Partida Rol por web

 Escuché sorprendido lo referente a la caja desconocida y no lo oculté, ya que no sabía genuinamente nada al respecto y ese detalle podría ser crucial para exonerar a mi sire:

 - No se nada sobre esa caja, de verdad, es la primera vez que escucho algo al respecto acerca de ella. Lo que si se es que conozco muy bien a Ibrahin y jamás hubiera formado parte en el asesinato de un príncipe, al menos que el objetivo hubiera sido una serie amenaza para La Camarilla, y no lo hubiera decidido por su cuenta y riesgo, eso seguro. Habría seguido ordenes de la propia organización, o al menos les hubiera informado de los detalles o pruebas. No digo que pudiera estar presente en el asesinato, las pruebas parecen ser sólidas en ese sentido, pero podría ser un testigo presencial, no el autor.

 Dí varias vueltas pensativo, antes de suspirar, y continuar:

 - Se lo que puede parecer, los intentos de un chiquillo Tremere para proteger a su Sire, y cuyo juicio puede estar perturbado por sus sentimientos o un deseo de mantener su propio estatus, pero es mi opinión genuina basada en los años en que conozco a Ibrahin. No tengo más pruebas salvo mi palabra y lo que puedo contarle, usted decidirá si creerme o no. ¿Que más quiere preguntarme?.

En el momento en el que nos íbamos a quedar solos me temí lo peor. Con los otros allí aún podía haber algo de control, pero solo la gangrel... Nada más alejarse Krampus y Nicholas, llevé la mano al bolsillo, en un gesto casual que, sin embargo, no tenía nada de fortuito. Mi navaja era un arma tan buena como cualquier otra si uno sabía como usarla, y a mi se me daba bien. Si esa chica se creía que iba a tenerlo fácil se iba a llevar una desagradable sorpresa, al igual que sus compañeros cuando se encontraran a la gata despellejada a modo de aviso.

—Acércate y lo compruebas cuando quieras —respondí a la invitación. Verás que chasco cuando te des cuenta de que el apodo no es más que otra forma de tocar los cojones de Ratón. Y nada que ver con lo que yo hacía.

Sin embargo, no hubo suerte. Krampus, que no se había ido todavía, se dio la vuelta al escuchar el intercambio, y volvió a apartarse con sus protegidos, como una madre con sus críos. Una madre jodidamente fea, pero no vamos a juzgar, claro que no. Mientras, Malware aprovechó el inciso también, antes de largarse definitivamente. Y en cuanto todos lo hicieron, Øystein decidió salir al final, dando pie a una escena cuanto menos surrealista.

—Podéis iros a un motel cuando queráis. O detrás unos arbustos, si os mola más ese rollo —dije alzando una ceja. Yo también estoy, ¿os acordáis?—. Y ni se te ocurra —avisé al otro Brujah, previendo su impulso contra mi furgo, aunque todo con una sonrisa.

No había maldad alguna contra el tipo, y si se cargaba un cristal, bueno, ya se arreglaría. Algo me decía que por cosas peores iba a pasar en un futuro cercano, así que tampoco había que hacer sangre por una tontería. Volviendo al tema.

—Me imagino que os conocéis ya. —Por supuesto, el tren—. Mejor, me libro de tener que hacer las presentaciones y dar explicaciones. Respondiendo a tus preguntas de antes... —Miré a Gaia y me encogí de hombros—. Ni puta idea. Soy de los que dicen salta, y salto —no me costó admitirlo—, así que no suelo preguntar demasiado. Eso se lo dejo a mi sire, y conociendo a esa zorra, seguramente nos cuente lo justo y necesario, en el último momento. Aunque quien sabe, ha estado muy habladora. Solo se que, aquí nuestro colega —me referí así a mi compañero de Clan—, es quien nos va a conseguir la reunión con los Anarquistas, y a ser posible evitar que desemboque en una matanza de la que salgamos mal parados. Así que esperemos que estén de buen humor, y que no todos sean unos Gangrel asalvajados, ¿eh?

Gaia miró de soslayo a Cathrain cuando le instó a comprobar si sabía usar los puños, recibiendo como respuesta una provocación -... ¿Y cabrear a Malware? No estando del mismo lado...A Krampus no le gustaría... - al menos era sincera, a ella no le importaría nada una peleilla, de esas que empezaban a puñetazos, continuaban a mordiscos y terminaban en inconsciencia, pero no era buen momento para que los aliados con un objetivo común quedaran impedidos frente al enemigo. Estaba claro algo, Gaia no le tenía miedo, lo determinaba su sonrisa tranquila -... Me gusta tu actitud, quizás en otro momento podamos medirnos... Siempre he disfrutado el combate... Si te va la marcha ya tendremos momentos para entretenernos...

