Partida Rol por web

luego del viaje, el taxista estaciona en la puerta del hotel 5 estrellas, donde se celebrara la convencion anual de la asociacion PARAISO

el portero del hotel se acerca al taxi y amablemente te abre la puerta invitandote a bajar

bienvenido!

luego el taxista se baja para abrir el baul del taxi y sacar tu equipaje

corriendo sale del hotel un botones, que algo atolondrado, comienza a juntar el equipaje

rapido y seguro, no se preocupe por nada, yo me encargo de su equipaje

el botones junta todo y como puede va cargando con todo para dentro del hotel

detras de tu taxi, se habia hecho una larga fila de taxis esperando su turno para entrar al hotel

el portero se acerca con sumo respeto y sacandose la gorra se presenta

soy bruford el portero del hotel
sonrie con cierta elegancia y agrega
cualquier cosa que necesite, si esta a mi alcance, no dude en pedirmelo, y hare lo posible por hacer su estancia lo mas placentera posible

luego señalo al botones
si sigue a ching, le mostrara donde tiene que registrarse

tu taxi arranca y detras viene otro, se detiene, y bruford rapidamente se acerca a abrir la puerta

bienvenido!

El trayecto del aeropuerto al hotel se le hizo corto, demasiado, en esa ciudad hasta donde ha alcanzado a ver todos tienen prisa. Por suerte que entiende inglés así que no anda tan despistada, pero aún así se sorprende de la cantidad de modismos y lo rápido que hablan los americanos.

Se baja del taxi y responde al saludo del portero, siguiendo luego con la mirada al atolondrado botones. Un gracias es todo lo que alcanza a decir antes de, literalmente, salir persiguiendo al botones.

Bajo del taxi junto a mi mascota y respondo al saludo del portero dándole un fuerte apretón de manos.

Jesús Capitán, ¡encantado!

Después sigo al chino comprobando que Aladar, mi mascota, me sigue. Vuelvo la vista y saludo con la mano al portero. - ¡Ya nos vemos!

Bajo del taxi y sigo a mi dueño.

Espero paciente mi turno metida dentro del taxi que me ha traido desde el aeropuerto hasta el hotel que no estaba muy alejado y en mi interior no me gusta lo que veo, delante de mi baja una mujer que sigue al botones y despues el taxista se baja y abre mi puerta tambien para que baje

Demasiado lujo..

Agarro la jaula de Luna y haciendo uan mirada rapida al contexto del Hotel, reparo en el portero que me saluda y ante su parrafada tan solo hago un leve asentimiento para seguir sin hablar al botones oriental que me conduce a traves de la puerta dentro del Hotel...

Este es el hotel, el taxi... con Jane a mi lado, se detiene en la puerta y bajamos, presto, el botones nos atiende y nos pide que le sigamos adentro.

bueno... ¿que te parece Jane? por lo menos nos van a pagar unos dias de vacaciones

Si, eso parece. Y vaya hotel han decidido escoger.

Digo admirando la entrada del hotel, había oído hablar de él, pero nunca había tenido la suerte de poder acceder a su interior. Una sonrisa ilumina mi rostro mientras veo la variedad de personajes que van entrando en el hotel.

Bien, vamos a ver que tal las habitaciones.

Digo con una sonrisa pícara.

El yellow cab les llevó a través de las avenidas de la City hasta el magnífico Hotel situado en la zona más elitista de New York. El viaje había sido entretenido, y tanto Marcos como Carla, y desde luego ella misma, sonreían mientras admiraban el bullicioso panorama.

Por fin se detuvieron, tras una larga cola de taxis más.

-Bueno, aquí estamos por fin, ¿n'est-ce pas? ¡Y menuda pinta tiene este Hotel! ¡Mon dieu! ¿Bajamos...?

No esperó respuesta. En ese mismo momento se estaba ya abriendo la puerta del coche, y salió rápida, sonriendo, con los ojos brillando por la emoción.

Enrico baja del taxi que le ha llevado desde el aeropuerto a la puerta del hotel donde tiene la reserva hecha. El taxista le ayuda a sacar la maleta. Sube la montura de sus gafas de sol hasta que topan con su cejo y observa al portero y al botones. Se acerca hasta la puerta para entrar. Saluda al portero y también al botones, apoyando la cordialidad de su saludo con una sonrisa amistosa. No se preocupen, puedo llevar mi maleta yo mismo, estoy acostumbrado. entra en el hotel.

-Magnifico...

Fue la primera palabra que paso por su mente, para acabar en sus labios en un leve susurro impregnado de ironía.
Estaba cansada -como casi siempre-, el viaje de avión había resultado más que difícil; nunca se acabrá de llevar bien con esas maquinas voladoras, por más que viaje en ellas.

-Asco de bullicio, asco de idioma, asco de acento... -no le impresionaba en lo más mínimo todo aquel despliegue-, cuanta opulencía y tontería tiene estos-. Decía para si... noo quería bajarse aún del taxi, prefería esperar y observar a la gente que llegaba.

¿Serán todos de la asociación? -dijo mientras salía del taxi, encaminandose hacía la recepción.

Muchas gracias Buford; soy Facundo Vilusto. Digo bajando del taxi y siguiendo a Ching para que me diga donde registrarme, mientras miro la fachada del hotel Lindo esto eh... digo asintiendo con la cabeza hacia Buford

Me bajo del taxi, miro en derredor, la verdad es que bastante agradable todo el asunto. Miro al portero y le saludo con una amplia sonrisa, luego sigo al botones.

Bajo del taxi algo desaliñado después del viaje tan largo, cubro mis ojeras con las gafas de sol y bajo a Rufus del vehículo a tirones vamos Rufus bájate ya (parece que mi perro se enamoró del asiento del taxi).

El portero me da la bienvenida  a lo cual lo saludo lo más amable que puedo, pero no le doy mucha importancia después de todo solo es su trabajo Hola, buen día, Gracias.

Miro a los demás que están llegando supongo que vienen a la convención y mantengo un ojo en mi valija, no sea que me la roben, por lo que sigo al botones de cerca hasta la recepción.

Huy por fin llegamos, ahora si me echo un buen meo para marcar territorio y a comer carne de primera je je je. Me apresuro a entrar y lo tironeo dentro del hotel a Jack

bienvenido señor vilusto, y ya sabe, si necesita algo.. cualquier cosa.. lo que sea... bruford puede conseguirselo...

luego rufus el perro de jack palacios mea una de las lujosas columnas del hotel
el portero al ver eso abre los ojos como platos y sacando un pañuelito blanco de ceda corre detras para limpiar la meada

pero señor.... eduque a su can porfavor...
agrego bruford sin perder la compostura, mientras mansillaba su fino pañuelo

Salgo del taxi y le doy una mano a Cassandra para ayudarla a salir.
Que lujo, mas del que me esperaba
le dice un poco bajo, pretendiendo que el portero no escuche.

Luego le doy un apreton de manos al portero en saludo.

Buenos dias, como esta Sonrio al hombre mientras desciendo del taxi con Mateo en mis brazos y camino lentamente viendo lo majestuoso del lugar Han botado la casa por la ventana