Partida Rol por web

-Buena idea. Intentemos averiguar lo más posible mientras regresamos con Tormus. Comencemos por el templo, a ver si averiguamos algo más de los dos objetos encontrados.

Me hacerco lo màs posible al vagabundo, conteniendo mi rabia y tratando de no hacer ruido,no hay nada màs despreciable que matar a un perro, y menos a uno tan fiel como este en cuanto juzgo oportuno comienso una corrida hasta estar a la distancia suficiente del desgraciado y lo ataco intentando robarle el cuchillo

Alexander se acerca sigilosamente al vagabundo y consigue hacerse con su cuchillo sin mucho esfuerzo. Cuando el vagabundo intenta atacar al perro se da cuenta que le falta el arma. Se da la vuelta y ve al elfo con el cuchillo en la mano.

Qué haces a continuación? Como lo has pillado por sorpresa tu tienes la iniciativa ^^

El capitán Lauren se despide de vosotros cuando decidis ir al templo para averiguar algo más sobre el medallón.

Rodeais el edificio (ya que os encontrabais detrás de este) y entráis por la puerta principal. Esta es bastante grande por lo que Nobu no tiene problemas al entrar con vosotros. Una vez dentro podéis ver que el templo es bastante grande. Podéis ver una sala bastante grande con su altar al fondo. Justo encima está la estatua de una mujer de pelos largos y semi desnuda y varios animales del bosque a sus pies. Esta estatua representa a Atenas, la diosa de la tierra. También podéis ver a ambos lados dos capillas más pequeñas con sendas estatuas. Ambas las reconoceis de inmediato. Una se trata de Basth, la dama de los bosques. La otra capilla está presidida por Gea, la madre naturaleza. Ambas diosas son conocidas y reverenciadas por elfos y druidas.

Al adentraros un poco más en el templo, una sacerdotisa sale a vuestro encuentro. Al igual que vosotros es una elfa. Os hace una reverencia y os da la bienvenida.
Buenos días hermanos elfos, que Ateas sea con vosotros. La proxima homilía no será hasta dentro de una hora, pero si puedo ayudaros en algo solo tenéis que decirlo.

Muchas gracias por compartir esa valiosa información compañero. Tendremos precaución.

Continuo andando a mi habitual ritmo pausado, observando el ambiente con parsimonia y con una sonrisa tranquila en rostro. Y mientras, en mi mente, resuena aún esa palabra... Bahamuth

Esto es el paraíso- digo mientras observo el precioso templo por dentro, pues soy fanático de la historia y arquitectura.-además están mis diosas queridas aquí, antes de irme tengo que rezar unas oraciones.

Hola, encantado sacerdotisa, mi nombre es Lacross, mi acompañante se llama Lalaith y ésta es mi mascota, Nobu. Venimos para hacerle unas preguntas sobre éstos objetos- dicho eso, saco el medallón y el puñal de la bolsa y se los muestro a la mujer

¿Sabe usted a que pertenece el símbolo de éste medallón?

Tomo el arma a toda velocidad, y miro al vagabundo sonriendole, maliciosa sonrisa de asesino

Vas a correr o queres ser vos el asado de hoy?- le digo al desgraciado miràndolo a los ojos, sin pestanear, mientras le apunto con el cuchillo.

Ladrón de pacotilla, pretendes intimidarme?? dice el vagabundo a la vez rápidamente te hace una presa y te agarra.

Te acabás de ganar la muerte pordiosero!!- grito mientras trato, en vano, de soltarme

presiono el cuchillo con toda mi fuerza para no perderlo y busco la manera de apuñalar al vagabundo, me desespera esta extraña situaciòn UN ASADO VOY A HACER CON TU CARNE Y CON EL PERRO TE VAMOS A DISFRUTAR!- grito furioso y sigo luchando por alcanzar mi libertad

Mauricio sigue esperando en la puerta de la casa de aquella señora, pero ya habia pasado un rato,  Alexander no regresaba y empezabas a escuchar ruidos en el callejón; los ladridos del perro eran cada vez mas frecuentes y también oyes unos golpes secos. Algo no iba bien...

Deja de chillar, escoria! dice el vagabundo mientras le da un cabezazo a Alexander. Consigue acertarle pero no le daña demasiado.

AHHHH sigo intentando soltarme en vano quien dirìa que esta basura tenga tanta fuerza, ahora mi egoismo hace que extrañe a Mauricio

a fuerza de cabezasos inútiles no vas a matar a nadie rata, mas te vale soltarme y correr que si me libero solo vas a sufrir

Se acabó muchacho, tu lo has querido! el vagabundo te lanza contra la pared y acto seguido intenta darte una patada en el estomago, pero el perro que estaba ladrando, se le echa encima y le muerde la pierna, provocandole una herida sangrante. Entonces el vagabundo le da la patada al perro. El animal cae unos metros más adelante pero ha conseguido desviar la atención del vagabundo el tiempo suficiente para que puedas reaccionar.

Sos mio digo, y riendo lanzo una puñalada al cuello del vagabundo, que como idiota erro, me doy vuelta y miro al vagabundo con profundo odio

Alexander aprovecha la distracción del perro para lanzarle un ataque directo al cuello del vagabundo. Parecía que le iba a dar en la yugular pero en el último momento la trayectoria del arma se desvió. Aun así le hizo un profundo tajo en el cuello.

El vagabundo mal herido se tapona la herida del cuello con la mano, retrocede e intenta escapar del callejón.

A AHORA SI HUÍS RATA INMUNDA le grito y lanzo un ataque con el cuchillo directo a su espalda

Alexander le clava el cuchillo por la espalda, provocando otra profunda herida de la que mana bastante sangre. El vagabundo finalmente cae al suelo inconsciente y va perdiendo la vida a medida que el charco de sangre a su alrededor se hace cada vez más grande...

El perro se te acerca y empieza a olisquearte. Mueve la cola y da saltitos, como agradeciendote que le hayas salvado.

Observo al perro qué alegre se veía q natural es la muerte.. sin la conciencia de a poco se me pasa la ira, y lamento haber matado, aunque en el fondo, se sintió bien...

hola amigo estas solo?¿ hablo para el perro(o para mí) mientras me inclino para devolverle los cariños y observarlo de cerca, me acuclillo y observo sus ojos..

El perro te ladra alegremente y vuelve a dar saltitos a tu alrededor. Seguidamente se mete a lo más profundo del callejón y empieza a olfatear y excarvar un poco en la tierra. Puedes ver fácilmente que la tierra en ese sitio ha sido removida hace poco tiempo. El perro te mira, mira el lugar donde ha estado excarvando y te vuelve a mirar a ti y a ladrarte, como indicandote que ahi hay algo.

Al entrar al templo, una agradable paz me invade. A pesar de la tristeza, ya no siento angustia. Es casi como estar en casa. Saludo a la amable elfa que nos ha recibido y aguardo a que responda a las preguntas que mi compañero ha efectuado, mientras observo el maravilloso edificio.