Partida Rol por web

El vuelo fue lento, pesado y aburrido. En poco menos de una hora se llego al punto de dispersión, y pudisteis ver como cada escuadron con sus armaduras voladoras se separaban adoptando formación en Delta hacia sus objetivos...

A vosotros aún os quedaba un rato de vuelo. La charla por radio era poca o casi inexistente hasta que el piloto del transporte insignia dio la señal de aterrizaje.

Las compuertas laterales se abrieron y mostraron el paisaje desertico y desolado de la zona. Los vehículos se quedaron en suspensión por encima de las montañas y vosotros os dejasteis caer con pesadez... Las patas metálicas dejaron marcas en la roca desnuda mientras el polvo se levantaba a vuestro al rededor. La temperatura en el exterior era muy elevada, pero los trajes os protegían de esas temperaturas creando una atmósfera agradable e ideal para combatir.

Los transportes, después de desearos buena caza empezaban las maniobras de alejamiento dando un pesado giró de 180º mientras tenían el morro levantado para tomar altura. Las toberas se iban girando conforme el piloto presionaba los pedales e imprimían mas potencia a las pesadas maquinas iban acelerando poco a poco pero el silencio del momento se vio interrumpido, a la vez que una voz empezaba a gritar frenéticamente en todos vuestros radares las alarmas se disparaban y luces rojas se encendían...

- ¡Contactos! ¡Son dos! ¡LOS TENEMOS JUSTO ENCIMA! - pero era tarde... o eso parecía, por ahora solo pudisteis mirar hacía el cielo, estaban justo encima, dos aviones haciendo un picado y soltando cuatro proyectiles que comenzaban a caer con velocidad hacía vuestra posición...

Ya nunca mas conduciría una motocicleta para el ejército. Ahora vestía un arma mucho mas poderosa, era parte de ese arma y se sentía tan cómodo en ella que bien podría decir que se trataba de una segunda piel.
Aunque los preparativos para la misión y el viaje habían sido terriblemente tediosos, Riley aguantaba como todo un militar, sin emitir queja alguna y siempre con la cabeza alta y el gesto serio.

Toda la adrenalina que había estado siendo contenida por el tedio se descarga de un solo golpe cuando por fin tocan tierra. Los amortiguadores de las patas de la armadura frenan la dura caída, aunque tiene que salir del agujero de diez centímetros que ha creado el peso de Blaze sobre ña superficie de roca. Aquellos trastos eran buenos. Parecían muy resistentes.

Pero el momento dura poco. El ataque comienza antes de lo previsto, apenas si se han ido los transportes. Un par de aviones en picado lanzan su carga de muerte sobre el grupo y aunque Riley los ve venir y sabe perfectamente que hacer para evitarlos, su falta de costumbre con la armadura le hace dudar un segundo que quizá signifique la diferencia entre salvarse o poner a prueba las armaduras con una gran explosión.

Mórrison también aguantaba el tipo mientras le ponían la armadura. No le rsultó pesado casi para nada, de hecho casi disfrutaba con todo ello. Es la 1º vez que conducía uno de esos artefactos, siempre viéndolos e imaginándose cómo sería conducir uno, estaba encantado y ahora lo único que deseaba era estar por encima de las circustancias.

Casi no puede valorar la resistencia de las armaduras al amortiguar una caída así cuando ya ve venir el primer ataque del enemigo.

William caminaba con paso tranquilo, decidido hacia lo que serían sus nuevas armaduras de combate, la nueva forma de hacer la guerra y defender nuestras creencias... Pero cuando las pudimos contemplar, lo único que pudo hacer fue santiguarse... Santa María, madre de Dios... fueron las únicas palabras que salieron de su boca, mientras llevaba su mano a la cruz que colgaba de su pecho.

Se la sacó del cuello y comenzó a anudarla a su muñeca, quedando solamente la cruz colgando de la misma y la cadena de cuero dando un par de vueltas sobre la piel del irlandés... Pasó todo el proceso de montaje, de incialización y de transporte un tanto asustado... esas máquinas sin duda eran poderosas, muy poderosas... pero si eran necesarias para combatir al enemigo es que también tenía una gran potencia de ataque...

Justo antes de saltar para caer en el desierto, por los comunicadores de todas las armaduras y de quien pueda estar escuchando se escucha la voz de William... ya era sabido por todos su gran religiosidad... Seremos pastores, por ti señor por ti, el poder ha descendido de tu mano, nuestros pies ejecutarán rápidamente tus órdenes, haremos manar un río hacia ti, para reunir a todas tus almas. In nomine Patris et fillii et Spiritus Sancti

Segundos después estábamos ante un enorme desierto, y siendo atacados por el enemigo... Demasiado pronto...

