Partida Rol por web

Aquello nos e estaba volviendo una situación cómoda y no sabía qué era peor si que Eddy se largara o que Robert se enfadara por ello. Ellos hablaban y yo, iba pasando mi mirada de uno a otro, mientras iba frunciendo el ceño a cada frase nueva que soltaban, hasta que al final me puse en medio de ambos y levanté las manos pidiendo como una tregua y puse cara de sicópata, como diciendo que el próximo que comenzara a " subirse " por las paredes de aquella manera se ganaría una " galleta " de parte de la chica que estaba presente.

- Vamos que esto no se trata de que nos pongamos a discutir, sino de que estemos unidos ¿ no? Al menos, yo para quedarme sola con toda esta movida no vengo, que es como estaba en mi casa..

Casi bufé mientras organizaba mis ideas para hablar.

- Eddy recuerda que esto es algo entre todos ¿ vale? No queremos sentirnos excluídos, al menos no en esto y no nos conocemos lo suficiente como quizás para confiar ciegamente en alguien y Robert.. - Ahora mi vista se volvió hacia el otro muchacho. - Vayamos a buscar ese tatuaje que dice y esperaremos, tenemos que darnos un voto de confianza entre nosotros... nadie que no lo haya vivivo en sus propias pesadillas nos va a ayudar.. por favor.. Sólo quiero que todo esto se termine..

Cuando Beth se puso en medio me quedé mirando a Eddy un segundo. Después bajé la vista y di una calada al cigarro. Volví a mirar al tatuador y después a Beth.

- Está bien, está bien... trabajo en equipo... vámonos, no perdamos más tiempo - me tragué el orgullo, pero no lo volvería a hacer.

Las palabras de Robert me habían cabreado de verdad, asi que me giro devolviendole la mirada. Le hubiera pegado un puñetazo si Beth no hubiese intervenido.

-Beth, yo estoy trabajando en equipo, os estoy diciendo que hacer mientras yo voy hacer averiguaciones, que desgraciadamente solo puedo hacer yo, y la actitud de Robert me esta tocando los cojones. Os ofrezco mi casa, una posible solución a ésta mierda, algo que hacer, que también es muy importante, como salvar una vida, y asi me lo agradece?- Contesto a Beth, luego miro a Robert.  -Robert no te pido que me lamas el culo, ni siquiera que me lo agradezcas, pero por lo menos guardame un poco de jodido respeto. Porque con frases como te revuelvo la casa hasta encontrar el arma, directamente no te dejo entrar en la misma, captas? Tio, yo no he pedido ser el lider, ni siquiera me lo considero; pero parece que para avanzar tengo que ir solo a ver a esa tia.-

Despues hago una pequeña reflexión.

-Qué quereis hacer? Quereis ir por vuestro lado o confiais en mi? Os he dado todos los datos, yo estoy confiando ciegamente en vosotros, dejandos mi casa, el ordenador, el libro, el teléfono de otro tatuador, voy a averiguar a qué coño nos enfrentamos.... Qué más quereis de mi? Dónde veis que os excluyo?...-

Miro de nuevo a Robert, pues veo que se guarda algo, más bien se contiene...

-Vamos a solucionar ésto aqui y ahora, porque con desconfianzas y con malos rollos no vamos a conseguir nada.-

La tensión se iba notando en el ambiente y los ánimos se estaban calentando. Era una situación dura que había creado la desconfianza y la posible marcha de Eddy. Cuando Eddy comenzó a hablar lo escuché sin interrumpirle, no quería alterar más la situación. Una vez que terminó apuré el cigarrillo y lo tiré, para después pisarlo. El humo salio de mis pulmones.

- Claro que aquí no hay líderes Eddy sino que sólo tú tienes la suerte o la desgracia de saber más que los demás. El libro, tu cita con Marlen, la posible hora de la muerte de Carol, yo lo único que sé es que me quieren matar - le dije abriendo los brazos y soltando una pequeña carcajada - y a tí y a ella - señalé respectivamente. Me acerqué unos metro a Eddy - No vamos a separarnos nadie de nadie, vamos a realizar el plan establecido: yo llamaré a Carol y tú irás a por Marlen, te esperaremos en tu casa - le puse la mano en el hombro, para que viese que no estaba molesto ni le guardaba ningún rencor - No tengo nada que aclarar contigo amigo, sólo dudé porque sabías más de la cuenta y encima querías marcharte ¿me entiendes? - le dije con la mano en el pecho - pero quizás al saber más arriesgas tu vida al irte por ahí sólo, eso es tener cojones - y le di con el índice unos toquecitos en el pecho - Si hay algún problema, llámanos, ten el teléfono a mano. - tema zanjado, sólo habíamos perdido los nervios un momento.