El beso con Holtet fue intenso, tanto que despertó un comentario en Puños -... La idea de los arbustos me gusta, no sera la primera vez... - responde la mujer con la naturalidad de quien come palomitas de maíz -...Pero no te enceles, seguro que tú también le beneficias y con gusto a tu sire.... - o eso imaginaba, era una de las primeras relaciones que surgían entre vampiros, aunque los gangrels solían tener reuniones más erótico festivas, eran abiertos sexualmente hablando y actuando a no ser de que el alfa fuera particularmente celoso. Y ahí estaba Gaia, sentada sobre la entrepierna de Holtet con la mirada felina traspasándole, mientras él le silbaba y se apartaba.

- Oh la culpa de toda esta porquería que llevo es por Krampus, me obliga a bañarme a diario y me ha comprado ropa nueva... - Oystein comienza a agacharse debajo de su vestido y Gaia se lo levanta, sin pudor, mostrando un diminuto tanga negro de encaje, eso y no llevar nada era lo mismo -...¿Ves así mejor?... - La hembra no tenía inconveniente para mostrar su cuerpo, el cual todo había que decirse, era espectacular en musculatura, esbeltez y feminidad. 

Que Oystein le dijera que estaba preciosa le había gustado, al igual que cuando su coterie se quedó impactada mirándola, jamás había levantado tanta expectación entre los varones y la vanidad femenina había comenzado a surgir desde hacía relativamente poco tiempo.

- Sí nos conocemos... - se baja el vestido y pone su mano sobre el pecho de Holtet -... este tipo es de fiar... y yo nunca olvido a mis amigos... - por el gesto de su cara sobró decir "a mis enemigos tampoco" -...¿Te dicen salta y saltas?.... - Gaia le miró con curiosidad -...¿Y tus deseos?... Quiero pensar que eso lo haces con tu manada, si no..., vas a ser la mascota de alguien durante mucho tiempo..., y en mi experiencia, más te vale mostrar carácter, o serás el juguetito de algún antiguo..., deberías saltar sólo cuando sepas para qué cojones lo haces... 

- Oystein....¿los anarquistas quieren una tregua o paz con la camarilla?.... - pregunto dudando, cuando Krampus no está me siento en la obligación de saber más -...¿Por qué vas a mediar en la charla?... Me sorprende ese cambio de ideología en ti...  ¿Es idea de Linn?... ¿Está ella esperándonos cerca?... - le pregunto con curiosidad

- Puños, llamar salvaje a un gangrel que sepas que es un halago... - le dice con buen humor, no era la primera vez que alguien hacía esos comentarios para faltar al respeto y se encontraba con que realmente aquel término no tendía a molestar -...Y créeme, si vas a hablar con anarquistas y eres del otro lado, no te van a recibir con buen humor..., le tendrás que ofrecer algo para que no te revienten... Ya sabes la ley de "estás en mi territorio, paga el precio"....- le comenta pensando que si Krampus se quejaba de ella y su falta de sutilidad, moriría si tuviera que enseñar a ese brujah novato

- Oystein... me gustaría que en algún momento pudiéramos hablar, quizás más adelante....y pudiéramos... bueno..., echar un rato juntos... Probablemente Ovillito y Krampus también lo deseen...Por los viejos tiempos, ya sabes... Además quiero que sepas donde y cómo puedes localizarme, tras esta noche sabré dónde voy a pasar la mayor parte de mi tiempo... Me gustaría saber lo mismo de ti... - él sabía que ella no mentía, y quería tener contacto con él, la experiencia del tren le había unido, así como sus acciones, a los amigos, siempre cerca.

- Puños..., ¿hace mucho que fuiste abrazado?... - le pregunta a su nuevo "juguetito" -... ¿te llevas bien con tu sire o es una de estas relaciones "difíciles de explicar"?....

El brujah se fue animando poco a poco. Le gustaba la actitud del hermano de sangre, y Gaia continuaba en su radar de posibles reclutas del movimiento. Sí, se amenazaban mutuamente, pero de frente y con honor. De quienes desconfiaba era de los tipos cobardes y cautelosos como Krampus, que medían cada gesto, cada palabra, por lo que le disgustó comprobar que era el nosferatu quien dictaminaba ahora las acciones de Gaia. Qué curioso que semejante bichejo impartiera modales y vestimenta a otro caínita.

