Partida Rol por web

Estáis placidamente en vuestra gran habitación de 1 metro por 1 metro, la más confortable que hay. El ciber-yoga os ha sentado bien, si no tendríais que cortaros felizmente los brazos o piernas, para poder caber en aquel lugar. Una luz cerca del cogote os despierta. Es la voz del dulce ordenador, que requiere vuestra presencia.- Alerta, misión, Alerta, misión, esclarecedores reúnanse en la sala de operaciones más cercana. 

KennyMco se despierta hecho un ovillito.

Sonrie. El es feliz de vivir en el complejo alpha. El es feliz de ser un esclarecedor, el es feliz de que el ordenador le quiera tanto.

Prontamente, sale de su habita-cubículo en el sector MIK, se pone las botas, y se asegura de llevar sus posesiones encima, porque lo mismo el ordenador cuenta con que las utilice (Luego caigo en la cuenta de que no posee más que su abrigo rojo, sus botas, y sus dientes)

"¡Que ciclodía tan bonito para servir al ordenador y al complejo alpha!"

Se ajusta la capucha reglamentaria para los que viven en el sector MIK, y -asegurandose de no pasar por zonas prohibidas- va felizmente hasta la sala de operaciones del sector MIK (Vivo ahi ¿no? Digo yo que sabré cual es)

Obedientemente, Bollaserv se despierta y en un extraño alarde de contorsionismo, dirige una sonrisa bobalicona al origen de la luz.
- ¡Gracias Ordenador! - responde sin comprender porqué da las gracias, pero sabiendo que es mejor darlas. Con la torpeza del que acaba de despertarse (o incluso más), se pone en pie procurando no pisar a compañeros de habitación al salir.
- Ah, hoy va a ser un gran ciclodía, gracias a mi amigo el Ordenador! - exclama nada más cruzar la puerta, para dirigirse por rutas de su CS a la sala de operación más cercana, tarareando la alegre canción "el ordenador es mi amigo" que aprendió en su formación juvenil con ayuda de unas cuantas descargas eléctricas...

La habitación resulta pequeña para la enorme mole, mezcla de grasa y músculos, que es Bat-R-acio. El esclarecedor mide algo más de 2 metros y su peso se encuentra más cerca de la segunda centena que de la primera... mucho más cerca. Para algunos hacerse un ovillo en el piso de la habitación es una buena forma de dormir, para Bat resulta imposible. El ovillo terminaría saliendo por la puerta. En su lugar el gordo pero muy jovial, quién no sería jovial viviendo en un sitio tan maravilloso... Bat duerme sentado en una silla demasiado pequeña para su tamaño aunque gracias al ordenador suficientemente resistente. Aquella silla roja había sido todo un hallazgo. No todos los días se encontraba uno con una roca tan cómoda como aquella ya pintada de rojo y con la forma justa para apoyarla contra la pared que haría las veces de respaldo.

El gordo, joven y jovial Bat se puso de pie. O casi. Al menos no estaba de rodillas. Eso cualquiera que lo viera podía asegurarlo.

Un pequeño empujón a la puerta, un corto movimiento de hombros y cuello para acomodar los huesos, un paso hacia delante. Ya estaba fuera. Sin esperar más comienza a poner un pie delante del otro para así ir hacia sala de operaciones del sector.

Camináis hacia vuestro destino. Finalmente llegáis, aunque hay un pequeño y feliz problema. Está pintado de azul, eso quiere decir que solo tienen acceso a él ciudadanos con CS Azul. Vosotros sois CS Rojo (Por debajo de CS Azul) así que en teoría tenéis prohibida la entrada. Por fuera los cristales están pintados de negro, por lo que no podéis ver lo que hay en el interior del complejo. Pero parece haber gente dentro. El ordenador da de nuevo el aviso.- Esclarecedores, no me hagáis esperar, ¿acaso huis del gran ordenador?.- El ordenador precisaba de vuestra presencia.

"¡Como usted ordene, su grandiosísima Computadoriedad!"

KennyMco abre la puerta de la sala.

¡Y empuja al Bollaserv dentro! "Venga, compañero ¡no hagas esperar al ordenador!"

