Se me helo la sangre al escuchar ese estruendoso alarido. Un vordak, un combatiente de elite de los Señores de la Oscuridad. Por un segundo, casi tropiezo y se me embota la mente, deduzco que debe estar usando una especie de ataque psquico.
El vordak carga hacia mi con su maza, logro desviar el golpe con el brazo, sin embargo un dolor sordo me recorre toda la extremid, aprovechando que esta desequilibrado levato el hacho y la blando hacia su pecho prodiciendole un corte profundo. EL vordak retrocede llevandose una mano hacia la zona herida. Ya mas cauteloso vuelve a cargar y me preparo, hacha y maza se encuentran produciendo una lluvia de chipas, con las armas entrelazadas cada uno hace presion desde su lado y por unos segundos nos quedamos en esa posicion. Sin embargo, los efectos del ataque psiquico empiezan a notarse, me pesa el cuerpo y las piernas me fallan. El vordak lo aprovecha, levanta la maza y la estrella fuertemente contra mi pecho.
Salgo expulsado hacia atras,casi pierdo el hacha, me falta el aire y se me nubla la vision, apenas puedo ver como el vordak se acerca lentamente para rematarme. Esta a mi lado, silencioso dispuesto a acabar con mi vida sin piedad. Vuelve alzar su arma esta vez apuntando a mi cabeza. Por mi mente vuelven a pasar los recuerdos del ataque ,mis camaradas muertos, mi hogar destruido, el pueblo masacrado. Aprietos los puños, -Asi no- pienso. El vordak deja caer con fuerza la maza, -vamos levantate ¡LEVANTA¡-me digo a mi mismo- ¡NO PUEDO MORIR AQUI!- grito, apartando,e de la trayectoria del arma enemiga. -¡AAAH!- grito con todas mis fuerzas. Ruedo haca un lado y antes de que el vordak pueda recobrase, blando mi hacha horizontalmente, decapitandolo en le acto.
Perdon por la demora
Al morir la criatura, su cuerpo se disuelve poco a poco en un repugnante líquido verde. Observas que la hierba y las plantas sobre las que se esparce el humeante fluido se marchitan y mueren. En el suelo, junto al cuerpo caído, hay una Gema que parece valiosa.
Un poco más adelante, en el mismo sendero, divisas un gran destacamento de giaks que corren hacia ti, alertados por el combate.
No te preocupes, entendible y razonable :D
ESTADO: 6/23 de Resistencia.
Estoy cansado, casi no puedo tenerme en pie. Pero se acercan, oigo como vienen y se que intenciones traen consigo. Me levanto como puedo y me dispongo a correr. Sin embargo, veo una especie de gema junto la cuerpo del muerto ME detengo un momento lo cojo a toda prisa y empiezo a correr.
La Gema despide un calor increíble y te quema la mano, aunque hábilmente en seguida la agarras con el borde de la capa y la introduces en la mochila.8 Una Gema de ese tamaño debe de valer cientos de Coronas, pero no tienes tiempo de contemplar tu premio, pues los giaks están muy cerca y sus flechas pasan rozándote la cabeza, por lo que te das media vuelta y corres a refugiarte en el bosque.
Mientras corres entre los árboles que cada vez se van haciendo más espesos, los gritos de los giaks empiezan a extinguirse a lo lejos. Cuando ya casi has dejado atrás a tus perseguidores, sientes un dolor intenso en la frente, pues despistado como estabas, chocas contra una maraña de ramas bajas...
Estado: 4/23 de Resistencia.
Te añado la gema a tu ficha :P
Motivo: Resistencia ?
Tirada: 1d10
Resultado: 3
Estás enredado en una masa de enmarañadas ramas y raíces. Al fin, con mucho esfuerzo, logras soltar la mano derecha, empuñar el hacha y abrirte camino muy despacio a través del follaje hasta llegar a una zona de bosque menos denso. Tienes la capa desgarrada en varios sitios y te has cortado y magullado malamente el brazo izquierdo encima del codo. Aún así, y pese a las heridas, continuas tu viaje.
Has estado caminando penosamente por el bosque durante casi dos horas. Te asalta el temor de haberte perdido, temor que comienza a parecerte realidad. Al menos, te dices, aparte del graznido lejano y ocasional de algún kraan, no has visto ni oído ninguna otra señal que delate la presencia de enemigos en esa parte del bosque.
