Partida Rol por web

Podria mentirte, pero no lo hare, solo se lo he contado a una persona. A Anna por que es como la hermana que nunca tuve me inclino un poco hacia delante mientras no aparto la mirada

No te preocupes, te protegere de quien intente hacerte daño, te lo prometo. No voy a dejar que nadie sufra y menos un buen amigo como tu. Siempre te estare vigilando

Su comentario crea en mi rostro una perfecta imagen de sorpresa, antes de estallar en sonoras carcajadas que pronto cesan por educación. ¿Protegerme? Esta si que es buena, debo de dar una imagen bastante pobre si cree que preciso protección.

- JAJAJA... ¿Crees... crees que temo que me hagan daño? ¿Que temo por mi seguridad? Jajaja... - Separo mis piernas, que estaban cruzadas, y me inclino hacia delante- Según mis creencias, si no teno la fuerzapara proteger mi dominio, merezco perderlo. Y yo hago extensiva la norma a mi propia vida: si no puedo defenderme por mi mismo, merezco el daño que me quieran hacer. -Vuelvo a recostarme- No, no temo por mi seguridad. Aunque agradezco tu interés.

No es ese tipo de daño Ian, es otro mas sutil, mas mezquino niego mientras me levanto y camino hasta estar tras el asiento y deslizo los brazos por los laterales abrazandote por el cuello e inclinandome un poco para susurrarte al oido donde has vivido, nadie ha dicho nada de ti, ni de tus actos pero este mundo al que vas a ir es un mundo de hienas, de lobos que te despedazaran despues de quitarse su falsa piel de oveja y para su lengua no estas preparado, aun creo que no

De modo que... ¿Aquí el peligro es que hablen de ti? Esto si que es nuevo para mi. Estoy habituado a tener que defenderme de las garras de los depredadores de la selva, de las lanzas de los nativos y de los fusiles de los cazadores furtivos, incluso del potente armamento de las guerrillas. En estos años de inmortalidad, mi exiwstencia ha corrido peligro en numerosas ocasiones. Y sin embargo, ahora he de preocuparme por... ¿Palabras?

- No... no lo entiendo.

Giro el cuello ligeramente, aprovechando la cercanía de Sarah. Acerco mi rostro a su cuello, no los colmillos como un cazador, sino la nariz como un igual, para degustar su aroma cercano y sensual.

- ¿Qué hay de peligroso en sus lenguas? Incluso la serpiente más venenosa inyecta su veneno a través de los colmillos, no de su bífida lengua. -Acaricio levemente su mejilla con la punta de mi nariz, mientras inspiro suavemente- Sin embargo, creo que debo confiar en tu criterio. Agradeceré que me vigiles, pues además de ese modo estaré seguro de tenerte cerca...

Ian, las lenguas de la estirpe son duras, muy duras y al final nos terminan haciendo daño, demasiado daño te miro de reojo y apoyo la barbilla en tu hombro. Van a comenzar a decir cosas, mentiras sobre ti. Haran que te rehuyan que el mundo se hunda a tu paso que se pudra que se tuerza que todos te odien. aroma a rosas, frescas como si las hubiera cortado el mismo dia se despega de toda mi piel de cada rincon de ella. Ian Nottingham el que mato a su familia, el que sacrifica jovencitas para su disfrute personal. Deseoso del poder del principe, le derrocara, le aniquilara y despues destruira la ciudad sonrio cerrando los ojos Aun despues de muerta, de nuevo te protegere...

Sonrio ante las sugerencias que presenta Sarah, mentiras que podrían urdir contra mí y que me terminarían destruyendo. Pero no sonrío despreciando tal posibilidad, sino con una sonrisa seca, cínica. Recuerdo las palabras que un jefe indio pronunció ante mí en una ocasión: por fiero que sea el león, tarde o temprano se enfrenta a otro aún más fiero. En aquel momento, el más fiero era yo, y desgarré su garganta con mis fauces. Pero sus palabras no me han abandonado, como una premonición, un presagio. No soy un ególatra, se que no seré el vampiro más poderoso del mundo. Se defenderme, y venderé cara mi piel cuando la Muerte Definitiva me alcance, pero tarde o temprano me cruzaré con otro en la sangre más fuerte que yo. Y mi esperanza es que me vea como depredador y no como presa.

