Partida Rol por web

Bien hecho Lars!

Elogió la antitribu con un buen humor palpable en su rostro, pero solo había sido un pensamiento veloz, pues volvió a centrarse en lo que quedaba del ritual, pero esta vez, alcanzando un nivel de concentración que pocas veces podía replicar, acabando con este por fin.

Quizá pensando en aguantar el disparo como la vez anterior, esta vez tampoco intento esquivarlo recibiendo el impacto directamente. Mientras tanto saco mi pistola para apuntar al tipo de las gafas de sol al tiempo que miro a Aurora.

Necesitamos terminar ya el ritual porque no tendremos mucho más tiempo si las cosas siguen así. Esperemos que no falte mucho para terminarlo.

Kupuka se lanzó contra ella pero estaba preparada, interponiendo la estaca entre los dos cuerpos kupuka se llevó un impacto directo sobre el corazón, pero Sam perdió pie mientras Kupuka caía encima de él y apenas le hizo un rasguño.
La mano del sacerdote de su manada se alzo mientras Sam forcejeaba por quitarse de la trayectoria de su garra como buenamente pudo. Pero no bastó, la pericia de su compañero de manada era mucha y de poco le sirvió.
- No quiero hacerte nada hermano, pero no puedo seguir perdiendo el tiempo, la manada nos necesita. - Dijo intentando que reaccionara.

Hijo de puta. Murmuré al ver que me impactaba, aunque al decirlo no pude hacer otra cosa que sonreirme al ver el caos de la gasolina habia hecho, si el hijo de perra queria jugar yo tambien podía hacerlo, así que saque una de las pistolas  y disparé mientras habia intuido que Aurora habia terminado el ritual, tal vez por eso, por el hecho de  no fijarme bien, en mi emocion por cain no fui muy efectivo, sabia que el fulano nos queria muertos pero yo queria  bailar sobre su traidor cadaver.

Veo mis creaciones extintas por el fuego, pero también a los tremere que quedan. El fuego debería mantener a raya a esos humanos así que es hora de dedicar mi atención a otros objetivos más peligrosos.

Pierre está resultando una verdadera molestia con esa velocidad. Invoco de nuevo la oscuridad. Tres nuevos brazos surgen de las sombras y se lanzan hacia el vampiro para enredarse en él e inmovilizarlo.

Aurora lo sintio en su interior como algo se formaba, pocas veces lo habia sentido pero era una sensacion que reconocia como si fuera un ritual compartido con los demas presentes.

Pierre no tuvo que esquivar un disparo y trago el daño del ataque de martin sin problema divertido por el enfrentamiento. Aunque se cuido de los brazos oscuros de Lars. Pero entonces antes de volver a disparar parecio sentir algo y con su velocidad empezo a retroceder rapidamente de ahi. No dijo nada en ese momento pero algo lo tenia muy molesto mientras escapaba.

Todos los demas vampiros lo sintieron ene ese momento, primero una sensacion que siendo humanos haria que sus pelos se pusiera de punta como si algun tipo de lectricidad estuviera pasando en sus cuerpos pero luego algo mas una sensacion de poder que les hizo olvidar por un corto momento los gritos de la bestia. La bestia que por un momento les pidio con miedo que se vayan pero ahora callaba.

Entonces los demas vampiros invitados mancharon con su sangre ese monte, haciendo que todos los presentes sintieran el corte no solo una vez sino diez veces como si estuvieran conectados.

Un grito salio del interior del monte, un grito de odio profundo pero tambien de una gran impotencia mientras agujeros que aparecian en la tierra se fueron sellando rapidamente. Pronto el monte parecia mas natural que antes con los arboles no siendo tan oscuros y las luces electicas volviendo a iluminar el camino.

Eso no quitaba que habia un incendio junto a ellos y que habia humanos delirantes. Pero cuando un trinfo parecio ocurrir frente a ellos, Kupuka los miro y en especial a Sam. "Esto no ha acabado..." fue lo ultimo que dijo con una voz que no le pertenecia. Entonces se metio sus garras en el pecho y con un rapido movimiento se estirpo el corazon arrugado que tenia. "Aqui." dijo como si lo ofreciera a ella para que clave su estaca, pero como te lo mostro lo aplasto destruyendolo. Entonces el gangrel callo al suelo volviendose polvo que lleva el viento.