Al descender de un rocoso promontorio divisas algo insólito en la enmarañada espesura. Rodeada de zarzas espinosas y apretadas raíces, ves la entrada de un túnel que desaparece en el interior de la ladera. La boca tiene aproximadamente siete pies de altura y algo más de diez pies de anchura. Al acercarte a ella notas una leve brisa que proviene del negro fondo. Si el otro extremo del túnel tiene salida por la ladera contraria de la colina, te ahorraría muchas horas de difícil ascenso. Pero también podría encubrir peligros desconocidos.
Estado: 6/23 de Resistencia [4-2 (por heridas) +4 de curación]
No tenia mucho tiempo y estaba herido, escalar no era la mejor oopcion. Ademas al subir podia ser sencillamente avistado y un blanco facil. Por lo que me adentro en la cueva, rezando por que no hubiera nada peor de lo que estaba huyendo
Perdon por el micropost ando algo liado
El túnel está oscuro y en su interior el aire es mucho más frío que fuera. Avanzas con mucha precaución apoyando una mano en la pared del túnel para ayudar a tu sentido de la orientación. Después de caminar durante unos tres minutos en total oscuridad, percibes un olor a podrido delante de ti, semejante al de carne putrefacta.
De repente algo muy pesado se precipita desde el techo sobre tu espalda y te hace caer de rodillas. Es un alacrán zapador y debes luchar contra él, pues trata de estrangularte con sus largos tentáculos viscosos y sólo tu sexto sentido te ha librado de la muerte
Alacrán zapador: Destreza en el Combate 17; Resistencia 7
Tú: Destreza en el Combate 16 (19-3 por la oscuridad); Resistencia 8/23
Puntuación en el combate: -1
No te preocupes, y sobre todo, ¡suerte!
Motivo: Lucha a muerte
Tirada: 1d10
Resultado: 6
La viscosa criatura lanza un prolongado y horrible alarido y cae muerta. Estás a punto de dejarte vencer por el pánico. A gatas te acercas al cadáver de la bestia y le arrancas de las mandíbulas lo que crees que es tu cinturón. A lo lejos ves luz y corres hacia allí lo más velozmente que te es posible. Cuando por fin sales al aire libre te desplomas en el suelo cubierto de hojas y jadeando tratas de recuperar el aliento.
Poco a poco te incorporas y compruebas que sigues llevando puesto el cinturón: después de todo no lo habías perdido. Lo que has arrancado de las fauces del alacrán zapador es una correa de cuero con una pequeña bolsa colgando del medio de la correa. Rompes la hebilla y encuentras en su interior 20 Coronas de oro.
Sintiéndote un poco mejor, recoges tu equipo y sigues hacia el este a través del bosque. Este empieza a aclararse hasta que finalmente descubres ante ti un camino entre los árboles. El camino está lleno de gente que se dirige hacia el sur. Muchos empujan carros de mano en los que transportan sus posesiones...
Editado tu ficha con las 20 coronas de oro.
Di perdón por el lrgo tiempo de ausencia. Mi padre aún no se recupera del todo por lo que con la universidad me quita la mayor parte de mi tiempo. Sin embargo, las cosas se van tranquilizando por lo que en unos días voy a poder volver con un ritmo normal
EDIT del máster: Sin problema, era sólo saber si todo andaba bien, o bueno, todo lo bien posible :)
Respiro ,tratando de recuperar el aliento, un poco más y hubiera caído a manos de esa bestia. Por suerte salí con vida y con unas cuantas monedas demás, seguro de otro desafortunado viajero. Cuando salgo de la cueva me encuentro otra vez en el bosque. Ya sintiéndome mejor reanudó el viaje ya más tranquilo.
A las pocas horas, por fin puedo vislumbrar el final del bosque. Aliviado salgo raudo de este mar se hojas y entró a un camino transitable. El camino estaba lleno, una multitud de personas estaban recorriéndolo, empujando carros llenos de posesiones. Parecían refugiados de algún pueblo destruido, me pregunte si también habría sido obra de los giaks. Unirme a esas personas era mi mejor opción por ahora intentaría ver que es lo que había pasado y así podría saber algo de los giakss.
La gente está cansada y hambrienta, puedes verlo desde lejos. Han recorrido muchas millas desde que abandonaron su ciudad en llamas, y a medida que te acercas te das cuenta de que no son realmente una amenaza, para ser sinceros, ni siquiera se fijan en ti demasiado, sucio y herido como estás, cuando te unes a ellos.
