Partida Rol por web

 Miré el intercambió de palabras entre los presentes en silencio, durante toda la conversación, sin decir nada, hasta el punto de que nadie se acordaba ya de mi presencia, lo cual me gustaba, pero eso tenía que cambiar, al hacer notar un hecho obvio, a la ve que trataba de evitar un enfrentamiento inútil y absurdo, volviendo al meollo del asunto:

 - Además de que el objetivo tendría la ventaja de jugar en casa, no hay que olvidar, con toda probabilidad, si es la mitad de astuta de lo que parecen dar a entender, por muy desquiciada supuestamente que esté, que seguramente estará esperando visita no grata. Personalmente creo que sería de locos ir a esa isla sin algo más de información logística de ese lugar.

 A continuación le dediqué una mirada significativa a la antigua princesa de la ciudad, esperando que puediera extenderse algo más de su decripción del lugar, o, como mínimo, indicarnos de alguien que pudiera hacerlo.

Era esperable que alguien no fuera capaz de contenerse ante la provocación y no me extrañó que el último en llegar fuera precisamente quien mordiera el anzuelo.

-JAJAJAJA. Muy bueno ese la verdad, debo admitir que no pensé que ustedes pudieran divertirse pero... -De pronto me quedo en silencio y mirando fijamente a Stein -¿Estás hablando en serio? No debería sorprenderme, el utilizar chiquillos como peones es algo no les es ajeno. Supongamos que los abrazas, lo más probable es que a la primera de cambio la bestia los consuma y terminen convirtiéndose en un obstáculo ¿O acaso tanto miedo te generamos que ya estás buscando soldaditos en cualquier parte?- 

Al ver que se queda mirando fijamente buscando una respuesta por mi parte, ésta vez le premio con algo de sarcasmo:

 - Gracias por explicar el funcionamiento de nuestra organización,

y asintiendo, aclaro con el tono del maestro que recita la lección por enésima vez

- En el Sabbat solo sobreviven los fuertes, y creo que eso dice algo de mis camaradas.

Si tienes miedo de cortarte con la espada de Caín, tampoco podrás blandirla contra tus enemigos.

Hago un espaviento con la mano hacia Nicholas, disculpándolo y quitandole importancia

- No te preocupes, chico. Seguro que hay otros juegos más seguros y tranquilos para ti. Como he dicho, la Espada es solo para los que se atrevan a empuñarla. 

Debería buscar un momento para agradecerle al bueno de Nick la oportunidad de extenderme en las proezas de la secta con la replica que me acababa de servir en bandeja. 

Todos comenzaron a sacar sus dudas, la verdad era que luchar contra una nictuku seria algo bastante complicado por no decir jodido.

Shamil se muerde la punta del pulgar mientras va analizando todas las posibilidades de lo que podria salir bien o mal, y la verdad sea dicha, las cosas malas parecían ganar enorme peso sobre una balanza de probabilidades.

Nick aparece, Shamil solo le hace un gesto saludándolo, detestaba a ese tipo y sabía que no tardaría en hacerse detestar, no entendía como Dante podría siquiera considerarlo un aliado.

Alana comenta que el objetivo se encontraba en una isla no muy lejos del lugar, lo que realmente le parecía una locura de ir y visitar.

- Entonces, si lo que les preocupa realmente es la gente de Erebo, la mascarada será lo de menos…ya pudieron ocultar toda una masacre hecha por aquellas criaturas marinas, ¿Por qué les costaría ocultar un enfrentamiento contra esta criatura? Por cierto…no recuerdo haber escuchado su nombre, sin embargo, no pierda tiempo discutiendo con Nick, es un tipo de muchos truenos y pocos rayos, pero se de buena fe que cuando se trata de este tipo de operaciones, puede darnos una buena mano – esperaba que con estas palabras cesaran las hostilidades que iban escalando entre aquel cainita y el desquiciado anarquista - …con respecto a Darija…ir a su isla lo considero un riesgo completamente innecesario, creo que lo mejor sería atraerla aquí, y enfrentarla en las costas para aminorar los daños contra los mortales…montar un operativo en suelo conocido, es mucho más conveniente que ir a tierra desconocida, que imagino usted Alana tampoco sabrá mucho de lo que sea que haya montado la desquiciada en aquel lugar ¿no? –

La voz de Shamil era carrasposa y sus dientes completamente afilados se dejaban entrever fácilmente mientras hablaba, sin embargo, con aquella apariencia monstruosa, intentaba ser lo más civilizado posible.