Las palabras de Robert me habian calmado bastante, y asiento escuchandole con atención, suspirando aliviado al final.

-Gracias, siento si he perdido los papeles, pero esque a veces siento que esto me supera.... Hace 10 años perdí a mi novia entre mis brazos, y juré que no volvería a pasarme.

Izam y Alexia saben que fibra tocar, me cargan con ésta presión para desestabilizarme, y la muerte de la camarera.... La tenía que recoger de su trabajo, ponerla a salvo... Y mira lo que ha pasado...- Apreto los dientes y los puños, y los ojos se vuelven vidrosos.

-No tenía que haber muerto, y encima juegan a enseñarme quién será la proxima muerte, retandome a salvarla o haciendo que caiga sobre mi conciencia..... Por eso tengo que averiguar qué son, por eso tengo que ir hablar con Marlen....- Añado sacando un cigarro y colocandomelo en la comisura antes de encenderlo, cayendo una solitaria lagrima por mi mejilla.

Apreto el hombro de Robert. -Vamos, tenemos que salvar una vida.- Les digo acordandome de la libreta que me dio la camarera y de donde saqué el numero de Beth, puede que esté el de Carol también....

A pesar de mis palabras hubo un momento en el que creí que se pondrían a pelear y no habría forma de pararlos, por lo que pensé que para recibir aquella ayuda era mejor que volviera de nuevo a mi casa e intentar que no me mataran que venía a ser prácticamente lo mismo que quedarme con dos hombres que se ponían a pelear entre sí, pero por suerte, parecieron tranquilizarse un poco y el cómo terminó la conversación de dejó totalmente sorprendida y sin saber qué decir, tan sólo mirándoles como si la peleaba hubiera sido entre dos adolescentes gallitos intentando averiguar quién la tiene más grande.

Crucé mis brazos sobre mi pecho y simplemente me quedé esperando, por si aún cambiaban de idea y debía irme, porque no tenía nada claro qué era lo que acababa de pasar, ni siquiera cómo habían conseguido arreglarse entre ellos con aquellas palabras.

- Tengo que salir más o alguna cosa así.. me he perdido en algún punto y ahora no sé qué se supone que tengo que hacer..

Eddy se marcha a buscar a Marlen y os quedais solos.

A poco de marcharse Eddy las luces parpadean un poco. Esto os pareceria una pequeña bajada de la tension electrica si no estuvierais siendo persegido por un maniaco fantasma.

Despues de eso no pasa nada, todo vuelve a la calma aunque sentis el aire pesado, tal vez por vuestro propio miedo.

Al llegar a aquella casa y que la luz parpadeara de aquella manera me invadió una sensación de intranquilidad aún mayor que la que ya tenía y eso, que tampoco era que últimamente estuviera de los más tranquila. Miré a Robert con cara de preguntar si aquello habría sido algo normal, pero estaría como yo así que no me molesté ni en preguntarlo en voz alta, ya era bastante complicado tener tantas dudas como para encima tener que exponerlas una tras otra en alto.

- ¿ Dónde teníamos que mirar lo del tatuaje o eso?

Terminé preguntando pues yo quería ayudar y era lo que Eddy nos había encargado hacer.

A los pocos minutos llaman a la puerta, es una chica muy atractiva por lo que veis por la mirilla.

Hice un gesto para que Robert no me respondiera aún y se quedara en silencio, pues la idea era no abrirle la puerta a nadie y si debíamos hacerlo, al menos que fuera Eddy quien nos lo dijera, pues era su casa y no la nuestra.

Me quedé de pie y sin moverme delante de la puerta, esperando a que aquella chica se largara, pues no pensaba abrirla, es más, ni siquiera pensaba hacer el más mínimo ruido a ver si se iba pensando que no había nadie.

- No creo que debamos dejar que entre nadie... - mimente comenzaba a ser pura desconfianza. - Y mucho menos después de que intenten asesinarnos de una manera tan escandalosa como lo de la cafetería..

Quizás esta reacción no era muy común en mí, pero creía que era lo más correcto que podíamos hacer. Si aquella chica conocía a Eddy y no respondía nadie en su puerta, seguramente lo llamaría al móvil y luego él a nosotros.

La casa de Eddy no estaba lejos. Caminábamos déprisa para poder llegar lo antes posible. Las calles oscuras parecían absorbernos y las luces parpadeantes no auguraban nada bueno. Una vez allí comenzamos a buscar el libro que Eddy nos había encargado.