—Los anarquistas sólo quieren anarquía —explicó idiotamente Holtet, encogiéndose de hombros. Junto a su sire, Linn, habían formado parte de la avanzadilla del movimiento anarco por establecer sede en Berlin tras la muerte del primogénito malkavian, y gran parte del mérito de la fortaleza de la facción en la capital alemana se debía a sus esfuerzos. El brujah estaba seguro que su sóla presencia en la ciudad conseguiría aplacar los ánimos. O todo lo contrario— A los anarquistas no les interesa la paz con la Camarilla. Ni la guerra. La torre se está desmoronando por su propio peso —se trataba de lo que los antiguos denominaban como la Llamada, algo que por la juventud en las filas del movimiento, apenas si había afectado a los anarquistas— Y yo no he cambiado de ideología. Digamos que, aunque no lo parezca, me encuentro en una situación comprometida.

De la que espero librame ni bien ponga un pie en Berlin. Los idiotas lo llevaban a uno de los centros de mayor ebullición anarca del viejo continente, una bastión que fue posible en gran medida gracias a las acciones suyas y de su rubia. Si tenía suerte, le tratarían como un héroe allí. En el peor de los casos, contaba con la reputación de su rubia. Sin embargo no estaba dispuesto a hablar de más delante de Cathrain y la gangrel ahora que sabía que Krampus era quien manejaba los hilos.

—Cuando quieras, princesa —replico a la oferta de Gaia de mantener una "charla" amena. El vestido le sentaba muy bien, pero Øystein hubiera preferido verla con una chaqueta de cuero y unos jeans ajustados. Tal vez le regalara alguna de sus chaquetas en la próxima ocasión. Y algun tatuaje anarca, a los gangrel solían gustarles los tatuajes. Le encantaría ver la cara de Krampus al presenciar aquel nuevo estilo en su ingenua portadora.

La cálida entrepierna de la caínita afloró su mente, para luego convertirse en los labios carnosos de su sire que se retorcían en forma de reproche. 

Tenía que estar de broma, no podía ser otra cosa.

—¿Con Ratón? Antes me la corto. Bueno, no, seguro que la muy zorra me usaría de todas formas. Pero no, Malware queda fuera de... Bah, mejor dejemos el tema. No y punto. —Era muchas cosas, pero por ahí no pasaba. La sumisión a mi sire no iba por ese camino. De momento. Tras un instante, un pensamiento fugaz me hizo recordar que la eternidad podía ser muy larga, y en ella suceder muchas cosas. Joder. Menos mal que siguieron hablando, porque me habría atragantado con más palabras de tener que soltarlas.

Escuché el intercambio entre Gaia y Øystein en silencio, apoyado contra la furgo, sin comentar. Ni siquiera entré al trapo respecto a lo de ser un juguetito, pues la opinión de la cainita, en realidad, me importaba una mierda. Si, yo era una herramienta: de mi maestra que me había creado, de Lía que me pagaba, y de cualquiera a quien me ordenaran esas dos. ¿Manada? Bueno, si esa iba a ser mi familia —junto a Carnicero como no tuviera un golpe de suerte—, iba a vivir mucho tiempo sabiendo que me había fallado a mi mismo y mi sueño, pero al menos esperaba haber hecho los contactos suficientes para cumplir otro deseo, mucho más banal pero que también ardía en mis venas.

El precio a pagar. Ni siquiera como un puto vástago uno se libra de los límites de toda la humanidad. Que coño, podemos ser más fuertes, rápidos y superiores a los mortales, pero aún con esas nos toca vivir las mismas reglas en lo que de verdad importa, solo que no nos espera la muerte al final, no hay liberación. Esa es nuestra maldición, y quien no se haya dado cuenta es que es imbécil. ¡Ja! Soy la culminación de lo que me busqué en vida —un sicario, otro millar de víctimas que mandaré al hoyo (aunque ya no a ellas, no)—, he matado hasta al propio tiempo. Si aguantan lo suficiente, todos se convierten en asesinos, solo que yo he sido un monstruo desde casi el principio, y ahora me toca aguantar la mierda para siempre, o hasta que algún otro cabrón más duro me haga un favor. ¿Y mientras? Mientras a perder todos los lazos, a aplastar lo que me quede de alma, ahogada en sangre, y dejarme llevar por lo que soy, he sido y seré, solo que la Bestia es muy real, y llama a mi puerta de vez en cuando. Se agazapa a la espera, sabiendo que tiene la partida ganada conmigo. Pues aún no, bastarda. ¿Me oyes? Hay de mi para mucho, te vas a tener que esforzar.

Me había perdido en mis pensamientos y, con ello, la mitad de la conversación. Si me habían dicho algo, no me enteré más que al final, cuando volvió a dirigirse a mi la Gangrel. ¿Qué interés tenía esa salvaje? Nombre, procedencia, si llevaba mucho siendo un vampiro... Información que, por el bien de los míos —era lo que podía hacer por ellos—, no quería revelar.