Deslizo mi mano hacia el pelo de Sarah, acariciando suavemente los mechones tras su oreja. Se que en estos momentos no estoy muerto o inmerso en una auténtica guerra civil gracias a ella. Y me ofrece protección en el nuevo mundo que debo descubrir y comprender. Pero ¿Por qué? ¿Qué gana ella con todo ésto?

Deseo conocer esos detalles, pero no me atrevo a preguntarlos. De modo que permanezco en silencio, serio y cavizbajo, inmerso en mis propias dudas.

¿En que piensas? te miro a los ojos sonriendo siento si te han incomodado las palabras, pero han sido blandas considerando lo que pueden algunos decir. Pero no te preocupes, aun tardaran en llegar, si oyeras lo que dicen de mi. Todo mentiras, pero tan divertidas como... si lo recuerdo lo que me dijo aquel hombrecito una vez me quedo pensativa un segundo antes de decir

Las grandes almas tienen voluntades; las débiles tan solo deseos. ¿que alma tienes?

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En tantas cosas... En mi actual debilidad mi falta de conocimientos acerca deuna sociedad que me es ajena, que es más peligrosa para mí que una selva inhóspita y apartada. En los años que llevo en la eterna noche, y lo poco que me sirve eso ahora. No soy mucho mejor que un vampiro recién creado. Más letal, si, pero no mejor.

- En el futuro, Sarah, en el futuro...

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Deseos. Anhelos ¿Qué es eso, ya? ¿Donde quedan esos sentimientos? Recuerdo haberlos tenido, recuerdo haberlos compartido con Labika. Hace mucho.

- Ya no recuerdo la última vez que tuve deseos. Ya no se ni cuanto tiempo llevo moviéndome solo por la voluntad. La mía... y la de aquél que habita en mi interior.

Pues cuentame como lo ves replico apoyando la frente en la tuya y luego mirandote a los ojos sonriendo. tal vez me guste ese futuro, sea mas bonito que el que yo he visto

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Dejame que te ayude a encontrar esos deseos y a cumplirlos. Ian no debes dejarte llevar por lo que habita en ti, tu eres el que lo domina, no el a ti. No lo olvides

Cita:

Mantengo la mirada en algún punto al fondo del avión, como si fuera capaz de ver a través de su fuselaje y clavar la mirada en un punto lejano del horizonte nocturno.

- El problema, Sarah, es que no lo veo. Lo veía antes, cuando lo planeaba junto a mi mentora y madre. Ahora, en cambio, viajo con destino incierto, solitario de aquellos que me han acompañado desde que me hice uno con la sangre, y desconocedor del mundo en que voy a adentrarme. No veo mi propio futuro, Sarah -Una tenue sonrisa develve mi mirada a mi anfitriona, clavando mis ojos en los suyos- Aunque eso no tiene por qué ser malo ¿No es cierto? Las grandes almas tienen voluntades, no simples deseos. No necesio ver mi futuro, sino reacciona ante él y doblegarlo.

Cita:

¿Dominio? ¿Sumisión? ¿Dejarse llevar? No son conceptos qe yo tenga asociados a aquel que habita en mi interior. Me resulta extraño oir a otro en la sangre hablar de él en esos términos.

- Yo no controlo a quien mora en mi alma, ni él a mí. Yo no puedo vivir sin él, ni él sin mí, somos parte de un mismo ser. Aún no comprendo la forma de entender esta relación por parte de los extranjeros, pero él es tan parte mía como el puño con que destruyo a mis enemigos. Más aún, porque me concede un poder inigualable cuando lo preciso. Nunca será mi siervo, ni yo el suyo, es nuesta unión lo que alimenta mi poder. Considero que las concesiones que le otorgo son poca cosa, a cambio de lo que me entrega.

No estas solo, me tienes a mi, te acompañare el tiempo que haga falta, hasta que ya no me necesites. Se que la relacion con tu sire es algo que no puedo comprender al igual que tu no comprenderias la que tuve con el mio, pero tambien hay noches en las que le echo de menos, me acompaño mucho enseñandome que era la libertad de ser vampiro y que la sed no debe controlarnos, sino nosotros a ella. te acaricio la mejilla con la mano con suavidad.