- Oh Dios, los arrogantes se han levantado contra mí, y una banda de violentos ha buscado mi vida, y no te han tenido en cuenta – esto lo dijo en un susurro casi inaudible a no ser que haya alguien muy cerca a el – Salmos 86, versículo 14 -

En cuanto el viejo Predicador terminó de hablar me fui acercando lentamente hacía el hasta quedar a medio metro de distancia aproximadamente cuando Shamil comenzó a hablar. 

-Había olvidado que Sonrisitas estaba aquí- Pienso al tiempo que me volteo para escuchar su aporte, aunque sin alejarme mucho del Predicador. En cuanto Shamil termina lo miro con cara divertida y le digo -¿En serio Risitas, truenos y rayos? Después de tanto tiempo pensé que tendrías más amor para mi- Me giro rápidamente hacia el padre Stein para susurrarle -Es mi fan número uno, te lo aseguro- Tras esto comienzo a acercarme a Shamil señalándolo -Pero en algo tienes razón, pelear en la isla de la criatura no es buena idea. Pero traerla a las costas- A medio camino entre Stein y Shamil me detengo y llevo mi mano derecha al mentón mientras fijo mis ojos en el suelo, pensativo. Sin levantar la mirada del suelo lanzo un pegunta al aire -¿A alguno se le ocurre un modo de alejar a la población de la costa durante un par de días? Alguna mentira por las noticias o lo que sea. No me malinterpreten, si esa cosa es tan peligrosa y hay que acabarla vamos a su islote y le ponemos fin. Pero no considerar la opción de sacarla de su habitad es como mínimo un desperdicio-

Por fin alguien daba en un clavo.

-¿Que quiere la "bestia" que le haga salir de su guarida? Y ¿no podriamos llevarla a una zona mas alejada de la civilización donde no llamemos la atención? Creo que hay territorio mas que suficiente para que los arboles caidos no se escuchen.

Mientras escuchaba la respuesta que brindaba el líder anarquista, dejé pasear mi vista entre éste y Alana, principalmente cuando resaltó nuevamente lo de la veracidad en cuanto a que la misma fuese realmente una Nictuku, pero una vez hizo mención de la Mascarada dejé escapar un sonido burlón y meneé la cabeza sin prestarle mayor atención. Sin embargo, las palabras de la antigua Príncipe no se hicieron esperar demasiado y al instante comenzó a lanzar sobre la mesa algunos otros datos sobre Darijah.

- Y allí va el resto de mis obligaciones para con ella- susurré en dirección a Leonid-. Parece que al final sí que ha culminado la tarea que me fue encomendada- manifesté sonriente.

Escuché con atención a los que acompañaban a Lichman, intrigada principalmente por saber quiénes eran y cuáles eran los asuntos que los habían traído a la ciudad, y luego observé con cierto desdén el entrecruce de palabras entre el Reverendo Señor y el recién llegado, dando más importancia a las acotaciones que algunos de los otros vástagos hacían. Sin embargo, al ver el accionar tanto de Alana como de Nick, comencé a moverme hasta posarme junto a Stein.

- Ir a la isla con intención de darle muerte sería estúpido, imprudente- dije finalmente, concordando con varios de los presentes-. Atacar un refugio a ciegas implicaría estar a merced de cualquier tipo de defensa que ella tuviese preparada de antemano, sin contar con la segura posibilidad de encontrarnos con estos experimentos que, según Vondik, la misma realizaba.

Instintivamente miré a nuestro Ductus un momento, como si buscase el beneplácito para hablar a expensas que éste ya nos lo había dado a todos, y luego continué.

- El único motivo por el que sería aceptable ir a la isla en este momento es para recolectar todo dato e información sobre el terreno y lo que allí se encuentra, no para atacar directamente- expresé, mirando rápidamente a los presentes-. Es justamente la información sobre el objetivo la que nos permitirá construir posteriormente un plan que tenga como fin la destrucción de la vástago.

Por un instante, mis ojos encontraron el suelo mientras intentaba hacer memoria sobre la información con la que contábamos anteriormente, pero luego desistí temporalmente sobre ello, meneando mi cabeza y volviendo a mirar al grupo.

