Partida Rol por web

Thor intentó golpear desde el aire a Wolverine, pero la inercia de su caída hizo que fallara cayendo al suelo. El X-men cayó de pie de espaldas al grupo. La acción rapida hizo que Thor no se percatara de su cara, pero cuando se giró frente a Tormenta apareció la sorpresa...

El grupo se disgregó para buscar nuevos objetivos. Daredevil decidió ir en busca de aquel que disparó el rayo. Accedió a un edificio de la izquierda. Mientras el Capitán América se alejó del grupo corriendo para ir en busca de Wanda y apoyarla en lo que fuera. Se pudo ver como tambien se adentró en edificio de la derecha.

 Para Thor y Tormenta fue un Shock el ver la apariencia de Wolverine cuando se giró. Solo unas palabras pudo murmurar:

Tengo hambre. Mucha hambre!!!

Su aspecto era demacrado con la máscara agrietada. Las partes visibles de su cara, así como su boca mostraban la de un auténtico zombie. Con sus garras salidas y algo erosionadas, mira fijamente hacia Tormenta.

Entras en el edificio de salio aquel rayo. Te extraña que aquel rayo no diera a alguien, siendo un ataque sorpresa. Sea quien fuera, escuchas unos pasos que parecen subir unas escaleras cercanas hacia tu derecha. El interior está bastante dañado con las paredes agujereadas, las puertas, permientiendo acceso a muchos rincones de este. Por su aspecto parecía ser un edificio de oficinas.

-¿¡Pero qué demonios está asando!?-gritó Thor empuñando su martillo. 

Abrió los ojos con sorpresa. Todo aquello estaba siendo completamente irreal, extraño... Había algo que su mente no llegaba a entender. 

-¿Y no querías que le hiciera nada? Mira con los ojitos que te está mirando, Tormenta -le dijo el dios mientras se preparaba para un nuevo ataque. -No tiene sentido que paremos, al menos debemos dejarlo inconsciente, ¿crees que no quiere hacerte daño? ¡Si parece que tiene ganas de comerte, maldita sea! Tenemos que hacer algo. 

Dicho esto levantó su martillo en dirección al cielo,  Lobezno o lo que quedaba de él, pronto dejaría de causar problemas.

Te mueves por el interior del edificio con tus sentidos al máximo. No sabes quien es el enemigo, pero te preparas para cualquier sorpresa. El edificio, o el grupo de estos son comunidades de pisos. Empiezas a subir al primer piso por las escaleras proximas y te metes por la primera puerta abierta. Muchas paredes caidas, incluso zonas del suelo abiertas. Vas andando por el pasillo hacia lo que es el comedor. Segun andas, miras por las habitaciones, cocina, y a traves de los agujeros de la pared ves el pixo anexo que sería de la comunidad de al lado. Todo se mantiene en silencio. El enemigo no parece estar en las cercanías. Observas que la zona podría esconder muchos encondites.

Escuchas que en la portería ha entrado alguien, pues entra con bastante ruido tropezando con algunos metales.

Entras en el edificio y viendo su interior ves que son comunidades de vecinos. Las paredes bastante maltrechas dejan ver el interior del piso que correspondería al portero. Luego está la escalera que sube a los pisos de arriba. No escuchas nada por ahora, con lo que deberás seguir moviendote para encontrar a Wanda o al enemigo que la atacó.

Maldita sea, y ahora tengo que perseguir a caperucita hasta casa de su abuelita para que el lobo feroz no se la coma...Impaciente, caótica, hará que nos maten a todos....Donde te has metido Wanda?.... No tiene mucho sentido ser sigiloso después de la entrada que he hecho, si hay alguien aquí ya me ha visto y sabe que estoy...

Con voz clara y sin miedo la llamó "Caperucita, estás ahí? estás bien?"

El escudo blandido en posición defensiva, los sentidos alerta, el capitán américa avanzó para volver a llevar a caperucita a casa de su abuelita. Cuando le pusiera las manos encima se iba a llevar una bronca, no se podía dejar tirado al equipo así, nunca lo había hecho y esperaba que nunca más lo hiciera.

Pendiente del entorno, la bruja se mantiene en el lugar luego de haber avanzado un piso hasta que, finalmente escucha un ruido que la sorprende bastante. ¿Será quien le disparó? No lo sabe, y gracias a ello, decide permanecer escondida entre los restos del edificio mientras observa quien sigue sus pasos. 

Muy atenta al entorno se mantiene, su escudo se mantiene fiel sobre su cuerpo, más aún cuando el silencio y aquella sensación de peligro, ciñe sobre su piel. No es la primera vez que padece algo semejante, que expuesta ante una situación difícil, deba improvisar. 

Mientras sales del piso, y llegas al rellano escuchas una voz en alto:

"Caperucita, estás ahí? estás bien?"

El tono y el apodo tan familiar te tranquilizan. Sin duda ese no podía ser otro que el Capitán América. Bajas las escaleras y lo ves mirando hacia el interior del piso que pertenecería al portero. Observando si hay peligro alguno. Al escuchar tus pasos bajar por la escalera, se alerta y gira la cabeza para identificarte. Coloca su escudo en plan defensivo y ves que es la misma Bruja Escarlata.

Escuchas pasos bajar por la escalera. Te alerta y giras la cabeza para identificarlo. Colocas tu escudo en plan defensivo y ves que es la misma Bruja Escarlata.

Aquella voz en medio de tanto silencio, genera una agradable sensación en la bruja cuando descubre que se trata de Steve, aquel amigo y compañero que ha seguido sus pasos hacia este lugar. Aún con su escudo místico activado, apenas intenta asomarse mientras observar el entorno. Es muy habilidosa a la hora de esconderse y más aún cuando el enemigo está al acecho. 

