Partida Rol por web

Finalmente el grupo decide retroceder y tratar de buscar ayuda en el otro grupo para poder resucitar a Eldarian. Decidieron volver por el mismo camino para así no perderse y llegar hasta la escalera por donde se habían separado.

*Pido ir al final de la subida pues con la armadura prefiero tomarme mi tiempo 

Jai, con el cuerpo de Eldarian a sus hombros comenzó la subida por las escaleras en busca de los compañeros. El tigre-hombre solo tenía en mente llegar cuanto antes hasta los demás para pedir su ayuda. Y eso tuvo sus consecuencias, pues durante el camino no prestaba la atención necesaria que aquel sitio lleno de trampas merecía. 

El mediando observa como el hombre felino sube rapidamente con su compañero a cuesta y luego de que sube este y Ecate empieza su ascenso por la escalera para poder reunirse con el resto del grupo.

Intento safarme de la telaraña pero sin mucho exito

Nada más poner los pies en la escalara, la telaraña, de la cual estaban hechos los escalones, atrapó los pies del felino. El tremendo tigre rugió de ira mientras intentaba zafarse. 

Pero por mucho que gritara e hiciera fuerza, las escaleras le retenían. Además el peso muerto que suponía Eldarian no contribuía si no que entorpecía en su intento de liberarse.

El pequeño intenta liberarse sin tener mucho éxito y parece que se pega mas aun de lo que estaba..

Estaba claro que Jai no estaba aún acostumbrado a sus manos en lugar de garras o zarpas, pues por mucho que lo intentaba y por mucha ayuda de sus compañeros, resultaba imposible liberarse de aquella trampa. Debía seguir intentándolo si quería escapar de allí, pues corría el riesgo de que alguien los descubriese y para entonces fuese demasiado tarde.

Nuevamente intenta escapar de esas telarañas... sin mucho exito, aunque nota que sera mejor busca como ayudar a otros a escapar asi que hace algo de memoria para ver quien tenia mas fuerza basandose en el arma que les vio usar

Lanzando un tremendo rugido el tigre-hombre que era Jai logra por puro coraje y fuerza salir de las pegajosas telarañas que le retenían.

Una vez liberado, Jai tendió una mano al siguiente que también estaba atrapado en la escalera para ayudarle a salir de ahí.

El pequeño sigue intentando poder despegarse de la tela de araña y subir con sus compañeros, pero aun le resulta muy difícil hacerlo. En este momento le gustaría tener su hechizo de volar para no pasar todo este tormento.

Valduane se elevó gracias a las habilidades de sus botas sin necesidad de tocar la tela de araña. Vio como sus compañeros iban quedando atrapados en ella. Decidió ayudarles para escapar de aquella trampa pegajosa.

Jail se habia liberado, valduane estaba libre asi que solo quedaba ella y el mediano, no creia que el mediano se pudiera safar solo, lo mejor seria intentar safarse ella misma en lugar de perder tiempo con el mediano, se ocuparia de la ayuda de todos para sacarlo de esa telaraña

Aun sin resultados, si no fuera por que ocuparian esa telaraña despues la quemaria una vez libre...

Finalmente el grupo al completo, o lo que quedaba de él se reunió en una de las telarañas. El grupo de arriba le explicó al de abajo que no servía de nada que subieran pues el camino estaba bloqueado y el final era mortal, literalmente. Allí habían perdido al drow que les estaba sirviendo de guía y a Asmodeo. 

El resto cargaban con Eldarian, que parecía haber corrido la misma suerte que sus compañeros, al menos de él habían podido recuperar su cadáver. Cosa que ahora Alba podría intentar devolver a la vida.

Y allí, juntos de nuevo, tendrían que seguir por aquella planta, pues era el único camino que faltaba por investigar.

En el reecuentro, el abatido grupo del piso superior se encontró con la pérdida de Eldarian. Alba avanzó, se arrodilla y examina con delicadeza el cuerpo del druida. Acaricia su rostro gentilmente y habla con dulzura.

- Nuestro amigo solo duerme, pero la gracia de Pelor puede despertarle - dijo son suavidad. Su mirada se fijó en un pequeño bolso atado al cuerpo del elfo. Lo abre y comienza a buscar algo. Al no encontrarlo a primera vista se ve obligada a meter los brazos, separar las armas y armaduras que tapaban todo y remover el profundo fondo. Cuando la joven casi metía la cabeza por fin halló lo que buscaba: un pequeño saquito. Lo abrió y un brillante polvo se descubrió: polvo de diamantes.

"Tendrá que servir. No. Servirá", pensó con convicción.

Espolvoreó el polvo alrededor de cuerpo, creando un circulo. Extrajo un pequeño vial con agua y ungió al caído. Después, arrodillada y con los ojos cerrados, juntó las manos y comenzó a realizar una plegaria en voz queda. Sus labios siguieron recitando una letanía durante un rato. Finalmente abrió los ojos alzó las manos y la cabeza y rogó a Pelor por el milagro.

- Oh magnánimo y Todopoderoso Pelor, atiende mi ruego: devuelve la vida a Eldarian, te lo suplico. Las sombras son muchas y su luz será necesaria en este oscuro camino que nos aguarda - oró. Finalmente descendió sus manos y las impuso sobre el pecho del elfo. Una luz dorada, hermosa, brilló bajo ellas.

Al reunirse todo el grupo, Jai se acercó a Alba y mostró a su fallecido amigo que portaba en sus brazos.

El tigre-hombre mostró el cuerpo y se arrodilló, tendiéndolo en el suelo. Luego se levantó y miró a la clérigo y con la voz entrecortada le pidio entre lágrimas:

- Por favor, devuelve la vida a mi amigo. Él...él solo trataba de ayudarnos y murió por defendernos- trató de explicarlo-. Es una buena persona. Por favor, devuélvele la vida.

Luego Jai se apató y dejó hacer a la mujer. Esta Oró por la vida del elfo elevando una plegaria a su Dios, Pelor. Al final puso sus manos sobre Eldarian y una luz salió de sus manos y se extendió por el cuerpo de su amigo. Era una luz cálida, blanca, prístina, pero no hacia daño al mirarla si no todo lo contrario, era cálida y reconfortaba al mirarla.

El hombre tigre, esperó, con angustia, a que su amigo y compañero de andanzas volviera a la vida.

Nuevamente intenta soltarse mientras el resto del grupo se ocupaba de ver si podian recuperar al druida a la vida

-Creo que ha sido un error separarnos ya que los peligros en este lugar son demasiados.

Observo cómo Alba realiza el ritual de sus plegarias con nuestro compañero druida.

-En la planta de arriba nos hemos encontrado con un enemigo terrible, pero no se si deberíamos intentar recuperar también los cuerpos de Asmodeo y Solom. Se que el Drow no os daba confianza, pero él conoce estas cavernas y nos puede dar información.

Miro el a todo el grupo y me pregunto por qué vamos a seguir aquí abajo si no tenemos a nuestro guía.

-O tal vez deberíamos abandonar este lugar...