- Paralelamente necesitamos tomar conocimiento sobre lo que Pentex puede haber estado haciendo aquí y de qué modo pudo haber afectado a Darijah, así como las consecuencias de esa afección- agregué a lo antedicho, llevando una mano a mi cintura-. Además, ¿estamos seguros que la presencia de Pentex o cualquier aliado ha desaparecido de la ciudad? Y sumado a ello, ¿estamos seguros que no existe ningún tipo de fuerza o enemigo adicional, alguno poderoso, alguno antiguo, alguno sorpresivo quizás?- manifesté seguidamente, posando mis ojos fijamente sobre Alana aunque sin mencionar nada más.

A mí mente venía el relato que nos había contado el Inquisidor y no podía quitarme de la cabeza a aquel hombre que, había mencionado, despertó cierto poder, y la posibilidad de que significara un peligro latente, algo que se moviese entre las sombras, me dejaba intranquila.

- Como ya he dicho, antes de siquiera intentar pensar el modo de matarla debemos obtener algo más de información. Y me gustaría, señora Vondik, que repare en la pregunta que le hice... ¿cómo sabe que es una chiquilla del mismo Nosferatu? ¿Qué seguridad tenemos de que hablamos de una Nictuku y no del hombre de la bolsa?- pregunté con desagrado-. Luego respecto a la Mascarada, ese es un asunto que no nos concierne y que resulta secundario en comparación al otro problema, máxime considerando que Lichman es quien parece jactarse de cierta pericia en dicho campo y consecuentemente podría pensar el modo de mantenerla- agregué con indiferencia.

Una pequeña pausa se produjo antes que finalmente decidiera continuar.

- Ahora bien, sobre la organización, como varios han dicho la participación de la mayoría de los grupos ya se ha visto afirmativa. Sin embargo, establecer quiénes liderarán o no dicha cooperación es un asunto que jamás se zanjará y llevará a mayores discusiones sin fin- expresé mientras iba viendo de a poco a cada una de las facciones.

"No los respeto y jamás lo haré, y el sólo hecho de pensar que otro que no fuese nuestro Ductus me diese una orden me resulta irrisorio", pensaba a la vez que decía mis palabras.

- Por ello, la idea de establecer un consejo temporal integrado por un representante de cada facción se acerca a lo más parecido a un acuerdo y seguramente será lo mejor que se pueda lograr. Nuestro Ductus nos representará, de eso no nos cabe duda, y supongo que Engel será otro de los representantes- mencioné observando a Alexander-, así como Lichman y Vondik- agregué mirándoles-; el resto supongo que se expedirá al respecto. Si están de acuerdo con ello determínenlo ahora, sino dejémonos de perder el tiempo y sigamos cada uno con lo suyo, pues hay una criatura que necesitamos cazar.

-11°

15:54 hs.

Como era lógico, las dudas, los planes, las conjeturas comenzaron a salir a flote, más de uno deseaba implementar una metodología de enfrentamiento contra la temida Nictuku, quien a cada minuto que pasaba, era más y más probable que comience su ataque contra la ciudad.

Es como uno de esos datos perturbadores que uno no quiere saber, del tipo: “nada te asegura que el universo no se acabará dentro de diez minutos”.

Alana cierra el puño, Hans nota el gesto y de cierta manera recibe su mensaje, estaba hastiada, molesta por lo mismo que el mortal, los vampiros, los demonios o los danzantes siempre cometen el mismo pecado: hablar mucho, hacer poco.

Sin embargo, para concretar algo se debe estructurar con mucho cuidado antes de que todo termine en desastre.

-¿Que quiere la "bestia" que le haga salir de su guarida? Y ¿no podriamos llevarla a una zona mas alejada de la civilización donde no llamemos la atención? Creo que hay territorio mas que suficiente para que los arboles caidos no se escuchen.

- Se encuentra en una isla, es una criatura tan destructiva que corrompe todo a su paso, hacerla cruzar las costas implicaría destruir a mas mortales…y eso a pesar de que puede ser lo de menos…tenemos algunos que no estarán del todo de acuerdo – Alana mira raudamente a Allan –

- Paralelamente necesitamos tomar conocimiento sobre lo que Pentex puede haber estado haciendo aquí y de qué modo pudo haber afectado a Darijah, así como las consecuencias de esa afección. Además, ¿estamos seguros que la presencia de Pentex o cualquier aliado ha desaparecido de la ciudad? Y sumado a ello, ¿estamos seguros que no existe ningún tipo de fuerza o enemigo adicional, alguno poderoso, alguno antiguo, alguno sorpresivo quizás?-