- ¿Qué haces aquí? - pregunta al asomarse de cuclillas. - No tenías porque seguirme, ten cuidado con las flechas... Casi me atraviesa una. - agrega al apoyar la espalda contra la pared desde la cercanía del suelo, esperando obviamente que sea el Capitán quien avance hacia ella para interceptarla. Tenía el escudo como ventaja, podía cubrirse tranquilamente y a diferencia de ella, estaba más acostumbrado a recibir disparos. 

Una vez que ya presenta su ubicación, Wanda se mantiene expectante mientras niega con la cabeza a esbozar una sonrisa. Le resulta muy graciosa la forma de ingresar de Steve, parecía un elefante en una chatarrería, los años pasan factura o tal vez ella aprendió por las malas a ser escurridiza. 

- Intenta no caminar como si fueras un obeso. - agrega al pensar que podrían descubrir su posición si el Capitán avanza de aquella manera. 

- Ese ya no es Lobezno o nunca lo fue Thor, así que en cualquier caso creo que poder terminar con el peligro que representa par quien se le acerque poniendo lo bajo tierra porque no creo que podamos eliminarlo debido a su alto poder de combate y regenerativo! - Dijo Storm al Asgardiano mientras que remontaba en el aire para alejarse del alcance de las garras de Lobezno mientras que invoca un relámpago del cielo para que caiga sobre el zombie que una vez fue su camarada X-Men

Steve la miró de arriba a abajo con expresión severa y ligeramente contrariada, justo como te miraría un hermano mayor después de que hayas hecho una travesura. Con un bufido teñido de exasperación le dijo

"Olvidaste lo que es el trabajo en equipo? No deberías actuar por tu cuenta, te pones en riesgo a ti y pones en riesgo a todos....."

Sé que no puede evitarlo, el caos que reina en ella le hace actuar así, de forma impulsiva, sin pensar en las consecuencias. No lo hace con malicia pero debo recordarle que ella también tiene un deber con el grupo, que si las piezas del equipo trabajan por separado lo debilitan, no servirá de mucho pero si consigo limitar su caótica actitud algo habremos avanzado...Ahora pondrá unos de sus mohines tan graciosos y tendré que aguantar la risa, te he echado tanto de menos Wanda....

"Te he seguido porque en los vengadores no dejamos a ningún compañero sin una cobertura..." dijo abriendo un poco los brazos dando a entender la obviedad que suponía que él estuviera allí en ese momento aunque la mención a la posible obesidad hizo que el capitán pusiera los ojos en blanco, blandiera el escudo en posición defensiva y caminara en silencio para intentar encontrar el origen de esas flechas y de aquel rayo rosa, que visto lo visto, bien podría ser de la misma bruja escarlata.

La mirada de la Bruja se entrecierra en pos de escuchar aquellas palabras que bajo el título de sermón, sólo ofrecen una respuesta a lo que por naturaleza el Capitán siempre dirá. No es la primera vez que trabajan juntos, ni las veces que las situaciones han superado a ambos al punto de sentir un acorralamiento que tras analizarlo en profundidad, se encuentra solución. 

- ¿Trabajar en equipo le llamas a lo de recién? Steve, en serio. - replica aún escondida, observando el entorno. - Storm no escucha, sólo lanza rayos y de verdad creí que su poder era mayor... Daredevil a su bola igual que Thor... Pero vale, ellos intentaron salvarme, incluído tú. -agrega al dedicarle una mirada a los ojos cuando asoma la cabeza apenas. - Y yo a ellos, pero me miran como si fuera una asesina... Incluído tú. No te confundas. - reprocha molesta. - No teníamos nada que hacer allí, había que avanzar y nadie lo hacía. No podía esperar a que te decidas, si mi esposo se encuentra aquí en peligro. Al menos yo, avanzo y aquí estás. Quejas a tu conciencia, la mía hace rato que no me escucha. 

Un suspiro se escapa de sus labios al escuchar la otra respuesta, ya al mostrar su mano para que avance hacia dónde se encuentra ella. Negando con la cabeza tal vez ante sus pensamientos, en verdad que aprecia a Steve desde sus comienzos cuando no había tanta situación tensa en el mundo y se podía estar sentados en un café hablando de nada o simplemente de las batallas ganadas. 

- Cap al deber, acércate a no ser que quieras un recibimiento del enemigo. Tenemos que planear y atacar, que nos tienen acorralados. Sensación que no me agrada en esta situación. Eres la voz de la experiencia... - afirma al esbozar una efímera sonrisa que lentamente se apaga al pensar que estos deben ser escenarios unidos unos con otros, lo cual si avanzan, pueden ir detectando a más compañeros. 

Reconoceis que ese no es el mismo Lobezno, sino es un zombie con toda la regla. Desde el cielo lo atacais con sendos rayos, pero los esquiva y se pone a correr hacia calle arriba, en la misma direccion que había ido el Capitán América.

-Tormenta, no podemos dejarlo escapar -le dijo el asgardiano mientras empuñaba su martillo con fuerza y se dirigía tras él. -La ira del Dios se encargará de él, maldita sea. 

Abrumado por el sin fin de circunstancias que podían devenir en aquellos hechos, intentando encontrarle sentido a todo, Thor corrió, saltó y voló tras su presa. Ahora que la cacería había empezado, ahora que se habían dado cuenta de que Lobezno no era más que un maldito zombie, era hora de atacar. 

-Tenemos que hacerlo papilla de cualquier manera. Cúbreme desde atrás, Tormenta -le pidió con una media sonrisa dibujada en el rostro. 

Antes de alcanzar a su víctima, si quiera, lanzó su martillo.