Entre el caos vieron una figura casi transparente aparecer por los arboles viendo todo con mucha pena. Los habitantes de la ciudad reconocian que se trataba de uno de los originarios de esta tierra. Un Cree. Este suspiraba y los miraba a ustedes contemplando lo que pasaba.

Contemplando lo que pasaria porque sin freno alguno los demas vampiros que les acompañaron fueron contra los humanos religiosos mostrando una verocidad importante en especial del ex inquisidor. David tambien fue con ellos mientras Sam quedaba sola.

El Cree que se acerco al grupo donde estaba Aurora. "Han defendido nuestras tierras, sus tierras." empezo a decir en un idioma que no era frances pero extrañamente entendian a la perfeccion. "El demonio no esta muerto. Pero ustedes son inmortales...talvez puedan encargarse que nunca salga y nunca mas pueda hacerle daño a nadie." expreso aunque los miraba en principio con algo de duda notaron que pronto parecio un pedido de este. "Les agradecere esto." expreso el ser que parecia confiado para hablar con ellos aunque tal vez era porque era un espiritu. "Me llamo Askuwheteau. Quien vigila." se presento finalmente.

Iba a seguir disparando cuando los sucesos a nuestro alrededor se disparan. Primero Pierre huye, pero cuando voy a ir detrás suyo sucede lo de Kupuka. Un nooo realmente apenado sale de mi garganta mientras extiendo la mano en esa dirección pero ya es demasiado tarde. Agacho la cabeza y rezo una rápida oración a Caín por el alma de nuestro compañero.

Entonces vemos el fantasma de los antepasados y me quedo mirándole fijamente mientras escucho sus palabras. ¿Conoces un túmulo que hay detrás de la Basílica de Notre Dame? Quizá podríamos hablar con quién habita ahí para ver si hay alguna forma de que pueda proteger esta zona o la zona donde haya quedado el demonio.

Miro a los vampiros atacando a los humanos con auténtico hambre pero intento controlarme para resolver este asunto. Después iré a cazar, lo necesito urgentemente.

Vi al desgraciado huir mientras maldecia en mi interior, pero lo peor fue luego de esa extraña sensación donde mi sangre quedo en el suelo ver como Kapuka se suicidaba, una parte de él aun estaba luchando, y de esa forma perdía a un amigo, un dolor incomprensible establecia mi ser, mientras me arrodillaba en la tierra con las manos temblorosas sin saber que era realmente lo que había ocurrido, ¿quien era ese ser que salia de la montaña?, ¿el guardian dice?, ¿pero eso en qué se traduce para el beneficio de Cain?

El ritual decía que mostrarias a los demás la corrupción de los implicados, ¿puedes hacer eso?, ¿pueden los demás ver la corrupción de los que hicieron daño a esta montaña?, ¿a montreal?, ¿nos hemos librado del demonio?, explicanos espiritu de la montaña, explicame más...

Mirando a Aurora digo:

El sacrificio de tu pierna no quedará en vano... lo hiciste bien- y mirando a los demás digo- lo hicieron bien, TODOS...

Sentia hambre... y sentia el hambre de los demás.

El mundo le dió vueltas tras completar el ritual, estaba de pie en su única pierna, esta cedió ante el inminente cansancio que ella manifestaba, se desplomaba sobre el suelo, agotada pero feliz de que está situación se normalizara y terminara bien... O eso creía.

Eh? O-oye, Kupuka... Que haces...

Fue lo que dijo mientras comenzaba a arrastrarse en dirección al gangrel.

No, no lo hagas por favor.

Su cara se llenó de desesperación, terror, y dolor al ver cómo el bastardo que lo dominaba estaba provocando el suicidio en en su hermano de manada, hasta que su corazón marchito fue aplastado, y sentía cómo ese sentimiento se reventaba cómo una burbuja.

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHH.