Ruega que no te pida algun dia en tu oscura y eterna noche algo de lo que puedas arrepentirte mas adelante

Tiene razón. Jamás comprenderá mi relación con Labika. Como tampoco yo comprendo tantas y tantas otras cosas. Pero la tengo a ella, aunque no la comprenda, aunque no esté seguro de poder confiar en ella. Es lo que tengo, a lo que aferrarme. Es lo que necesito. Para sobrevivir.

- Te agradezco tu compañía, tu dedicación, tus buenas intenciones -Acompaño su caricia tomándole la mano, manteniéndola en mi rostro- Prometo tratar de controlar mis impulsos, aunque la forma en que lo haga sea... diferente.

Sonrio asintiendo y manteniendo la mano

Se me habia olvidado, la llamada de antes, hable con Londres. Creo que conseguire una fiesta para que te presentes en sociedad, si la primogenita Toreador me recibe, bueno o al menos el principe, pero en ese caso ira Pietro. Ese dia tendras que controlarte mas aun si cabe, la bestia a veces surge de donde menos te lo esperas

Controlarme. La Bestia. Donde menos te lo esperas. Expresiones que me son ajenas, comprensiones diferentes de una misma realidad. Cuanto tengo que aprender. Pero cuanto tienen ellos que aprender, también.

- El que habita en mi interior no precisa ser controlado. No es mi enemigo, ni una bestia irreflexiva. Es un animal leal, una fuerza fiel, protectora de aquel que le alimenta. Mientras le trate como tal, mientras sepa alimentarle convenientemente, jamás será mi enemigo, sino mi protector. Soy yo mismo, mi lado salvaje, mi lado no-humano. Porque ya no somoshumanos, somo... algo más. Pero vivimos entre ellos porque nos es necesario, como el lobo debe seguir a los rebaños de ovejas, o el león a las manadas de búfalos. Porque son nuestra presa. Pero no somos nuestra presa.

- Te agradezco tus gestiones, Sarah, no se que haría sin tí. Pero estate segura de que sabré comportarme. No es mi primera fiesta. He vivido de ellas desde que entré en la eterna caza.

Me aparto de ti y doy un paso atras antes de ponerme delante tuyo

¿has comido hoy? por que quiero ponerte a prueba si no te importa. Dices que es un amigo, un aliado y que no somos la propia estirpe la presa saco una daga de no sabes donde y la acerco a mi brazo descubierto apretandola sin que llegue a hacer herida ¿Que ocurriria si saliera la sangre ahora? ¿me atacarias, moriria bajo tus colmillos?

Mi semblante se vuelve serio ante su prueba. No entiendo que pretende, que intenta demostrar. Mantengo la compostura, como si todo eso me intrigase. Pero no me intriga, me molesta, me vuelve irascible.

- ¿Si no me hubiera alimentado convenientemente? ¿Si el hambre corroyera mi interior? ¿Si mi existencia estuviera en peligro?

Me inclino hacia delante, acercandome a Sarah, mirándola con la fiera mirada del depredador, a pesar de la amplia sonrisa divertida y educada que se dibuja en mis labios.

- La respuesta es SI.

Claro que si. Si yo estuviera en peligro, si no atendiera las necesidades que alimentan mi inmortalidad. El que habita mi interior lucharía. Por él, por mí, por nosotros. Me protegería, lucharíamos como una sola fuerza, salvaje, primaria. Y no me arrepentiría de ello. Es la ley de la selva.

Bajo el arma pero no la guardo aun

Pues eso debes controlar, si hubiera una herida delante tuyo, no podrias atacarle, deberias contenerte. No devoraras a nadie de la estirpe, es anatema notas un olor a sangre en el ambiente, un pequeño hilo rojizo se desliza por el antebrazo hacia los dedos de la mano, parece que al final si hay una herida y que la taponaba el filo.

