Partida Rol por web

New Erebo, Season 2 (+18)

Hogar de Hans Lichman

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19/04/2019, 23:36
Hans Lichman

Cuando el señor Hans intenta realizar su siguiente movimiento, de alguna manera muy tonta, rompe la tabla de vidrio.

- Robert, por favor – dice mientras le indica al mayordomo que limpie los restos –

Luego te mira con rostro notoriamente molesto ante lo sucedido y te tras atusarse frenéticamente la barba te responde.

- Eso no es de mi competencia, si desea invertir, busque algunas empresas locales, soy gobernador, y esto no es u autoritarismo, así que no sé cómo ayudarlo, y si seguirá haciéndome perder el tiempo, le pido por favor que se retire -

Notas de juego

 

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20/04/2019, 18:10
Abdón

 La reacción del anciano y sus palabras posteriores no sirvieron si no para confirmar que aquí había algo. Tratando de parecer lo más inocente posible, le respondí, como quien no quería la cosa, tratando de sonar lo más despreocupado posible y con la actitud de alguien que no sabía que había hecho mal:

 - Le ofrezco mis más humildes disculpas, gobernador, si he dicho algún inconveniente. Como he dicho, solo quería invertir en su hermosa ciudad y hacer negocios en ella, pero si no desea que sigamos hablando del tema, me marcharé. Pero tenga en cuenta entonces que conmigo se irá mucho dinero y muchos puestos de trabajo que, de otra manera, hubieran sido para las buenas gentes de Erebo...

 Le miré fijamente, con mis manos cruzadas sobre mi regazo y una expresión severa, mientras esperaba su respuesta. Como gobernador, tendría que dar explicaciones de por qué dejó escapar a un inversor dispuesto a invertir en a ciudad y ofrecer puestos de trabajo, así que, como mínimo, ya no podría despacharme así como así y confiaba en que se abriera acerca de lo que era tan obvio que le ponía tan nervioso: Los misterioso inversores que tanto me interesaban.

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31/10/2019, 12:30
-HorelK-

7 de septiembre, 2018

-9°

15:02 hs.

Llegan al hogar del Señor Lichman, la misma, contaba con un muro bastante alto que lo rodeaba, una gran verja evitaba el paso a extraños y en una caseta se encontraba un guardia quien, al mirar al chofer, llama a su patrón, y rápidamente recibe la orden de dejarlos pasar, por lo que activa un botón abriéndose así lentamente el portón.

La casa era relativamente grande, de quizá tres pisos, con una fachada particular y una arquitectura gótica.

El vehículo debía ser estacionado en una rotonda y desde ahí debían caminar algunos metros hasta la gran puerta de madera, llegando a ese punto, se abre nuevamente dándoles paso para ingresar a la casa.

Adentro, todo se asemejaba a un estilo medieval, desde la entrada hasta el techo, parecía más una especie de castillo antiguo que el hogar de alguien que gobernaba una ciudad.

La sala era circular, con una chimenea y algunos sofás relativamente cerca, el mayordomo que les abrió la puerta, decide tomar sus abrigos.

- El señor Hans los recibirá enseguida, por favor, aguarden aquí –

 

Al terminar aquel cordial saludo, llega Shamil junto a un hombre de unos cuarenta, apuesto y de sonrisa permanente, casi todos lo conocían menos Abdón, se trataba de Engel, quien mira a los presentes y saluda con su típico y burlón tono de voz.

 - Muy buenas caballeros, al parecer ya estamos jugando en las grandes ligas eh…por cierto, este tipo no es ningún tonto, todas las verjas están hechas de plata repintada con aerosol, una sola pica de esas y el que se la robe tiene para comer por un mes – suelta una leve risa – ¿por cierto, para que nos han llamado? -

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31/10/2019, 14:18
-HorelK-

7 de septiembre, 2018

-9°

15:05 hs.

Ante las palabras del Ductus, todos se encaminan hacia aquel particular destino, por lo que tras pocas vueltas, llegan al hogar del Señor Lichman, la misma, contaba con un muro bastante alto que lo rodeaba, una gran verja evitaba el paso a extraños y en una caseta se encontraba un guardia quien, al mirar al chofer, llama a su patrón, y rápidamente recibe la orden de dejarlos pasar, por lo que activa un botón abriéndose así lentamente el portón.