- Ejem… - carraspea un poco Engel – no se preocupen por Pentex, tengo entendido que una cábala de magos logro erradicar por completo su presencia, créanme, alguna vez trabaje codo a codo con estos tipos y el simple hecho de poder respirar aire puro es síntoma de que se han alejado…por cierto, no les vendría mal un poco de suciedad en la ciudad – dice en tono de broma el Líder de los Danzantes –

- Como ya he dicho, antes de siquiera intentar pensar el modo de matarla debemos obtener algo más de información. Y me gustaría, señora Vondik, que repare en la pregunta que le hice... ¿cómo sabe que es una chiquilla del mismo Nosferatu? ¿Qué seguridad tenemos de que hablamos de una Nictuku y no del hombre de la bolsa?.

- Los secretos dejan de ser secretos cuando uno es experto en la Senda de la Sangre, solo basto una gota para poder ver a Nosferatu en mis recuerdos…-

- Luego respecto a la Mascarada, ese es un asunto que no nos concierne y que resulta secundario en comparación al otro problema, máxime considerando que Lichman es quien parece jactarse de cierta pericia en dicho campo y consecuentemente podría pensar el modo de mantenerla-

Una sola palabra quebranto el profundo silencio que se había formado, la palabra venia de Allan, y era corta y escueta, como el semblante del mago:

- No -

Los miró a todos los reunidos con el ceño fruncido. Su expresión no había cambiado, pero algo era distinto. Un aura casi perceptible de amenaza. No era difícil para aquellos depredadores sentir cuando otro de su especie invadía su territorio, y eso estaba pasando.

- No la traerán a la ciudad - explicó fría, mecánicamente - si lo hacen, me veré obligado a destruirla yo mismo, a continuación, a todos los que participaron en la cacería. Seré franco con ustedes, la única razón por la cual respeto su existencia es por un antiguo pacto que Kenneth y una compañera muy respetada concretaron con la ex-príncipe. Es una cortesía que les brindo, como le aclare a Leonid en otra ocasión, pero mi cábala no tendría ningún inconveniente en terminar con sus politiqueos en una noche, permanentemente -

Calló, recorriendo a todos con la mirada, buscando quizás un desafío o una pizca de incredulidad. Las palabras, siempre decía, eran buenas pero las que realmente hablaban eran los actos.

- Por cierto, les presento a Allan, es un amigo y casi hermano mío…archimago y protector de Erebo – dice Kenneth.

Nadie añade nada hasta que Alana, con su típica media sonrisa responde.

- Pues como protector de la ciudad, es mejor que nos brinde soluciones en vez de problemas… -

- No soy protector de la ciudad. Solo de los durmientes que la habitan. Centros urbanos están fuera de la cuestión, o tendrán que enfrentarse a algo muchísimo peor que Darija –

Ambos personajes, líderes de sus respectivos grupos se ciñen sobre palabras tajantes que terminan en frases cortantes, Allan sin un ápice de cambio en su rostro, mientras que Alana lo imitaba de manera directamente improporcional con su inconfundible expresión de constante burla, dejando en el aire un toque extra de tensión que de por sí ya se venía sintiendo.

Y pasaron los minutos de manera tan lenta, que incluso con la oscuridad de la eterna noche que se cernía sobre Erebo fue opacada con el silencio sepulcral que se había formado en un grupo con demasiados seres interesados en un objetivo al cual todos apuntaban, pero nadie sabía cómo afrontarlo ni junto a quien enfrentar.

- Mortales, magos, cambiaformas, demonios, miembros del Sabbat, de la Anarquía y de la Camarilla…debemos establecer nuestras agrupaciones para conllevar a un plan que debe ser acatada con sumo respeto, eso no es negociable ni mucho menos discutible, todos deseamos vernos muertos los unos a los otros, sin embargo, existen fuerzas que nos superan en demasía y por ende debemos unirnos de tal forma que podamos hacerle frente…incluso la barrera que separa la Tierra de los vivos con la de las Sombras es particularmente…filosa aquí en esta ciudad – una voz sepulcral, casi como la de un fantasma tratando de hacerse corpórea en medio de dolorosos intentos, se hace resonar en la garganta de Melanctha –

- Si, que el guantelete es particularmente agresivo en esta parte, la realidad misma parece querer aislar a la ciudad – le responde Allan sin añadir nada mas –

- Si nadie quiere agregar más palabras, creo que lo correcto es que digan quienes irán a la Isla de Darija para realizar ya sea el estudio o el ataque, por mi parte prefiero que tanto los elohims de Argentina, Alana, Kenneth y Allan permanezcan en la ciudad, en caso de que los vampiros no sean capaces de detener a la nictuku – dice el gobernador dando aparente punto final a todo lo ya dicho -

- Esa petición es del todo inaceptable.

