Partida Rol por web

Se abren las puertas del piso -4 para mostrar un corredor a oscuras, con un pequeño fluorescente al final, que se ilumina intermitentemente.

Podeis observar puertas a ambos lados del pasillo, cada una con un sistema de lector de tarjetas y una placa en el centro de la puerta.

Debajo del fluorescente, una puerta entreabierta, parece más grande que las demás y no tiene sistema de seguridad.

Bien, al ver el panorama de la planta, hago un gesto a mis compañeros para que avancen en silencio, mientras me sitúo en el lado izquierdo del pasillo, avanzando hacia la puerta abierta con extrema precaución.

Las puertas del ascensor se abrieron para dejar ver un oscuro, y mal iluminado, pasillo. Garbiel se tomó unos segundos para asegurarse de que su arma se encontraba en perfecto estado, no es que la fuera a utilizar inmediatamente... pero tenía un mal presentimiento...
Hans tomó el liderazgo e hizo una señal para que avanzaran. Garbiel andó, lentamente, media dozena de pasos y se detuvo; se agachó, rodilla en el suelo y espalda contra la paret, mientras apuntaba hacia el fondo del pasillo para cubrir la zona.
- Venga chicos... - susurró - Vayamos avanzando por parejas... así nos podremos cubrir mutuamente...
Intentando maximizar sus sentidos con su pura fuerza de voluntad, el marine intentó percibir algun sonido de que algo iba mal...

Jack quitó el seguro a su subfusil mientras bajaban por el ascensor.

Las puertas, al abrirse dejaron ver aquel pobremente iluminado pasillo. Hans tomó la iniciativa y se dirigió hacia la puerta entreabierta, haciendo un gesto para que le siguieran en silencio. Efectivamente era la mejor opción, ya que las otras puertas tenían un sistema de cierre de seguridad y por tanto, en teoría, estaban cubiertas, así que procedió a seguir al grupo con el arma en alto.

Todo esta en silencio, demasiado silencioso para tu gusto... Sólo puedes oír tu propia respiración, los latidos de tu corazón y los pasos de tus compañeros.

Una vez atravesais la puerta podeis ver, con ligera dificultad, que se trata de un comedor comunitario. Intuís que la habitación es grande, muy grande, aunque no podeis ver dónde acaba. Esta todo a oscuras.

Quito el seguro del arma y avanzo con mis compañeros hasta el comedor SIN HACERLES NINGUN GESTO PARA QUE AVANCEN. Allí, echo una ojeada con la linterna para ver el final de la sala y espero en silencio, junto a gabriel, a que avancen Jack y Hans, preparado para cubrirles.

Garbiel encendió la linterna para ver mejor la sala.
Con el fusil en alto observó el perímetro en busca de posibles blancos hostiles, o tal vez algún superviviente, mientras oía los pasos de Jhon, que llegaba a su lado.
Con un gesto de la mano, Garbiel, le indicó a sus compañeros que avanzara, él y Jhon los cubrían...

Una vez colocados mis compañeros, y viendo que ofrecen cobertura, conecto la linterna y me adentro cautelosamente en la sala, bordeandola pegado a la pared derecha, con el fin de no ofrecer un blanco fácil en caso de ser emboscado.

Llevais ya un buen rato moviendoos por la zona, con máxima cautela pero no encontrais peligro. Más bien, parece el piso donde los marines comían y dormían. También hay duchas y otras facilidades básicas para los humanos.

No hay información relevante de lo ocurrido en las instalaciones

Jack procedió a registrar cada rincón de la zona con la linterna encendida, asegurándose de que no existía ningún peligro potencial oculto en la oscuridad. No quería llevarse sorpresas...

Parece que no hay nada interesante por aquí, gente. Sigamos. - dijo al no encontrar nada interesante.

Ya un poco relajado buscó inconscientemente en el bolsillo de su chaleco algun puro, pero se detuvo a si mismo justo al tocarlo... no era buen momento. A ver si terminaban de una vez allí y podía fumar tranquilo...

Vamos a ver las habitaciones del principio - dijo con un cierto toque de impaciencia, dirigiéndose ya hacia allí.

- Si, esta zona está limpia. Deberíamos retroceder y examinar las habitaciones cerradas una a una, tal vez encontremos algo de utilidad o relacionado con las llamadas de socorro.

Dicho esto procedo a examinar la cerradura de la primera puerta del pasillo, mientras espero al resto de mis compañeros.

Tras examinar la zona junto a mis compañeros, me pongo ante la puerta enfrente de la que está Hans e intento abrirla, poniendo la mando pesadamente sobre el pomo de la puerta y empujando y tirando hasta que se abre. (o no)

Garbiel se mantuvo atrás, cubriendo a sus compañeros, que estaban buscando algo relevante en, lo que habían deducido que era, el comedor.
Atento al menor sonido extraño, o al mínimo atisbo de movimiento, Garbiel tardó en darse cuenta de que sus compañeros se habían decidido por examinar una de las puertas. Se dirigió junto a ellos. Vió a Jhon coger el pomo de la puerta, y Garbiel buscó una posición al lado de su compañero para cubrir el umbral de la puerta. Si alguna cucaracha de dos metros salía de allí, acabaría convertida en un colador...

Os encontrais otra vez en el corredor de las habitaciones tras haber examinado con cautela el comedor y no haber encontrado nada relevante. Las puertas (como ya sabeis) tienen un sistema de seguridad con lector de tarjetas personales. Así que, John se encuentra con que la puerta no cede en contra de su voluntad.

No habéis visto alguna targeta por ahí tirada?? Supongo que sería demasiada suerte... Digo mientras sigo forzando el pomo y veo que no cede...

Yo tal vez podría quitar esas puertas de ahí sin demasiado peligro, aunque Shelma y los demás se llebarían un buen susto jeje Sonrío a mis compañeros y empiezo a rebuscar en mi mochila a ver que encuentro que sea de utilidad, mientras espero si me dan su aprobación. ^-^