La casa era relativamente grande, de quizá tres pisos, con una fachada particular y una arquitectura gótica.

Los vehículos debían ser estacionados en una rotonda y desde ahí debían caminar algunos metros hasta la gran puerta de madera, llegando a ese punto, se abre nuevamente dándoles paso para ingresar a la casa.

Adentro, todo se asemejaba a un estilo medieval, desde la entrada hasta el techo, parecía más una especie de castillo antiguo que el hogar de alguien que gobernaba una ciudad.

La sala era circular, con una chimenea y algunos sofás relativamente cerca, el mayordomo que les abrió la puerta, decide tomar sus abrigos.

- El señor Hans los recibirá enseguida, por favor, aguarden aquí –

Al terminar aquel cordial saludo, pudieron notar que ya había un grupo aguardando en el lugar, uno con características tales que era innegable que eran seres sobrenaturales tal como la peculiar cofradía.

Por primera vez, desde que inicio toda esta revuelta y todo aquel particular embrollo, ambas facciones podían verse las caras, Anarquistas y Sabbat, juntos, frente a frente en un espacio tan reducido que, a pesar de no expeler respiración alguna a través de sus muertos pulmones, la tensión era tal que hasta parecía palpable.

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31/10/2019, 14:23
-HorelK-

15:05 hs.

Poco fue el tiempo que duraron solos, al rato, llega un grupo tan variopinto como obvios en su naturaleza.

Vástagos con la marca inherente de seres que pertenecían a la espada de Caín.

Por primera vez, desde que inicio toda esta revuelta y todo aquel particular embrollo, ambas facciones podían verse las caras, Anarquistas y Sabbat, juntos, frente a frente en un espacio tan reducido que, a pesar de no expeler respiración alguna a través de sus muertos pulmones, la tensión era tal que hasta parecía palpable.

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31/10/2019, 14:42
Leonid Zaitsev Sartori

No espero que la dirección se diera en recinto hospitalario, llevando a modificar a la brevedad su estrategia inicial para lidiar con posibles emboscadas. Ya considerando que fuese en este contexto no era casualidad, a su juicio era obligar a los presentes en identificar sus caras para limitar acciones futuras  y eso ya habla de la posible capacidad política de Linchman a su parecer.

Durante el trayecto dio las indicaciones, cuatro serán los que puedan entrar a dialogar en aquella mesa: Padre Stein, Madre Melanchta y Paladín Aurelio,  los dos primeros secundaran propuestas que él mismo como Ductus realice más las impresiones que puedan llegar a percibir de los presentes deben mantenerse bajo reserva. Evitar el uso de dones de sangre dado que se moverán en establecimiento privado y desconocen que tipo de protecciones cuente Linchman o la reacción que pueda tener  de usarse las habilidades del Padre Oscuro. Exceptuando que se trate de una emboscada en estricto rigor.

Al llegar dio la última indicación, de que el resto de la Cofradía espere dentro del lugar a menos que Linchman dictamine lo contrario y solicite que todos literalmente sean parte de la reunión. Cuando ingresan observa al mayordomo, entregando sus abrigos y dando a conocer sus ropas semi formales de color negro, en este caso vaqueros negros, una camiseta cuello tortuga, botas y una chaqueta de etiqueta gruesa en conjunto a la ropa térmica que debe de usar. Ya en el interior y correspondiendo al saludo pudo notar a otro grupo de sobrenaturales más a la distancia.

Deben de ser ellos.

Observa al resto de los presentes y comenta algo solo a oídos de ellos.

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31/10/2019, 14:52
Leonid Zaitsev Sartori

-Recuerden lo conversado en el vehículo, de presentarse solicitud por parte del sr Linchman de que el resto de la cofradía ingrese, así se hará-.

Guarda silencio y siendo esto más una orden que una sugerencia. Sabiendo y asumiendo que era más seguro al final que todos estarían en esa reunión.

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31/10/2019, 18:51
Arthur Mc Vain

- Sabias palabras, estimado Leonid - haciendo una breve pausa para admirar el castillo y alrededores.- Debo confesarte, querido amigo que alguien con tan buen gusto en una vivienda como ésta debe ser alguien dispuesto más a negociar y a disfrutar de la no vida que a luchar. Pero bueno, no hay que fiarse mucho de lo último ya que ostenta poder. 