Estás a punto de preguntar a uno de los aldeanos, buscando respuestas, cuando de pronto oyes el batir de gigantescas alas. El sonido proviene del norte, y ahoga tus palabras.
-¡Son kraans, kraans! Escondeos.
El clamor se extiende a lo largo del camino. Los pobres desdichados corren, nerviosos y asustados y, frente de ti, la rueda de un carro en el que van unos niños se atasca en un surco del camino y se rompe. Los niños chillan aterrados, incapaces de moverse.
ESTADO: 8/23 de Resistencia.
¿Puedo saber cuántos son y sus características?
EDIT: No sabrías decirlo, los kraans van por el aire y el bosque oculta a algunos de ellos. Sabes que son unos cuantos de esa especia de serpientes voladoras corruptas y que como es habitual, llevan jinetes sobre ellos.
¿Todo bien Dragen? Me quedé a la espera :P
-Mierda- pense, unos niños se habian quedado atrapados incapaces de escapar de los kraans. Todo el mundo empezo a correr por su vida y nadie los vio o no se atrevian a salvarlos. COn los mounstros cada vez mas cerca el tiempo se agotaba. Estaba herido, si iba en la ayuda de lo chicos puede que acabara muriendo con ellos, sin embargo no podia dejar a esas pobres almas a su suerte. Aprete los puños con fiera y corri en la direccion contraria a la que lo hacian todos, rezando por que no fuera tarde para salvar a esos chicos.
Saltas hacia el carro. La gente corre en todas direcciones cuando los kraans atacan y se llevan por los aires tenebrosos a sus pobres víctimas. Un enorme kraan planea sobre el carro y tres rugientes giaks saltan de su lomo sobre los espantados caballos. Debes pelear contra ellos mientras los niños huyen o abandonar el carro y correr a refugiarte en una casa de labor cercana que, desde ahí, tienes a la vista.
Aviso: Casi una semana desde la actualización, ¿todo ok?
Hice lo que pude, libere a los niños del carro, ahora sólo podía rezar por ellos. Cerca de donde estoy vei una cabaña cerca, un enorme kraan pasa cerca del carro y de el salen 3 giaks. Eran demasiados y yo mee encontraba herido, espere con todas mis fuerzas que nos niños oudersen escapar y corro hacia la casa que vi si mirar atrás.
Sorry, pero es que cada vez me pones las ediciones más difíciles T.Te
Abriendo la puerta de una patada, entras como una tromba en la casa de labor. El kraan que te perseguía te ha perdido de vista, pero al poco escuchas su aleteo, notando como planea en el cielo sobre el edificio, lanzando un graznido de victoria, pues de sus garras pende otra víctima que chilla aterrada. Demasiado parecido a los gritos de miedo que uno de los niños...
Sin embargo, no puedes hacer ya nada. Has puesto en riesgo tu vida y tu misión todo lo que has podido, ahora necesitas descansando. Tras comprobar que estás solo investigas a fondo la casa, y acabas por encontrar un pesado Martillo de Guerra que, si quieres, puedes coger, pues no parece que haya nadie para reclamarlo. También encuentras fruta suficiente para comer, y aunque no ves nada más en los armarios y cajones de la cabaña, no puedes quejarte.
Tras comer, vendar tus heridas con algunas telas y dormitar un rato, acabas por dejar pasar primero una y luego otra hora, hasta que empiezas a escuchar fuera de tu refugio el sonido de gente que parece salir del bosque. Con precaución, sabiendo que puedes no estar a salvo, te deslizas por la puerta y te escondes en el bosque. Permaneces atento hasta que te das cuenta de que son supervivientes de entre los refugiados, lo que significa que los Kraans y sus crueles jinetes han debido marcharse ya.
También oyes a lo lejos el galopar de caballos. El sonido se acerca y en poco el eco de la caballería se convierte en un estruendo. Los blancos uniformes delatan, en cuanto están a la vista, quienes son. Por el camino se acerca, veloz, un regimiento del Ejército Real de Su Majestad.
Tú, en la linde del bosque, debes decidir que hacer...
Estado: 18/23
Si decides coger el martillo tendrías que dejar el hacha o la lanza.
PD. Juraría que te había respondido, ¡qué cabeza la mía! Siento mucho el retraso con la historia :(