Partida Rol por web

Cita :

Pues ahí te equivocas Roy, porque la narración que YO hice acerca del roedor que se escapa, la chica que lleva a su mascota que es un hamster y demás fue invención mía por completo, para eso me curré un larguísimo mensaje.

Cita :

Eso es lo que he puesto. Se muy bien que hay un pj que lleva un conejo, y por lo mismo me tomé el trabajo de crearme un pj narrativo, algo que usé única y exclusivamente para poder dar juego y reunir a mi pj con el resto, por lo tanto, hasta donde yo estoy viendo, el que Roberto tomara al hamster, la gata se lo arrebatara de las manos, el perro de no me acuerdo quien saliera tras la gata y un largo etc, sólo fue posible gracias a una situación que yo creé, no tú con un algún pnj, ni un pj de otro jugador. He tenido el cuidado, en todo momento, de si voy a usar algún secundario, sea éste un supuesto invitado a la convención o empleado del hotel, no hacerlo moviendo a ninguno de los que tú has creado.

Si observas algo de lo que he escrito verás claramente que cuando me refiero a un pj, sea que le hable o simplemente le mencione, procuro poner su nombre subrayado ¿Para qué? Pues simplemente para evitar esta clase de malentendidos.

Te ruego leas bien lo que uno escribe, porque si la cosa va a ser así, ya mismo me avisas.

 P.D.: Y los conejos pertenecen a la familia de los roedores al igual que los castores, pero a un conejo mi pj no le tiene fobia, sino a los bichos que se parecen a los ratones.

P.D.2: Pido disculpas si el tono de la respuesta te parece algo seco, no niego que lo es, pero tengo demasiado carácter como para morderme la lengua.

Cita:

este fue mi 1º parrafo...
no pienso responder nada en esta escena

veo que siguen sin leerme!

postea tu respuesta en offtopic como pedi y ahi voy a leerla
(me voy a dormir, esto va hiperlento ensima)

-LUNA!-

Avergonzada vuelvo a gritar a mi gata que de vez en cuando le dan estos arrebatos, aunque hacia mucho que no. Mientras empiezo a despegar sus uñas de la camisa de mi acompañante continuo hablando.

-Vaya los siento...No se porque lo habra hecho.. debe ser el viaje..-

Le miro sonrojada mientras Luna vuelve a enganchar las uñas de nuevo en la camisa y yo intento volver a quitarselas

-Asi que una Discoteca..entonces seras un empresario con dinero ¿no? y bueno fumar drogas no esta bien...-

Veo como Luna sigue arañando y no tiene intenciones de quitarse

-Vaya..Luna...me parece que no vamos a poder desengancharla de ahi...¿ Se puede saber que te pasa? Tendre que pagarte la camisa-

Le miro timidamente y mas sonrojada que antes..

Finalmente Chleo vuelve corriendo a mis brazos. La alzo, pongo su cara frente a la mía y zamarreandola suavemente le digo: -Nunca más, me escuchaste! Nunca más  vuelvas a hacerme pasar un momento así!

Camino hacia Jack con mi mejor cara y le digo: -Gracias por ayudarme. Disculpá el mal momento.

Dicho esto, vuelvo a la mesa, le pongo la correa nuevamente a Chleo y le digo: - ¿Ya no creo que te den ganas de hacer más travesuras, verdad linda?

son las 3:00pm...

el raton huye hasta su amo y sube por su pierna, mientras la gata es atrapada por isadora, y minie se queda ladrando en medio del bar

- Juas, menudo follón con los animalitos... -, les digo a mis compañeros de mesa. - Menos mal que he dejado mi dragón de komodo muy "komodo" en la habitación. -

Lo sé, chiste malo, pero bueno, la situación requería uno de mis chistes.

-Jajajaja... No sabía que lo llamabas así-digo ante el chiste malo de Rafael.-Además, no he visto ningún dragón aún...

Todo ha vuelto a la normalidad y las copas de champagne parecen seguir desfilando.

- Sí, claro... -, le respondo con una sonrisa. - Tu busca, busca, que al final te vas a encontrar con el dragón. Además, recuerda que es venenoso y si te muerde... después habrá que chupar el veneno. -

No sé si es el alcohol o que, pero la conversación va tomando un tono interesante.

-No dudo que lo encontraré pero en caso de mordedura, no creo que quisiera chupar ese veneno, a menos claro está, que la recompensa valiera la pena...-bajo la voz y miro a los recién llegados, Camila y Marcos.-El dragón es como su amigo imaginario.