—Puede —respondí, encogiéndome de hombros—. Y no es que nos llevemos mal, pero... Es complicado, pasaron cosas. —No empezamos bien. Hiciste que matara a esa joven, que me saciara con ella. No tenías derecho y no lo olvidaré—. ¿Dime, y tú? ¿Raider, no? Debe de ser especial, a juzgar como estabas deseando defenderle con uñas y dientes ahí dentro.

Gaia escuchaba con suma atención a Holtet, le gustaba hacerlo, sobre todo por el caos que en determinados momentos podía llegar a formar -...Los anarquistas no quieren el sistema, pero ¿no existe sistema dentro de vuestro caos?... ¿No obedeces tú a tu sire cuando ella propone algo?... Eso en cierta medida es un tipo de procedimiento... de norma... - comenta la hembra divertida -... Es mejor ser independiente..., cada cual se preocupe de lo suyo, aunque sea irónico que ahora esté metida en lo vuestro.... -  las jugadas políticas se le escapaban y sin querer, se veía inmersa en ellas.

- Dices que la torre cae por su propio peso... ¿cuál es el motivo de la insurrección en sus filas?... ¿el exceso de traiciones?... - ella no tenía ni idea de las fuerzas que movían a los antiguos, nadie le había hablado de ello -....¿Cómo que estás en una situación comprometida?... ¿Necesitas ayuda de algún tipo?... Quizás mi coterie pueda ayudarte de alguna manera... Cuéntame Oystein... - marcó su nombre con su acento irlandés, como siempre hacía.

Gaia sonrió a Holtet con su más sincera sonrisa, estaba claro que deseaba tener un encuentro con él, aunque por las formas, quizás tuviera que ver con lo íntimo, o puede que no, pues había dejado claro que le reconocía como un amigo.

Cathrain por su parte negó de manera contundente relación alguna con su sire, casi parecía aberrarle la idea de estar con Malware, cierto era que su atractivo no era muy marcado, pero las relaciones aún así podían ser muy intensas entre vástagos -.... Me ha quedado claro, pones la misma cara de asco que cuando me ponen un humano delante... - dijo sin pudor o inconveniente, dando de nuevo una clara muestra de sinceridad.

El brujah era bastante silencioso, no parecía desear compartir mucho sobre él, algo que la hembra respetaba, al fin y al cabo, habían historias del pasado que creaban malestar y otras que eran dignas de ser narradas, así que Gaia respondió a Puños con una naturalidad pasmosa, dando informaciones personales sobre ella, estaba claro que no era alguien manipulador que jugase sus cartas para hundirle. No Gaia iba muy de frente, demasiado para la sociedad donde se desenvolvía.

- Raider..., sí, es alguien especial... me dio una vida de verdad..., la anterior a ser una criatura de la noche no merecía la pena, fue una suerte que me eligiese y me transformase, que me enseñara y me protegiera tantas veces... Ahora él tiene problemas y merece lo mejor de mi..., ya no soy su chiquilla, soy su igual y le amo por todo lo que ha sido siempre conmigo... Es más que respeto, es una llamada a la justicia, lo que dije dentro era verdad, a Raider le han hecho algo... No es el mismo y averiguaré por qué.... Yo doy la vida por mi manada, confianza, respeto y seguridad... - miró a Holtet y levantó su vestido hasta la altura del pecho dejando mostrar una herida fea y muy marcada, que a pesar del tiempo aún no había curado, su recuerdo del tren, dejó que Cathrain también la viera -....No estoy en mi mejor momento físico, pero esto ha sido protegiendo a Raider, haría lo mismo por mi coterie, si estimo que Nicholas o Krampus son dañados o molestados, la primera enemiga seré yo... - y de aquí podían tomar buena nota, Gaia era fiel ante todo, con un sentido profundo de lealtad y su coterie actualmente eran los vampiros mencionados, quizás esa forma de hacer las cosas fuera novedosa para él, pero la hembra no basaba la fidelidad en el sexo, si no en el honor y la supervivencia -...¿Te extraña mi forma de ver la vida, Puños?.... ¿Y a ti, Oystein?....

-Refuerzos desde arriba- asentí. -Se hace llamar Lía. Su segunda es Malware. Carnicero se pegó a ellas en algún momento y mantiene esta posición siendo útil a su manera. Supongo que con información pero esto sólo son conjeturas mías. La que realmente es valiosa es Malware. Sus conocimientos informáticos son inusualmente amplios para un vampiro de su edad.- Guardé silencio con el Tremere presente.