Observa como el buen Leonid ingresa al castillo, preguntándose si ha sido construido aquí o traído piedra por piedra. Queda un rato fantaseando con la idea y le hace señas a su Criada para que tome el volante y no apague el motor del vehículo ya que, quizás, podría enfriarse y ante eventuales problemas es conveniente estar preparados.

Quita una menta de su bolsillo y la mete en la boca para recordarse algo sencillo: todo cuanto existe es cenizas o sangre y el sabor de otra cosa que no sepa a sangre sabe a cenizas.

Queda a la expectativa, tan alerta como siempre, observando potenciales escondrijos de gente poco amistosa y midiendo distancias, calculando tiempos en recorrerlas y más entusiasmado que con la reunión con los "tres reyes magos"... ese trío de idiotas que le desagradan lo suficiente como para matarlos con gusto.

Si alguien le saluda, por educación responde al saludo de forma cortés y esbozando una sonrisa cordial pero dispuesto a matar.     

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01/11/2019, 14:43
Victor Leon

El lugar era… aburrido. No encontraba otra descripción. Le gustaban lo sencillo, lo natural y simple. Un cuarto con una cerveza a su lado era un paraíso luego de un largo día de “trabajo”. O caminar por el bosque persiguiendo algo… Pero quizás todo termine cubierto de sangre, así que eso le animaba.

-Estaremos atentos- le dijo simplemente a Leonid alzando la mirada hacia el enorme lugar. Recorrió con la mirada las ventanas, intentando calcular cuánto tardaría en subir por la pared e ingresar por una de ellas. Las salidas, la calle, las puertas, los guardias, las cámaras, todo pasó por una rápida inspección visual. Luego dejó que sus demás sentidos le indicaran de cualquier peligro inminente, reaccionando a cualquier sonido u aroma.

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01/11/2019, 19:58
Padre Stein

Soy de estatura menuda y paso algo desapercibido entre el imponente Arthur y Victor o los exóticos Aurelio, Leonid, pero cuando entro al ostentoso castillo me siento como en casa. Me quito los guantes y echo un vistazo a los que ya estan allí esperando. Todos de aspecto joven y cuidado.*

- Solo son cuatro.

Lanzo la apreciación en voz alta, con el tono neutro y desapasionado mientras guardo los guantes en los bolsillos de la gabardina negra.

- ¿Esperamos a más de los vuestros o es eso todo lo que queda?

Lanzo la pregunta a los desconocidos, avanzándome al resto de mis compañeros de una forma fría y antinatural. Mis movimientos no pretenden imitar los de los humanos y la ausencia del innecasario pestañeo suele resultar perturbadora a quienes no estén acostumbrados a tratar con otros monstruos.

Notas de juego

*interpreto el aspecto de los demás por las fotos, pero una breve descripción se agradecería

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01/11/2019, 21:18
Aurelio

Ten cuidado padre estéin. Una rata es insignificante, pero un ejército de ratas es capaz de devorar los cimientos de un edificio. Y los anarquistas son escoria, la mayoría compuesta por sangre débil tutelados por antiguos autócratas con aires de grandeza. Aunque tentar a su bestia para que entren en frenesí en las dependencias del gobernador era una estrategia interesante.

Debía estar atento a cada signo de protección, cada cuadro o estatua sospechosos de guardar claves arcanas en su superficie o disimuláda entre sus líneas. Por otro lado era una oportunidad única para adentrarse en la mente de aquel enigmático líder de una ciudad atestada de magos, cambiaformas y vampiros. Cada pieza de mobiliario, cada ambiente y cada salón mostraba los gustos e inclinaciones del morador de ese castillo desplazado en el tiempo erigido en mitad de la ciudad.

¿Se trataba de un demócrata fascista? Eso simplificaría la entrada de su fundación. ¿O por lo contrario era un idealista corrupto? Tenía conocimientos más que sobrados del mundo sobrenatural así que no sería descabellado pensar que fuera un antiguo ghoul, o incluso algún ser tocado por los magos o espíritus aún más blasfemos.

