Partida Rol por web

Me dirijo a Rakas mostrado mi jarra vacía con la clara intención de que me sirva un poco de la suya: -Nooo señor, este color de piel es único entre los míos, realmente no se lo qué es...no sé si es una enfermedad o un maleficio, el caso es que lo tengo desde que nací...al final te acostumbras ¿sabes? De hecho a mi me es de buen beneficio este color... se confunde con la hojarasca y al igual que los camaleones, me ayuda a esconderme mejor entre la maleza. JEJEJEJJEE. Y si a alguien no le gusta que no mire. concluyo cortante

Gliadel se levanta al compas de Krormar para hacer las presentaciones protocolarias a los dos desconocidos, pero es demasiado lento.Cuando va a abrir la boca Rakas ya esta acabando con la última porcion de su plato y platicando con el mediano.La expresión del elfo pareció concentrarse de repente asi que el joven por no molestar mas de lo debido opta por sentarse a la mesa y acercar su nariz al plato para advertir mejor su olor.
-Mmmmmmh.Placer de dioses...En el monasterio nuestra comida no estaba tan elaborada verdaderamente.-Acto seguido junta las llemas de sus dedos y empieza a bendecir los alimentos cuando su plegaria se ve inesperadamente interrumpida por la repentina exclamacion del elfo.
-Le conocen?.-
Mientras Gliadel gira la cabeza instintivamente en dirección hacia donde parece que el elfo está escudriñando solo le da tiempo ha decir una palabra.
-¿Que?

Miro el plato, lo huelo, pringo la punta de la lengua y busco con la cuchara... Si no somos enanos....buf...¿de qué diantres esta hecho esto?

Miro sin reparo al personaje que se mantiene alejado de nostros.

-Esta situación comienza a incomodarme y lo que es aun peor se me va indigestar tan maravilloso plato.- Del que vuelvo a servirme una buena ración antes de que el mediano acabe con todo.- Por los dioses unase a nostros en tan agradable conversación o larguese y deje de fisgar.

Pongo una jarra de cerveza y un plato para ver si acepta la invitación. Mientras trato de saborear el plato y descubrir su sabor.

Sin duda en el norte no existe ningún animal o hierbas que sepán igual. Podría ser sapo y aun así repetiría.

La cortés reverencia parece que no ha tenido el efecto deseado.Gliadel permanece genuflexionado mientras el enano irrumpe atiborrando los platos de comida,el mediano experimentando con ella y el elfo mas pendiente del enano que de otra cosa.
- Por los dioses unase a nostros en tan agradable conversación o larguese y deje de fisgar.-La expresión de Gliadel lo dice todo,solo nos faltaba que Rakas nos metiese en una pelea sin sentido.-
Gliadel propina un calmante seco en el hombro de Rakas mientras le mira fulgurantemenmte.
-No te metas con el hombre,no nos ha hecho nada.Si yo estuviera en su lugar también miraria alelado el pintoresco grupo que acabamos de formar, por las barbas de Pelor!.

- Lo lamento, pero me ha llamado la atención el plato así como el pequeño hombre, que lamento decir primero confundí con un niño.Me llamo Arza-El, y será un placer para mi unirme a ustedes.

-Por fin alguien con algo de educación!Encantado Arza-El, yo soy Gliadel, del Monasterio de la Vigilancia, en los Valles de la Luz, para servirte.Acomodate y prueba este estupendo plato que nos ha preparado el tabernero.-Y canturreando con tono incitador vocea.-Una pinta de cerveza para quien adivine que lleva esto...!

me rasco la cabeza y miro a Sammson de reojo y con una ceja arqueada-mmmmmm....esta claro que lleva hongos oscuros de las cavernas...los conozco, pero lo que no consigo descubrir es de que son estos trozos de carne tan sabrosos...-recapacito sobre la fauna de la zona e intento relacionar sabores. La carne tiene que ser de algún animal de por aqui...miro las paredes y busco si hay alguna cabeza disecada que pudiera relacionar con la carne que estoy comiendo.

Salto del taburete y me escondo debajo de la mesa; desde ahi observo cada detalle y cualquier movimiento del resto de compañeros y vigilo la puerta por donde ha entrado el herido.

Etchelión se concentra un momento por si hay alguien o algo escondido que no haya visto.

Desenfundo el espadón y voy hacia la puerta mientras de reojo miro al herido.
Trato de escuchar más caballos o algún sonido fuera de lo común. Sin embargo al oir a Gliadel me giro y me dirijo a Sammson.

-Seguro que tienes algo con lo que ayudar a mi compañero, yo mientras saldré a ver si viene alguién.- Miro al resto del grupo tratando de evaluar quien puede venir conmigo.-No estaría mal que alguno más me acompañara por si se complica la cosa, el resto que ayude a Gliadel estoy convecido que él logrará salvar a este hombre.