-No hay de qué. Nicholas ¿verdad?- lo miro ahora con otros ojos, analizándolo. Pero Krampus atrae mi atención antes de que pueda sacar en claro qué vio Ibrahin en él. -¿Mikael? Ahí está- hago un gesto hacia la puerta -Hablando con Lía desde que terminó la reunión.- Me encojo de hombros -Por ahora lo ataré en corto. Sospecho que es más leal a su sire que al clan y si estas sospechas son ciertas correrá su misma suerte. De eso puedes estar seguro. ¿Por qué te interesa?- Acompaño mis palabras con suaves gestos de las manos.

-Sí que se presentan noches complicadas... sí. ¿Por qué te interesa saber quién queda? ¿Es que Raider, Ibrahin, Alexandra aquí presente y tú habéis dejado algún cabo suelto?- lo miro con severa seriedad hasta que rompo a reír. -Sólo bromeo- entre sonrisas sostengo la mirada de Krampus.

-Esta es mi ciudad. Odio que los Anarcas la hayan tomado pero podemos usarlos en nuestro beneficio.- Me relajo -Supongo que te refieres a la Primogenitura de Berlín Occidental. Veamos:

Primogénito Tremere: Maxwell Ldescu, claro.
Primogénito Malkavian: Dr. Jekyll... muerto.
Primogénita Toreador: Antoinette, desaparecida.
Primogénito Brujah: Dieter Kotlar, creo que lo he visto por aquí.
Primogénito Nosferatu: Eddison, sentenciado.
Primogénita Ventrue: Nichole, en activo.

Por otro lado, en Berlin Oriental:

Príncipe: Gustav acudió a la llamada, vancante.
Primogénito Tremere: Heinrich Himmler, activo.
Primogénito Malkavian: Edward Hyde... muerto.
Primogénita Toreador: desaparecido.
Primogénito Brujah: desaparecido, pero no estoy seguro.
Primogénito Nosferatu: Eddison, sentenciado.
Primogénita Ventrue: Thomas De Lutrius, en activo.

¿Es esta información de su agrado, señor Krampus? La información con información se paga.- Sonrío y desvío la mirada a Nicholas. Pero no digo nada más. He cumplido y vuelvo a mi lugar junto a la puerta dándoles privacidad. La paciencia es una gran virtud que en estos años he aprendido a pulir y alimentar.

Mientras leo el informe noto la mirada del  Tremere e intento no mostrar nada, ser como una planta. Las palabras que le dirige a Krampus hacen que mire la reacción que tiene mio compañero cuando insinua que el está tramando algo junto a Alexandra y el resto de los involucrados.  Cuando se aleja una sensación de alivio recorre mi cuerpo con cada paso que da hacia la puerta. Le paso el informe al nosferatu por si quiere echarle un vistazo. Mi mirada se va a la puerta de la habitación en la que Mikael está reunido, quiero verlo y hablar con él en privado para ver cómo le ha ido desde la última vez que nos vimos.

Puedes ver que el informe se divide en dos partes. La primera es una descripción bastante acertada a lo que ocurrió en la reunión desde su llegada (tarde) hasta que Raider detectó al Tremere. La segunda narra cómo os encontró en la cámara acorazada del Makavian y os indicó a Gaia y a ti que cogierais los archivos de Hyde que ella marca como "pruebas de traición a La Camarilla, investigaciones de campo Tremere y artefactos de los brujos" sin más detalles. Acto seguido:

Øystein asió el cuerpo maltrecho de Linn. Recibió un golpe brutal pero ya empezaba a sanar. La anarquista permanecía inconsciente y, sin duda, necesitará sangre después de... componerse.

Cuando se giró para salir se topó de bruces conmigo, Alexandra.

Al entrar vi que Hyde yacía enorme, malformado, en el suelo. Raider e Ibrahin cercanos a él lo observaban.

-Bien hecho Raider. Ahora, vamos a componerlo, tranquilizarlo y que vuelva a su puesto.- Dije esto sosteniendo la puerta para ir cerrándola a medida que Billy, Øystein y Linn salían de la estancia.

Sonó mi teléfono móvil. Era Krampus, me sorprendió la llamada, descolgué -Dime Krampus ¿sucede algo?-

-Lo tengo, el muy gilipollas solo está llorando por sus chucherías y varitas mágicas, me quiere vender la moto con que no sabe nada. A cometido el error de intentar taladrarme, ahora dejaré que los perros lo ablande un poco. ¿te lo traigo a trozos y luego hablas con él o lo quito de en medio directamente?-

-Eres sorprendente- dije, me aparté del teléfono -Ibrahin. Krampus ha atrapado un brujo. ¿Has venido con alguien más a parte de ese sangre débil?- Ibrahin respondió -Sí, Mikael, mi chiquillo-.  A su vez transmití su respuesta a Krampus: -Es de los nuestros. Pero si ha espiado la reunión, pensará que eres un traidor a la camarilla.- Colgué.