Fuera como fuera, no esperaba nada nuevo de sus compañeros de la estirpe. Como ya dijo en una ocasión, los anarquistas se dedican a gritar, alimentarse y mearse encima como niñatos rabiosos. Lo más seguro es que hubiera un ejército de mendigos, matones, yonkis y prostitutas esperando a sus estimados líderes en el bar de carretera más cercano. De lo contrario iba a resultar muy fácil eliminarles.

Asintió con una media sonrisa a las palabras del padre Stein y esperó a las ordenes de su Ductus. 

- Tiradas (1)
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04/11/2019, 19:13
Rick Dawson

La noche era ya cerrada cuando el grupo de anarkistas llegarón a la mansión, un lugar que no pasaba desapercibido para nadie en la ciudad sin duda un centro de poder a tener en cuenta.  Rick descendió del coche, portaba la larga gabardina con una larga gabardina tal y como solía acostumbrar.

 

Sus ropas oscuras no llamaban la atención siendo una persona más en una fría y oscura noche.  Espero a sus compañeros a fin de acceder juntos al recinto que sin duda permanecía bien custodiado.  Al llegar pudieron ver a los miembros del sabbat, eran mayores en número y sin duda Rick pudo sentir como le escudriñaban seguramente intentando tantear las fuerzas de aquellos 4 vampiros a simple vista.

 

Rick se limitó a hacer un gesto con la cabeza en señal de saludo sin prestar demasiada importancia a todos los ojos que les observaban, habían venido a aquel encuentro por un solo motivo y no tenía intención de prestar atención a estupidas provocaciones o similar de aquella gentuza.

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04/11/2019, 21:38
Abdón

 Me mantengo en mi lado, entre los anarcas, comprobando el perímetro de seguridad, sin perder de vista a nuestros compañeros de reunión. Si temía un ataque, mi principal temor era que viniera del grupo contrario, pero mi expresión gélida no dejaba traslucir la menor emoción, por lo que era imposible adivinar lo que estaba pensando.

 Observé al Padre Stein, mientras hacía su pregunta, y esperé a que el líder de nuestra comitiva respondiera a su pregunta, hecha con un tono condescendiente que me fue indiferente.

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05/11/2019, 04:03
Leonid Zaitsev Sartori

-En su observación coincido bastante Arthur, invitarnos a su refugio deja un mensaje bastante claro-.

Comenta solo a los oídos de Arthur para mantener la observación en confidencialidad.A su juicio corrobora su temor respecto al consejo recibido por su potencial aliado, si los ha convocado a la morada es porque goza de un poder real y sin lugar a duda es intocable. Llegando a ser inquietante no solo la cantidad de contactos que deba de poseer o sus secretos a esconder, sino que en este mismo momento y asumiendo el escenario acaban de posicionarse es todo acomodado para que este gane. 

Luego escucha el comentario de Padre Stein respecto al otro grupo que aguardan en el refugio, dejando asomar una media sonrisa que a pesar de ser cortés muestra un aire evidente de maldad  pura por parte del cainita común en los depredadores de la estirpe de Caín.

Espera  a ver la respuesta de los presentes ante la provocación de Stein, de responder ya podría emitir los juicios correspondientes de cada uno. Quitándose en ese momento los lentes de sol para revelar ese extraño color miel azulado de sus ojos cuyos párpados poseen un extraño tono carmesí y a pesar de su atractivo ligeramente andrógeno, es evidente que despide un halo sobrenatural intimidante.  Guardando los espejos en el bolsillo interior de su chaqueta formal y observa a quien ha realizado un saludo de respetuosa venida, correspondiendo en ese pequeño ademán por cortesía como respeto al dueño de casa.

Debía estar atento , más ante el movimiento realizado por Padre Stein que resultará a su juicio bastante interesante y más aun porque ahora la manada de lobos se encuentra rodeado en la cueva de otros depredadores. No olvida que el enemigo de la Congregación atacó en grandes números, sufriendo bajas considerables y eso lo lleva a establecer varias teorías respecto de ellos al mismo tiempo que esta preparado para reaccionar en caso de precisar defender a su Cofradía.

-Muchas preguntas se presentarán en esta curiosa reunión, hermano-.

Invitando a Padre Stein de manera diplomática en su marcado acento italo ruso a mantener esa distancia sin menoscabar las observaciones de este. Dejando claro que de existir una respuesta de la contraparte, solo han de recibir una respuesta fría y cortés por su lado.