¿Que es lo que me pide? ¿Sacrificio? ¿Por las normas? ¿Por otros? ¿Sacrificarme por otros? Eso no puede ser. Eso no va a suceder. Naturalmente que el león no se alimenta de otros leones, pero sabe matar a otros de su especie si su existencia está en peligro. Mata a los cachorros de otro si se adueña de una manada, seguro de que al crecer vengarían a su padre ¡¡Y las leonas observan y callan!! ¡¡Porque conocen su lugar!!

Me recuesto de nuevo, con la espalda completamente apoyada y un velo de tranquilidad e indiferencia en mi rostro.

- Lo lamento, Sarah. Me alimento convenientemente y me aseguro de esta rodeado de la mayor cantidad de presas posible. ESAS son mis reglas. Pero si mi existencia peligra, si debo elegir entre otro de tu... Estirpe, o yo mismo, no habrá elección. Yo mismo reclamaré al que habita en mi interior para que surja con su fuerza primaria y haga el trabajo. Y estaré consciente para disfrutar del espectáculo. No le debo nada a nadie, Sarah, y no hago sacrificios ni concesiones. Eso es lo que soy. Llámame bestia salvaje, llámame monstruo, no me importa. Soy consciente de lo que soy y convivo con ello, no lucho contra ello. No lucho conta mí mismo.

- No obstante, como ya he dicho, tengo unas reglas. Se lo que ÉL necesita y me preocupo de suministrárselo. Y soy muy concienzudo en ello, creeme. Mi... Bestia, como vosotros la llamais, está mucho más satisfecha que las de aquellos de entre los tuyos que han visitado Umtata en todos estos años. Lo se, lo he visto, he vislumbrado su interior, y los que habitaban sus corazones no estaban satisfechos, estaban furiosos, se sentían prisioneros y solo esperaban una oportunidad de escapar, aún fugazmente.

El olor de la sangre inunda mis fosas nasales. Siento el penetrante aroma, el suculento alimento. Pero estoy tranquilo, pues no estoy habriento. El que habita en mi interior descansa, como un león bajo la sombra de un árbol. Habrá otros momentos para cazar. Esta noche, está satisfecha.

- Deberías limpiarte, querida. No te sienta bien el rojo -Observando el hilo de sangre en su brazo, antes de volver a clavar mis ojos en su rostro- No hace juego con tus bellos ojos.

Eres identico a el. El era del clan de los demonios, un moldeador de carne y hueso. Torturador de los suyos me rio mientras me siento en la silla de nuevo, es una risa demente mientras se abre mi tercer ojo de nuevo y crecen los colmillos ¿Has visto tambien mi interior como el de los otros o solo la superficie?

MIro la herida con desden como si no me importara mucho que estuviera ahi, la acerco a mi boca para limpiarla con la punta de la lengua suavemente mientras se cierra y luego con el dedo limpio el fino hilo para chuparlo despues.

Ian, yo mate a mi creador, bebi su sangre hasta que murio, me hizo poderosa y le hizo acercarse al ultimo estadio de su salvacion segun el. Ya te dije que te protegeria no importa lo que hagas, es mi karma por el pasado...

- Me insultas, Sarah -Es cierto, no se en qué puedo parecerme a ese ser, pero su descripción está muy lejos de mi verdadero yo- No se nada de ningún Demonio, ni se que es eso de moldear carne y hueso. Pero yo ABORREZCO la tortura, del mismo modo en que ABORREZCO a quienes matan por puro placer. La presa siempre es digna de respeto, su muerte nos concede la vida, para eso existe y eso debemos respetar. Su muerte debe ser rápida y lo menos dolorosa posible. Es lo menos que merece por su sacrificio. No encuentro placer en matar, y no me gusta causar dolor. Me entristece que tengas esa opinión de mí...

Mi semblante se ha vuelto duro, frío. Mi mirada desciende brevemente, hacia el suelo del compartimento donde nos encontramos. Pero vuelven a ascender hacia su ojos. Estoy indignado. No furioso, no irascible, más bien defraudado. Un torturador ¿Yo? ¿Esa es la imagen que doy?

- He guardado respeto a tu intimidad, Sarah Matius. No me he inmiscuido en tu relación con quien te habita, ni tengo intención de hacerlo.