Las lágrimas saltaron y ella comenzó a arrastrarse al montón de polvo que antes era su amigo, estaba llorando casi a todo pulmón mientras más cerca estaba de los restos.

Había ignorado la aparición del espíritu o lo que fuera, ella estaba sintiendo tanto dolor que la ira se estaba acumulando.

Voy a... Matarlos... Voy a matarlos, voy a matarlos, VOY A MATARLOS A TODOS, MATARÉ A TODOS, LOS MATARÉ A TODOS, SENTIRÁN MI IRA Y LOS HARÉ PAGAR POR LO QUE HICIERON CON KUPUKA, VOY A MATAR A TOOOOOODOOOOOOOS.

Estaba perdiendo la cordura en su mar de dolor y furia, mientras gritaba que mataría a los causantes de la muerte de su amigo.

Siento una verdadera frustración al ver cómo Pierre nos elude y escapa, y me prometo que lo atraparemos mientras hago chasquear los tentáculos de oscuridad.

Entonces la acción de Kupuka me deja helado. No llego a moverme mientras el gangrel se deshace en una nube de polvo. No sé cómo reaccionar, más que contemplando lo que queda de él.

La rabia de Aurora me hace dudar de si acudir o no, pero termino acercándome con cautela y poso mi mano en su hombro en un intento de tranquilizarla.

- Le vengaremos - digo mientras le ofrezco apoyo para que pueda ponerse en pie y unirnos a los demás y al espíritu.

Y kupuka se fue de aquella manera, murió delante de ella mientras trataba de frenarle. Sam se puso de rodillas cuando este le dejó incorporarse y se quedó paralizada cuando se arrancó el corazón. Boquiabierta pues era lo último que esperaba. Por un instante se asustó mientras este hablaba pensando que había una esperanza y luego ... Ni siquiera pudo gritar. Estaba llorando y temblando como una idiota de pura rabia. Primero su hermano y ahora Kupuka...
Sedienta, hambrienta y rabiosa no pudo contener a la bestia y se lanzó a por los humanos detrás de David y el inquisidor como una desquiciada sin ninguna contemplación por nada ni nadie, gritando de un modo que haría que mas tarde se resintiera su voz.

"Si, lo conosco un buen cristiano. Se suponia que me reemplazaria pero lo sellaron donde no debian." expreso con tristeza a Sean que se encontraba ya algo alterado por todo y talvez mas por ver a Sam corre con los demas. Vio a los demas y parecio que el espiritu los miraba con igual tristeza. "Lamento mucho su perdida." expreso a todos.

Nego con la cabeza a Martin por un tiempo mientras miraba a los demas del grupo con si estuviera fijandose algo. "No soy el espiritu de montaña. Soy Askuwheteau, un chaman del pueblo Cree. El espiritu de la montaña fue asesinado por el demonio que ahora la habita y que no esta muerto. Pero estara encerrado por algunas decadas o mas tiempo, esa es la buena noticia." expreso aunque siempre con una gran seridad mientras miraba a los demas.

"Si tu eres el jefe espero que puedas calmar a los tuyos. No se si pueda confiar en quienes no pueden dominar sus instintos." expreso con firmeza pareciendo no confiar del todo, sin duda no era un agente de Cain pero si un posible aliado. "Si juras no dañar esa cruz..." señalando la gran cruz de montreal. "tambien que cuidaras este bosque y plantaras arboles por todo lo que quemaste y por ultimo no dañaras a ninguno de mi tribu. Entonces te dare algo que te ayudara a identificar a los sirvientes del demonio." le propuso como condiciones.

Mientras no muy lejos de donde estaba el espiritu y el grupo estaban los demas vampiros peleando. El fuego seguia con fuerza por la naturaleza aunque algo de agua llegaba a ese lugar por una lluvia que talvez habia llegado por su propia voluntad o tal vez por la de Jakob. Lo importante igual fue que empezo a llover con cierta fuerza.

Eso no importaba a los que peleaban y comian al mismo tiempo. Todos escuchaban el ruido de los gritos, el olor a la sangre y las risas siniestras de sus compañeros. Habia una fiesta sabbat al lado y los humanos no tenian ningun tipo de oportunidad contra ellos.