Impaciencia, ese era el sentimiento durante el tiempo que tardaron en ponerme la armadura, un vacio en el estomago mientras los sistemas se ponian en marcha y despues, una vez realizados los test de sistema de nuevo impaciencia, mezclada con ira, para que negarlo

La llegada a la zona, salimos del transporte y al comenzar a probar los movimientos de la armadura... problemas

Los segundos pasaban... los cuatro proyectiles estaban mas cerca y los aviones comenzaban a enderezar el morro dispuestos a seguir en vuelo horizontal...
Los transportes seguían moviendose acelerando aún mas los motores nerviosos... todo parecía ir mas y mas lento ante el peligro inminente. Pero algo no iba del todo bien, las computadoras lograron identificar los aviones y no se corresponden al nivel tecnológico marroquí... algo iba mal...

Aviones

Cuatro misiles se dirigen hacia nosotros a toda velocidad, casi sin pensarlo, hinco una de las rodillas metállicas en el suelo produciendo un fuerte sonido ante el impacto, con una destreza y rapidez dignas de un experto en el control de esas máquinas, saco el Mauser 2150 y apunto directamente hacia uno de los misiles que se acercan, el que esté mas centrado de todos, para intentar reventarlo y que la explosión afecte a los demás...

Un par de segundos después se escucha un fuerte sonido que proviene del enorme arma que porto, una pequeña estela de tierra se levanta en la parte de atrás de Eastwood producida por el retroceso y del arma, y un casquillo del tamaño casi de una persona sale volando y cae al suelo... La bala se dirige directa hacia su objetivo...

Eastwood y su computadora calibraron en milésimas de segundo los cálculos necesarios para efectuar el disparo...

El proyectil fue lanzado con una fuerza impresionante por no decir con una puntería casi milimétrica pues impacto de lleno en uno de los misiles haciendo que este detonara en pleno vuelo. La fortuna sonrió un poco esta ocasión, pues la explosión hizo que uno de los misiles se viera afectado por la onda expansiva forzando un cambio de rumbo y su posterior explosión.
Pero dos seguían en vuelo... cuando estuvieron a pocos metros la cabeza de cada misil explotó en el aire dejando al descubierto una estructura como de panal que lanzaron infinidad de proyectiles que reventaron dos transportes casi por completo.

- ¡ROMPE ROMP......! - fue lo ultimo que sonó en la radio de uno de los pilotos, ese ataque había perforado la cabina e hizo que se estrellara unos metros hacía el norte, pero el segundo transporte se vio dañado en los motores de cola perdiendo estabilidad y cayendo sobre el pobre Eastwood que nada pudo hacer por evitar el potente impacto que lo arrastro varios metros para luego explotar.

Algunas alarmas saltaron en la armadura de Eastwood señalando ciertos daños en la parte frontal y perdida de integridad pero seguía operativa al 100%

Lo peor había pasado y los aviones seguían alejándose...

¡Mierda!
Por puro instinto, al ver caer los transporte, Riley piensa en tirarse cuerpo a tierra para cubrirse de las posibles explosiones... Pero las luces y las pantallas de datos que ve frente a sus ojos le recuerdan en décimas de segundo que se encuentra a bordo de la mejor máquina jamás diseñada por los pensadores y técnicos de la UE.
Sale a la carrera hacia el transporte que ha caído mas lejos con la intención de socorrer a los pilotos y cubrirlos si los aviones deciden hacer una nueva pasada.
Una vez que llega, valora la situación, intentando comprobar si puede sacar a los ocupantes del transporte del amasijo de hierros que es ahora la nave.
Abre el canal de comunicaciones y advierte a la base.
¡Los transportes han caído!

La cabina esta destrozada. Llena de metralla y de restos humanos, sin duda, nadie, absolutamente nadie, tiene una pieza de cuerpo junta mas grande que una cabeza. Riley conocía a la perfección las municiones perforantes de racimo, las cuales están prohibidas. Sin duda la visión es dantesca, vísceras mezcladas con restos metálicos. Sin duda alguna nadie ha sobrevivido.

La armadura de tonos blancuzcos corrió veloz hacía la zona del accidente. Miró por la ventana y sin perder el tiempo. Los cortadores de fusión entraron en contacto con el amasijo de hierros que era la cabina y en apenas unos segundos la parte delantera ya estaba separada del resto de la nave para poder sacar a los heridos y muertos - Levanta Eastwood - dijo por radio al soldado para que este facilitara el trabajo...

Acier contempló asombrado y con los ojos como platos la situación.
Mas aun así no se movió del sitio en el que estaba, escrutando el horizonte por un posible nuevo ataque o contacto visual con el enemigo. White y Blaze se bastarían por el momento para atender el desastre.

Viendo como esta la situacion y que white y Blaze estan encargandose del transporte me giro en la direccion de los aviones por si tratan de dar otra pasada, mientras activo en mi armadura el rifle de plasma, listo para intentar derribarlos si vuelven a la carga