Partida Rol por web

Buho sabio le hace una seña de agradecimiento al capitan , mientras se acerca al Mayordomo quisiera dar una vuelta por el lugar, y sobre todo ver su magnificencia desde las alturas, podria tener acceso a una torre, para poder observar el paisaje y las estrellas que nos rodean??

Palacio del Barón de Ruanon
Horario: Noche

Roanan sonríe a Buho Sabio.

Sin duda vuestro ansia de conocimiento es reflejo de vuestro nombre, noble señor. El Mayordomo os hace un gesto para que le sigais al interior del Palacio. Pero ahora es noche cerrada y casi todos en La Mano duermen. Sin embargo, que eso no os inquiete. Tengo ordenes del Baron de mostrarles en detalle todo el Palacio mañana por la mañana. Ahora, deberían refrescarse y comer algo tras tan largo viaje.

Es cierto lo que dice el Mayordomo. Ahora mismo estáis fatigados de la semana de viaje intenso que habéis llevado...

Al escuchar esas últimas palabras le pego un ligero codazo a Águila en el costado, luego me llevo la mano derecha a la boca formando un pico con los dedos. Levanto las cejas y sonrío

Lo cierto es que me comería un giak

Asiento ante las palabras del mayordomo y mis compañeros, pero antes de seguirle le digo:
-Claro que os seguiriamos, pero antes de nada quisiera presentar mis respetos ante Lobo Gris. Quisiera ver su cuerpo antes que los monjes empiecen su tarea de embalsamar.

Al escuchar el comentario de su compañero, Águila Certera se acerca al resto de Señores del Kai y susurra su asentimiento.

Sí, no es conveniente que comiencen su trabajo hasta que hayamos podido observar su estado. A lo mejor descubrimos algo que otra gente sería incapaz de percibir.

Una vez comentado esto, se queda al lado de los monjes y se dispone a acompañarlos.

Buho sabio asiente, Debemos revisar su cuerpo, puede que ello nos de respuestas de como murio, mientras mira al mayordomo en espera de su respuesta

Palacio del Barón de Ruanon
Horario: Noche

El Mayordomo Roanan no ve ninguna objeción a vuestra petición de velar los restos de Lobo Gris. Tampoco el Hermano Zagor, aunque os pide con un gesto que esperéis. Vosotros sabéis que los clérigos deben “preparar” el cuerpo (asearlo y cubrirlo con un sudario al menos, más tarde aplicarán unguentos y preparados para evitar que el cadáver se corrompa durante el viaje de vuelta al Monasterio). Os aseguran que os avisarán para que lo veléis en cuanto esté listo.

No veis ningún problema en esperar un poco más para presentar vuestros respetos al Gran Maestro Lobo Gris, así que seguís a Roanan que quiere mostraros vuestros alojamientos.

Palacio del Barón de Ruanon
Horario: Noche

A través de una de las varias puertas pequeñas, pero fortificadas que dan acceso al Palacio, seguís a Roanan. Detrás vuestro, un numeroso grupo de criados cargan con vuestros equipajes.
El camino por el que os conduce el mayordomo a la luz de las velas, os hace ver la enormidad de esta fortificación, llena de pequeños patios y multitud de corredores, pasillos, escaleras, rellanos, etc... La estructura es complicada, algo claramente pensado para que los defensores tengan ventaja en caso de un asalto, y para unos recién llegados como vosotros pronto os hace sentir perdidos.
Finalmente os detenéis en un pequeño salón en el que se ha dispuesto una mesa preparada con abundante comida y bebida. Una chimenea próxima ofrece calor e iluminación. Unos criados os ofrecen toallas mojadas en agua fría para refrescaros.

Roanan os pide que os sentéis y disfrutéis de un pequeño tentenpié , y la verdad es que no os veis capaces de rechazar la invitación, ya que lleváis siete días de duro viaje, comiendo carne en salazón, queso y pan duro. De manera que os dais el lujo de sentaros por un momento y disfrutar del pollo asado, de la panceta tostada y de cebollas asadas con salsa, todo regado con cerveza fría.
Habéis terminado ya de cenar cuando por un pasillo entran dos soldados de la guardia y se cuadran. Roanan se hace a un lado y os hace un gesto para que os levantéis, ya que por el pasillo aparecen tres hombres, y aunque nunca lo hayáis visto, os dais cuenta inmediatamente que el primero de ellos es el barón de Ruanon, Derek Vanalund.

