Subes a un pequeño descansillo, donde un ventanal da a la parte frontal del sanatorio. A ambos lados se extiende un amplio pasillo con numerosas puertas pesadas. A mano derecha en el mismo descansillo, hay una puerta donde pone "director".

Con un cabreo cada vez más creciente, Ryan resopla y se dirige hacia la puerta del "director", al fin y al cabo, ha sido la que más le ha llamado la atención desde un principio.

—¿Hola?— Pregunta, asomándose un poco antes de entrar.

Al abrir la puerta del despacho, se eleva una capa de polvo en el lugar. Tienes frente a ti una mesa, con dos sillas delante y varios armarios pesados de metal, con cajones. Ves huellas en el suelo sobre la capa de polvo que lo cubre. Tus compañeros deben haber pasado por ahí, pero de momento no responden a tu llamada.

Pero lo que si oyes es un tararear infantil por los pasillos, que te pone los pelos de punta.

Cuando Florencia se acerca, la mujer gruñe, se sacude y da una dentellada al aire. No parece atender a razones. De su boca no salen palabras entendibles, sino algo inhumano y primitivo.

-¡Qué va! No nos entiende, fijo. Ni una palabra. Y lo de que no es de este mundo... ¡Super chungo!, ¿no? Podría ser. ¡Qué fuerte! Por primera vez estamos delante de algo que podría ser de verdad lo que buscamos en el programa.

¿Se ha olvidado de su novio...? Eso parece. Mira embobada a la mujer, y ni se inmuta cuando ésta le tira una dentallada al aire, en respuesta a Flo. Sigue filmando, absorta.

-Y tampoco es que se la entienda a ella... nada de nada...

- !Os dije que estaba poseída! !Vade retro satanás! - digo con determinación, dando drama al asunto, aunque la verdad esto si que era bastante gore. Pero tenía que permanecer impasible, salir corriendo no era una opción. Había deseado esto durante mucho, mucho, tiempo. Cuando el tren pasa hay que cogerlo, cogerlo bien por las riendas.

Flo cayo de culo justo delantes de Denis asustada por la muestra de gratuita violencia que recibio tras su intento de comunicación.

-Si sera... puta loca, porque este lugar lleva cerrado demasiado tiempo, sino pensaría que alguien se ha olvidado un paciente.-Mas cabreada que de costumbre se levanto de suelo, se sacudió el polvo y quedo cruzada de brazos aun con el ceño fruncido.

-Toda tuya Ursula-Como le había prometido era el turno de la medium.

"Solo vos pódrias ordenar desde el suelo. Vamos arriba..." dijo ofreciendole la mano para que se levante. "Debemos pensar en otra cosa. No podemos quedarnos aca cruzado de brazos." comento mientras obversababa distraido las accciones de Ursula.

No está del todo seguro si se debe a que su sistema nervioso ya ha dicho "hasta aquí", o a que no es lo peor que le ha pasado hoy, pero Ryan consigue mantener el tipo ante la lúgubre melodía. Aquello ya es el colmo, y hay dos posibilidades: O son sus compañeros gastándole una broma pesada, o por fin va a encontrar "algo" de verdad, al fin y al cabo, el tópico de la niña fantasma es demasiado bueno como para dejarlo pasar.

Además... Había algo extraño... y quería comprobarlo por sí mismo.

Deposita la caja con las cintas sobre la mesa, y vuelve a asomarse al pasillo.

Ves el pasillo oscuro y vacío. Ni un solo ruido o murmullo.

Al no ver a nadie, Ryan traga saliva. Pero ahora está seguro. Esa voz la ha oido antes. Y sabe de qué le suena.

Inmediatamente, vuelve al despacho, se sienta en la mesa del director y vuelve a sacar la grabadora. No le queda más remedio, se dispone a escuchar todas las cintas que le quedan.

Pones en el reproductor la siguienta cinta: "sesión 7".

Miraba con espectación al bicho poseido, esperando algo, pero solo gruñia. Ni mover objetos, ni nada de nada...

- ¿Mia? - miro a Florencia cuando dice aquello- ¿Quieres que intente conmunicarme con ella? ¿Una ouija por si tiene algo metido dentro?- asiento un par de veces, cogiendo el tablero- Un poco de incienso tambien ayudará...¿Pero que hacemos con Ryan?

- Joder!, - vaya nochecita de sustos, pienso, mirando fijamente a la mujer, - ¿estás bien jefa?, - pregunto a Floren mientras se incorpora.

Esto parece nuevo, el medio centenar de películas de zombies de mi colección personal, desfilan por mi cabeza, mientras observo con más interés a la mujer. - Cuidado, podría infectaros, - digo sin pensar. Cuando me doy cuenta de mi frase continúo torpemente, - eehh, si os muerde, digo. En la boca hay mogollón de bacterias y eso, y  se te puede infectar. 

Miro a los demás, pero parecen distraídos con el numerito que está montando Úrsula, así que me salvo de algún comentario sarcástico.

Mientras el resto está planteándose lo del ritual de Úrsula, a ti te parece oír la voz de Ryan. "¿Hola?" ¿Puede ser que Ryan haya salido? ¿O es que de verdad ahí hay una forma de bajar al sótano? La voz provenía de dónde venís, de los otros pasillos.

-hey!hey!- levanto la mano para que todos presten atención,-¿habéis oído eso?, -señalo hacia los pasillos, de donde venimos-¡creo que es Ryan!

Me dirijo en esa dirección gritando su nombre

-¡Ryan!, ¡Ryan!

El corazón comienza a latirle desbocado en el pecho. Hacía años que su cerebro no trabajaba ni a la velocidad ni de la forma en que lo está haciendo ahora. Mary, Billie, La princesa... Y Simon. ¿Tendría esa mujer un complejo de góllum?

Todo es extraño. Extrañísimo. Y es en ese momento cuando Ryan se pregunta si a sus compañeros no les habrá pasado algo. Y comienza a sentirse asustado... Y también muy solo.

Pero al fin y al cabo, él es investigador paranormal. Así que eso es precisamente lo que va a hacer. Investigar lo paranormal y montar el mejor programa que jamás se haya realizado en cuanto consiga encontrar a los demás.

Pones la siguiente cinta que marca "sesión 8".