Lo miro a él y bajo la mesa toco su pie con el mío.

el camarero se acerca al barman tras casi tirar la bandeja por culpa de camila

- como vengan los de bromatologia y encuentren una rata en la cocina nos cierran el hotel...

el barman responde en voz baja para que solo el camarero escuche

-shhh.... igual si pasan a la cocina igual nos clausuran.... jejeje

Me siento en mi mesa y tomo otro sorbo de vino, mientras hecho una mirada panorámica al salón, todo a vuelto a su ritmo y sigue igualmente abarrotado de gente. Vuelvo a hechar otra ojeada al hombre rubio de la barra, también protagonista del escándalo.

Se acercó a Mini, que no dejaba de ladrar:

-Bueno bichejo, ¿ahora me dejaras cojerte, o te volveras a escapar? -dijo mirando a la perra como si de su hija se tratase-, buena la habeís liado entre todos -se agacho, dejando a la vista el codigo de barras tatuado en su nuca, y cojió a Mini con dulzura-. No me muerdas, ¿eh?

Le pasó Mini a Juan lo más rápido posible.

-Después de esto ya no sé si me apetece postre -dijo con una media sonrisa en el rostro- ¿Quieres postre, o ya estas cansado de mí? Si es así tranquilo... Tengo una bonita habitación y, espero un albornoz grande que llevarme prestado, esperando... Y sino, podemos seguir de interrogatorios. -comento esto último poniendo cara de angelito.

Lucía entra al bar con paso indeciso, su perro Peke en brazos.

Se sienta en una de las mesas vacías, observando a todos los demás que había en el bar.

Pone a Peke en el suelo por si quiere andar por su alrededor, mientras espera a que venga a servirle algún camarero.

Recojo rapidamente a Mini, que está terriblemente alterada, cada uno de sus músculos estan tensos y no para de ladrar buscando al gato que se le escapó, trato de calmarla susurrandole al oido y acariciandole la nuca, le doy unos cuantos pedazos de carne y estos llaman su atención, olvidanse temporalmente del gato. Hago un gentil ademán a la señorita Skeel para que se siente, yo hago lo propio, agarrando el plato de Mini, poniendolo en la mesa, y dándole, poco a poco, trozos de carne mientras descansa y se calma en mi regazo.

Ninguna comida se puede llamar comida sin el postre. - Dije con una sonrisa en la cara. ¡Camarero!. La carta de postres por favor.

Tuviste mucha suerte de que no te mordiera, no se que le pasa contigo, pero definitivamente incluso a mi me hubiera mordido si la hubiera agarrado de esa forma... de todas maneras, disculpa por la escenita, tardará para calmarse del todo, pero con un poco de carne y algo de mi postre... llenará la barriga y le entrará sueño.

Tras leer la carta de postres, me decido por un tres leches y espero a que la señorita Andreea elija.

Cuando siento su toqueteo por debajo de la mesa, decido que es hora de hacer algo para ponerla un poquitin nerviosa. Me quito con cuidado una de mis zapatillas, y con completo disimulo, sin tocar las piernas de los demás, comienzo a acariciar la suya por debajo de la mesa, subiendo lentamente hacia su rodilla.

- Bueno, tal vez la recompensa sea suculenta, ¿no crees? -

la situacion era algo ridicula en el bar, las personas que me rodeaban estaban muy interesados en ese tema y todo parecia no tener sentido alguno.
Echo una mirada al saloy y ahi la veo, unapersona que se abstraia de todo. Me hacerco a su mesa...
Hola señorita, Isadora creo es usted si mal no recuerdo haber escuchado su nombre, verdad?

Sentí su pie subir suavemente por mi pierna y disimuladamente, bajé mi mano derecha para sujetarlo, jugando lentamente con sus dedos y sin dejar de mirarle a los ojos.

-No dudo que la recompensa valdría la pena... Cuidado, porque siempre se puede pedir más. Ya le contaré los detalles, doctor.

Sujeté sus dedos por unos instantes más, acariciando suavemente para provocarle cosquillas.

Erin me busca las cosquillas pero no tengo cosquillas... chincha.

Comienzo a juguetear con los dedos de mis pies entre sus dedos de la mano, mientras intento safarme de su mano y continuar acariciando su pierna.

- Espero ansioso los detalles, doctora. -

No consigo sacarle ni una sonrisa, cruzo mi pierna y le dejo seguir acariciándome intentando que no se note el rubor en mis mejillas y el calor que se siente allí. Intento dedicarme a otra cosa, sacando conversación a los Camila y a Marcos, luego de contestar a Rafael.

-Tengo un par para darle, pero será después de la conferencia y espero que no se parezcan a las conferencias del director del hospital.