Partida Rol por web

Es una nota que has visto como escribía, en ella pone esto:

"Podrá nublarse el sol eternamente;
podrá secarse en un instante el mar;
podrá romperse el eje de la tierra
         como un débil cristal.

¡Todo sucederá! Podrá la muerte
cubrirme con su fúnebre crespón;
pero jamás en mí podrá apagarse
    las ganas de pedirte perdón."

Ya tienes el poema, solo te quedan las rosas. 

Laila asintió a Henry, pues le parecía una idea acertada, si lel primogénito Nosferatu opinaba que los móviles podían entrañar peligro ahora mismo, por algo sería. 

-Me parece correcto, en cuanto tenga un momento me juntaré con la señorita Katherine para que entre las dos podamos lograr eso... Posiblemente podamos compenetrarnos aunque yo no es que sea una hacker tampoco-

Entonces Laila miro hacia el gangrel para la pregunta que parecía estaban todos esperando.

-Cuando diga usted señor Maximillian, saldré a cumplir con mi cometido.-

Laila miró hacia el tremere un momento para ver si este decía algo, y para reafirmarse en su decisión de a quien seguir. 

 Mientras los demás estuvieron hablando el tiempo, yo les estuve escuchando con atención, evaluándolos con atención y tratando de comprender sus verdaderas motivaciones. Cuando se decidió lo de dividirnos en tres grupos para cubrir más terreno, comenté:

 - Me parece buena idea lo de los tres equipos. Entonces veamos quien encaja bien en cada equipo y vayamos a cumplir las diferentes misiones, damas y caballeros. Los investigadores que vengan conmigo entonces...

Viendo que todos apagaban y quitaban las baterías de sus teléfonos hice lo mismo y escuche atentamente a mis compañeros, en silencio y con mi mirada fija en la mesa, casi como si no estuviera ahí. Ni siquiera había notado la nota que Harvey me había intentado pasar. Me encontraba pensando acerca de un tiempo anterior, muy antiguo y salvaje. De repente sonrío, mostrando mis afilados colmillos y suelto un simple -El mejor momento para convertir al cazador en presa, es cuando este está cazando- Luego elevo mi vista hacia mis compañeros y comienzo a hablar.

-Esto cambia un poco nuestras prioridades, pero a su vez abre una ventana. Una ventana que nos presenta un plan arriesgado pero que, de salir bien, podría traernos beneficios importantes. Pero para esto necesito saber un par de cosas, y necesito que sean muy honestos. Primero ¿Cuanto tiempo necesitarías para descubrir desde donde se están monitoreando las señales?- Esto lo digo mirando a Kátherine- Y segundo, quienes de ustedes confían en sus habilidades para rastrear y acabar con alguien como nosotros-

Con los móviles ya apagados, se dispuso a aclarar como podrían saber si alguien les estaba escuchando. Para ello, cogió el bloc y un lapiz y empezó a escribir, con esa caligrafía tan maravillosa de épocas anteriores, con letras que transmitían grandeza y personalidad, sin caer en lo tosco de la actualidad.

El papel, decía sencillamente:

Voy a mirar en el almacén del hotel, dónde llené de varios utensilios que creí que podrían ser de utilidad. Uno de ellos, es un aparato para captar "ondas de radio" y ver hacia dónde se expanden. Si triangulamos la posición, podría captar la señal destinataria, del envío, en el caso de que alguien nos escuchara. Dicho aparato, aparte de eso, servirá para verificar si esta sala emite alguna frecuencia. Para ello, deberemos encender los móviles uno a uno, y hacer una llamada a recepción, para ir descartando filtraciones; ya que en caso de que emitiera en bidireccional, signicaria que hay un tercero que escucha sin permiso. Aparte de los móviles, podría detectar cualquier frecuencia de una posible escucha que hubiesen ocultado por la sala. Con eso creo que podemos asegurar la zona. Y si resulta que nos ven o escuchan, podemos mirar de engañarlos mientras afinamos la búsqueda al triangular.

Así que cuando Max le preguntó cuanto tiempo creería que necesitaría, creyó que en 10 minutos bastaría, y eso anotó en el papel. Más los cinco para ir al almacén a buscar parte del material.

En cuanto preguntó si alguien sabia rastrear y asesinar otros vampiros, ella negó en la cabeza y escribió:

Lo mio es el arte y las reuniones sociales. Creo recordar que para rastrear quienes más se enorgullecian eran los Gangrel... y los Assamitas. Yo haría que la vieja se gane el sueldo.

Dicho eso, bajó a por el material y al rato, volvió para hacer sus comprobaciones.

- Perdona, igual no he entendido ¿pero no hemos apagado los moviles para poder hablar tranquilos? -Digo sin haber entendido muy bien la situación. - Hay que ver lo preparadas que vienen algunas para estas cosas, yo me he traido el tabaco y una maleta.