Me quedé a solas en la estancia con Raider, Ibrahin y el inconsciente primogen convertido en Malkavian. Les informé de las "los artefactos de los brujos" se los había dado Ibrhin a Nicholas para que los sacara. Yo le informé en ese momento de "Las pruebas de traición a La Camarilla y las investigaciones de campo Tremere" que él había pasado por alto. Esta información cambió el semblante de ambos, sobre todo del Tremere. Le afectó sobremanera.

Abandoné la estancia sin añadir nada más.

Mientras salía, Ibrahin se acuclilló sobre el cuerpo del primogénito Malkavian, me pareció oír que rezaba. Raider estaba a unos pasos, observando en silencio.

Después de que, a la noche siguiente Raider e Ibrahin abandonaran la sala de torturas de Hyde, sólo quedaron las cenizas del primogénito Malkavian.

Llegué hasta ellos sin dificultad, escurriéndome por las sombras. Los observé un rato mientras hablaban, tras ello me materialicé, muy serio, miré a Øystein -Anarquista-, luego al chiquillo de Malware y, por último, a Gaia -La Gangrel-.

-Simpatizando con el Anarquista ¿eh? Demostraré que tu sire, Raider, es un traidor a la Camarilla- sentencié con contundencia. La estaba provocando -¿Sabías que antes de tu abrazo fue primogénito de una ciudad?¿Sabías que jamás fue a ningún cónclave de su ciudad? Después el clan Gangrel se declaró independiente y no tardó en abandonar a sus compañeros- añadí revelando algo que, de seguro, no le había contado.

En cualquier caso, me situé detrás de Cathrain.

Esperaba encontrar allí a Nicholas. -¿Siguen dentro?- Quería intercambiar impresiones de la reunión con él y ponerlo nervioso, así podría sonsacarle más información. -No importa, ya lo pillaré-

El joven Nosferatu asintió a Alexandra como si ella hubiera confirmado sus sospechas, pudo notar como callaba en presencia de Ldescu y eso le dio algún que otro detalle sobre la situación actual. Había hecho bien en meter al Tremere en la conversación, así la Ventrue no podía ser tan cortante o desafiante y Nick pude leer tranquilamente el informe mientras él acaparaba la atención de los dos peces gordos.-Vaya, yo sospechaba todo lo contrario de Michael, me pareció notar cierta tirantez entre el y su sire. Era algo más bien profesional, como si el neonato quisiera "estudiar" algo que su sire no aprobaba o acaparaba para él. De todos modos Sr.Ldescu es tan solo una conjetura mía, no es nada que pueda corroborar. Mi interés es meramente "económico" Ibrahim me debía ciertos favores, por ende si dichas deudas no puedes ser saldadas por él tal y como dictan las costumbres de la Camarilla esas deudas las heredará su chiquillo. Eh ahí mi interés, prefiero que él lo sepa para evitar malentendidos en el futuro. Claro está, si también fuera declarado anatema, esperemos que no llegue a suceder, se me generaría la duda de a quien acudir.-era na buena cortina de humo y algo totalmente adecuado, aunque Krampus no era ni mucho menos tan avaricioso el Tremere no tenía porqué saberlo. Si la primera impresión que daba el Nosferatu de si mismo era algo distorsionada mejor que mejor.

El comentario de Ldescu le pilló de imprevisto, aún siendo un vampiro joven pudo aguantar el tipo y reirle la gracia, aunque se notaba claramente que no le había hecho ninguna gracia; sin embargo él era un primogen y tocaba joderse. Trató de mantenerle la mirada, pues de haberla desviado indicaría que tenía algo que esconder, tenía que echarle huevos y jugársela a una posible dominación. No había otra manera de mantener las formas.-Tal y como usted bien dice tenemos que quedarnos con lo positivo de la situación, quizás ahora la Camarilla trate de aunar fuerzas contra un enemigo común y la ciudad se unifique.¿Cabría esa posibilidad?.- comentó distendidamente entre ambos antiguos. Sabiendo que los occidentales son pro anarquistas, aunque le sorprendió que Ldescu se desmarcase en público de dicha facción.-Espero poder pagarle con sinceridad además de con la información que solicite Sr.Ldescu, mi coterie nace para cubrir una necesidad, esa necesidad es la mediación. No nos engañemos se muy bien que el bajo estatus de nuestra coterie no nos depara el mejor de los porvenires en las filas de la Camarilla, pero precisamente eso mismo hace que podamos tener un acercamiento más taimado con los Anarquista. Pudiendo llegar a ser algún día los ojos y oídos de la Camarilla en ese ámbito tan peculiar, siendo útiles por nuestro trabajo más que por nuestra posición social Arbeit macht frei.-no pudo evitar las mil y una lecturas que podrían salir de dicha frase. Si, serían libres, pero presos de la Camarilla.-Ese será nuestro campo de acción, si con eso podemos ayudarle en algún modo para nosotros será un honor apoyar a cualquier miembro de la primogenitura de Berlín, por ende de apoyar la causa de la Torre de Marfíl. A través e Michael no le será difícil localizarnos.-quizás no era una gran información, pero si era veraz y discreta. El Nosferatu le tendía una mano y le daba a entender que el neonato tenía un modo de contactarles. Todo a través de terceros, un banquete para los Tremere más oportunistas, aunque quedar a bien con un primogen siempre era una sabía decisión. Si uno no arriesga no gana.