Aquel comentario era una orden clara y sutil para el resto de la cofradía en aguardar el cruce de palabras hasta iniciar la reunión con el Gobernador. 

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05/11/2019, 05:47
Kasius

Kassius llega al refugio en el vehículo indicado por el Ductus, tal cual este ordenó, se sientia un poco incomodo ante tantos lujos, eso realmente era innecesario para él pero bueno, no era su propiedad y debía tolerarlo, bajo del carro y espero las órdenes, debía quedarse afuera a menos que se solicitará lo contrario, lo cual debía ser lo más correcto, esperaba que dentro de poco el ingreso de todos fuese requerido, sino bueno, eso dejaría bastante que desear del anfitrión, cosa que por supuesto tampoco le mataba pero por respeto lo normal sería estar todos e incluso para mayor seguridad del grupo.

Pensaba un poco acerca del poder que debía tener ese tal Linchman para ser capaz de invitar a una manada de adversarios a su hogar al mismo tiempo y sin ningún temor, eso era algo bastante preocupante e incomodo, en fin de una u otra manera su papel estaba más que definido en cualquier eventualidad, el sabía lo que debía hacer por su manada y estaba dispuesto a ello, el Sabbat debe prevalecer, la manada debe prevalecer, todo lo demás es secundario.

Aquí estaré dijo cuando Leonid dio su orden y aguardo al lado de Victor.

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07/11/2019, 16:01
Dante Morgan

Dante estaba sentado en uno de los sillones con una pierna cruzada sobre la otra, sentado con aire comodo y descaradamente despreocupado. Charlaba con sus compañeros con ociosa naturalidad, hasta que llegaron el resto de los "invitados".

Los observo con ojos encendidos de diversion en su rostro atractivo pero engañosamente inocente.

-Solo esperamos al anfitrion, creo dijo con un acento britanico de alta sociedad, digno de un vecino de Westminster. Hizo un ademan con la cabeza como si contara a los que llegaron Vaya, veo que ustedes no se andan con vueltas. Lo de "we few, we happy few, we band of brothers" lo toman como solo una sugerencia, asumo?

Saboreaba cada palabra a medida que hablaba, sin dejar de sonreir en ningun momento. Los ojos del baron chispeaban con algo que solo podia ser descrito como alegria, como un niño en la mañana de Navidad que se encuentra el arbol lleno de regalos. Obviamente ansiaba esta reunion.

-Solo cuatro... respondio guiñandole un ojo a Stein Que puedas ver.

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13/11/2019, 12:44
Arthur Mc Vain

Arthur es una mole de más de dos metros de altura y unos ciento veinte kilos de músculos, está calzado con zapatos perfectamente lustrados (enfermizamente limpios y pulcros), vestido con un traje de casimir​ de corte italiano clásico, que denota buena posición social y gusto y encima un sobretodo del mismo material que con la corbata también negra contrastan con una camisa blanca.  Sus cabellos castaños y canosos tienen un recorte que parecería a la moda actual tirando a un estilo militar, su barba luce un corte al cuchillo o algo tosco.

Se lo ve muy relajado, observando todo alrededor de sí y de los suyos y a todos, especialmente a los recién llegados. No expresa emociones ni sentimientos salvo alguien lo salude o muestre cortesía, a lo que responde en el mismo tono y esbozando una sonrisa.  

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15/11/2019, 03:05
Akissi Okonjo

La opulencia del hogar de Lichman, al igual que el resguardo de semejante refugio, no llamaron mi atención una vez nos adentramos en el vehículo hasta la rotonda que se anteponía a las puertas de ingreso. Era esperable, ese hombre del que tanto se hablaba parecía detentar poder y nuestra presencia el lugar así lo demostraba, sea que hubiésemos sido citados para negociar u otra cosa. Pero si había algo que me sorprendía era el reconocimiento que despertaba en mí este humano al demostrar esta aparente fuerza o poder... si es que en verdad era un humano.

Una vez adentro, la imagen me resultó extrañamente placentera, me recordó a los lugares que solía visitar hace ya demasiados años en el viejo continente, aquellos donde me deleitaba con palabras. Era increíble pensar cuánto había pasado ya desde aquellos días, el tiempo siempre tendió a volverse extraño, maleable, una vez se está muerta tantos años.