- Respecto a lo de rastrear, eso es mas para... bueno... ya sabes, gente que va con arcos y taparrabos, así que no es mi fuerte, si te refieres a otro tipo de rastreo... tampoco se que tal se me puede dar, yo se caer bien y tener suerte, y por ahora con eso me ha ido bien - Acto seguido me vuelvo a sentar y a apoyar los pies en la mesa, y nada más tocan la mesa mi cara cambia y los quito. - Ups - 

Respondo a la pregunta de Maximillian negando con la cabeza en silencio, indicando que no soy un luchador.

Katherine se toma su tiempo en escribir esmeradamente una propuesta interesante, que apruebo con un gesto de asentimiento. Veo con cierta incomodidad que pretende marcharse. Tengo sed, ¿Cuánto vamos a tardar?

En la espera, me quedo pensando sobre la tarea que me asignó el grandullón, para no perder la cabeza durante la espera. Políticos, empresarios importantes y mortales influyentes en Erebo...

En cuanto Katherine vuelve a la sala, le pido un refrigerio-. Señorita Katherine, ¿Puede ofrecerme algo de beber?

Veo a las polillas dividirse el trabajo, como si estando separados todo fuera a ir más rápido. Pero más rápido no siempre significa mejor. ¿Por qué no ir corrompiendo esta ciudad desde los cimientos, atrayendo los negocios a nuestra causa, uno a uno. Pero no, hay que dividirse, y los de las alcantarillas tenemos que encargarnos del nosferatu antiguo.

Entonces dicen aquello de matar a un vampiro. Miro. Asumo un Sabbat, que por tanto no se rige por las normas de la Camarilla, con lo que diré que sí, yo tengo el poder para acabar definitivamente con un sabbat.

Vuelvo a inclinarme, a seguir escuchando su interminable parloteo. Pero estoy aprendiendo tanto con lo que dice cada uno...

Laila escuchó toda la charla que se traían entre manos, si estaban siendo monitoreados este hotel ya sería un objetivo para el sabbat por lo que no era apropiado seguir utilizándolo como cuartel, tal vez con el tiempo podrían recuperarlo como tal una vez el sabbat fuese menos poderoso.

Le gustase o no, la anciana sentía que iba a tener que colaborar en ciertas cosas que no entraban en su contrato para poder llegar a cobrar lo prometido por este trabajo.

-Bien, señor Maximillian, tengo ciertas dudas ya que me dice que es a usted a quien tengo que reportarme, como por ejemplo... si usted muere o resulta incapacitado por otra situación... ¿seguirá mi contrato en vigor? y del mismo modo, si todos ustedes mueren...pero de alguna manera consigo expulsar al sabbat de la ciudad ¿se considerará cumplida mi misión indiferentemente de quien la ocupe después? lo digo porque mi contrato especifica al sabbat como objetivo concreto.-

La assamita sentía que ahora después de estar los trabajos repartidos se estaba perdiendo el tiempo, solo quedaba designar un nuevo lugar de encuentro y la fecha y hora además de conseguir unos móviles básicos (varios cada uno pues se podría hacer una llamada con cada dispositivo antes de destruirlos para que no fuesen localizados).

-Cuanto más tiempo pasemos aquí más visibles seremos para nuestros enemigos, creo que no deberíamos demorarnos-

Edito para agregar esto: Laila ignoró en principio la pregunta de Maximillian respecto a lo de rastrear o acabar con alguien dado que aparte de que la respuesta resultaba obvia, la toreador ya había hablado por ella. Pero después decidió contestar a su modo.

-No me considero mala rastreadora siempre que sepa lo que rastreo, aunque seguramente no sea tan buena como los de su clan-

Dijo la anciana mirando a Maximillian para agregar

-Y aunque no diga que mi especialidad es el asesinato, tampoco me considero lega en ese aspecto. Distinto es el combate con múltiples oponentes o incluso individual, en eso tal vez me superen muchos enemigos y posiblemente cualquiera de ustedes.-

La hija de haquim no pretendía asesinar a ningún sabbat aún, había mucha información que debía ser obtenida de cada uno de ellos antes de convertirlos en polvo... excepto a uno...

A su vuelta, vino cargada con una especie de pistolita con un panel de agujas y un marcador digital que captaba las frecuencias, y contaba los polos y direcciones. Todo muy técnico. Empezó barriendo con el aparato, en busca de cualquier señal por la sala, y cuando detectó que no había peligro de filtraciones, añadió:

-Procederemos a verificar los telefonos...

El proceso fue tedioso, pero por suerte no muy largo, y finalmente terminaron concluyendo, si es que se fiaban de katherine, de que allí no había escuchas, ni nada parecido que pudieran temer.

-Está todo limpio. Es mejor que ultimemos los detalles y partamos, ahora que la noche es joven.

Fue a la puerta, abrió, y una trabajadora recogió el aparato y se lo llevó sin mediar palabra, luego volvió con el resto tras cerrar, pasó una factura que sacó de su bolso a Max, junto a un recordatorio de lo que pedía aparte del dinero, por la mesa. Luego le tiró un trapo a Harvey y un producto de limpieza y señaló la mesa rota.

Le miró fijamente, mientras esperaba que los acontecimientos siguieran.