Señalo con total calma en respuesta a las palabras del gobernador.

- Lo dije antes y lo repito: el precio que debe pagar Alana por sus pecados es dar su no-vida para enmendar el error hasta exterminar la amenaza que ella misma desató. Si no va a luchar, prefiero que se la ejecute ahora mismo.

El argumento era tan sumamente lógico que me parecía estar dando lecciones para niños pequeños.

- Y si no vamos a golpear todos a la vez, le recomendaré a mi ductus que no golpeemos en absoluto. Podemos esperar a que la Niktuku sea quien ataque Erebo y no tengáis más remedio que luchar todos. Incluso usted, señor gobernador.

Puntualizo clavando los ojos en el apetitoso Hans Lichman una vez más.

-11°

16:04 hs.

Y de pronto una muy contenida carcajada se hizo oír con un simple resoplido, demasiado humano, típico de un Camarilla de pura cepa.

- Eones y milenios han transcurrido desde que el primer vampiro apareció en nuestro mundo, y ahora los que siempre se autodenominaron ser su espada, sus soldados al frente de una guerra que parecía que nunca iba a suceder, sin embargo, ahora tienen por fin la oportunidad de demostrar que pueden luchar no solo contra un mito sino contra un general de las fuerzas que tanto temían y… ¿deseas esconderte entre los humanos? Bravo…simplemente bravo… - en verdad estaba gozándolo - negociar favor por favor... puedo conseguirte un puesto de Harpía en un Eliseo si quieres Stein. Parece ser tu llamada - el sarcasmo se desbordaba como el veneno ante cada palabra enfatizada con mucha burla –

Kenneth mira a Allan. La máscara de "profesional desinteresado" estaba comenzando a deslizarse, una sombra de sonrisa afloró en los labios del archimago, probablemente al intentar contener una risa ante el comentario de Alana.

...incluso la barrera que separa la Tierra de los vivos con la de las Sombras es particularmente…filosa aquí en esta ciudad ...

En todo momento Leonid mantuvo la expresión sería en su rostro, ahora entrelazando los dedos de sus manos para crear un puente y tomar esa postura meditativa respecto a los últimos eventos acaecidos en la misma ciudad. A su juicio la llegada de las criaturas sobrenaturales no es coincidencia alguna, y no puede evitar experimentar una mayor desconfianza respecto a hechos que si bien son efectivos no pueden ser considerados como elementos estáticos en una estrategia a realizar.

-Nuestro peor escenario es que la criatura ya haya comenzado a incursionar en territorio y haya causado la muerte de don Aaron. Considerando que se vío en la lejanía a un horror deambulando en los bosques-.

Dice en un tono tajante y no puede considerar que las actividades de Pentex no han cesado de manera definitiva, considerando que las palabras de Melanchta aun hacen eco en su mente al punto de dejar en un segundo plano las dispustas políticas que se establecen en los presentes. Incluso considera que el plan del Gobernador no es tan descabellado.

Stein...estás presionando innecesariamente esto.

Piensa ahora observando de reojo al antiguo con una expresión analítica y más seria de los acostumbrados, posando sus ojos directamente en Vondik ahora con reprobación a su actitud.

-En realidad lo que plantea Stein no es menor señora Vondik, más aun considerando su responsabilidad por mantener a una criatura de este tipo y más-.

Y más aun considerando que la alianza de la que muchos se jactan desde el principio fue precaria y ahora deben comenzar a reestructurar todo desde un principio, pero este tema en este momento llega a ser irrelevante para él a efectos prácticos. Siendo tajante en su comentario sin dar pie a bromas o sarcasmos, dado que en un contexto delicado no da margen para caer en sentimientos tan humanos, ahora posando sus ojos en el resto de los presentes.

-Respecto a lo señalado por el  Gobernador, puede que en este momento sea la opción más loable considerando que Darija es un activo a ser recuperado por estas organizaciones . Implicando que debamos cubrir demasiados flancos para abordar esta cacería y las consecuencias que ha de traer si fracasamos en esta labor-.