Cuando Nick le pasó el informe Krampus tan solo lo miró por encima, sacó el móvil y se limitó a escanear el documento. Con clara diferencia todo el dinero que le hacia falta a la pobre rata de cloaca estaba invertida en ese móvil, era su principal herramienta de trabajo y para eso Krampus siempre trataba de recurrir a lo mejor.

Una vez Ldescu se alejó Krampus se despidió educadamente e invitó a Alexandra a acercarse a la terraza, desde ahí podrían controlar la puerta del despacho de la arconte a la par que hablar con algo más de privacidad.-Los Tzmitce tienen contratada a una Assamita, se llama...¿No se supone que están de nuestro lado?¿de qué va toda esa movida de "la Tumba del Viejo"? -le susurró la información, pero el nombre se lo dejó ver escrito en la pantalla de su móvil sin llegar a enviarlo. Siendo imposible que lo vieran Ldescu o Nick.-¿Qué diablos ha pasado?¿cómo han podido torcerse tanto las cosas?Ponnos al día por favor, estamos pisando mierda a espuertas ¿qué saben?¿qué podemos decir y que no?.-Krampus a pesar de susurrar intercalaba el mensaje con aspavientos y palabras en voz alta que Ldescusi podría escuchar. Precisamente estaba simulando el cabreo de Nick y Gaia por dejarlos tirados, la señalaba con el dedo recriminándoles la falta de apoyo y el hecho de no haber pagado los favores que le debía. De espalda a Ldescu le fue muy fácil guiñarle un ojo a sus acompañantes para que le siguieran la corriente, estaba sentenciado que todo aquello tenía que terminar con un bofetón por parte de Alexandra y un preocupado Nick sujetando a su compañero de coterie a punto de entrar en frenesí.

-Joder- pronuncié rompiendo por primera vez con mi compostura. -No tenía ni idea de quién era la Assamita- Hice un gesto para que me acompañaran fuera. Esperaba que Lía no demandara mi presencia antes de terminar con Ldescu.

-Se lo avisé. Le dije que no podría encubrirlo mucho más y no me hizo caso. Krampus, cada una de las identidades que Ibrahin- hice un gesto a Nicholas -Aguilar- volvía a hablar con krampus -Coincidió con la muerte de un vampiro joven. Un anarquista o un enemigo de la Camarilla... ese Tremere es muy antiguo. Combate La Llamada con sangre de vampiros jóvenes y... combate el vínculo aniquilándolos. Esto no explica que matase al primogénito Malkavian, claro pero... hay más.- hago un gesto a los dos interlocutores para que atiendan lo importante que es tener esta información en secreto -es como una droga para él. Cuando detecta sangre adecuada y descubre que su portador es un traidor a la Torre de Marfil lo liquida. Se lo bebe. Pero no lo diaboliza... espero.- Torcí el gesto en señal de derrota -¡Cómo he podido ser tan tonta!- me acaricio las sienes con una mano -Las cajas que sacó Nicholas eran propiedad de los Tremere pero los documentos que di a Gaia eran una investigación arqueológica que tuvo lugar hace treinta o cuarenta años sobre un yacimiento frente a la costa de Sicilia. Una red de túneles con, en teoría, documentos antiguos en pergamino y tablillas de cerámica en escritura cuneiforme. Fue profanado y destruido en el año 1126.- Miré en todas direcciones -Bajo él se encontraba la tumba de un vampiro que ya era antiguo en esa época. Se rumorea que ese Antiguo guardaba un secreto que tenía que ver con el Poder de la Sangre. Creo que era un antiguo Tzimisce, pero no lo puedo asegurar.- Volví a mirar en todas direcciones. -De la investigación poco se sabe salvo que se llevaba a cabo exclusivamente por vampiros y que fue desmantelada de mala manera, sus protagonistas desaparecieron o fueron asesinados y La Camarilla hizo oídos sordos a las quejas de otros vampiros por las muertes o desapariciones de compañeros o conocidos.- Cogí el brazo a Krampus -En el Almacén de Hyde vi una lista de nombres y reconocí uno de ellos: Greta Davenrost.- Sostuve su mirada -Greta Davenrost es Linn Christiansen, la sire de Øystein Holtet. Siempre me he preguntado qué le pasó para cambiar de bando, ahora creo que tiene que ver con esa investigación en la que formó parte. Mataron a toda su coterie, Krampus, incluido su sire.-

No podía entretenerme más. Seguro que Mikael saldría pronto y Lía advertiría mi ausencia. -Tienes mi teléfono... volveremos a hablar- añadí para terminar.