Repentinamente mis ojos se posaron en los que ya se encontraban en el recinto e instintivamente me adelanté unos poco. Con cada corto paso, la tela mi pantalón tipo cargo dejaba escapar un leve siseo que finalmente se detuvo ante el último golpe de la suela de goma del borceguí en el piso. Un sobre todo negro cubría el suéter de cuello largo en composé, haciendo de la totalidad de la vestimenta una unidad acromática y nada sutil en cuanto al tipo de comodidad que brindaban. Mis labios apenas se fruncieron mientras mis ojos les veían a los cuatro que allí estaban, ojos oscuros como mi piel que de a momentos parecían resultar inexpresivos y otras veces quizás melancólicos, quizás indiferentes, quizás inquisitivos.

Habiendo escuchado a Leonid, simplemente me limité a asentir y al igual que Víctor dirigí mi atención a lugar en el que nos encontrábamos, intentando hacerme una idea mental de la situación espacial en la que nos encontrábamos. Sin embargo, una mueca se dibujó en mi boca, casi una sonrisa, al escuchar las palabras de Stein. “He visto a cuatro cainitas hacer lo que no podría una decena... he escuchado historias sobre algunos shakari capaces de hacer temblar, cada uno de ellos solos, los cimientos un principado costello. A pesar de no merecer respeto alguno, no es sabio subestimarlos”, pensé sólo un momento antes de volver a centrarme en el lugar.

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17/11/2019, 20:48
-HorelK-

7 de septiembre, 2018

-9°

15:10 hs.

De pronto, como si ya el frio infernal no fuera suficiente, la tensión casi palpable de una sala con varios vampiros aguardando reunirse con un simple mortal, siendo que lo normal sería que fuera al revés, ahí fuera, en una mezcla extraña de copos de nieve con nubes tormentosas, comienzan a sonar los relámpagos de un clima que seguía su rumbo, ignorando todo aquello que pasaba.

El mayordomo, un hombre de unos cuarenta y tantos, ingresa a la sala y con una voz un poco ronca al principio, pero luego corregida con un carraspeo, indica que lo sigan.

La gran casona demostraba contar con un amplio espacio en la zona trasera de la sala, con pasillos oscuros que daban la sensación de querer que aquellos vampiros casi se toquen unos con otros.

La limpieza y el orden eran las predominantes, los finos muebles contaban con la firma inconfundible de Lignum Vitae, era fácil perderse en los lujos que demostraba cada cuadro y cada figura, sin embargo, nada atraía más que la cansada mirada del anfitrión.

El Señor Lichman resultaba ser un hombre de avanzada edad, con vetusta pero impecable barba, de ojos brillantes y mirada lejana, como un hombre que deseaba no estar ahí, pero a su vez afrontaba sus responsabilidades frente a unas criaturas que con un simple chasquido le podrían hacer desaparecer, literalmente.

La sala donde se realizaría la reunión era circular, con unas escaleras que daban acceso a una plataforma donde el hombre se encontraba sentado tras un amplio escritorio.

A su diestra y siniestra se encontraban las figuras de dos hombres, ambos de aspectos completamente distintos puesto que uno era joven y de larga melena, con una sonrisa un tanto particular y unos ojos tan verdes que parecían jades relucientes; el otro, por su parte, era un hombre de más edad, de cabellos plateados sin embargo aún no demasiado viejo, ambos serian fácilmente confundidos por simples mortales sin embargo, había algo en ellos que los envolvían de una penosa oscuridad que era difícil de comprender.

Allan Smith y Kenneth McAlpin también se encontraban en el lugar, aunque el archimago prefería la penumbra de un alce disecado como refugio, el cambiaformas por su parte prefería estar más hacia el centro

El señor Lichman quien contaba con el rostro oculto detrás de sus dos manos, poco a poco levanta la mirada y pide que se acomoden todos con una ronca voz.