Si estuviera vivo respiraría, parpadearía e incluso experimentaría un dolor de cabeza al pensar en todos los escenarios. Para su buena fortuna esta muerto y sus nervios embotados completamente para sentir tales debilidades.

-Nuestro peor escenario es que dicha criatura nuevamente esté circulando en los alrededores, que sea la posible causante del deceso de don Aaron y desconocemos si actualmente esta criatura ha creado aberraciones que estén a su servicio dado los datos genéricos entregados por Vondik-.

La mirada no cambia en momento alguno y aun retumba en sus palabras lo señalado por la Heraldo. Y luego el comentario de Allan respecto a la realidad.

-Es preciso investigar primero para recabar información de lo que estamo enfrentando, ese proceso no puede superar las 24 hrs e incluso menos de corroborar que esta criatura ya ha comenzado a moverse en los alrededores. Deberemos coordinar políticas preventivas para colocar bajo resguardo a la ciudadanía de enfrentarnos al escenario de que esta criatura ya esta acechando en los límites de la ciudad-.

Su mente va trabajando rápidamente, de lo señalado por Stein tiene razón en no usar las fuerzas correspondientes pero no es sensato entrar a esperar un ataque a la ciudad considerando que el poder de Darijah es capaz de mover un ejercito.

-De a momento son los dos pasos que deberemos de llevar a cabo hasta tener más información clara al respecto. De ahí la planificación estratégica irá adaptándose de acuerdo al escenario que vaya develándose-.

-Obviamente, la Espada de Caín se hará cargo de este asunto -.

Termina por dictaminar ante los presentes, sin dar pie alguno para intriga y juegos políticos. Sabiendo que debe de realizar otras acciones durante esta noche.

Ingresa al lugar en donde realizan la reunión, ya son las 15:50 horas y el tiempo de aguardar órdenes ha terminado ya que quizás ésto se convierte en una tarea de rescate o quizás de venganza. Observa a todos sentados y sin mucho pensarlo ingresa a oír de qué trata la reunión, en silencio y luego de fijarse detenidamente en las paredes, sobre todo en las más cercanas a la salida.Se coloca de pie a la derecha de la puerta, mirando desde afuera dicha ubicación.

Permanece en silencio, alerta y listo para lo que sea. Observa a todos como para ser capaz de describirlos a un artista para que quite un perfecto retrato de cada uno. 

No comprende la utilidad de escuchar tantas sandeces y mandadas de parte de seres que se creen o dicen ser tan poderosos que pueden acabar con la cosa esa, sea lo que sea.

El infantil palabrerío de Alana Vondik le da vergüenza ajena y observa cada reacción de los presentes porque quizás alguno revele sus intenciones.     

Busca un asiento vacío y se sienta en él, como deseando no caer en letargo o el sueño de las eras por escuchar todo lo que escucha. No demuestra emoción alguna ni simula respirar.

Las palabras de Alana me atraviesan como un cuchillo. No le faltaba razón a gran parte de sus argumentos: la espada no se escondía tras los corderos y mis métodos muchas veces no eran tan propios del sabbat como cabría esperar. De hecho, esa era una de mis contradicciones internas des del principio y no logro contener una mueca de desprecio cuando la mujer da en el clavo.

Sin embargo, debía ser coherente con mis actos. Acababa de pedir la ejecución de la cainita si no se dignaba a luchar, de modo que cabía esperar algo de hostilidad de vuelta. Por otra parte, me complacía haber generado una respuesta en un ser tan poderoso y antiguo como proclamaba ser la ex-príncipe.

Des de mi punto de vista no tenía mucho sentido que Alana defendiera la no-intervención de los magos en el combate. Sería de necios despreciar un arma como aquella, pero entendía su postura como una forma de defenderse ante la presión de mis comentarios.

La posición de Leonid también me sorprendió. Les garantizaba la particiación de la manada sin esperar nada a cambio en pro de la conciliación. No podía decir que estubiera de acuerdo con esa postura, pero sabía cual era mi sitio.

Mi silencio demostraba que acataría las decisiones del ductus.

 - Esto no es productivo. - Respondí, con tono frío, tras haber permanecido callado durante toda la conversación. - Tenemos un enemigo común, poderoso y en un territorio que conoce y domina. Y estamos peleando como niños, en lugar de hacer causa común y unir fuerzas todos para eliminar la amenaza, como sería lo lógico, aportando soluciones conjuntas. En su lugar, se pierde el tiempo con quien tiene la culpa o quien se va a encargar del asunto.