- Hmm... - exclamo de forma jovial, con una enorme sonrisa en el rostro mientras observo el edificio.

Cuando el tipo de la capucha empuja al otro doy un paso atrás a la espera de que alguien muera calcinado. O peor.

- Vamos amigos - la voz, gutural, cavernosa de un hombre jovial y feliz como no podía haber otro - No hay razón para dudar, entremos - y sin embargo no me muevo, no habría fuerza capaz de hacerme entrar allí sin antes ver qué le sucedería a ese otro tipo.

Bollaserv se resiste como puede al empujón al tiempo que chilla como un cerdo en el matadero ¡Ordenador! ¡Traición! ¡Malvados terroristas comunistas mutantes han saboteado la sala de operaciones! ¡La han pintado de un CS que tenemos prohibido! ¡Quieren sabotear el buen hacer del ordenador!

KennyMco empuja.

Su esfuerzo es impresionante, aunque parece que los CUATRO dias que ha pasado haciendo trabajos forzados le merman un poco el resultado.

Mientras empujo, voy tarareando la música de "RockyBa-R-BOA" esa peliculada que nos ponen para motivarnos.

"Dor, ¡Orde-na-dor! ¡Orde-na-dor! ¡El Me-jor" (Repetir tantas veces como el guitarreo)
"Los rebeldes, son un montón"
"y nos los tenemos que cargar"
"Ellos apestan, son malos y tal"
"Pero encima, nos quieren enviolinaaaar"

"Peeeeero, el ordenador es grande y mola mas"
"Peeeeero, él tiene ojos en to's ladooos"
"Peeeeero, el ordenador mola un cojotrón"
"Y los comunistas caerááááán"
"Reventadoooos"

Parece que con el soberano esfuerzo, a Bollaserv se le escapan los gases.

El empujón surte efecto, y la puerta se abre. Los esclarecedores de dentro de la sala se quedan mirando al individuo que va vestido de rojo. Son unos cinco...- CS Rojo, has desobedecido las órdenes del ordenador, maldito comunista.- Dice uno sacando su pistolaser.- ¿Algo que decir antes de que te vaporicemos sumarísimamente?.- Dice apuntando con la pistoláser. Los demás lo secundan.

Bollaserv es empujado hacia adentro, la puerta se abre y se cierra tras de sí. Por ahora no escucháis más que los que están dentro felizmente hablando con él.

- ¡Me han empujado! - protesta patéticamente señalando hacia fuera, a KennyMco. - ¡Vine hasta la puerta siguiendo las ordenes del ordenador (bienamado ordenador) y allí me ha asaltado un terrorista comunista (que a lo mejor es mutante)... ¡Seguro que quiere sabotear la misión!

- Será un traidor? - pregunto a nadie en especial - Entrar así a un edificio azul... Creo que deberías mirar.

Dicho esto, sin esperar respuesta tomo a Kenny por la cabeza y le obligo a meterla dentro. Confiando en ser lo suficientemente pesado y fuerte como para que no pueda oponerse. Mientras tanto mantento el oído atento a posibles gritos de terror.

Intento forcejear contra Bat. Claro que para mi, Forcejear, consiste en ¡Pifiar como un merluzo!

Asi que abro la puerta y me meto hacia dentro como si hubiera visto al mismimo jefe comunista, amenazando con devorar a toda mi familia-clónica

"Padentruuuuuu"
 

Dormía "plácidamente" en mi claustrofóbica habitación hasta que la voz del Gran Ordenador llamó, puede que sea de día o quizás había algún asunto importante, aunque, tratándose del maravilloso Ordenador, siempre era algo importante.-¡Buenos días mi Gran Ordenador!-Saludé efusivamente mientras intentaba hacer un saludo militar. Sin recordar que dentro de mi habitación no podía moverme demasiado y ni si quiera llegué a alzar el brazo.

-¡Ahora mismo!-Contesté sin esperar respuesta mientras abría la puerta para dirigirme a donde se me necesitase*.

Kenny entra rodando... o eso parecéis ver, ha tropezado y va cual pelota de plasma rodante hacia el interior de la sala. La puerta se cierra tras él.