- Está en el libro de brujería que nos dijo que tenía, busquemos rápidamente. Voy a llamar a Carol para que vaya viniendo - le dije con el móvil en la mano. Pero en ese momento sonó el timbre, Beth se asomó y me miró pidiendo silencio - ¿La conoces? - nos separámos de la puerta, para hablar en tono más bajo - Quizás sea Carol... Sé que no debemos fiarnos de nadie, pero Eddy se ha ido y tuvimos que fiarnos de él, no tenemos otra opción.. ¿qué me dices?

Me quedé un momento en silencio y pensando pero acabé negando con la cabeza.

- Creo que es mejor esperar y no dejar pasar a nadie.. - Dije de manera rotunda. - Se llevaba el teléfono. - vuelvo a insistir - Si fuera algo importante y no le abriera le llamaría, al menos, eso haría yo.. Esta no es nuestra casa, no podemos abrir la puerta..

Por mi parte ya había cumplido el cupo de fiarme de gente que no conocía aquel día y después de que intentaran volarnos por lo aires lo que menos me patecía era arriesgarme a que nos fuera a pasar otra parecida.

- Sé que es mona, pero intenta controlarte.. esto es como en las pelis de miedo, fijo, de esas que ves y duces.. no abras.. no abras.. y va el tonto del personaje, abre la puerta y se jode todo..

Volví a negar con la cabeza, intentando que me hiciera caso.

Sonreí de medio lado.

- No te equivoques monada, ahora mismo me preocupa más mi cuello que echar un polvo. Está bien, llamo a Eddy. Si se echa el teléfono a la oreja hazme una señal para no cortar la línea por si llama a Eddy.

El teléfono sonó al otro lado. Con el rabillo del ojo miraba a Beth por si me hacía alguna seña. Eddy me dijo que se trataba de Erika, una compañera en San Gabriel. Me dijo que le abriese la puerta y que pronto nos llamaría con nueva información. Cuando todo estuvo aclarado, me dirigí a Beth.

- Es Erika, una estudiante de San Gabriel, dice que la dejemos pasar, está tan loca como nosotros, así que no hay problema.

Me acerqué a la puerta y la abrí. Una chica rubia con buena presencia estaba al otro lado de la puerta.

- ¿Erika, verdad?

Mientras espera, no puede evitar no quedarse quieta. Está nerviosa y un poco asustada. Cuando la puerta se abre, suspira aliviada.

Asiente, con la respiración agitada.

Sí, soy Erika. Erika Northman. Se presenta. ¿Eddy? Pregunta mirando al chico. No tenía ni idea de como era. Quizá se estaba metiendo en la boca del lobo. También echa un vistazo a la chica.

A mí personalmente seguía sin parecerme una buena idea abrir la puerta sin que él estuviera en casa, pero si él mismo decía que le anbriéramos tampoco iba a decir nada. La miré con curiosidad, aunque estaba más que claro que no era precisamente yo la que más ganas de hacer amigos tenía y miré a Robert de reojo..

- Hombres..

A regañadientes casi la cogí del brazo para meterla en casa y volver a cerrar la puerta.

- Lo siento, creo que me llega con que intenten matarme una vez al día.. Eddy no está, vendrá pronto. Él es Robert y yo soy Beth.

Ahora sí la tendí la mano, tampoco había motivo para ser descontés más allá del que no me fiara ni de mi propia sombra.

Ah.. Deja ir Erika ante la aclaración y le estrecha la mano.

Por lo que veía, ambos estaban igual de asustados que ella. Sobretodo la chica.

¿Que han intentado matarte? Pregunta con interés. Normal que estuviese así. Lo suyo comparado con lo de ella eran pesadillas de niño pequeño...

Asentí con la cabeza, aunque tampoco tenía del todo claro si era lo que habían intentado de verdad o sólo era un aviso para que viéramos que todo aquello no era un juego, pero claro, bastante me costaba pensar con claridad con lo intranquila que estaba..

- Una cefetería ha estallado en nuestras narices no hace mucho tiempo..

Mi reacción instintiva fue llevarme un brazo a la nariz y olerme, y lógicamente, aún olía a " quemado " yera bastante desagradable.

- Lo que me recuerda que mejor me doy una ducha. No creo que a Eddy le importe ¿ no?

Podía sonar algo frío pero era difícil intentar actuar con normalidad en esa situación.

- ¿ Os importa si...? Bueno, sé que suena raro, pero os molesta si dejo la puerta del baño un poco abierta..

Me daba miedo quedarme sola y así si tenía que gritar me escucharían.