- Hace veinte años, cuando me reuní por primera vez con seres de su clase, juraba que dentro de un par de décadas vería un número reducido de ustedes…sin embargo, ahora, hoy veo más rostros de desconocidos y de completos impertinentes que no son capaces de controlar sus propios impulsos – de su escritorio saca una carpeta y la lanza al centro de la sala, dejando que varios documentos salgan volando – un ataque en medio de una fiesta, dejando cuatro víctimas, eso hace apenas dos horas… – nuevamente lanza otra carpeta - …registros de criaturas extrañas atacando a mujeres a modo de transgresión sexual y respectivo asesinato…por último y no menos importante, el ataque al Alakran Pub… - Kenneth levanta la mirada - …con varios testigos, lo que implica un complicado trabajo de encubrimiento… -

Nuevamente calla y se levanta de su asiento, dejando ver que vestía una elegante gabardina de finos bordados.

Da varios pasos en circular y habla con un énfasis tajante que fácilmente a un mortal simple podría asustar.

- Se perfectamente que pueden ser un poco más que simples animales, pero también sé que pueden entenderme, cuando Alana se presentó y juro que no lastimaría a ningún humano, lo acepte buenamente a modo de llevar la fiesta en paz, sin embargo, ¿esto? Como tomar todo esto sin considerarlo una afrenta a mí, a mis ciudadanos y a mi propia inteligencia… ¿acaso buscan ser tratados como los monstruos que supuestamente desean no demostrar ser? Porque de ser así… - aprieta los dientes, se notaba realmente enfurecido - …pues, con gusto podemos jugar ese juego –

Cruza los dedos de ambas manos, dejándolas en la espalda.

- Consideren esto como una última advertencia…si no pueden abrazar su lado más civilizado, y deciden actuar como imbéciles violentos…entonces los cazaremos como los perros rabiosos que decidieron ser -

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18/11/2019, 01:50
Leonid Zaitsev Sartori

Leonid observó atento a quien es el líder de la secta contraria, estudiando su comportamiento algo dramático y histrionico al momento de desenvolverse con el padre Stein. Sin emitir palabra alguna porque de ser otro escenario el intercambio de palabras se llevaría a cabo al instante pero guarda silencio expresando de manera nata una mirada inquisitiva hacia todos los integrantes del movimiento que no pierde en momento alguno la formalidad.

Al escuchar la indicación del mayordomo en que lo sigan comienza a avanzar manteniendo su porte elegante y estudiando detenidamente la distribución de aquella mansión. Sin evidenciar la incomodidad de toparse con el resto de los presentes hasta llegar al salón donde se llevará a cabo la reunión.

Luego de ingresar estudia con atención la estructura hasta posar sus ojos en Lichman quien aun oculta su rostro además de notar la presencia de quienes ocupan puestos a diestra y siniestra además de notar la presencia del Archimago como del señor Mclapin.  Tomando asiento tras ser ofrecido esto por el dueño del recinto, quien es dueño de la ciudad, escogiendo una silla posicionada en el lado derecho.

Su postura es formal de espalda recta y las manos en las rodillas, posando sus ojos en la carpeta que tira al centro de la mesa junto a aquellas hojas que se van esparciendo por diferentes puntos del salón. Esperando que el resto de sus hermanos recuerden la indicación de no hablar a menos que sea necesario y en estricto rigor el mismo dueño del recinto lo autorice inicialmente.

Ataque a una fiesta que deja a cuatro víctimas...probablemente sean los otros invasores...no puedo asegurar

Criaturas extrañas que atacaron a mujeres a modo de transgresiones sexuales,  ¿estará asociado a los hombres peces o a algo más?

Va escuchando y observando por el rabillo del ojo como Lichman va rodeando la mesa pasando por cada uno de los presentes hasta recordar el primer pacto establecido por la Camarilla junto a su agenda secreta. Luego de escuchar la advertencia donde estipula todas las condiciones a seguir mira a sus hermanos de reojo, especialmente a la Madre,  al Padre y al Paladín de que no emitan palabra alguna hasta que el mismo gobernador otorgue el permiso.

Debe de contar con demasiado poder para amenazar de esta manera, más allá de su don político. 

Leonid en su atractivo sobrenatural que denota esa aura siniestra no parpadea y posa sus ojos en los de Lichman haciendo notar ese respeto a las palabras establecidas. Al mismo tiempo que estudia la reacción que ha de tener la contraparte tras la amenaza realizada sobre ellos y a su juicio, entrar a justificar solo llevaría a caldear más los ánimos de ese momento.

¿Ver un número reducido de nuestra especie? ...de esto puedo conjeturar varias impresiones