Partida Rol por web

Empezais vuestro camino en dirección nordeste. Habeis sincronizado vuestros relojes con el otro equipo: ahora son las 11am (evidentemente, vuestro sistema horario no coincide con el de este planeta).

Teneis calor. Los indicadores de temperatura marcan 32ºC.

Tras un par de minutos, la montaña de más adelante ya no parece tan pequeña, podeis deducir que tiene menos de 700m de altura.

Es una montaña bastante pelada, no tiene demasiado rastro de vegetación y la poca que hay está prácticamente muerta o seca.

Derek tatarea una canción que se le había pegado. Mientras, mira la montaña.

- Guau, me la imaginaba más... como el Monte del Destino o así. ¿No habéis leído ese libro? ¿El no-se-qué de los Anillos? Es del siglo... -Derek se rasca el casco-, no sé, XIX o así. Sí, muy viejo -vuelve a mirar la montaña-. Bueno, Compañía del Anillo, yo digo: que el labrador empuje el arado, pero elige una nutria para nadar, y para correr levemente sobre la hierba y las hojas, o sobre la nieve... ¿un elfo?. ¡No! -Derek saca su arma-. ¡Ésto! -entonces el hombre se encamina hacia la montaña, atento a cualquier contratiempo.

¿Pero que clase de compañero nos ha tocado? Bueno, mientras que de la talla en los momentos precisos, me vale. De todos modos, admiro su capacidad de bromear y abstraerse en medio de una misión, ojalá yo pudiera disipar tan facilmente mis dudas y temores, el saber si volveré a ver a Eva y a los crios...

-Vaya con la montañita, nos llevará un rato subir hasta ahí arriba.

Al llegar al pie de la montaña podeis ver como ha alcanzado una altura considerable.
Ahora veis con exactitud que está llena de rocas afiladas, vegetación muerta y quién sabe qué más. La cantidad de rocas augmenta con un gradiente más o menos constante de altura (vamos, que hay más rocas en la cima que en la base).

Si hechais un vistazo a esta cara de la montaña en busca de peligro extra no encontrareis nada.

Despues del comentario de Derek, John levanta una ceja. Todavia no se cree que este tipo haya leido el libro del señor de los anillos, pero lo ignora totalmente y sigue para adelante. Recordando el comentario que Finnegan hizo antes sobre posibles explosivos, John estará atento para verlos/esquivarlos/avisar a los demás/lo que sea mientras busca un camino para llegar donde tengamos que poner la antena.
Donde va ese cacharro? pregunta a Derek mientras echa una ojeada a la montaña.

- Lo más alto posible, compañero -responde Derek, señalando hacia arriba: a la cima-. Wow, será una buena caminata... -mira a los fornidos marines y al experto en demoliciones-, anti-bichitos, y anti-explosivos... mmm... mejor será dejar a las damas primero -sonríe, esperando que los expertos puedan evitar algún tipo de emboscada o trampa. Así, Derek va pisando donde pisan los demás, con cuidado, sin dejar de tatarear en voz muy baja-. Un paso aquí, la hormiguita sigue así. Otro paso más, la mariposa Marimar...

Cada vez el pendiente de la montaña se hace más abrupto. El numero de rocas crece cada X lo que hace más dificil encontrar un buen lugar que poner el pie.

Parece que la humedad va decreciendo con la altura.

La subida escarpada le estaba costando lo suyo a Finn que apenas hablaba concentrandose en no perder el equilibrio.

Ascendia a ritmo tranquilo un poco a su bola.

- Uy, ¿por qué no inventaron las antenas tipo hormiga? Me la pongo en la cabeza y ya está -masculla Derek, medio tropezándose.

John, con cuidado, asciende por la montaña tropezando cada dos por tres con las rocas del camino.

Comienzo a subir con todo tipo de precauciones, pero en vez de seguir los pasos de mis compañeros, los flanqueo por la derecha, pues si vamos en fila india y uno cae, mal asunto. Me concentro en subir a la vez que oteo mi lateral en busca de cualquier amenaza o signo anómalo.

Intentais escalar este pequeño risco (que parece ser la opción más fácil) pero no dais un palo al agua, menos Hans, que empieza a trepar con cierta soltura.

Mientras Derek intenta, sin fortuna, escalar se le cae la antena!!

Todos veis con asombro como Hans os saluda des de arriba.

- ¡Scheiße! -grita Derek, mientras intenta coger la antena. Sus dedos logran tocarla, pero no puede sostenerla, y cae...

La antena cae al suelo haciendo un ruido que congela la respiración. ¿Se habrá roto?

Hans observa, des de lo alto del risco, la desafortunada escena.

Por un momento pienso en bajar a ayudar a mis compañeros, pero ahora mismo soy el único en posición de cubrir al equipo. Observo a mis compañeros así como la zona que les rodea, siempre atento ante cualquier situación de peligro.

Consejo: intenta buscar algo en plan cuerda, para ayudarles a subir. Aunque sea tumbandote al suelo y alargandoles la mano xDDD

Mmmm, voy a ver si el cacharro sigue entero o me lo descontarán de mi bajo sueldo -masculla Derek, acercándose con cuidado a la antena-. Ya le dije a la tata que me dejara subir a aquel árbol, ahora sabría trepar mejor...