Se trata de un hombre que supera los cincuenta años, de complexión poderosa y altura media. Posee rasgos pétreos, en una cara afeitada con esmero. Lleva el pelo largo y peinado hacia atrás, de color castaño claro y con vetas grises debido a las canas. Sus ojos son azul metálico.
El Barón viste con ropas de calidad que denotan su rango. En torno a su cuello, un pesado collar de eslabones de oro, símbolo de su rango y por el que le habéis reconocido.

El Mayordomo Roanan interviene para anunciar al Barón y a los dos hombres que le acompañan: Su heredero, Aladar Vanalund, y a Sir Alistair Grey, Primera Espada de Ruanon.

Aladar Vanalund, el heredero de la Baronía, es un joven de gran altura y gran complexión física. Comparte los rasgos duros de su padre, pero tiene el pelo castaño rojizo, cortado muy corto, y sus ojos son castaños.
Sus ropas son de calidad, y en su dedo muestra el Sello de Ruanon, un anillo que sabéis que lo identifica como Heredero de la Baronía.

En cuanto a Sir Alistair Grey, posee el título de Primera Espada de Ruanon (lo que quiere decir que es el mejor guerrero de toda la Baronía) es un hombre de cuarentaitantos años, delgado y musculoso a la vez, calvo y pulcramente afeitado. Es tuerto, su ojo ciego está totalmente blanco mientras que su ojo bueno reluce azul claro como el hielo.
Está ataviado con una armadura de placas de color escarlata que le protege desde los pies hasta el cuello. El yelmo lo lleva al brazo, y a su espalda asoma la empuñadura de un gran espadón.

Os dais cuenta que tanto el Barón como su heredero han tenido que levantarse del lecho para daros la bienvenida en esta hora de la noche, lo cual agradecéis mientras os presentáis formalmente ante él. El Barón os saluda formalmente a cada uno de vosotros:

Sean bienvenidos a Ruanon, Señores del Kai. Aunque su presencia no pueda hacer olvidar la pérdida de Lobo Gris, al menos la reconforta. En nombre mío y en el de mi hijo les digo: Consideren mi hogar como el suyo propio.

Con esto, el Barón y su hijo se despiden hasta mañana. Al parecer se celebrará un Banquete en vuestro honor en el Gran Salón, y el Barón ha dispuesto que vosotros comais en su mesa, junto a su familia y más leales vasallos. Tendréis tiempo de sobra para hablar largo y tendido.
Con esto, la pequeña comitiva se dispone a irse...

Águila Certera se levanta cortésmente en cuanto se intuye la presencia del barón y saluda respetuosamente con la cabeza siempre en silencio y con una incomodidad evidente. No se siente cómodo entre las paredes de piedra de un castillo.

Buho sabio agradece las palabras , se levanta para ir a ver el cadaver

Agradezco las palabras del Baron y su cortesia por recibirnos a tal intempestivas horas.
- Lamento que nos hayamos concido en tales circunstancias, sin duda como los sacerdotes tardaran varios dias en preparar a Lobo Gris para su ultimo viaje, ya tendremos ocasión de hablar mas adelante. Hasta entonces pasen ustedes buena noche.
Hago una reverencia leve como señal de respeto.

Palacio del Barón de Ruanon
Horario: Noche

Una vez vuestro anfitrión y sus acompañantes se van, Roanan os ofrece seguirle para bajar donde están los restos mortales del Maestro del Kai.

Al poco, seguís al Mayordomo y a dos jóvenes criados que portan lámparas de aceite por los silenciosos pasillos de palacio. Descendeis unas escaleras que os llevan a una especie de bodega. Notais cómo la temperatura desciende varios grados y os deteneis ante una puerta. Roanan os dice que cuando terminéis aquí los criados os conducirán a vuestras habitaciones y con esto se despide.

Al entrar, descubrís que se trata de una pequeña cámara iluminada por antorchas. Está vacía de mobiliario excepto por dos mesas. Una de ellas está repleta de unguentos, hierbas e instrumental de embalsamar. En la otra está el cadaver de Lobo Gris. El hermano Zanbar trabaja sobre él, limpiando el cadaver con un paño con agua. El hermano Zagor os saluda con una inclinación de cabeza mientras mezcla hierbas en un mortero.
Os acercais poco a poco, comprendiendo la labor que los dos clérigos realizan. El cuerpo debe ser embalsamado para que no se corrompa hasta que llegue a la Cripta de los Maestres, en el Monasterio del Kai, donde será enterrado con todos los honores que merece.

