volvió a mirar para infundirle ánimo y se dirigió hacia el lugar donde se encontraba el cuerpo de la compañera caída, la cogió en brazos y comenzó a caminar hacia el siguiente nivel​​- Vamos, no pienso dejar a la pequeña aquí tiene que venir con nosotros- añadió guiñándole un ojo, algo se traía entre manos el nigromante...

Su idea era sencilla, caminar hacia adelante y esperar que el próximo piso no les mate o que si lo hacía pudiera proteger a Ratko en el proceso. Anteponía la seguridad de su amante antes que la suya propia, pues creía que era imposible que ambos sobrevivieran. Entonces, sorprendiéndole totalmente, Ratko se colocó frente a ella, muy cerca, soltando aquellas palabras con decisión. Había tal seguridad en sus ojos, que incluso esa sensación que persistía en ella se diluía un poco. Pero fue el beso lo que logró desplazar su mente, olvidar por unos pocos segundos todo lo que les había tocado vivir.

-Lo sé, saldremos de ahí- dijo con una sonrisa radiante, aunque seguía teñida con algo de tristeza-. Le arrancaremos la cabeza a esa perra…

Por Niella, por todos los usuarios de magia, por ellos mismos, por cada muerto que tapizó su camino hacia el poder. Se vengarían y terminarían con aquella locura. Incluso aunque no lo lograran, al menos les darían esperanzas a otros y quizás se alzaran contra ella.

-Gracias- murmuró antes de ponserse en marcha.