Sam mientras ahi estaba tambien comiendo y golpeando. Con David al lado sonriendo y mirandola con varias ideas en su mente.

Martin se estaba conteniendo por el dolor por la perdida de Kapuka, una pequeñisima lágrima de sangre se asomó de su ser pensando en él, y en parte, en su sacrificio,  por lo menos se habia liberado, y las reacciones de Aurora y de Sam, lo impactaron,  nadie sabia lo mucho que había querido  a su sacerdote.

Y entonces, escuche limpiandome  la lagrima y mostrando fortaleza, habia sido siempre fuerte de voluntad, y mirando al espiritu le dijo:

Yo te prometo que cuidaré este sector y los mios, y cuidaré  en honor de nuestro hermano perdido qué tenia más conección con la naturaleza, en honor a Kapuka,  su sacrificio, el nuestro y en honor de nuestro Padre, te prometo que cuidaré esta cruz, y   si me ayudas con lo que me vayas a dar para identificar a los traidores, yo estaré agradecido, dado que su misma presencia es una amenaza para este sitio y para otros lugares sagrados.

Igualmente deberemos poner nuestro dominio cerca para poder cumplir con esta promesa. Pero prometo cuidar este lugar sagrado para que no vuelva a ocurrir

Pensé en Corazón y miré a las viudas de reojo.

Y respondiendo a la petición del indigena de calmar al grupo dije:

Hermanos, Emisarios de Cain!, Hermanos - miro a todos, pero en especial aquellos que tuvieron esa reacción- y aliados a esta noble causa, por favor  dominar vuestra voluntad!, hagamos esto en nombre de nuestro padre y en honor de Kapuka, que  al final demostró ser nuestro hermano al cual nunca olvidaremos, y  con la calma, nuestra venganza estará hecha, por Cain y por todos, pagaran.

Sam se había lanzado de cabeza a por el primero de esos humanos que encontró cayendo encima de él para morderlo a continuación. Al apartarse de él, el hombre estaba muerto con la mirada perdida y la cara de Sam estaba manchada de sangre, se alzó buscando más víctimas con fuerzas renovadas.
La voz de Martin resonó lejos, pero entre todos los cuerpos moviéndose y con el sabor de la sangre en su boca sus palabras sonaban distantes y carentes de significado, lo único que asimiló era que en su timbre no había urgencia ni llamada de socorro alguno.
Volvería a moverse entre los cuerpos, atizando mamporros aquí y allá para agarrar a otro de esos humanos y morderle el cuello con tanta fuerza que casi separó su cabeza del cuerpo. Entonces  pareció ligeramente desorientada cuando aterrizó en aquella debacle. Pronto un puñetazo le hizo aterrizar y agarró al fulano en cuestión del brazo mientras apartaba a otro de ellos de una patada. Y de esa guisa se alejaría del corazón de la reyerta.

A pesar del hambre que siento permanezco junto a Martin mirando a los demás. Pero me giro hacia el espíritu y afirmo a sus palabras. Si Martin ha dicho que así se hará, es que así se hará. Su palabra es firme y no se equivoca, convertiremos esta montaña en un refugio seguro en honor a Kupuka. Y en la medida de lo posible evitaremos dañar a los miembros de su tribu, aunque no por eso nos dejaremos matar por uno.

Termino por reunirme con el grupo y el fantasma. No siento hambre pues no me he visto obligado a usar demasiada vitae y, pese a la carnicería que tiene lugar a varios metro de mí, presto atención a la conversación.

Asiento a la petición del fantasma, de acuerdo con los demás. Poco puede añadirse a sus palabras.

Le costaba mantenerse bajo control, pero si pudo, realmente era de las cosas más difíciles que tuvo que hacer en su no vida, se apoyó en Lars mientras podía mantenerse, pero el hambre sr estaba haciendo insoportable, insufrible y molesto.

​​​​​​Sa... Sami...

No tenía fuerzas para mantenerse en pie, literalmente, ahora quedaba seguir escuchando, o al menos tratando de escuchar por su parte.