 Me levanté de mi asiento y me dispuse a dirigirme a la puerta:

 - Cuando decidan comportarse como Cainitas, pueden contar conmigo, pero hasta entonces, por favor, no hagan perder el tiempo a los demás con estos sin sentidos. Por mucho que discutan, al final la lógica dictará que necesitarán unir fuerzas y dejar a un lado sus diferencias para dar caza con éxito al objetivo.

Dante suspiro y se refrego los ojos, su rostro una mascara de hastio.

-Creo que es suficiente por hoy dijo al ver que Abdon se levantaba Obviamente no vamos a llegar a nada de esta manera, donde todos intentan medirse el miembro. Mi grupo esta dispuesto a ayudar en el problema de Darijah. Lo que ocurra con Alana no es asunto nuestro. Esta acabada, no representa una amenaza para nuestros objetivos, por lo que no me concierne. Conociendo a los Tremere como los conozco, si logra salir de Erebo terminara como bibliotecaria en una capilla en Montenegro, dopada hasta arriba con la sangre de los Siete.

El tambien se levanto y se abrocho el saco de su traje. Recorrio con la vista a la sala. Hans, Allan y Kenneth podrian ser problemticos, pero estaba seguro de poder llegar a un acuerdo con ellos. Igual que con Leonid, aquel Ductus era un grata sorpresa. Si las circunstancias fueran distintas, quizas hasta podrian debatir entre ellos los pro y contras de sus respectivas ideologias.

-Nos mantendremos en contacto de manera mas impersonal, a ver si logra de esa manera imperar la logica y no la juvenil algarabia de esta reunion. He de preparar a mis muchachos para la campaña.

Sasha sonrió ámpliamente mostrando sus dientes en el proceso, al ver cómo los inmortales no se ponían de acuerdo y ponían sus intereses egoístas a los de la mayoría. En cierto punto les entendía, puesto que si pudiera ser eterno, no se pondría al frente del tifón para que se lo llevase con él.

Su mirada astuta se posó sobre la de su Alfa y después de recibir permiso se puso en pie mirando al supuesto mago y de reojo a los que pretendían salir de la reunión. -"Creo que es una mala idea abandonar la sala ahora que empezábamos a ponernos de acuerdo en algunas misivas. Coincido con la opinión del joven de cabellos rubios y mirada azulada oscura". Comenta haciendo referencia directamente a Leonid.

-"Debemos tener información antes de tomarnos la molestia de ir a cazar a nuestra presa. Si tan importante es la zona para los "poderosos", (comentó mostrando un evidente tono divertido y utilizando sus manos para hacer comillas); deberíamos buscar un lugar que nos suponga una ventaja para el combate venidero. Un lugar al que replegarnos si la cosa se pusiera difícil o peligrosa. Pensad en ello, si la Celosía es poderosa en la isla, esa situación no sería la óptima para ir a buscar a la bestia, puesto que los enemigos allí serían demasiados y/o demasiado poderosos, por lo que perderíamos una muy buena baza que usar en su contra. Quizás Lord Allan pueda mostrarnos un lugar adecuado que no se encuentre demasiado dejos de aquí y que podamos utilizar para ese fin. Pero repito que sería el lugar al que replegarnos en caso de necesidad".

El Danzante caminó unos pasos dejando sus manos cruzadas detrás de su espalda antes de continuar. -"Me uniré al grupo que vaya en busca de información a la isla, puesto que soy el mejor rastreador de los que nos encontramos aquí reunidos y si me quedase.... Seguramente me arrepentiría de no haber ido de primeras. No me interesa quién se decida que me acompañará, pero sí debemos ponernos de acuerdo sobre cómo proceder entre los que decidan ir". Dijo parando sus pasos antes de continuar. encontrándose de nuevo al lado de sus hermanos Danzantes -"No entre todos los que se encuentran aquí ahora". 

-"Así que sugiero a los que no tengan intención de formar parte en esta primera toma de contacto, se mantengan en silencio o se marchen para preparar sus ejércitos para lo que viene a continuación, porque sólo hacéis que enredarlo todo y el tiempo no nos sobra". Concluyó con una amplia sonrisa de nuevo.

Leonid va tomando nota del comportamiento de cada presente, reparando en la actitud del líder anarquista al mismo tiempo que su mente va trazando todos los planes posibles. Asintiendo a la observación de la Ex Príncipe y reparando en la actitud medianamente impulsiva de sus acciones que muchos pueden remitirlo a alguien apasionado.