Al parecer, los clérigos han terminado de limpiar el cuerpo de Lobo Gris, y ahora esta listo para ser envuelto en un sudario blanco. Pero al ver el estado del cuerpo del maestro, os sorprendéis...

Todos recordáis a Lobo Gris. Aunque no residía en el Monasterio, el reservado Maestro volvía todos los años con motivo de la Festividad de Fehmarh. Incluso en algunas ocasiones llegó a entrenar a algunos monjes en la sabiduría del Magnakai. Era un hombre de complexión poderosa y altura media, sus rasgos estaban perdidos en un rostro inundado por una barba larga y desaliñada, al igual que el pelo, sin peinar y abundante como el de un salvaje, sucio y negro como la pez. Entre esta maraña destacaba un ojo azul clarísimo, ya que el otro estaba tapado por un parche. Al parecer, lo perdió en un combate hace años.

El cuerpo de la mesa es sin duda el de Lobo Gris, el rostro del cadaver es el que recordábais, pero observáis con horror como se encuentra crispado y contraido por el dolor, y la piel está estirada sobre los huesos. Incluso la carne parece haberse consumido de su cuerpo. Además, su pálida piel presenta una leve y antinatural tonalidad amarillenta.

Observais con pena el cadaver. Parece ser que Lobo Gris sufrió terriblemente antes de morir. ¿Qué clase de enfermedad podría haber provocado tanto dolor?

Palacio del Barón de Ruanon
Horario: Noche

Examinais entre todos el cuerpo del fallecido, discutiendo sobre lo que os parece, y finalmente llegáis a algunas conclusiones...

Esta claro que fuera lo que fuera lo que lo mató, debió de actuar de manera letal y fulminante. No es fácil que un Gran Maestre del Kai muera por enfermedad ya que la disciplina de Curación lo evitaría, y la disciplina Caza lo hace inmune a los venenos naturales. La posibilidad de que fuera envenenado con un veneno no natural (es decir, creado por la mano del hombre) existe. ¿Pero cuál? Vuestros conocimientos de Curación os hacen saber de los sintomas de los venenos comunes, y el aspecto del cadáver de Lobo Gris no os ofrece ninguna pista sobre qué veneno pudiera tratarse.

Al final, Zorro Plateado dictamina que sea lo que sea lo que mató a Lobo Gris (enfermedad o veneno), hay dos posibilidades, o se trata de algo nuevo, o de algo tan exótico que no es conocido por vosotros...

Mientras llegamos a esa conclusión no dejo de observar el cuerpo del sabio maestro.

Hermanos. Digo dirigiéndome a los monjes.

¿Han encontrado en su limpieza alguna cosa que les haya llamado la atención? Algo fuera de lo normal, alguna herida o similar...

Águila Certera revisa nuevamente el cuerpo.

Simplemente, señaládnoslo.

Dice el joven recordando el voto de silencio de los monjes.

es extraño, deberiamos preguntar si otras personas que trabajaban con Lobo Gris enfermaron de igual manera...si no yo creeria que es por envenamiento.. pero que podria ser se queda en silencio observbando el cuerpo

Palacio del Barón de Ruanon
Horario: Noche

Ante la pregunta de Águila Certera, los dos clérigos hacen el gesto multiversal de encogerse de hombros, lo que os da a entender que no han encontrado nada extraño (aparte del aspecto del cadáver, claro). Los hermanos Redentores son una orden de sanadores y hubieran detectado cualquier herida o similar al preparar el cuerpo.

En cuanto al comentario de Buho Sabio, todos conocíais la fama de solitario de Lobo Gris. No era alguien del que se supiese que tuviera compañeros o ayudantes, pero todavía no sabéis si en los últimos tiempos se han producido muertes similares a las del Maestro del Kai en Ruanon. Es algo que tendréis que averiguar...

Le echáis un último vistazo al cuerpo, y observáis en la mesa anexa los efectos personales del Maestro; un arco largo llamado Silbido y una espada bastarda con el nombre de Colmillo, dos poderosas armas mágicas que según la tradición, reposarán con él en las criptas del Monasterio. También hay un anillo de plata fina sin adornos, cosa extraña, ya que los Señores del Kai no son dados a llevar joyas o abalorios de ningún tipo.

No veis sin embargo la capa de tonalidades verdes típica de todo Señor del Kai, y el hermano Zanbar os explica con gestos que estas ropas no se encontraban entre los efectos personales que les han sido entregados.

Águila Certera recoge el anillo de plata y pasa sus dedos sobre el anillo para ver si hay algún tipo de relieve, grabado o similar...