- Caray, que considerada, gracias - Vuelvo a colocar los pies encima de la mesa con toda la tranquilidad del mundo, sonrío y añado - Ya que la voy a limpiar yo la puedo manchar tranquilo, whiskey no tendrás ¿no? - 

Aliviado por las noticias, voy a recuperar mi terminal móvil cuando unas palabras concretas del antiguo Nosferatu cruzan mi mente-. ¿Y Internet? ¿Es posible espiar mediante Internet?- pregunto a Katherine, con un último coletazo de preocupación.

-Gracias por la precaución. Si esta habitación es segura, podemos terminar con esto y empezar a trabajar. 

En cuando Harvey colocó los pies de encima con su sonrisa burlona, detuvo lo que estaba haciendo y aunque en apariencia no mostraba ninguna emoción, por dentro tuvo que hacer acopio de un elevado autocontrol, aunque ya sabía cual sería su primera victima de la Camarilla cuando empezasen las bajas.

Por lo que a ella respectaba, él no habia superado la prueba, y pasaba a formar parte de las malas hierbas de su jardín.

Luego, retomando la atención de Henry, e ignorando la petición de whiskey de Harvey (pues ya no gozaba de su hospitalidad por la afrenta, ni tampoco de su compasión), le respondió:

-Disculpe, las distracciones me han desviado del camino por unos instantes. Antes pedió bebida -le entregó unas llaves de una habitación de abajo- cuando termine devuelvala a la recepción. En cuanto a Internet, supongo que si es posible, pero no soy experta en ese campo. Me temo que lo mío es la tecnología, no la programación informática. Yo monto, y entiendo de tecnología, pero en cuanto a viruses... del BASIC y el "Hello world" no paso.

Miro a todos con actitud cansada y simplemente suelto -En vistas de los recientes acontecimientos cambiaré los grupos un poco, solamente para estar seguros. Henry y Clark, ustedes encárguense de establecer comunicación con la primogenitura nosferatu, tal vez tenga información que nos sea de utilidad, sobre todo acerca de eso que decía  de que las comunicaciones podrían estar comprometidas. Katherine, tu y Mikael encárguense de averiguar sobre las personas influyentes de esta ciudad, desde políticos hasta grandes empresarios, quiero saberlo todo. Sobretodo si es que tienen alguna relación con los fanáticos- Tomo tanto mi celular como el de Harvey de la mesa -Si de verdad le preocupa que tras mi muerte su paga pueda verse comprometida, le sugiero que no me deje morir señora mía. Por lo demás su trabajo seguirá siendo el mismo, seguir al equipo que en el que usted crea que puede causar más provecho. Lo que si, voy a necesitar que me notifique a quien de nosotros planea seguir. Sientase libre de escribirlo en un papel y dármelo antes de que nos dividamos.- Mientras decía esto último me fui acercando lenta pero constantemente hacia Harvey y, por alguna razón, una especie de sonrisa se iba marcando en mi boca dejando que mis colmillos volvieran a ser completamente visibles -No creas que me olvidé de ti, tu y yo nos encargaremos de investigar quienes son los que dominan el crimen en esta ciudad y su posible relación con los fanáticos. Por lo demás, en dos días abre un nuevo club nocturno en la ciudad, nuestra reunión será en ese lugar en la noche de estreno para ver que hemos logrado conseguir. Si no hay mas preguntas podemos partir. Eso si, señora no olvide lo del papel por favor.

- Bien, pues una vez decidido todo nos vemos en 2 días en la inauguración del club - Entonces me levanto, cojo mi telefono y empiezo a irme con prisa.

- Ahora tengo que irme a vomitar el whisky al baño, Maxi, te llamo en 2-3 horas y quedamos - Esto último lo digo estando ya saliendo por la puerta mientras me tapo la boca con la mano.

En realidad no voy al baño, me voy corriendo porque no voy a limpiar la mesa de Katherine, así que salgo corriendo del hotel y me pillo un taxi y le digo.

- Arranque, rápido, ahora le digo a donde vamos - Y me iré a una cercanía de mi refugio y luego iré hasta allí andando y dando un pequeño rodeo.

Out of roll: perdón que no tengo mucho tiempo hoy

La nota que te pasa Laila pone. 

Escribiendo algo escueto, sin más la anciana escribe una pequeña nota que dobla y entrega a Maximillian ante la mirada de los demás.

-Si le parece bien-

La vampiresa sabía que todos se preguntarían quien sería espiado, aunque ella no se lo diría a nadie más. 

Sonrío ante los tejemanejes que se traen todos. Patética forma de intentar parecer humanos. Incluso aquellos que más inhumanos deberían verse intentan aparentar humanidad. No comprenden la realidad, ya no somos humanos. Yo lo sé muy bien, toda mi raza lo sabe muy bien. Llevamos en nuestros cuerpos la prueba de este hecho.

Pero vale, quieren jugar, pues que jueguen. Por un momento me han dado ganas de fundirme en las sombras y ver lo que había escrito la asamita en el papel. Pero hay un motivo por le que no lo he hecho: porque no me importa en absoluto.

Así pues, mientras espero que acaben con el proceso para ir a buscar a mis perros y adentrarnos en las alcantarillas, me siento en uno de los lujosos asientos, que espero no manchar demasiado, claro.