Por lo que observo es un político pero también ese impetu es de alguien asociado a la guerra, eso es claro. Más por su capacidad de medir fuerzas y a efecto práctico indispensable para enfrentar de manera directa no solo a la Nictuku sino a los enemigos aun invisibles. 

Termina por hipotetizar en sus pensamientos ahora posando sus ojos ante las palabras de don Alexander al sentirse aludido por la descripción física dada hacia su persona y apoyo a la propuesta de investigación. Su mirada que no parpadea muestra alguien atento a cada detalle en concordancia a los pensamientos que va concibiendo a cada segundo.

-La Cofradía dispondrá de hermanos aptos para esta labor y yo estaré participando de manera activa  en el proceso de investigación don (Alexander). Sugiriendo que en este punto el grupo debe ser reducido no superior a cuatro o cinco integrantes para no entorpecer la labor de esta misión-.

Manteniendo su posición reflexiva ahora mirando de reojo por unos segundos a Akissi, Víctor y a Kassius, invitando a ellos con ese gesto a dar sus opiniones  como sugerencias al respecto. Siendo evidente su interés de que sean implicados dentro de esta misión y mirando nuevamente al resto de los presentes porque se ha colocado en la mesa ya un punto formal a tratar al aceptar como hecho el interés común de todos en participar dentro de la cacería.

-¿Querras decir en grupos de a cinco?-Dijo Hector con cierto retintin-por que yo no me voy a quedar en casa y creo que mas de uno tampoco.

Arthur huele a los presentes para memorizar sus aromas y olores, desde su lugar, a la vez que desea identificar la forma de cada aura y patrones dominantes ya que no siempre serán "amigos" mas mientras sean herramientas de ayuda al Sabbat, sus existencias adquieren valor. Un caballero no deja atrás ni da por desconocido a un aliado mientras esa alianza dure.

Luego observa a Leonid, quien es un espécimen tan sobrecogedoramente alfa, líder de la jauría, que ha hecho que los perros y las golfas se retiren primero para prepararse ya que carecen de toda disciplina y no están a la altura del Sabbat.

¿De quién es la gloria, a fin de cuentas, de los sabuesos y mastines que persiguen a la zorra o del cazador que le da muerte, la descuartiza y con ella alimenta a los perros? - pensó para sí antes de esbozar una mínima mueca de sonrisa.- El Sabbat es todo ese conjunto que va de caza.       

De repente se escucha un solitario pero muy sonoro aplauso, hecho con lo que solo podría interpretarse como fuerza desmedida. Lo curioso es que quien me hubiera visto hacerlo se habría dado cuenta que poco fue el esfuerzo que puse en el mismo. Poniendo una mueca que parecía decir por todos lados "Me he vuelto a pasar" comienzo a hablar -Parece que esta fiesta está llegando a su fin. Una lastima, ya tenía en mente la chica con la que quería bailar pero ni modo- Lanzo una mirada furtiva a Alana para luego poner una cara de eureka y comenzar a decirle a Dante -Hey Dante, yo me ofrezco a ir en el primer grupo. Una lastima que no valla la peliroja, esperaba conocerla más a fondo la verdad- 

Después de tanto tiempo y tanto divagar en palabras el camino al parecer se abría, no puedo creer que les haya tomado tanto tiempo llegar a la conclusión de que había que crear grupos de exploración y buscar a la maldita de Darija, sin embargo escuchar las palabras de cada uno era una manera de conocerlos y Kasius desde el principio se dedico a ello, bien hasta el momento en que su Ductus le dio una pequeña mirada, en ese instante ya solicitada la creación salió al paso; muy a pesar de que no se le daba muy bien la diplomacia...

Muy buenas noches mis estimados, mi nombre es Kasius y en representación de nuestra Cofradía me ofrezco como integrante del equipo de exploración, pongo a la orden todas mis habilidades para hacer de esta misión todo un éxito y afirmo mi compromiso de protección en la medida que lo necesiten con todos y cada uno de los que llevaremos a cabo esta misión.

Si bien no estábamos para caernos bien los unos con los otros si se podía armonizar un equipo que trabajara sinceramente bajo un fin común en lugar de intereses individuales sería probable que logremos tener algo de éxito sino terminaremos siendo un gran aperitivo sin duda.