Era hora de salir.

Cuando lo hagáis, no muy lejos de allí en la dirección que se marcharon Gaia y Cathrain, encontraréis una furgoneta y, junto a ella, charlan distendidamente "Puños", Gaia y -jodida coincidencia- Øystein Holtet.

Mientras os acercáis veis como "Su Poya" sale de las sombras junto a ellos intercambiando unas palabras mirando hacia Gaia y medio ocultándose detrás del cuerpo de Cathrain.

Su Poya no lo ha visto, pero podéis ver a lo lejos que Krampus y Nicholas ya han salido del museo y se acercan hacia vosotros.

Y allí apareció el pedazo de carne con ojos, otra vez con su voz desagradable y rastrero careto para hacerse notar. Gaia elevó una ceja por aquella provocación tan sumamente burda -... Buena suerte, es difícil probar lo que no existe... - le repite la hembra conteniendo las ganas de cogerle por el cuello, pero eso sí, avanzando despacio hacia él, intimidándole con la mirada, ¿no estaba por eso detrás de Cathrain?... La gangrel sabía oler el miedo y eso le dio risa y se rió, larga y profundamente de él -... Cuando era pequeña una vez cogí un pan que no era mío y eso no me convirtió en ladrona... Antes de mi abrazo nadie le señaló como traidor, de lo contrario no habría salido con vida, eran otros tiempos, ¿no?... No me vengas con mierdas baratas, la prensa rosa hace lo mismo cuando no tiene nada que vender... Sé quien es Raider, tú no... Demuestra lo que quieras, la existencia puede ser muy larga para vivir con miedo....- zanjó la mujer con claridad acercándose mucho a él, poniendo su bonito rostro casi al roce de su jeta -...¿Siguen dentro?...¿Quién exactamente?... ¿Buscas a alguien en especial?... - sabía a quiénes buscaba, no iba a soltarle prenda, aunque justo en la distancia podía ver a su coterie, eso le relajaba, otra vez juntos, como debía ser.

Muchas preguntas habían quedado sin responder, eso era lo de menos. Volvió ha hablar en ingles para que Nick lo entendiera-¿Y el Sabbat?¿Nadie lo está teniendo en cuenta?¡Joder!De eso hay que avisar a la arconte, esos tíos no van a parar de darnos caza.-dijo apresuradamente antes de que Alexandra se marchara. Quizás tuviera que hablar con Lía, pero allí estaban todos los neonatos reunidos y la arconte estaba ocupada. Tendría que esperar.

Le hizo un gesto a Nick pidiéndole paciencia mientras salían, la mierda se amontonaba por momentos y el necesitaba pensar con claridad.

En aquella ocasión no le costó mucho aparentar un cabreo o como mínimo el Nosferatu salía de bastante mal humor, se acercó al grupito viendo como Gaia intimidaba al Carnicero, o eso le dejaba creer el cabrón del Nosferatu.-¿Todo bien por aquí?- preguntó en tono neutro a los asistentes.- Tenemos una copia del informe, no es ni tan buen, ni tan malo.-dijo mirando al Carnicero dando a entender que cierta información ya había sido contrastada. No pudo evitar mirar a Øystein con cierta curiosidad y asombro.-¡Hostia!¿Y tú de donde sales?Ciertamente era al último que pensaba encontrarme por aquí ¿estáis todos bien?-le preguntó al anarquista saludándole sin mayor aspaviento.

- Sí todo bien, Krampus... Solo que este de aquí, el "Impotente", acaba de dejarme claro que va a demostrar de que Raider es traidor a la Camarilla, no sé si para provocarme y que le reviente la cabeza o como sinónimo de que desea ser amigo mío y no tiene habilidades sociales para demostrarlo..., el caso es lo que le he dicho... Es difícil probar lo que no existe.... - resumen de la jugada -... Ah, y preguntaba por vosotros, está muy interesado en nuestros movimientos.... es como tener una garrapata pegada a la ingle... - mira a los presentes -...¿qué?... no me digáis que no os pasaba cuando erais humanos... - eso simplificaba sus anteriores condiciones de vida.

Mira a Holtet con la mejor de sus sonrisas, le caía muy bien ese tipo, la historia compartida unía.