Una mano con una bolsa emerge detras de Gliadel.Tras seguir el brazo con mirada estupefacta ve al mediano con cara inexpresiva.Coge la bolsa y mira en su interior.

-Bien Gracias!Esto me vendra de perlas.-su mirada agradecida lo dice todo.-Haber que puedo hacer!

Una vez fuera de la taberna me concentro mejor y trato de distinguir algo inusual. Es poco lo que yo puedo hacer dentro, aunque no me alejo de la puerta por si hubiera problemas.
Sin bajar la guardia me acerco al caballo del herido para hacerme cargo de él, observo de que calidad es la montura y cual es su estado, puede que averigue algo como si viene de muy lejos, si ha forzado mucho al caballo en su probable huida.

Arza-El fue el último en moverse. Viendo cómo actuaban todos los demás miembros del grupo con el que estaba cenando. Cuando vió que acababan de salvarle la vida fue entonces que se decidió a moverse.
Salió de la taberna y se dispuso a buscar si había alguien en los alrededores.

Dentro de lo poco que podeis acordaros de las características de los enanos, que estos se ofrezcan a regalaros algo (como la comida y la bebida) implica que está más que preocupado por la situación. No es nada común que estén dispuestos a regalar nada.

Parece que es bastante amigo de este Randamis, por eso quiere que le lleven a Coblee a su casa

-Randamis...-Parafrasea al oir el nombre de nuevo en boca del enano- Claro de eso me sonaba!
El hombre dijo algo de Randamis antes de volver a desmayarse.Algo de una carpa o una carga.Parecía bastante preocupado.Me temo que algo le podría estar pasando a tu amigo.

Fuera me acerco al caballo, le froto y le hablo de manera tranquilizadora.- Bueno veamos si llevas algo interesante amigo.
Cojo las alforjas en caso de tenerlas, en caso contrario busco en la silla alguna bolsa, o sobre escondido.
Libero al caballo de la silla y el bocado para que pueda descansar, viendo que está bien domesticado le dejo libre para que pueda relajarse y descansar.

Gliadel muestra sintomas de preocupación constante.Hay algo raro en este asunto que no le acaba de gustar.

-No creo que sea buena idea registrarle.No porque no sea ético ya que en esta situación podría hacerse la excepción sin duda alguna,nuestras intenciones son dignas .-Carraspea con cierta incomodidad.-Pero si la carga que lleva iba dirigida a Randamis ,un experto mago como afirma Sammson, su naturaleza puede que sea mágica y podriamos dañarla sin quererlo,incluso...-Mira temerosamente al cadaver-Podría ser peligrosa.-diciendo esto último mirando con cierto temor al cadaver.

Un hechizo de curación mas.En eso piensa Gliadel.Uno más y puede y solo puede que el hombre pudiera terminar de contar su historia: Solo es una pequeña posibilidad.Desgraciadamente eso supondría la pérdida de una parte de su fuerza divina que podría emplear en salvar a alguién que de verdad lo necesitara,despues de todo este hombre ya estaba fuera de peligro.Gliadel no puede evitar recordar en este momento el consejo de su anciano maestro Wolfren,quizás el mas importante que nunca le diera:Útiliza tus poderes con sabiduría, hijo,Pelor no siempre puede estar allí para ayudarte siempre que lo necesites.
Sin embargo esta situación no tenía precedentes,era una excepción y la vida de alguien más podría estar en juego.Gliadel se haya en un dilema.

-Bien,lo intentare.Apartaros.-

Gliadel vuelve a posar sus manos vacilantes una vez mas en el cuerpo herido.Esta vez su cara refleja una concentración sin precedentes.Sus oraciones vuelven a bañar la sala.

-Una luz,frente a un abismo oscuro.
La misericordia son sus frutos.
La desgracia,su peor enemigo.
Acepta la luz que te doy,hombre de fé!
y deja que bañe tu cuerpo,
el mundo te necesita!,
para que le devuelvas favor,
la luz,
tu vida.

Niego con la cabeza viendo que nos estamos metiendo en un callejón sin salida.- Creo que los únicos que pueden decidir sobre si mover el herido son mi compañero o el tabernero que parece conocerlo. De todas formas creo que es imporatne que Randamis sepa de esta situación cuanto antes.- Miro nuevamente al herido insquisitivamente buscando algo extraño que pueda portar, lo hago desde una distancia prudencial, las palabras de Gliadel sobre el objeto mágico me han dado que pensar.

Se me ha ocurrido algo, si Gliadel tiene razón y el objeto que puede portar el herido es mágico o frágil, el elfo aquí presente podría hacerse cargo del registro, parece tener relación con Randamis y seguro que algo conoce de magos.- Sonrio ante tan buena ocurrencia y con los brazos en jarra espero a que el mago proceda.